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Confesiones de un aspirante a escritor

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Confesiones de un aspirante a escritor

Los relatos eróticos son el punto de encuentro de mi afición por la literatura – como lector y como aprendiz de escritor - y la atracción y fantasías que siempre me han producido la belleza y sensualidad de la mujer.

Desde los principios de la navegación – por la red – he recalado en mil puertos habitados por mujeres hermosas que se mostraban sólo para mí, que amaban o se dejaban amar ante mí. Pero como no siempre una imagen vale más que mil palabras también recalaba de vez en cuando en páginas de relatos o anécdotas eróticas.

Confieso que, en el mejor de los casos, las narraciones que había encontrado tenían el morbo suficiente como para conseguir su objetivo sexual más inmediato pero que nunca despertaron en mí interés literario – porque seguramente no lo tenían.

Hasta que el azar me llevó hasta Todorelatos. En esta página, no sólo encontré prosa para la autosatisfacción sino también calidad.

Llevaba años escribiendo relatos y poesías de contenido o trama erótica. Llevaba tantos años escribiendo como años desesperando dar a la luz "mi obra". Así es que casi de forma inmediata después de mi ingreso como lector, decidí que aquel era el rincón para publicar mis relatos.

No he batido ningún récord pero el primer mes ya había publicado 13 relatos y tenía más de 75.000 visitas – En 3 meses 31 relatos y más de 207.000 visitas -. Me las prometía muy felices: me equivocaba.

A pesar de esos números, no he acabado de estar satisfecho con la relación calidad/puntuación de mis relatos ni tampoco con mi tendencia por momentos de hacer "concesiones a la galería" para intentar ganar puntuaciones y atraer visitas.

Es muy importante que los autores que participamos en esta comunidad, con más o menos fidelidad, seamos conscientes que la excelencia literaria y la eficacia para despertar la líbido no van necesariamente cogidas de la mano. ¿Por qué le tiene que gustar a una persona que solo pretende hacerse una paja un Lolita de Nabukov o el Trópico de Cáncer de Miller?

¡Suerte que el nick que elegí fue "El Escribidor" y no "El Escritor"!

Elegí "Escribidor" porque era muy consciente de lo que pretendía o de lo que no pretendía. Me acordé de La Tía Julia y El Escribidor, de Vargas Llosa, donde este personaje escribidor era un guionista de folletines para la radio, un escritor "alimenticio", como lo puede ser un redactor publicitario de anuncios que tiene que vender un producto en el que ni siquiera cree, un policía que tiene que redactar un atestado para que sea cuanto menos que convincente o un periodista que cubre un evento anodino. Eso/ese era yo: Escribidor.

No pretendía pues ser Escritor.

Pero las alabanzas a mis relatos, las críticas positivas, las puntuaciones altas, mi ego y, cómo no, el interés de un periodista en ciernes como Dani en entrevistar a un ya inmodesto Escribidor, hizo que me desviase de mi correcta orientación inicial y me creyera un Escritor.

No digo que no lo sea., digo que la comunidad de Todorelatos no tiene que ser el refrendo a la consulta: Escritor sí / Escritor no. Todorelatos es, si me apuran, una prospección, un sondeo para quien quiera aventurarse a ello.

Uno prueba, y si ve que puede gustar/interesar, pues adelante, a publicar.

Pero, no nos engañemos – lo he comprobado – fuera de Todorelatos no hay un mundo de cazadores de talentos esperándonos. Por no haber, no hay casi nada.

Los premios de la Sonrisa Vertical – referencia obligada de la novela erótica los últimos 20 años – no sólo han quedado desiertos en alguna de sus últimas ediciones, sino que su editorial ya ha suprimido los premios y creo que la continuidad de la colección.

Una de las revistas – en castellano – que más salida podían dar a los relatos eróticos, el Penthouse, ha cerrado.

Qué espacio queda entonces para la publicación de relatos eróticos. A mi juicio, hay cuatro espacios – sin contar el fondo del cajón del escritorio:

El mundo editorial tradicional, que sólo está al alcance de muy pocos: consagrados, escritos muy buenos o mediáticos (simples rostros conocidos de la tele). Estos últimos con tendencia al alza.

Certámenes y premios literarios. (Desconozco ese mundo pero presumo que debe ser duro e injusto).

Comunidades virtuales como Todorelatos que permiten la participación, sin otra pretensión –que no es poco - que satisfacer el ego, aprender y agradar a los demás.

Y la poco explorada publicación en las nuevas editoriales on-line. De libros por pedido en papel y/o e-book o formatos similares.

Yo me decanto por las dos últimas vías, que creo que son, no sólo son compatibles sino que suponen una combinación perfecta.

Una comunidad virtual como Todorelatos – la mejor, sin duda - porque nos permite pulsar la aceptación del público y la calidad de "nuestra obra". La aceptación del público mediante los parámetros conocidos de puntuación, visitas y comentarios. Y la calidad de nuestros relatos gracias a las críticas de otros autores y lectores.

Y la publicación en formato e-book o similar, en solitario o de forma colectiva, porque es una forma muy fácil de poner en circulación una publicación propia, a muy bajo coste, de forma que el aspirante a autor, al menos, no se quede con las ganas de ver editada su obra.

Un libro en el escaparate de una librería tiene un encanto especial, pero no tiene que ser menos gratificante mostrado en un aparador virtual por el que a diario pasan miles de personas.

Además, para los autores en ciernes, sin firma registrada, tal como hemos podido comprobar en recientes foros, es una preocupación constante los plagios y apropiaciones de nuestras modestas obras.

Yo mismo he comprobado cómo relatos míos como El Jardín Prohibido de Carla, MI Cuñada Raquel, Natalia o Una Lección de Hípica con Verónica, aparecen sin mi firma en otras páginas webs de relatos eróticos: eliteraltos.com, mariaunpajote,com, hispa69.com y relatos-abc.com. Esta última web con el agravante de cobrar mediante sistema de clave de acceso previo pago por mensaje SMS.

Creo que necesitamos registrar como autores nuestros relatos más originales y considero que no estaría de más publicarlos para que nuestra firma pueda ser conocida en los ambientes literarios – cuanto menos del género erótico – y defendida de intrusos y piratas.

En cuanto a derechos de autor, me voy a permitir reseñar dónde recabar toda la información necesaria sobre legislación, trámites, tasas y localización de las oficinas nacionales en las se registran las obras:

En España: http://www.cultura.mecd.es/jsp/plantilla.jsp?area=propint&id=17

En México: http://www.sep.gob.mx/wb2/sep/sep_459_indautor

En Argentina: http://www.jus.gov.ar/minjus/ssjyal/Autor/default.htm

En Colombia: http://www.cecolda.org.co/

 

Para más información sobre esta cuestión y para el directorio de otros países de habla española, existe un organismo, el CERLAC - Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe - internacional y de carácter intergubernamental, que presta asesoría técnica a los gobiernos Iberoamericanos en la definición y aplicación de políticas, programas, proyectos y acciones para la promoción del libro, la lectura y el derecho de autor. Fue creado en 1971 por iniciativa de la UNESCO.

Su página web es la siguiente: http://www.cerlalc.org/index.htm

 

En cuanto a editoriales virtuales, hay dónde elegir. Yo he explorado un poco ese mundillo y he seleccionado las que a priori ofrecen mayores garantías:

http://www.libronauta.com

http://www.ciberautores.com

http://www.noveles.com

http://www.nuevosescritores.com

 

En definitiva, que me gustaría ver publicados mis relatos y los de otros autores de esta comunidad virtual y que me gustaría verlos en el escaparate ideal: Todorelatos.

¿Es el futuro de una nueva sección? ¡Ojalá fuera factible!

 

22/07/04 © Carlos_62, ElEscribidor.