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Traicione a mi marido con su peor enemigo.

en Hetero: Infidelidad

Traicione a mi marido con su peor enemigo.

Hola, me llamo Tania, tengo 18 años y apenas acabo de salir de la prepa, mis medidas son 88-61,99, como ven soy bastante nalgona, y algo chichona, de brasiere soy 34-c, soy bonita, de facciones finas, de piel muy blanca y sensible, mi cabello es negro, y me lo dejo casi llegando a las nalgas, a veces me hago ondas con tenazas ardientes, no me gusta mucho pintármelo pues me gusta resaltar mi tono natural, y me maquillo en tonos naturales desde chica, siempre fui la nena más cotizada del cole, incluso anduve con cuatro profesores, mucho más grandes que yo, he tenido muchos novios, quizás más de 25, y con la mayoría siempre me han llevado a la cama; pero hace más de 3 años decidí andar de novia con un muchacho algo tímido del cole, su nombre es Rodrigo,  y hace apenas 7 meses que nos casamos.

Él tiene apenas 21 años, y esta desempleado, y como es muy joven casi no tiene experiencia en nada, además creo que es un poco tonto, se le ha hecho un poco difícil conseguir un empleo con un buen sueldo, creo que ando con el porque me trata como Reyna, y no me pide nada a cambio.

Bueno les sigo platicando, Me gusta usar bragas con adornos al frente y en colores oscuros, negros, morados, o fiuscia, la verdad no uso mucho tangas, me gusta más usar chikinis, de esos que inevitablemente dejan tres cuartas partes de nalgas de fuera, como no queriendo, pero finalmente no cubren bien las pompas, resaltan que estoy muy nalgona, y me pone la idea, que se me marquen en la ropa cuando camino y los hombres me vean con lujuria, mientras contoneo las nalgas con desparpajo.

Casi siempre uso sandalias de plataforma altísimos con los pies al descubierto, o zapatillas igual altísimas y me gusta usar mallones blancos, o amarillos, muy bien ajustados a mi cuerpo, y blusas o minitops muy escotados, mostrando mis pichones blancos levantados y expuestos, cimbrándose ante la mirada degenerada de los hombres.

 A Rodrigo nunca le ha molestado, al contrario, dice que le gusta presumir la vieja que tiene solo para él, aunque a veces se cabrea un poco cuando en la calle me gritan algún piropo obsceno o muy grosero, o incluso yendo de la manita con el me han dado alguna nalgada y él ni se entera, yo hago un esfuerzo por no pegar un gritito.

Un día, en un parque estaba esperándolo; yo iba en mallones amarillos, con unas sandalias abiertas altísimas de más de 12 cm. y un minitop blanco, sin brasiere y sin chikini debajo de los mallones, mi panocha perfectamente depilada, se marcaba irremediablemente, de pronto vi cómo se acercó un grupo de jóvenes, era un grupo como de 6 o 7 jóvenes bastante garañones, me empezaron a decir toda clase de lindezas, yo me hacia la desentendida,  hasta que se animaron a comenzar a manosearme en plena calle, me dijeron que cuanto cobraba, que me veía muy buena, que si era una verdadera puta, otros me decían pinche zorron, o mira nomas que hembra, alguno me dijo casi al oído pinche vieja puta; empecé a mojarme irremediablemente ante tal trato que me prodigaban, no sé porque, pero  pare aún más mis nalgas como ofreciéndoselas, como por instinto de mujer,  creo que ellos se dieron cuenta y no tardaron en comenzar a nalguearme, uno por uno, y por momentos me jalaban hacia a ellos de espaldas, y me restregaban su polla en todas las nalgas, algunas personas que estaban por allí veían la escena, pero me veían como una puta probablemente por mi ropita tan sexy, algunos hombres que pasaban caminando, se iban y otros se quedaban a curiosear y sacarme fotos con su celular, los hombres se reían manoseándome por todos lados entre mis chichis y mis nalgas, turnándose entre ellos, yo me dejaba hacer y me empape mi panochita de puro placer.

-Miren que rico culo cabrones y no dice nada la putita ¿te encanta verdad puta? decía el que al parecer era su líder.

Yo no decía nada, soportando sumisamente las muestras de virilidad de esos desconocidos, como una buena hembra como mi mami me enseño; uno me pregunto mi nombre, Tania le respondí, antes de terminar la frase el cabron me escupió en mi boquita, no pude evitar tragármelo, la verdad pensé que iban a terminar cogiéndome, finalmente después de casi media hora de estarme fajando en el parque, al final vieron que se acercaba una patrulla y pienso que pensaron que lo mejor era irse, y se alejaron riéndose de mí.

Rodrigo, el muy tonto ni se enteró, yo lo estaba esperando, pues nos habíamos quedado de ver allí, cuando llego eran casi las 7 de la noche, me beso tragando sin querer parte de lo que me acababan de echar en la boca, y me pidió disculpas por llegar tarde y me dio un globo en forma de corazón, yo no le hable durante más de media hora para hacerlo sufrir un poco, me daba cierto placer humillarlo por ser tan tonto, la primera vez que me acosté con él le dije que era virgen y ya había estado con más de diez hombres distintos, y no se dio cuenta, de hecho a él nunca se la he chupado, y ni hablar de darle mi culo, a mis 18 años aún era virgen anal y no pensaba dárselo a cualquier hombre.

En una ocasión por falta de tiempo, me pidió que lo acompañara a una entrevista de trabajo, me puse un bikini rojo, bra a juego todo con encajes, una chiquifalda de likra que me llegaba apenas a medio muslo, sin medias, así me gusta más pues se me ven más mis hermosas piernas blancas carnosas y muy bien torneadas; un gran cinturón dorado, y arriba una blusa roja strapples muy ceñida y súper escotada decidí no ponerme bra para marcar pezones, me maquille en tonos oscuros a conciencia, me eché la loción del corazón y me restire el cabello hacia atrás haciéndome un chongo alto súper sexy. Completé mi look con unas zapatillas rojas de tacón de aguja, y de esas que se abrochan con una tirita arriba del tobillo, me puse pestañas postizas, y me pinte los labios con un rojo intenso y gloss, de ese brillo que parece que trae una semen fresco en la boca, tome un bolso rojo muy sexy y chiquito donde solo cabía mi polvo de maquillaje y mi lipstik, me veía súper putita, pero con cara de nena inocente, como a Rodrigo le gusta.

Llegamos a una empresa enorme y una secretaria nos informó que lo del empleo era en el décimo piso, al abrir el elevador vimos una oficina enorme decorada en dorado, y la gente uniformada muy elegantes, otra secretaria nos dijo que esperáramos en un sillón viejito de tanto uso, por un momento nos desesperábamos, pues el tiempo pasaba, de vez en cuando algún empleado curioso se acercaba al rincón, pero solo para verme las tetas, yo me hacia la desentendida.

Hasta que después de casi dos horas y media, otra secretaria más nos indicó que pasáramos.

Entramos a una oficina totalmente blanca con tres estatuas de mármol de tamaño real de mujeres desnudas adornando la entrada, al fondo un escritorio de madera precioso y en un piso aún más alto que el resto del lugar, sentado en una silla que parecía de Oro, Un hombre veía a la calle desde sus ventanales completamente trasparentes como quien observa un montón de hormiguitas, ¡era el décimo piso!;  la gente se veía chiquita desde arriba con excepción de algunos albañiles que se encontraban en una construcción en el edificio de enfrente, y los distinguía perfectamente eran morenos, humildes.

Rodrigo estaba tranquilo, pero cuando el hombre giro su sillón 360 grados hacia él, y vio quien lo iba a entrevistar y quien iba a decidir sobre nuestro futuro, puso cara de desencajado; yo no comprendía bien pero me puse más sonriente y coqueta para no hacer quedar mal a Rodrigo; aun así me presento con él, le dijo que me llamaba Tania y que nos acabábamos de casar, su nombre era Antonio, se portó súper atento conmigo, casi como un padre muy consentidor no paraba en llenarme de halagos, aunque no dejaba de verme mis chichis y las nalgas con total descaro, Él era un hombre como de unos 30 años, moreno muy Feo, y tosco, y algo panzón, pero era muy varonil, y tenía algo que me hacía caer rendida a sus pies, tenía una voz gruesa, muy decidida y muy dominante, es más grande de edad que ambos y en Verdad a mí me pareció guapísimo.

Después de una plática un tanto cuanto tediosa, pero muy concisa, Antonio le recibió su currículo a mi marido y le pidió los celulares de ambos dijo que para estar bien comunicados, cuando Rodrigo giro la cabeza para buscar un bolígrafo para apuntarle mi celular, Antonio me guiño un ojo al tiempo que se sonrió lascivamente conmigo, una mujer entiende perfectamente lo que los hombres quieren de una cuando la ven como el me vio, pero pensé que mi deber era ayudar a mi esposo, Antonio prácticamente me estaba desnudando con la mirada.

Al llegar a casa Rodrigo me dijo que ese hombre Antonio lo molestaba mucho en el cole, incluso le quito varias novias. Mi panochita se mojó como intuyendo lo que le esperaba a mi piel, sin querer levante más el culo excitada, y pase mi lengüita mojando mis labios, mientras consolaba a Rodrigo.

No paso mucho tiempo, al tercer día Antonio me hablo a mi celular no al de Rodrigo y me dijo.

-Hola señora Hernández, ¿no está Rodrigo?

-si señor…, alcance a decir es que me estaba vistiendo y era verdad estaba yo en baby doll saliendo de mi cama.,

-No me lo pases, mira mi amor solo hablo para decirte que tu marido está contratado como subgerente de planeación, pero quiero verte el viernes por la mañana en mi despacho para ofrecerte un empleo a ti también, creo que lo deben necesitar mucho no?,

-Si señor gracias conteste gustosa.

-Ah y ya no me digas señor

-Dime Tony, y también delante de Antonio, ¿entiendes Reyna?,

-Si…Tony.

-y cuando estemos solos ya te diré como me tienes que decir, preciosa, ja,ja; te mando un beso corazón, y recuerda que te espero el viernes sin falta, ¡ah y ven sola! no le digas a Rodrigo de eso, es un poco remilgoso desde la escuela en algunas cosas, siempre he tenido que estarlo corrigiendo, no sabe vivir la vida, ¿entiendes?.

Sí señor,. Quiero decir Tony.

Antonio  colgó el teléfono, mis piernas temblaban de deseo, que hombre tan dominante, además estaba yo muy contenta, mi marido ya tenía empleo y probablemente Yo también, además la forma en que Tony me trataba me excitaba muchísimo.

De inmediato le conté a mi marido las buenas noticias, Ya tenía empleo. Él ingenuo se puso muy contento sin saber lo que su Jefe seguro planeaba hacer con su mujercita.

Yo por dentro como una minina nerviosa, no dejaba de pensar que empleo quería ofrecerme Tony, bueno pensé sin duda alguna debía ser algo bueno, no creo que quiera propasarse conmigo tan pronto, nos acabábamos de conocer y además Rodrigo había sido su compañero de escuela.

Le di un beso a Rodrigo muy largo y profundo de lengüita, y esa noche lo deje que me cogiera más de tres horas, aunque yo no me vine ni una, Rodrigo por cierto volvió a insistirme en penetrarme por el culo, a lo que por supuesto me negué.

Continuara…

estrellita, estrellita