La altiva Maria Eugenia me llamó por teléfono para que la instruyera sobre como y donde debería trabajar como una de mis prostitutas. Yo le pregunté por su actividad diaria para saber como adaptarla, aunque ya estaba casi todo planificado para ella. Me informó que trabajaba de 10 a 17h como asesora jurídica de una gran empresa. Quedé en pasar por su casa esa misma tarde a la 18h para darle personalmente las instrucciones.

Como quedamos me presenté y ella me esperaba junto con su marido, Nos sentamos en el salón a tomar una copa mientras le exponía su trabajo.

- Lo primero es que tu nombre se queda en Uge, nada de María Eugenia, que es demasiado cursi y rimbombante para una puta.

- Lo segundo es que en tu trabajo como tal y ante tu chulo, osease, yo, no te me pones de traje sastre como vas ahora.

- Discúlpame, es que vengo de mi otro trabajo.

- Disculpada, pero ve a cambiarte. Delante de mi solamente llevarás, como máximo, y te repito, como máximo, sujetador con copa abierta, bragas tanga y medias, con o sin liguero. Ve a cambiarte.

- Ahora mismo, susurró, mientras abandonaba el salón.

- Siento ser tan brusco con tu esposa, pero en este negocio si flaqueas se te meriendan las putas estas.

- No te preocupes, lo entiendo. Llegarían a ser como esposas, y si tu cuadra de putas es amplia te dominarían, buenas son estas mujeres.

- Me alegro de que lo entiendas, porque a lo mejor algún día tengo que disciplinar a tu mujer.

- Te lo agradeceré, a ver si se muestra menos altiva. Ella desciende de una familia aristocrática y de dinero y, como ves es arrogante con todo el mundo. Empezamos las sesiones de SM con tus otras putas Bea y Lauri por recomendación de una asesora matrimonial, ya que nuestro matrimonio se iba al garete por su soberbia. Desde que es humillada ha mejorado bastante.

- Por cierto, ¿Por qué habéis incorporado a vuestro hijo a las sesiones?.

- Esa es otra, el chico siempre fue muy mimado y consentido, desarrollando un gran complejo de Edipo. Por desgracia, imprevisiblemente no sorprendió en la primera sesión con tus putas y amenazó con contar nuestra actividad a sus abuelos maternos, los marqueses de Medina Mediana, así que hubo que incorporarlo. Por lo menos se parece a mi en mi tendencia masoquista.

- Ya, ya veo que no te importan los cuernos.

- Yo lo que quiero es que mi mujer, a la que, aunque permita me ponga cuernos, amo mucho, no me haga la vida imposible con sus caprichos de princesa. Si, por ende, se satisface mi masoquismo, pues mejor que mejor.

- Mira, me alegro, es un peso que me quitas de encima. No todos los maridos y parientes son tan comprensivos. Alguna gente se pone la mar de conflictiva.

- ¡Ah! Pero tienes más putas casadas?. Yo creí que casi siempre eran solteras.

- No, parte del éxito del negocio es que las mantenga alguien en sus necesidades cotidianas. Por eso es mejor que sean casadas o vivan con sus padres o que tengan un amante fijo o algo así.

- O sea, que además de cornudo consentidor soy, como el dicho, apaleado.

- No, la financiación de la puta se contempla en el reparto de beneficios. Voy con mis putas al 50% en el supuesto de que residan y se mantengan en casa de otra gente o por si mismas si son de gran rendimiento y lujo. Mis colegas que tienen putas solteras que mantener se llevan el 80% de los beneficios. Además, si tienen otro trabajo remunerado como es el caso de tu esposa, permito que sigan ejerciéndolo.

- No, si me vas a convencer de que eres todo un Mecenas del sexo.

- Ironiza lo que quieras, pero mis putas y sus familias me quieren mucho, Pocas veces tengo que castigarlas. Son las más disciplinadas de Barcelona. Mis colegas son estúpidos y no admiten que mi fórmula sea esa. Creen que es porque la follo bien, y no es así. A una puta se la debe tener siempre ansiosa de un polvo con su chulo. Así, cuando se le sueltas lo aprecian más.

En ese momento volvió la Uge vestida según mis instrucciones. El sujetador rojo sin copa levantaba sus blandos aunque atractivos pechos impulsándolos hacia delante y mostrando orgullosamente las extensas y oscurísimas aréolas coronadas por unos pezones no muy largos pero sí gruesos. El tanga de hilo dental a juego tapaba tan solo la entrada de su cueva delantera. Si se inclinaba quedaba al descubierto la trasera. Las medias eran de malla gruesa con ligas.

La invité a sentarse a mi lado y pasando un brazo sobre sus hombros para acariciarle un pezón, proseguí mi conversación con Guillermo:

- Como te decía, ese 30% de beneficio sobre lo habitual que se llevan las putas de mi negocio supone que sus familiares o amantes deben hacerse cargo también de su "puesta a punto". Es decir, depilación y peluquería, ropa, maquillaje, joyas, gimnasio, transporte, etc...

- ¿Así que yo debo depilar el coño de mi esposa para que lo disfruten otros?

- Yo te recomiendo, para que te quites de preocupaciones y problemas, que le pagues una depilación total y definitiva al laser.

- Zorrilla, qué prefieres, conservar la posibilidad de felpudo y los problemas del continuo pelado y su irritación y picores o deshacerte para siempre de esa molestia.

- Con permiso de mi chulo, prefiero depilarme para siempre.

- Hay algún detalle importante que tratar: me informaron mis putas Bea y Lauri que deseáis otro hijo, sea tuyo amigo Guillermo o de vuestro propio hijo.

- Bueno, durante un mes que voy a ser tu puta , se podría posponer el proyecto ..... salvo que ya esté preñada, pero bueno, en un mes no se notará mi tripa si es que lo estoy.

- No es ese el inconveniente, el estar preñada, aunque sea en estado muy avanzado no afecta al negocio, es más, de ordinario se cotiza más cara la puta preñada. El problema es la selección del padre. Esta noche tengo una entrevista con Bea y su marido, Julián, para tratar algo similar. Bea quiere tener un bebé de Julián. Eso implica dos soluciones: O se aparta de la actividad hasta que se diagnostique el embarazo o tiene que prescindir de los clientes "sanitariamente seguros". Los clientes sanitariamente seguros son los que, a cambio de no usar condón, presentan certificado médico de no padecer ETS. Esos son los que mejor pagan y si se prescinde de ellos el negocio pierde mucho, además es que se van a la competencia y es difícil recuperarlos.

- Me ilusiona tener un hijo, no puedo asegurar que no esté ya preñada.

- Bueno, estés o no, a partir de hoy follarás con condón hasta que recomiences a tomar la píldora. ¿Cuando empieza el ciclo?.

- En dos semanas creo.

- Bueno, no es mucho, teniendo en cuenta que no podrás follar en una semana por las perforaciones de los anillos ... de toda maneras el mes de puta comenzará a contar desde el primer trabajo.

- Si claro, es razonable. También pueden ser dos o tres meses.

- Concreta porque traigo aquí el contrato y hay que dejar eso claro.

- Bueno ... Si lo dejamos en seis meses estaremos todos más seguros de ... ne ... deee ... bueno yo ...

- Nada cariño –intervino Guillermo- todo el tiempo que quieras. No te apures.

- Vale pues. Contrato de seis meses de puta.

- Si ... vale.

Entretanto yo ya manoseaba su agujero vaginal notando su humedad y no pude reprimir una alabanza:

- Desde luego, Guillermo, tienes una esposa de bandera. Las putas deben ser iniciadas de jóvenes por regla general, pero creo que tu esposa será de primera sin necesidad de ser aprendiza previamente. Solo catar sus jugos ya dice todo, afirmé llevándome a la boca los dos dedos que habían penetrado su encharcada cavidad.

- Gracias, no debería ser menos dado su rancio abolengo.

- Bien Uge, más instrucciones: debes acudir mañana mismo si te es posible a un establecimiento de tatuajes y piercing. Aquí tengo los dibujos y anillos que hay que ponerte y me falta anotar la posición exacta de acuerdo con tus medidas. Ponte de pie.

El proyecto de puta se levantó y yo saqué de mis bolsillos un metro y un calibrador con los que medí su anatomía anotando la posición milimétrica de cada tatuaje y hasta las micras de sus perforaciones. Cuando medí el grosor de su clítoris me llevé una decepción. No ofrecía la necesaria dimensión para soportar el grueso anillo de titanio que tenía pensado para ella armonizando con sus amplias caderas y el decorado que éstas presentarían enlazando su riñonada, su vientre y su monte de Venus. La decoración de la porción superior de aquel cuerpo, extendida desde el pecho izquierdo hasta la segunda vértebra dorsal paseando por el hombro cumplía mis mejores esperanzas.

- Guillermo, tengo que pedirte un favor. Bueno no es favor porque te daré un 5% de participación en beneficios de explotación de la ramera durante tres meses.

- Dime Jorge ( creo que no había mencionado mi nombre).

- Te resultará un poco molesto, pero necesitaría que la puta tuviera puesta en el clítoris la cápsula de vacío que tenéis entre vuestras "herramientas" durante media hora de cada dos todas las noches durante una semana.

- ¿5% de beneficios?. Dalo por hecho.

- Bien tío. Eres un colega guay. Una cosa más contigo: Tu te podrás follar gratis a mi puta por respeto a los deberes conyugales establecidos en el sagrado sacramento del matrimonio. Pero si vuestro hijo quiere tirársela deberá pagar la tarifa que corresponda en el cuadro según lo que pretenda de ella. Conste que la pienso poner en tarifas de puta de lujo. Por supuesto las orgías esas como la que tuvimos el otro día quedan prohibidas para ella, salvo que paguéis su precio de mercado. La tarifa va en la carpeta que ahora le daré a ella. Si os parece cara os puedo ofrecer una sustituta, no tan apetecible como ella, y no gratis como teníais a la Uge hasta ahora.

- Razonable tío.

- Uge: aunque te catalogue como puta de lujo, ello no quiere decir que vayas a follar entre sábanas de seda y hoteles de cinco estrellas. Se es puta de lujo en función del nivel de tarifa, no en función de los lujos durante el trabajo. Las tarifas mayores son las de las putas llamadas "guarras", que son las que se prestan al sado, las meadas, la zoofilia y cualquier otra perversión. Te he clasificado como tal atendiendo a tu inclinación masoquista. Por ello te tengo asignada a trabajar desde las seis de la tarde de martes a jueves a domicilio y hotel. Los viernes y sábados prestarás servicios en el gabinete SM llamado "El Amo Severo" de mi amiga Lucrecia, y los domingos y lunes descanso. El término de la jornada laboral se establece a las dos de la madrugada. Los ingresos por exceso de trabajo a partir de esa hora serán íntegros para ti, pero me tienes que comunicar la incidencia por el móvil. Cualquier exceso por esfuerzo corporal, drogas u otros que pueda perjudicar tu trabajo "oficial" no será responsabilidad de mi empresa.

- ¿Te has constituido como empresa?, intervino Guillermo.

- Es una forma de hablar cuando se trata de negocios.

- Ah, ya. Y de seguridad social qué?

- La seguridad de asistencia sanitaria y pensión va por cuenta de sus cotizaciones en el trabajo oficial. Yo garantizo su seguridad ante accidentes laborales y el estado sanitario de los clientes acreditados que no empleen preservativo. ¿Alguna precisión más?

- En ese caso, Uge, aquí tienes los anillos, una cadenita que deberás llevar siempre a la cintura reposando sobre tus generosas caderas de buena paridora, los dibujos de tus tatuajes, el croquis de su situación sobre tu cuerpo y la dirección del estudio de piercing y tatuajes de mi amigo Sebastián que es de acreditada habilidad y sanitariamente intachable. Vete con tu marido por si la vuelta se te hace un poco incómoda. Ahora, en señal de aceptación del contrato lo firmáis los dos y te pones en el pulgar derecho este anillo con mis iniciales.

- ¿ Por qué tengo que firmar yo?. Objetó Guillermo.

- Porque no quiero después problemas de divorcios y otras maniobras sucias que ya se han dado con frecuencia. Debe quedar claro que ella ejerce con tu pleno consentimiento.

Convencido firmó, al igual que ella y después yo y les di uno de los ejemplares del contrato. Inmediatamente ella se puso el anillo que le había entregado para el pulgar y quiso quitares al alianza matrimonial, cosa que le impedí.

- Para cualquier cliente el saber que la puta que arrienda está casada es un aliciente más por el morbo de poner de paso unos cuernos. Así como el saber que tiene hijos, por lo que deberás mencionar a la menor ocasión tu condición de casada y madre. Se me olvidaba, dada tu escasa experiencia anal sería conveniente que te colocases un plugg-in con frecuencia para acomodar bien ese agujero a su frecuente uso a partir de ahora. No es lo mismo ser sodomizada una vez al mes que varias veces en un día.

Impartidas las instrucciones a la puta novel partí para casa de Bea a tratar con ella y su marido Julián el asunto de su embarazo. De paso me enteraría de las actividades de Lauri, que había ingresado mucho dinero últimamente en mi cuenta pero no me había dado razones de es incremento.

Días después me contó Uge su visita al gabinete de piercing. Previamente, en tres sesiones se había hecho depilar a láser totalmente. Se le ocurrió que la acompañase su hijo ya que su marido tenía otros compromisos. Mi amigo Sebastián no tenía idea de que la mujer que llegaba era una de mis putas. Ella y el chico le empezaron a instruir y darle los dibujos y los croquis de posición de los tatuajes del pecho y hombro, pasando después a los de la zona lumbar y la nalga. Mi amigo trabajó sin abrir boca aunque un poco extrañado de tanta profusión en la decoración.

Cuando llegó el turno al pubis y Luis le entregó la correspondiente hoja donde figuraba "Puta de J", el hombre no pudo sino comentar que si no era demasiado joven para tener putas y menos maduras. El chaval fue tan imprudente como para responder que no era su puta sino su madre, que si fueses su puta la hubiera decorado de otra manera. Sebastián quedó estupefacto ante el desparpajo del muchacho y Uge quedó totalmente abochornada. Al parecer estuvo roja de vergüenza y sin saber adonde mirar durante el tatuado de su membrete tan explícito de su condición de ramera, espatarrada sin pudor ante su propio hijo que seguía el trabajo atentamente.

El piercing quedó para otra sesión a la que se presentó sola pero aún avergonzada. El morboso de él no se privó esta vez de preguntar a Uge sobre lo escabroso de su situación sin que ésta soltase palabra. Pero a pesar de su prudencia no pudo contenerse de insultarlo cuando él comentó la educación tan truculenta y el mal ejemplo que daba a su hijo entregándose a vida de meretriz tan explícitamente delante de él. También preguntó si se lo follaba. Sebastián quería averiguar quien era el chulo de aquella madura belleza. No hizo falta decírselo, Cuando tras anillar los labios mayores y menores de la puta, ella le entregó la descomunal argolla que iría atravesando el ya bien elongado clítoris, supo que el chulo era yo ya que conocía mi gusto por los clítoris grandes y anillados gruesos. Sabía que notar ese peso mantenía a mis putas excitadas y predispuestas al trabajo. En el caso de Uge se le colocó también una cadenita enlazando su gran anillo clitoriano con los dos de los labios mayores.

La concedí una semana y media de plazo para cicatrizar sus taladros y la emplacé a trabajar presentándola en "El Amo Severo" donde mi amiga la dómina Lucrecia alabó su decoración, que la dotaba de un aspecto imponente sobre su ya espléndida figura. Enganchó una cadena al anillo de su clítoris y se la llevó tras si a las profundidades de sus mazmorras y salas de tortura para iniciarla en el trabajo.

Una vez colocada mi puta, me marché para casa de Nwin donde sus padres querían hablarme.

CONTINUARÁ.

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