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Complicidad entre primos 8

en Amor filial

En el ascensor Manuel empezó a sobar las tetas por debajo de la camiseta.

-         Espera a que lleguemos a casa al menos. – Con gesto de falsa molestia.

-         Te he esperado Ali, se me ha hecho largo.

-         Y a mí, vamos, abre la puerta.

-         Ep, ya estamos en casa, vamos a follar y luego hablamos.

-         Jijiji.

La cogió en volandas y la dejó en la cama. Se desnudó y una polla quedó apuntando a Alicia, que se iba desnudando mientras le sonreía.

-         Túmbate ya y déjame que te quite las bragas.

Obedeció sonriente y se mordió el labio, invitándole con la mirada a hacerlo. Levantó el culo para facilitarle la labor y se abrió de piernas relajándose. Manuel aspiró el perfume de la prenda.

-         Creo que te has mojado algo en el ascensor.

-         Puede jijiji.

-         Pues toma polla.

Se la metió de un golpe provocando un grito de ella y empezó a follarla con rapidez, agarrándole de los muslos mientras veía el bamboleo de las tetas y la cara de disfrute de su prima. Cada vez que se la metía oía un chac por los jugos que salían de su coño.

-         Te gusta, te gusta que te follen así, ¿eh?

-         Me gusta que me folleeeeeess.

-         Grita, que te oigan los vecinos.

-         Aaahaaaahaaah

-         Voy a lamer la corrida que sueltas.

La sensibilidad adquirida por la follada y la lengua de su primo hizo que siguiera gimiendo. Luego le acarició las tetas y se le puso a horcajadas casi para que le hiciera una mamada que no le hizo falta reclamar. En esa posición le estuvo follando la boca. Hasta que volvió a la postura inicial. Le encantaba sentir y ver cómo penetraba a su prima. Sentir su polla aprisionada y dejarla unos segundos dentro hasta volver a iniciar el movimiento.

-         Joder que dura me la has puesto con la mamada.

-         Siempre te pasa igual conmigo.

-         Aaaaaaaah

Manuel se quedó recostado encima de Alicia, con su polla todavía dentro de su vagina. Mientras empezó a besarla suavemente en los labios, sudorosos todavía.

-         ¿Te ha gustado cariño?

-         Me ha encantado, qué fuerza.

Permanecieron así unos minutos.

-         Uy, Ali, me gusta esa estampa tuya con el pelo revuelto y el coño con mi semen.

-         Jijiji

Sonrió para la foto medio incorporada y mostrando los restos del polvo.

-         Y ahora ven que te la limpio, encanto.

-         Muy bien Ali, y ahora vamos a la ducha que si no te vuelvo a follar.

Después de la cena se recostaron en el sofá.

-         Primo, mira que casi no tengo hoy ganas de salir, estoy algo cansada. ¿Habías hecho planes?

-         No, no te preocupes. Con Toni está hablado y espera que le llame. Te entiendo.

-         Gracias encanto.

-         Yo también me canso, ¿eh? Y no de follarte sino que esta semana ha sido algo ajetreada en el trabajo.

-         Estoy aquí para que te relajes. – Dándole un beso en la mejilla. - ¿Quieres que me quite el pijama?

-         Si no coges frío…

-         Me abrazaré a ti si lo tengo.

-         Empieza amorcito

-         Si me acabas de ver desnuda… - Con cara picarona.

-         Pero me gusta verte así, anda.

Se levantó, se echó el pelo para atrás, gesto que sabía que encantaba y provocaba a su primo. Empezó dejando ver el ombligo y con parsimonia se quitó la camiseta del pijama, dejando libre su generoso pecho, bamboleante con sus movimientos.

-         ¿Te gusta? – Preguntó reclinándose, dejando caer su pecho, gesto que también encantaba a su primo, que aprovechó para acariciarle las tetas. – Chist, no he acabado aún primito. – Dándole un pequeño manotazo sonriendo. - ¿Quieres que me lo quite de frente o espalda?

-         ¿Ehm? Esto… de frente, me gustaría.

Le lanzó un beso y amagando varias veces, acabó por deslizar el pantalón corto hasta los tobillos. Luciendo la más encantadora de sus sonrisas.

-         Ya está.

-         Muy bien primita. Gracias.

-         No hay de qué. Me está entrando frío. – Sentándose en las rodillas de Manuel, frente a él.

-         ¿Mejor? – Le preguntó acariciándole la espalda y los muslos mientras la abrazaba.

-         Sí.

-         Todo por ti primita.

-         ¿Qué es este bulto que tienes? – Preguntó sonriendo, como si no supiera la respuesta.

-         Lo que tú me provocas.

-         Jijiji

La erección de Manuel pugnaba por romper la tela. Ya era visible durante el desnudo de Alicia y que se sentara encima de él sólo hizo aumentarla. A Alicia le gustaba sentir esa dureza frente a su cuerpo desnudo y que ella le provocara tanta excitación.

-         Solo hay una manera de bajar ese bulto.

-         ¿Esta?

Se puso de rodillas y le sacó la polla y empezó a mamarla. Tiró del pantalón para que su primo le facilitara la labor y libre del pantalón le lamió los huevos, volviendo a tragarse ese mástil.

-         Me gusta verte así la polla, dura, y además sigues sin pelo. Estás en todo.

-         Como a ti te gusta. Ali, la forma de que me baje es darte por el culo, me has puesto muy burro.

Con calculada sumisión Alicia se puso de rodillas y recostó los brazos en el sofá. Su primo le lamió con fruición el interior de la vagina y a continuación probó con un dedo la resistencia del ano.

-         Um. – Le provocó un pequeño respingo.

-         Debe de costar menos por que ya lo abrí en tu anterior visita.

Acarició sus nalgas, lamió el borde del ano provocando otro pequeño gemido y metió sus dedos en el coño de Alicia.

-         Tus jugos harán de lubricante. Eres genial primita. Hay que ver cómo te corres.

-         Ya sabes lo que me gusta tu polla.

Puso la punta a la entrada del ano y empujó levemente. Esperando a que empezara a dilatarse.

-         Me gusta ver el agujero tan abierto que te deja mi polla.

-         Jijiji, pervertido.

Volvió a meter la polla esta vez hasta la mitad. Provocando un suspiro en Alicia.

-         Entra mejor que la otra vez.

-         Con el meneo que me diste no me extraña.

-         Allá va, hop.- Enterrando su polla hasta el fondo.

-         Auff.

La enculó lentamente, sacándola casi por entero para hundirla de nuevo todo, hasta sentir la frialdad de su culo en sus huevos. La cogió por el pelo y dijo.

-         Ahora viene la marcha.

Acelerando las embestidas y los gritos de Alicia. Hasta que se corrió dentro.

-         Vaya manera de descansar Manu. – Dijo todavía jadeando.

-         Sí, me voy a limpiar la polla al baño. Ahora sí se bajara.

-         Te acompaño.

Se quedaron dormidos desnudos abrazados, con Alicia dándole la espalda. Para Manuel era muy agradable sentir la suavidad de su piel.  Era ya mañana entrada cuando se despertaron.

-         Uf, qué sueño, ¿has descansado bien Alicia?

-         Sí, estoy como nueva y más cuando me duche.

-         Hazlo mientras preparo el desayuno.

-         Prefiero hacerlo contigo. Además así veo que tu polla puede tener otro tamaño, jijiji.

-         Qué mala eres.

-         Malo tu, que de noche sentía como refrotabas tu polla en mis dos agujeritos. – Con cara entre enfado y risa.

-         Los tenía ahí mismo y uno no es de piedra.

-         Se te pone dura como una piedra conmigo.

-         Bien lo sabes y bien que te gusta.

-         Jijiji.

-         Hala a desayunar y no te vistas, total te la quitarás enseguida para la ducha.

En la ducha Manuel se fijó en lo sexy que estaba su prima bajo el agua. Con el pelo pegado y la piel que relucía con el agua.

-         Qué guapa estás en la ducha.

-         Como si fuera la primera vez que me ves aquí, gracias.

-         Es verdad, sin cumplidos.

-         Tu también estás muy bien en la ducha, aún con la polla pequeña.

-         Te follaría al salir pero quiero reservarme algo y no quiero sudar recién duchado. – Le introdujo dos dedos en la vagina riendo.

-         Para.

Cerró el agua y se metió la polla por entero en la boca. Se la sacaba y le daba unos leves soplidos, la lamía de arriba abajo y el glande y se la volvía a meter.

-         Mira, con que en la ducha se me queda pequeña, ¿eh?

-         Si te la mamo yo no.

-         Por decir que era pequeña. – Follándole la boca y luego golpeándole con la polla en las mejillas. – Chupa.

-         Me gusta chupártela.

-         Toma.

Empezó a eyacular en la boca, se la sacó y el resto cayó en su frente y una mejilla.

-         Límpiame la polla y te lo tragas todo.

Con gesto sumiso obedeció y acabaron de ducharse.  Al salir sonó el teléfono de Alicia.

-         Um ¿será tu madre?

-         Voy a ver. Hola Leo…

-         Hey Ali, cómo no me llamabas.

-         He estado muy liada con los exámenes.

-         Ah, ¿ha ido bien?

-         Creo que sí.

-         Buena chica. Pues había pensado si nos podíamos ver…

-         ¿Hoy?

-         Sí.

-         Hoy no puede ser, estoy fuera, de visita familiar. – Guiñando un ojo y sonriendo a Manuel.

-         ¿Y mañana? Aunque sea por la tarde.

-         Tampoco, volveré cansada del viaje. ¿Tienes prisa en verme?

-         No, esto, pero me gustaría quedar.

-         ¿A hablar o a follar?

-         ¿Eh? No pienses mal Ali…

-         Jijiji que no pienso mal, pero recuerdo la vez anterior.

-         Bueno, era sábado y… es más normal.

-         Querías quedar hoy, que es sábado jijiji.

-         Me gusta estar contigo.

-         Y reconoce que follar conmigo también, no pasa nada.

-         Ya que lo dices… sí.

-         Y tocar mis tetas.

-         Me estás poniendo Alicia.

-         ¿Cómo tienes la polla?

-         ¿Eh? Creciendo, se me está poniendo dura.

-         Para el siguiente finde creo que nos veremos, ya te llamaré, chao encanto.

Su primo estaba oyendo la conversación y conteniéndose la risa.

-         Mira que eres mala primita, que te gusta jugar con nosotros.

-         Si os gustan mis tetas y el resto de mi cuerpo, sufrid un poco, jiji.

-         ¿Piensas en él para follar los tres?

-         Sí, aquí Toni por Carla, y allá mi mamá por Leo.

-         Se llama Leo. Pero tú te follas a los cuatro y yo sólo a dos.

-         Nada te impide que te folles a Toni y Leo jijiji.

-         No me va lo siento.

-         Peor para ti, pero quizá en faena opinas distinto.

-         Lo dudo.

-         Ver una polla en acción excita.

-         Lo que es la mía déjala descansar un rato, que me dejas seco.

-         Y lo que te gusta. ¿Ya no quieres que vaya desnuda por casa?

-         No, no, eso sigue así.

Dieron una vuelta a mediodía antes de comer. Aprovechando el día soleado se sentaron en una terraza. Donde Alicia siguió siendo objeto de miradas por los chavales y alguna persona de más edad. Con un vestido estampado y un escote favorecedor de dos tetas firmes.

-         Je, cómo te miran esos chavales, son los mismos de ayer.

-         No me digas que te molesta.

-         Para nada. Me divierte  ver cómo babean. Seguro que se pajean contigo.

-         Jiji, seguramente. ¿les conoces?

-         No, a alguno de vista. Fíjate que si les miras tu miran para otro lado, qué mal disimulan, cómo si no se les notara…

Después de comer Manuel dijo.

-         Estoy algo cansado, voy a dormir un poco.

-         Dulces sueños.

-         Me basta estar contigo.

-         Ya acabo yo de recoger.

-         Gracias Ali. – Dándole una palmada en el culo devuelta con una sonrisa.

Durante la siesta Alicia recibió la llamada de Marta.

-         Hola hija.

-         Hola mamá.

-         ¿No te habré pillado chupándole la polla a tu primo?

-         No mamá está durmiendo la siesta que está cansado.

-         Como otras veces… ¿ya le has dejado agotado?

-         Algo hemos follado, no veas cómo me pilló ayer. Pero es del trabajo, de mí no se cansa jiji.

-         Mejor para ti hija. Yo ya tengo ganas de ver y sentir esa polla.

-         La semana que viene mamá.

-         Sí.

-         ¿Y papá?

-         Medio dormido en el salón viendo la tele, te llamo desde el dormitorio.

-         Qué abandonada te tiene mamá, no sabe lo que tiene en casa.

-         Bueno hija pasadlo bien, besos.

-         Eso seguro, te quiero mamá.

Alicia se quedó un poco pensativa. Quería a sus padres, aunque con su  madre de siempre había desarrollado más confianza. A su padre también lo quería, se mostraba cariñoso, aunque con una actitud por lo general más preocupada en el trabajo. Casi inconscientemente empezó a acariciarse el clítoris y después a introducirse un dedo. Sonrió y pensó que era momento de despertar a su primo. Justo cuando se encaminaba le vio salir por la puerta.

-         ¡Ah! Ahora mismo iba a despertarte.

-         ¿Y eso? No me dejas ni descansar.

-         Bueno a ver qué hacías.

-         Dormir jeje.

-         Mamá me ha llamado y está ansiosa por ver tu polla.

-         La semana que viene la verá de cerca.

-         ¿Cuándo vendrá Toni?

-         Cuando quieras. Oye ¿te has hurgado el chocho? Te lo veo algo abierto.

-         Así me lo dejas tu jiji. Sí me he masturbado un poco.

-         Joder, eres insaciable. Si le llamo vendría ahora mismo pero me dijo que trabajaba hasta las ocho.

-         Aún no son las seis.

-         Túmbate en mi cama, que te voy a inspeccionar el chochito a ver qué le pasa.

Alicia sonrió y se tumbó obedientemente en la cama. Su primo le abrió los  labios vaginales con delicadeza, miró el interior y con dulzura empezó a lamer el interior. Mientras Alicia se relajaba y cerraba los ojos.

-         ¿Mejor así Ali?

-         Ummmm sí, sigue y calla. – Mientras le ponía la mano en la cabeza.

Al cabo de unos momentos Alicia sintió un espasmo y un gemido ahogado indicó la salida de sus jugos por el orgasmo. Manuel los recogió y acabó compartiéndolos en un beso. Jugueteando luego son sus lenguas.

-         Así se te hará más corta la espera. Te veo muy relajada para tu primer trío, ¿ es el primero, no?

-         Sí, eso sí. Contigo estoy segura y me gustará probar algo nuevo. Mi culito sigue siendo solo tuyo.

-         Gracias.

-         ¿Quieres que te haga algo?

-         No, te debía algo de placer para ti, para mí también me encanta explorar tu chochito, ya me entiendes… prefiero reservarme algo para luego.

A las ocho y cuarto llamaron al timbre y en un par de minutos Toni estaba ya en el piso.

-         Vaya pareja de pesados en el portal, si no llego a subir antes. Joder ya estás en pelotas

-         Serían José y Elvira. Le gusta pasearse así por casa.

-         Jijiji. Ya les conocemos.

-         Qué suerte verla así todo el día tío. – Dijo Toni.

-         Vosotros dos ya os conocéis, así que no hacen falta presentaciones.

-         No, nos conocemos desde aquella noche donde me miraste Alicia.

-         A mí y a mis tetas.

-         Sí, para qué negarlo. ¿Las puedo tocar?

-         Parece mentira en ti Toni, ¿a qué has venido?

-         Tócalas que lo estás deseando. – Dijo Alicia sosteniéndolas con la manos y ofreciéndoselas con sonrisa picarona.

-         Vaya para de melones. – Dijo Toni amasándolas. – Qué blanditas y firmes. – Y pasó a chuparlas. – Me encantan.

-         No eres el único jiji. Quiero ver que polla tienes.

-         Vamos mejor ya al cuarto. – Intervino Manuel.

Ya en el cuarto Toni se desnudó rápidamente. Su polla medía 16 centímetros y era recta, no como el platanito de Manuel, más ancha y con las venas marcadas. Tenía un glande ancho y finalizado en punta. Lo que le daba un aspecto más agresivo.

-         Umm, no está nada mal tu polla, así comparo dos tipos diferentes.

Alicia la tocó y la inspeccionó con curiosidad e interés. Mientras Manuel se desnudaba. Alicia se puso de rodillas y les hizo un gesto sonriente para que se acercaran.

-         Joder qué polla tienes Manu, pero la mía es más ancha, perfora. Y todo depilado jajaja.

-         Jajaja, la tuya impresiona su aspecto. Pregúntale a Alicia. – Ésta solo sonrió.

-         Alicia me la ha puesto muy dura.

-         Como hace conmigo siempre.

-         Empiezo por el invitado. Para la próxima vez la quiero sin pelo eh, pase por esta vez–Dijo Alicia.

Le agarró la polla con la mano y se la introdujo en la boca. Luego le lamió el tronco y el glande. Manuel le acercó la polla a la boca y giró la cabeza para mamar la polla de su primo.

-         Hasta el fondo Ali.

-         Conmigo ya lo ha hecho.

-         Pero no es tan larga.

-         Pero sí más ancha.

-         Ali puede con todo ¿verdad?

-         Pues claro. – Dijo sacándose la polla de la boca y empezándola a lamer.

-         Te gustan las pollas Ali. – Inquirió Toni.

-         A pares. – Respondió y empezó a pajear las pollas una con cada mano.

-         Chúpame la polla y te la clavo. – Ordenó Toni.

Alicia obedeció sumisa, le encantaba hacerse la sumisa y el efecto que provocaba en los chicos. Le escupió en la polla y lo extendió con la mano después de chuparla. Se tumbó en la cama, abrió sus muslos y le indicó con el dedo el agujero del coño.

-         Te dejaré que me folles solo por aquí. – Le dijo.

-         Allá voy.

Le introdujo de un empujón la polla hasta el fondo, provocando un respingo y un gemido en Alicia. Y empezó a bombear con fuerza. Mientras que Manuel le acercó la polla y le golpeó la cara con ella. Sin decir palabra ninguno abrió la boca y dejó que Manu dirigiera la mamada.

-         Me está poniendo más ver cómo se la chupas.

Alicia se sacó la polla de la boca y dijo.

-         Yo también quiero follarte.

Toni pasó a tumbarse y Alicia se puso encima de él y se ensartó la polla. Notaba la mayor anchura respecto a la de Toni. Pero prefería sentirse más profundamente penetrada y la forma aplatanada de la de su primo. Éste volvió a meterle le polla en la boca, ahogando los gemidos de Alicia.

-         ¿Siempre grita así?

-         Por lo general sí. – Respondió Manuel. – A mí me gusta, pero más me gusta que me la chupe.

-         Qué suerte tienes con ella de novia tío.

-         Yo sí puedo darle por el culo.

-         Lo que yo te digo. – Mientras le amasaba con las manos las nalgas.

Manuel se pudo detrás y untó el ano con saliva. Buscando la mejor postura le empezó a penetrar lentamente, provocando una leve queja de Alicia en forma de gemido.

-         Venga Ali que no es la primera vez que te enculo.

-         Pero sí que tengo dos pollas dentro a la vez.

-         No, antes la tenía en tu boca y Toni en tu chocho.

-         Ya me entiendes, aahm.

Manuel había llegado hasta el fondo. Ambos chicos acompasaron su ritmo para penetrarla a la vez.

-         Cabrones me penetráis a la vez aaaahh.

-         Increíble tío, increíble. Joder cómo se le mueven las tetas– Decía Toni. – Cliente preferente en el bar, bebida gratis siempre que pueda.

-         A la que estáis follando es a mí. – Dijo Alicia.

-         Tu también estarás invitada encanto. – Respondió Toni.

Mientras Manuel seguía taladrando su culo sin descanso, le agarraba las tetas por detrás.

-         Me pones muy bruto Alicia. Y que te follemos dos a la vez.

-         Yo me voy a correr pronto. – Advirtió Toni.

-         Sácasela y córrete en su cara, ¿puede hacerlo Ali?

-         Puede.

-         Ponte a cuatro patas y la cara en alto. – Le ordenó Manuel.

-         Joder cómo te estamos dejando los agujeros Alicia, mira Toni.

-         Jejeje, es brutal esta tía.

Manuel volvió a penetrarla analmente. Mientras Toni empezó a pajearse y Alicia abrió la boca, en parte también por la follada anal que recibía.

-         Aaaaah me corro en tu cara mientras te enculaaan.

Los chorros de una generosa corrida le cayeron por casi toda la cara y algo dentro de la boca.

-         No te lo tragues aún Ali, Toni sácale una foto con mi móvil.

-         Ya está. Espectacular.

-         Gracias tío. Espera Ali que ahora me correré yo en tu cara para que tengas dos corridas a la vez. Límpiale mientras la polla a Toni como haces conmigo.

-         Gracias Ali, estás en todo, y por haberte follado.

-         Voy yo.

Alicia se sentó en el borde la cama y Manuel se corrió en su cara que quedó impregnada de semen de dos corridas. Alicia puso cara de satisfacción y se relamió.

-         Me limpias la polla y te limpias luego la cara, recógete el semen y adentro.

-         Esta tía es la hostia, Manu.

Alicia hizo lo que le dijo Manuel y después se marchó al baño a acabar de limpiarse.

-         Ver a Alicia con mi semen en su cara y tu dándole por el culo, me la ha vuelto a poner dura.

-         Un descansito y seguimos. Ya te dije que puede con todo. ¿Estás bien Ali?

-         Sí, ya voy. – Se oyó desde el baño.

-         Voy a por unas cervezas antes de seguir. – Propuso Manuel.

-         Gracias tío.

Al volver de la cocina le ofreció un botellín a Toni y éste le ofreció brindar.

-         Venga Ali que se te va a calentar. – Le dijo Manuel.

-         Ya vuelvo ya. – Respondió Alicia mientras entraba por la puerta.

-         A brindar los tres. – Dijo Toni. – Por Alicia. – Ésta le correspondió con una sonrisa.

-         Ya vuelven vuestras pollas a estar tiesas jiji.

-         Ha sido nada más verte entrar otra vez. – Respondió socarrón Manuel.

-         Estás muy buena Alicia. – Completó Toni.- He disfrutado mucho.

-         Un placer. – Contestó Alicia.

-         Me gustaría que con esas tetas me hicieras una cubana.

Alicia sonrió y se puso de rodillas frente a los dos chicos, sentados en el borde de la cama. Empezó por la polla de Toni, amasándola y hundiéndola entre sus pechos.

-         ¿Te gusta?

-         Me encanta.

Miró a su primo, volvió a sonreír y dijo.

-         Para ti también.

-         No esperaba menos de ti.

Mientras la hacía Toni se levantó y le ofreció su polla. Abrió la boca y dejó que se la follara, se la metía entera y se la sacaba, sin prisa.

-         Aún no me he follado ese coñito hoy. – Dijo Manuel.

Alicia se puso de costado en la cama, por detrás recibía la follada de Manuel y por delante la de Toni en la boca.

-         Mmmm mmm.

-         Quiero correrme en su culo, cambia de agujero si quieres Toni.

-         Gracias.

-         Ouuuf chicos, me partís aaah.

-         Puedes con todo Ali. – Le replicó Manuel.

-         Claro que sí. – Aseveró Toni.

-         No te olvides correrte fuera tío.

-         Descuida, quiero hacerlo en sus tetas.

-         Túmbate boca arriba encanto.

Alicia se puso en posición y su primo le elevó las piernas para levantarle el culo lo justo para clavarle la polla en el ano.

-         Oufff aah.

-         Hala que bien que te lo he perforado hoy.

-         Por eso cabrón.

Toni aprovechó para meterle de nuevo la polla en la boca.

-         Mmmm mmm.

-         Me corro en tus tetas aaaah.

Le sacó la polla y derramó el semen en las tetas. A continuación se lo extendió con las manos.

-         Así bien untadas Ali.

-         Trae que te la limpio cabrón.

-         Me corro en tu culo… - Casi le sale primita pero se contuvo a tiempo, ahorrándose embarazosas explicaciones. – Aaaaahh.

-         Cabrones que follada, os habréis quedado a gusto.

-         Solo te falta la limpieza de polla.

-         Claro.

-         Pero antes levanta las piernas, así sujétate las piernas con las manos y muestra el ojete con la corrida, muy bien, ya está la foto.

-         Ahora sí me limpias la polla. Muy buena la foto con las tetas y el ojete con las corridas.

-         Qué mamones sois. Ahora dejadme que me duche.

-         Por supuesto, te has portado como una campeona, estamos muy contentos. ¿Eh Toni?

-         No hace falta responder. – Dijo Toni.

-         ¿Por qué no te quedas a cenar? Pedimos una pizza.

-         Solo me quedo si invito yo, me veo obligado. ¿Cenará desnuda Ali?

-         Sí.

-         ¿Y cuándo venga el repartidor?

-         No la verá, estará conteniéndose la risa en un rincón.

-         Qué morbo me da.

-         Ya lo verás. Ali, ¿verdad que cenarás desnuda?

-         Cabrones. – Fue su respuesta.

-         Jajajaja. – Rieron los dos a la vez.

-         Esperaba pasarlo bien pero no tanto, Manu.

-         Me alegra.

-         Es súper morbosa Alicia. Y esas tetas.

-         Bien que nos domina con ellas y con esa carita de buena.

El repartidor llegó cuando estaba Alicia sentada en el sillón, de espaldas a la puerta, por lo que apenas era vista.

-         Toma quédate el cambio.

-         Gracias.

Cenaron sin mayor incidencia que algún manoseo a Alicia de vez en cuando.

-         ¿Saldréis luego?

-         Por mi sí, ¿te apetece Ali o estás cansada?

-         La ducha me ha dejado como nueva.

-         ¿No tienes algo de irritación en los agujeros?

-         Un poco pero se aguanta bien, la boca un poco cansada con tanto pollazo.

-         Discúlpanos Alicia pero nos pones muy brutos y lo disfrutas también. En un rato me ducho y ya nos veremos luego por ahí Toni.

-         Perfecto. Yo me voy ya. Gracias por todo y si queréis repetir ya sabéis. Sobre todo a ti guapa. Solo por follar contigo otra vez me depilo la polla y lo que haga falta. – Le acarició una teta sonriendo y enfiló la puerta.

-         Si no, no follas jiji.

-         Y discreción, que te corto los huevos.

-         Descuida. – Y salió de casa.

-         Bueno primita ¿qué te ha parecido? Por cierto que entes casi se me escapa decirlo cuando me iba a correr con la segunda enculada. Jajaja. Me nublas el sentido.

-         Bien, un poco brutos pero bien. Me ha gustado la sensación de ser follada por dos buenas pollas a la vez.

-         Esa es mi Ali, es que de verdad que puedes con todo. Me siento muy afortunado. Además el trío lo querías tu. Carla es mujer y más delicada. – En tono conciliador.

-         Sí que me gustaría verla, aunque fuera solo para saludarla.

-         Es posible que la veamos.

-         Venga vete a ducharte mientras me visto. Llevo demasiadas horas en pelotas.

-         Voy. – Dándole una palmada en el culo sonriendo.