La odisea de Virgilio (VIII: La cantata del Diablo)

Padre nuestro, de todos nosotros,
de los pobres, de los sin techo,
de los marginados y de los desprotegidos,
de los desheredados y de los dueños de la miseria,
de los que te siguen y de los que en tí... Ya no creemos.

Baja de los cielos pues aquí está el infierno,
baja de tu trono, pues aquí hay guerras, hambre, injusticias,
no hace falta que seas uno y trino,
con uno solo que tenga ganas de ayudar nos bastaría.

¿Cuál es tu reino?,
¿El vaticano?,
¿La banca?,
¿La alta política?

Nuestro reino es Nigeria,
Etiopía, Colombia, Hiroshima,
el pan nuestro de cada día
son las violaciones,
la violencia de género,
la pederastía, las dictaduras,
el cambio climático.

En la tentación caigo diario,
no hay mañana en la que no esté tentado
de crear a un Dios humilde, justo,
un Dios que esté en la Tierra, en los valles, los ríos,
un Dios que viva la lluvia,
que viaje a través del viento
y acaricie nuestra alma,
un Dios de los tristes, de los homosexuales,
un Dios más humano,
un Dios que no castigue, que enseñe,
un Dios que no amenace, que proteja,
que si me caigo me levante,
que si me pierdo, me tiende a su mano,
un Dios que si yerro no me culpe
y que si dudo me entienda,
pues para eso me dotó de inteligencia,
para dudar de todo.

Padre nuestro de todos nosotros,
¿Por qué nos has olvidado?,
Padre nuestro, ciego, sordo y desocupado,
¿Por qué nos has abandonado?

http://www.youtube.com/watch?v=9JbJDw_e_Kc

http://www.youtube.com/watch?v=FDKTne37OxU

http://www.youtube.com/watch?v=Z-j1Pg-WqWc

La cantata del Diablo. Mägo de Oz.

Nota: Es importante leer los primeros capítulos para entender la historia.

http://www.todorelatos.com/relato/67879/

http://www.todorelatos.com/relato/67888/

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Aún no había amanecido y la actividad en el apartamento de Liliana era frenética. Ayudamos a Liliana a empacar y dejar la casa limpia y ordenada. Ella dijo que no era necesario, pero como invitados Laura y yo nos sentimos moralmente obligados. En ese momento aún albergábamos esperanzas de poder volver a la ciudad. Pero al final estas fueron vanas. Mientras lo hacíamos Liliana y yo nos besábamos cada dos por tres. Pero Laura hizo algo inusitado, me dio una nalgada en mi trasero y luego me sonrió. ¡Me estaba tirando los tejos delante de Liliana!. Y lo más desconcertante aún, que Liliana se percato de aquello y se puso a reír. Y yo abochornado. ¿Que es lo que se trajinaban estas dos?

Tomamos un fuerte desayuno. Yo me había levantando aún sin asimilar el descubrimiento de que Laura y Liliana eran amantes lesbianas y a la vez Liliana lo era de mí. Y ahora para más inri ¡ Laura me metía mano sin ningún pudor ante la presencia de mi amada ! Estuve varias veces a punto de exigir respeto a Laura. Pero ellas sonrían sin parar cada vez que Laura me tocaba. Esta siempre aprovechaba cualquier oportunidad para tocarse conmigo o para bloquearme con el pasillo , sonreírme y mirarme seductoramente.

Yo no entendía absolutamente nada. Laura era la profesora más tímida en el departamento. Cumplía perfectamente el estereotipo de genio sin habilidades sociales. Pero desde hacía dos semanas su comportamiento había dado un giro radical. Ahora se disponía a escapar de la ciudad con Liliana y conmigo. Esto no era habitual en ella tomarse este tipo de confianzas. Más bien todo lo contrario.

Esperamos a que el del súper abriera. Nos dirigimos los 3 y vimos que muchas estanterías estaban vacías. Los suministros estaban llegando con dificultad a la ciudad. Si los golpistas no tomaban acciones con respecto a ello más tarde o temprano habría hambruna entre los habitantes. Aún así había suficiente. Con todo el dinero que teníamos compramos todo lo que pudimos de alimentos no perecederos. Prácticamente el maletero del coche se lleno de ellos.

Les pedí a mis compañeras de viaje que me esperasen un momento. Iría al cajero a sacar más efectivo. Afortunadamente el cajero automático de la esquina de la calle estaba en funcionamiento. Deje mis cuentas casi vacía y mi tarjeta tiritando. Sospechaba que ese dinero nos iba a ir bien en un momento dado. Tal vez un soborno pudiese ser preciso. Yo me dispuse a conducir. Laura se sentó en el asiento del copiloto y Liliana atrás junto a multitud de equipaje que no entró en el maletero.

Arrancamos el coche y tomamos dirección a la salida norte de la ciudad. Nos extraño que no hubiese patrullas ese día y el tráfico era inexistente, solamente circulábamos nosotros. Pero la cosa cambio cuando estábamos a punto de entrar en la autopista que llevaba a la capital. Allí había un puesto de control del ejército.

• ¿ Liliana que hacemos ?- Dije
• Di que eres un viajante y que como representante tienes que ir a la capital.
• Se me ha ocurrido una idea. – Comenté- ¿Laura has traído tu portátil?
• Sí está en la maleta que tiene al lado Liliana en su asiento.
• Liliana sácalo y dáselo a Laura. Laura pon cara de muy ocupada tecleando.

Nos dispusimos a hacer el paripé. Cuando llegamos cerca el soldado con gestos con su mano nos indicaba que nos detuviésemos. Yo puse la mejor de mis sonrisas.

• Buenos días soldado. ¿En qué puedo ayudarle?
• No se puede abandonar la ciudad.
• Lo sé, pero supongo que los generales desearan que la economía de la nación se restablezca cuanto antes. Hay que levantar el país. Menos mal que vosotros, unos grandes patriotas, habéis intervenido. Esos malditos rojos que estaban en el gobierno se estaban cargando el país.
• De acuerdo. ¿Hacia dónde van y cuál es su cometido?
• Soy representante de una empresa de software. Ella es Silvia, mi ayudante comercial, y atrás está sentada María, secretaría de ventas. – Liliana le dio una encantadora sonrisa que vi desde el retrovisor.
• Vale, pueden pasar pero vayan con cuidado. Aún estamos buscando a traidores.

Sus compañeros retiraron la barrera de stop y proseguimos la marcha. Cuando dejamos bien atrás el puesto de control solté un gran soplido.

• ¡Fuuuu! Parece que lo hemos conseguido
• Por ahora, Virgilio, por ahora. No estaré tranquila hasta que lleguemos al pueblo.- Dijo Liliana

Nos quedaba por delante un viaje de unos 500 kilómetros dirección norte. Dispuse una marcha con una buena velocidad pero no excesiva, no debíamos llamar la atención. Pero por desgracia la íbamos a dar si o si, la carretera estaba desierta. Solo circulábamos nosotros. Aquello era preocupante, pero también llamativo. Si la ciudad no recibía mercancías se colapsaría en cuestión de días. Si los militares creían que habían impuesto el orden estaban muy equivocados. Si esto seguía así el hambre aparecería en poco tiempo y con ellos los disturbios. Estaba claro que se iba a producir un baño de sangre en pocas semanas. Me pregunté qué clase de idiotas habían iniciado el golpe de estado. De todas formas eran militares, desertores del arado. Profesionales de la violencia. Poco bueno se puede esperar de ellos. Y este golpe de estado era la demostración. Habíamos hecho muy bien huyendo.

El viaje transcurría sin percances. Por la autopista íbamos a buena velocidad. Yo bebía agua mientras Laura abría la ventana disfrutando de la brisa. El paisaje cambiaba progresivamente. De las tierras de regadío del sur pasamos a extensas zonas de cereales. El día estaba relativamente bien, aunque desde el oeste unos grandes nubarrones delataban que en pocas horas nos alcanzaría una borrasca.

Llevábamos 5 horas de viaje. Empezó a llover a cantaros. Empezaba a tener ciertas dificultades para poder ver la calzada. Cuando íbamos descendiendo un cambio de rasante vimos de improvisto otro puesto de control en mitad de la autopista. Esto no nos dio tiempo apenas de reaccionar.

• ¿¡ Liliana que hacemos !?

Liliana parecía estar paralizada. Tenía cara de pánico. No reaccionó. Otra vez recibí ordenes de pararme y así lo hice. Un soldado con chubasquero se acerco a la ventanilla. La bajé mientras estaba lloviendo a cantaros.

• ¡ Sus papeles ! – Me dijo con un tono de agresividad - ¡ Quiero todos los documentos de identificación !

Se los dimos . Este los recogió y se dirigió hacia su jeep. Pude oír lo que dijo.

• ¡ Central ! Solicito información de un tal Virgilio con código 1138 THX, de una tal Laura 9000 HAL y otra llamada Liliana 0666 BAL. Corto

No pude oír la respuesta pero por el gesto que puso el soldado me asusto.

• ¡ Mi sargento !

Un corpulento soldado se salió del tanque y se dirigió hacia nosotros. Dio instrucciones al resto de la patrulla de que le acompañase.

• Sargento estos individuos se encuentran a 450 kilómetros de su lugar de residencia. Ya sabe las órdenes que recibimos.
• ¡¡ Pelotón!!

Los soldados nos apuntaron con sus fusiles de asalto. Instintivamente levantamos las manos

• ¡Salgan inmediatamente del coche!

Procedimos a salir sin hacer ningún gesto extraño que malinterpretaran, de forma lenta.

• ¡Soldados cacheen a estos traidores!

Eso no sonó nada bien. Empecé a temer por nuestras vidas. Empezaron por mí mientras estabamos apuntados por sus armas.

• Mi sargento , este está limpio
• Seguid con la morena.

Agarraron bruscamente a Laura y la empujaron contra el coche. Le hicieron abrir las piernas. Entonces empezaron a cachear sus piernas, pero lo hicieron de forma claramente lasciva. No la estaban cacheando, la estaban magreando. Laura empezó a protestar. Entonces el soldado le metió la mano en la entrepierna. Laura grito

• ¡Mira la puta que tenemos aquí! Pero si está mojada con solo magrearle las piernas. Tú eres una calientapollas.
• Sargento, tengo que protestar por el comportamiento de sus hombres- Dije
• Tú a callar o te descerrajo un tiro.- Respondió el sargento. Si mirada declaraba claramente sus intenciones. No paraba de mirar de forma lasciva a Laura y a Liliana.

El soldado siguió con su abuso

• ¡Estate quieto! ¡Puerco! – Grito Laura mientras intentaba zafarse de su acosador.
• ¿ Me llamas a mi puerco ? – Le dio una sonora bofetada – Te vas a arrepentir so puta.

La lanzó contra el tanque. Entonces saco su cuchillo de asalto.

• ¡ Noooooooooooooo ¡ - Grite desesperado intentando ir hacia él para golpearle. Pero recibí un puñetazo en el estomago que me hizo caer de rodillas. Luego una patada en la cabeza y entonces, ya en el suelo, una bota me pisaba el cuello
• Tú te vas a estar aquí quietecito mientras nos divertimos con tus amiguitas. Los rojos sois unos cabrones que os lleváis las putas a pares. Además con la cara de empollón que tienes seguro que eres un picha floja. A este par de zorras le vamos a dar lo que necesitan. Unas pollas que le den bien duro, cosa que un puto maricón como tú no eres capaz. Seguro que mientras nos las follamos no se te pone dura.

El del cuchillo se acerco a Laura y cogió su camisa por debajo e introdujo el cuchillo. Y de un preciso corte se la rompió. Luego cogió el sostén y se lo arranco violentamente con las manos.

• ¡ No ! ¡ Otra vez no ! Te lo ruego , no lo hagas - grito Laura
• Una puta no da órdenes, una puta chupa pollas.
• ¡ Dios no ! ¡ No podre soportarlo otra vez ! ¡ Ayúdame ¡- gritaba
• Jajaja. Dios no va a venir a ayudarte, zorra. No te vas a librar. Te vamos a romper todos los agujeros de tanto follarte.
• ¡No lo hagas ¡ ¡ Mátame ¡ Pero no me violes. ¡Otra vez no!
• ¿Y crees que te voy a hacer caso? Quizás te haga un favor y te mate luego maldita traidora. Pero por lo que me dices pareces que no es la primera vez que te dan duro, ¿ Eh ? No te preocupes que conmigo y mis amiguitos te vas a correr de gusto. Por que se que eres un putón. Así que no finjas que eres una estrecha.

Entonces algo ocurrió. Una luz cegadora inundo todo. Los soldados cayeron al suelo. Durante un instante temí que había habido una explosión termonuclear en los alrededores. SI era así entonces estábamos muertos. Pero entonces me fije bien, la luz cegadora provenía de ¡Liliana! Parecía como si su cuerpo desplegara una fluorescencia de una intensidad más brillante que la de una supernova. Era todo su cuerpo el que estaba incandescente e incluso hasta su pelo transmitía luz. Me estaba haciendo daño a los ojos e interpuse mi mano hacia la luz tapándolo.

La luz se apago y Liliana volvió a aparecer tal cual. Los soldados estaban en el suelo sufriendo ataques epilépticos, de sus bocas salía espuma. Liliana me ofreció su brazo para levantarme, lo cogí pero a la vez con un gran temor. Siempre lo había sospechado. Liliana era extraña, pero no me imaginaba hasta que punto. Fue a por Laura y la agarro del brazo y ambas se dirigierón al coche, Liliana abrió la puerta del copiloto y ayudo a Laura a meterse. Luego ella abrió la de la puerta trasera.

• ¡Virgilio! Debemos marcharnos

Yo estaba atolondrado. Pero sus palabras me despertaron y obedecí. Cogimos el coche y rodeamos el puesto de control por el arcén. Le di mi chaqueta a Laura para que se tapase. Esta estaba entre llorando y asustada por la persona… o lo que fuera que estaba sentada en el asiento de atrás.

• Virgilio coge la siguiente salida. Ya estamos cerca y no nos arriesgaremos a continuar por la autopista. A partir de ahora iremos por carreteras comarcales

Con gran temor por mi parte pero al final le dije

• Liliana ¿Que a sido eso? ¿Quién eres? ¿Que eres?
• Ahora no es el momento. Ya os daré explicaciones cuando lleguemos a la masía. Bien ahora gira en el siguiente cruce a la derecha.

Pospuse mi pregunta y seguí sus indicaciones para llegar a dicha propiedad agraria que Liliana afirmaba poseer. Después de media hora adicional cogimos un camino de tierra que un kilometro más allá nos llevo a un edificio antiguo. Se trataba de una construcción de piedra sin pulir unidas con cal. La fachada principal apuntaba hacia al sur. Tenía dos plantas con una altura de 5 metros cada una de ellas. Había diversos arcos en la planta baja y se podía observar que tenía una bóveda de crucería en el techo. El aspecto general del edificio era abandonado pero en buen estado. Aparque junto a lo que parecía la entrada principal.

• Bienvenidos a mi Masía. Aquí es donde viviremos en el próximo año.

Liliana nos invito a entrar. El aspecto exterior del edificio no era muy alentador pero el interior parecía agradable. Nos mostró las diversas habitaciones. Eran muy espaciosas, se notaba que el edificio era muy grande. Había un cuarto de baño con una ducha muy grande, podían caber muchas personas dentro a la vez, y a la vez una bañera igual de espaciosa. La cocina estaba bien equipada, había hasta un frigorífico apagado y vacio. Pero el resto de utensilios antiguos. También había una cómoda sala de estar, no había ni televisión, ni radio a la vista, pero estaba atestada de estanterías cargadas de libros. Aquella biblioteca era enorme. También había una chimenea de leña. En las afueras había un bosque, así que podríamos obtener leña de allí. En habitaciones separadas a la casa principal había algo que parecía ideal para montar una granja artesanal de gallinas y una porqueriza. En la planta superior estaban las habitaciones. Había 4 en total. 3 de ellas con grandes camas. Me senté en una de ellas y comprobé que tenia la dureza que a mí me gustaba. Estaba amueblada de manera clásica, los muebles tenían el aspecto de ser del siglo XIX.

Luego Liliana nos mostro el cuarto dormitorio. Era el más grande de todos pero eso no fue lo que nos dejo anonadados a Laura y a mí. Las paredes estaban pintadas en rojo y del mismo color la tapicería del suelo, la cual estaba pensada para poder andar descalzo. Había un sofá a un lado grande. Una cama enorme, de en torno a 3 x 3 metros o más. Había varios espejos de cuerpo entero y uno enorme colgado del techo apuntando hacia la cama. En las paredes había esculturas y pinturas, todas ellas representaban a hombres y mujeres manteniendo relaciones sexuales de todo tipo (orales, vaginales y hasta anales) y en multitud de posturas. Aquello tenía la pinta de ser lo que era, un picadero. Había dos armarios enormes en cada flanco. Por curiosidad abrí el de la derecha, entonces cualquier duda desapareció. Estaba atestado de juguetes sexuales de todo tipo: consoladores, dildos, bend over boyfriend, bolas chinas,.. Había juguetes dedicados hasta la dominación como esposas, fustas, pequeños látigos … Había hasta dos correas para el cuello, una de color azul y otra de color rosa . También había un disfraz de sirvienta. Laura se acerco y también puso cara de alucinada.

Luego los dos abrimos el de la izquierda. Estaba completamente llena de botes de lubricante sexual. Si íbamos hacer uso de aquello tardaríamos años en consumirlo. Con lo que Liliana tenía allí se podía montar perfectamente un sex shop completo.

• Bueno ya os he enseñado las habitaciones menos una. La que veis al final del pasillo. Esa os la mostrare en un momento. Ahora por favor poneros esto. Yo también me voy a cambiar. Virgilio tu habitación será esta de aquí. Laura esta es la tuya. Iros a cambiaros. Solo quedaros con las túnicas puestas. Quitaros la ropa interior.

Liliana nos dio dos túnicas de un color blanquecino ligeramente grisáceo. El mío tenía unas líneas de color azulado, la de Laura de color rojo. También había unas runas de esos colores. Parecían de un idioma antiguo. Liliana se dirigió a su habitación. Laura y yo nos quedamos en el pasillo parados con cara de circunstancias. Esas ropas tenían toda la pinta de ser dedicadas a algún tipo de ceremonia.

• Laura ¿Tú qué opinas de esto?
• ¿Que qué opino? Pues estoy igual que tú, no entiendo absolutamente nada. Bueno si entiendo una cosa. Liliana nos ha salvado la vida y a mí de ser violada. Así que si me pide que me ponga esto me lo pondré. Entra en tu habitación y ponte el tuyo.

Yo aún circunspecto me dirigí a la que se me había asignado como habitación. Me quite toda la ropa y me puse aquella túnica. Salí al pasillo y espere. Primero salió Laura vestida con la suya. Esperamos unos minutos y salió Liliana. Aquello fue impresionante Salió con un vestido hermoso, parecía una túnica también pero parecía de estilo grecorromano pero era de un color rojo purpura brillante. Se había maquillado los ojos también de un color rojizo y sus labios también de un color rojo intenso brillante. Llevaba puesta una tiara en el cuello, parecía estar llena de piedras preciosas que brillaban (rubíes, esmeraldas , zafiros) , y tenía puestos unos largos pendientes dorados con diamantes. Parecía haberse vestido como una sacerdotisa de la antigüedad. Liliana paso a nuestro lado y se dirigió a aquella puerta. La abrió de par en par ambos lados. Con una mano nos invito a entrar.

Aquella habitación estaba abovedada. Con una forma cruz en la pared del fondo. Juraría que aquello había sido una capilla. Pero Liliana la redecoro de una manera totalmente distinta. No había ninguna cruz en honor al Cristo. En cambio había un altar. Una gran mesa alargada. A la derecha había una figura femenina desnuda, de grandes pechos y caderas. Me resultaba familiar, se parecía mucho a la que había en el apartamento de Liliana. Debajo de ella había un candelabro de 9 velas rojas. A la derecha había otra figura era la de un hombre portando un cántaro de agua, se parecía mucho al símbolo del zodiaco asociado a acuario. Debajo de él había otro candelabro con 9 velas pero estas de color azul. Enfrente del altar había una mesa en ella había una copa dorada de una forma muy peculiar. Era de oro antiguo, parecía oxidada como si tuviera miles de años. Tenía dos protuberancias en forma de solapa hacia el exterior en ambos lados. A este lado de la mesa había dos superficies ligeramente levantadas y acolchadas. Parecían para arrodillarse como lo que hay en los confesionarios. Delante de la mesa había algo aún más intrigante, era una cama grande, de 2 x 2 metros.

Aquel templo estaba ligeramente oscuro. Liliana encendió las 18 velas con una cerilla. La habitación empezó a tener luminosidad. Pero era peculiar. Las velas rojas no tenían un fuego de color habitual sino era un fuego de color rosado. Las velas azules las tenían de un color celeste. Pudimos ver con más detalle el resto de la habitación. En las paredes había frescos que parecían representar escenas bíblicas. Adán y Eva en el Edén, Sodoma y Gomorra destruidas, Noé y su arca, David contra Goliat y Jesús ascendiendo a los cielos.

• Liliana, ¿Qué es esto? O mejor ¿Quién eres?
• Virgilio, yo no me llamo Liliana. Ese no es mi verdadero nombre. Yo me llamo …

Liliana se le parecía hacerle un nudo en la garganta. Su cara parecía de vergüenza. Su cabeza la había caído intentando ocultarse de mi mirada.

• ¿ Cómo te llamas ?
• Mi verdadero nombre … mi nombre … es … es Lilith
• ¡¡¡¡¡ ¿ Qué ? !!!!!! – gritamos ambos Laura y yo
• Soy Lilith. Soy un ángel. Yaveh me asigno como esposa de su última creación. Un ser libre e extremadamente imperfecto. El decía que a pesar de sus enormes limitaciones esa nueva raza tenía una enorme capacidad. Con el tiempo gracias a su libre albedrio será capaz de lo mejor y de lo peor. Y en su libertad sería capaz de honrarle o degradarle. Aquel ser se llamaba Adán. Pero Adán era un ser posesivo y egoísta. No podía convivir con él. Era un pésimo amante e intento forzarme a mantener sexo. Eso fue la gota que colmo el vaso y le abandone. Pero mi decisión fue trágica. No supe suavizar el carácter de aquel nuevo ser. Y por ello ahora toda la humanidad sufre las consecuencias de que fuese expulsado del Edén. Hay seres humanos malos, pero dentro de lo que cabe la mayoría de las personas tenéis buen corazón. Y ahora la humanidad va camino de la destrucción. Yaveh y Asherat no perdonaron mi fracaso y fui repudiada. Luego me dirigí a Lot y me uní a los demonios rebeldes. Me hice amante de Asmodeo. El repudio me provocó deseos de venganza y sabotee la relación de Adán con su nueva pareja, Eva. Entonces pasé a ser la reina de las súcubos, las cuales son mis hijas.
• ¿Entonces eres un demonio? – pregunto Laura
• Lo fui hasta hace unos años. Después de miles de años de ira empecé a comprender a la humanidad y aceptar vuestras imperfecciones. Al final resultabais encantadores. Pero al mismo tiempo vi vuestro enorme sufrimiento. Este mundo está lleno de dolor y lo resistís con constancia y perseverancia. Los ángeles os admiran a vosotros, los humanos, por eso. Que aunque la vida no pare de daros golpes os levantáis de nuevo. En verdad os digo que los ángeles están enamorados de la creación de Yaveh. Asherat se compadeció de vuestro sufrimiento y previo los sucesos que ahora acontecen. Pidió a Yaveh de que os diera una nueva oportunidad y que salvará a la humanidad de si misma. Yaveh se hizo derogar pero los ángeles le convencieron. Yo en aquellos momentos intentaba obtener el perdón y Asherat contacto conmigo. Ella convenció a Yaveh para crear un plan que incluiría mi redención.
• Hablas de Asherat. ¿Quién es Asherat?- interrumpió Laura
• Asherat es la esposa de Yaveh. Es la reina de los cielos y diosa de la fertilidad. Hasta la época de Salomón los judíos la adoraron pero los sacerdotes misóginos intentaban imponer una sociedad patriarcal y proscribieron sus ritos. Luego pasaron a llamarla la reina y madre de los demonios. Es la figura de la izquierda.
• ¿ Y la otra ? – pregunté
• Yaveh ha tenido muchas representaciones. Hasta Moisés era un toro, pero con él se proscribió ese rezo si recordáis lo que ocurrió cuando bajo del monte Sinaí. Luego su representación paso a ser una cabra que en su honor sacrificaban en el templo de Jerusalén. Hasta que llego Jesús y se adopto el siguiente símbolo del zodiaco, en orden ante horario, los peces. Los primeros cristianos representaron a Dios mediante los peces. Pero el imperio romano degrado esa representación e impuso ese símbolo sádico de la cruz. En realidad Jesús quería que se le acordase por sus actos en vida no por su tortura. Pero el año zodiacal está acercándose al nuevo símbolo, una nueva era. Donde los humanos tendréis una nueva esperanza y el dolor se os mitigará. La edad de acuario.
• Esto no tiene ningún sentido, es imposible. – Dije

Lilith atendió mi escepticismo de una forma espectacular. De repente salieron unas alas luminosas a su espalda. No estaban pegadas a su cuerpo, sino que flotaban. No eran de plumas sino de luz. Y no eran tan brillantes como las que vimos en el incidente del control. Su luminosidad era de un suave color rosado. Laura y yo quedamos alucinados y de manera instintiva nos arrodillamos ante ella.

• Levantaos mi hijos
• ¿Por qué nos llamas hijos? – preguntamos los dos a la vez
• Os acordáis de Caín y Abel. Eva no tuvo hijas. Y ellos no practicaron incesto con su madre. En realidad si leéis la biblia Caín huyo a Lot. Y de allí eran mis hijas. Dos súcubo hicieron lo que yo he hecho ahora. Se enamoraron de esos hermanos y se casarón con ellos. Al final me siento agradecidas por dichas hijas. Porque toda la humanidad tiene también parte de mi sangre. Y vosotros también. En cierta forma yo soy vuestra madre. Una madre de 6.000 años.
• Pues cariño te conservas la mar de bien.- Soltó Laura
• Gracias cielo.
• ¿Que es lo que predijo Asherat ? ¿Qué es lo que va a pasar? – Pregunté
• El apocalipsis de autodestrucción se ha iniciado. Y es imparable. Muchos humanos con poder son ciegos en sus corazones y dirigirán a la humanidad hacia una matanza sin precedentes. El golpe de estado es solo el principio. Si os habéis fijado el mundo se dirige a una guerra mundial. Y será una autentica masacre. Muy pocos sobrevivirán. Y estos supervivientes serán los elegidos para la reconstrucción. Pero alegraros por que las cosas van a cambiar. Yaveh os ha perdonado y los supervivientes os será regalado un don. En cierta forma se os dará un cierto regreso al Edén.
• ¿Has hablado de tu redención? ¿En qué consiste?- pregunte
• En precisamente hacer eso mismo que acabo de contar. Yo me he ofrecido voluntaria a endulzaros la vida a los humanos. A hombres y a mujeres. A aliviar vuestros corazones. A guiaros hacia la verdad divina y borrar de vuestras mentes todas las mentiras teológicas que os han corrompido. Y sobre todo a que cantéis a Asherat y a Yaveh. Cuando Asherat me dijo en qué consistía mi redención me pregunto que eligiera a un humano como futuro apóstol. Busque entre los humanos y te elegí a ti. Virgilio. Pero de manera inesperada también me enamore de ti, Laura. Ahora tú serás también mi apóstol. Pero no soy la única. Mis hijas, las súcubo se han establecido silenciosamente en otros lugares del mundo y han adoptado a otros apóstoles hombres y mujeres. Ellas me han acompañado a este camino de redención que en vez de un castigo es un regalo.
• ¿Apóstol? no entiendo - Dije
• Apóstol por que habrá una venida. Y esta vez no descenderá Yaveh, descenderá Asherat en forma de mujer. Vosotros estáis destinados a ser sus seguidores. Pero no os preocupéis aún quedan muchos años para eso.
• Has hablado de cantar a Yaveh y a Asherat. Yo la verdad es que cantar no se me da my bien. – comentó Laura
• No Laura no se trata de ese cante, se trata de otro cante. El cante que es la delicia de los cielos. Asherat y Yaveh son amantes y su fuerza es el amor. Su unión reside en el amor. Por supuesto no son amantes a la forma humana ¿ pero sabeis lo más curioso? Que la mejor forma de rezar , lo que les da energía a Asherat y a Yaveh es cada vez que los humanos hacen el amor. Los gemidos, los jadeos y sobre todo los orgasmos son la fuente de su vitalidad. Eso y los besos, los abrazos, las caricias, las palabras de amor, o sea todo lo relacionado con el cariño y el sexo. Y el sexo es la mejor de las formas. Los sacerdotes de diversas religiones han cometido un gran pecado al mancillar el sexo y demonizarlo. El sexo solo precisa muy pocas cosas. Dejar a los niños en paz y hacerlo en libertad y sin haceros daño. Nada más. No importa que sea entre hombre y mujer, hombre con hombre o mujer con mujer. En pareja, o con más gente. Lo importante es que intercambiéis entre vosotros vuestras aguas de vida.
• ¿Intercambiarlas? – preguntamos ambos
• Si mis hijos. En realidad al contrario que lo que os han dicho en vuestra educación vuestros genitales no son sucios sino todo lo contrario, son sagrados. Y no sirven solo para reproduciros. Como sabéis , una de las mejores formas de aliviar las penas es mediante el fornicio. Y los dioses os han dado ese instrumento precisamente para aliviar vuestras penas. Y si es en compañía mejor. Cuando lo hacéis en compañía podéis hacer otro acto sagrado. El semen y el fluido vaginal son líquidos sagrados y no sucios. Y están diseñados para ser regalados a otra persona. Cuando eyaculan los hombres o una mujer moja, esos líquidos son ambrosias para el otro amante. Las aguas de vida son para regalarlas al amante y que este las recoja en su interior como atesorándolas. Sintiendo así la esencia del ser amado consiguiendo que en cierta forma que parte del otro quede dentro suyo. Así que los humanos disfrutar de los fluidos sexuales del otro con deleite y que este os lo derrame en boca, vagina y ano. Hacer que entre en vuestro interior. Y que cuando lo haga os lo toméis como lo que es, un regalo que os hacen.
• ¿ Ano ? – pregunto alarmada Laura.
• Si también por ahí. Laura, el ano no es un lugar sucio desde el punto de vista místico sino que forma parte de la sexualidad y por tanto es tan válido como los otros dos. Y también puede ser útil desde un punto de vista práctico. Muchas parejas antes de la llegada de los condones hacían planificación familiar practicando sexo anal. Y no te confundas la sodomía no tiene nada de pecaminoso. La ciudad de Sodoma fue castigada por otros motivos y no por su gusto por el sexo por detrás. A Virgilio le encanta practicarlo, casi diría que lo prefiere. Pero no te asustes Laura, ya hablaremos de ese tema en otro momento.
• Bueno Liliana, o Lilith. ¿ Qué esperas de nosotros ? ¿por qué nos has hecho vestir así?- Le pregunté
• Esta es la ceremonia en la cual seréis invocados como apóstoles. Y la forma de hacerlo es mediante una ceremonia que voy a comenzar. En ella haremos usos de vuestras aguas de vida. Por favor arrodillaros.

Laura y Yo aceptamos ser sus discípulos y nos arrodillamos junto a la mesa. Lilith empezó a hablar en Latín y otra lengua antigua. Luego me dijo que se trataba de arameo antiguo.

• In nomine Asherah, in nomine Domini.

Después de unos minutos hablando en lengua que no entendimos y haciendo gestos de bendición a Laura y a mí. Nuestra sacerdotisa nos dio nuevas órdenes. Cogió la copa y nos dijo.

• Por favor Laura y Virgilio acercaros aquí.

Dimos la vuelta a la mesa. Yo me situé enfrente a la figura del acuario. Laura enfrente a la figura de Asherat.

• Virgilio quítate la túnica

Obedecí y me desnudé.

• Laura coge la copa, y acercate a mí.

Entonces Lilith se arrodillo frente a mí, cogió mi pene y se lo introdujo en su boca. Laura se arrodillo detrás de ella sosteniendo la copa. Volví a sentir su lengua más caliente que nunca. Aquella lengua estaba abrasadora. Sus labios apretaban mi pene de una manera que nunca había sentido. Su lengua enrollaba mi pene como si estuviera haciendo una presa y apretándola con fuerza. Mi excitación paso de 0 a 100 en menos de un minuto. Para añadirlo me introdujo el dedo en el ano con lo cual me acercaba de forma fulminante al orgasmo en tiempo record. Empecé a jadear de forma descontrolada y entonces la habitación se ilumino de un color rojizo. Las velas que estaban en torno a Asherat empezaron a brillar con intensidad. Era como si la diosa se regocijase de mi placer. El cuerpo empezó a darme calambrazos de placer inusitados, más fuertes que nunca. Aquello era el delirio en grado sumo. Jamás había sentido nada igual. El cuerpo me empezó a temblar de forma desaforada. Pero pocos segundos antes empecé a alucinar. La visión se me cambio radicalmente y empecé a tener una visión sinestésica. Con multitud de colores vividos, parecería que había tomado hongos alucinógenos. Entonces me corrí y la habitación se lleno de una fuerte luz rosada. El esperma empezó a salir a borbotones, pero Lilith no me estaba ya mamando, me masturbaba y mi chorro caía con una puntería que me dejo perplejo sobre la copa. Cuando la eyaculación se termino, caí sobre mis rodillas y con mis manos me tumbe en el suelo con la respiración agitada. Había sido tremendo.

Lilith me permitió descansar unos 5 minutos. Lo necesitaba de forma perentoria. Cuando ya me recupere levemente me ordeno levantarme.

• Virgilio sujeta ahora tú la copa. Es turno de Laura.

Así lo hice. Ahora Liliana ordeno desvestirse a Laura y se volvió a arrodillar entre sus genitales. Le abrió un poco las piernas y busco con los dedos el clítoris e introdujo su lengua en su vagina y con la otra mano introdujo un dedo en el ano de Laura. Yo arrodillado detrás de ella listo para recibir el fluido vaginal en la copa de mi compañera y alumna de doctorado. Lilith había metido la lengua profundamente y prácticamente con la boca pegada al sexo de Laura. No pude ver gran cosa pero Laura debió sentir algo muy parecido a lo mio. En poco más de un minuto empezó a gritar de placer y ahora la habitación se empezó a llenar de luz azul. Eran las velas en honor a Yaveh las que se iluminaron. Ahora sentía temblores, casi temí un ataque por parte de ella. En un momento dado la luz azul lleno la habitación. Los gritos de Laura eran desgarradores, había visto su primer orgasmo delante de mí. Puse la copa justo debajo de su vagina cuando Liliana se retiro y salió un buen chorro de su agua de vida. Laura volvió a caerse de rodillas, la sujete para ayudarla a tumbarse. Parecía tener los ojos fuera de sus orbitas. Ese orgasmo también fue tremendamente intenso.

Lilith dejo recuperarse a Laura. Pasado un tiempo ayude a Laura a levantarse.

• Hijos míos. Es hora de que cerréis el vínculo entre los dos. Agarrad la copa ceremonial con ambas manos.

Juntos nos pusimos enfrente a ella sujetando ambos la copa de forma que nuestras manos estaban unidas. Volvió a pronunciar palabras en arameo.

• Virgilio bebe la mitad del contenido.

Puse un poco de mala cara porque allí había algo de mi semen. Pero obedecí y me lo bebí hasta más o menos la mitad. Vi que Laura estaba mirándome fijamente con ojos de enamorada mientras ella sujetaba la copa que yo bebía. Luego Lilith volvió a pronunciar en arameo aunque pude percibir una frase distinta.

• Laura termina la copa.

Laura se bebió la copa de un tirón, como con ansia. No tuvo el menor amago de asco. Y era la primera vez que bebía mi esperma. Al terminar me dedico una cálida mirada.

• Ahora mis hijos. Sellaremos vuestro vínculo haciendo el amor. Id hacia la cama.

Los dos desnudos dimos la vuelta a la mesa y nos tumbamos uno al lado del otro. Lilith se puso en medio en el borde de rodillas. Entonces empezó a volver a mamar mi sexo. Pero esta vez no era tan intensa, era una mamada más suave. Más habitual. Luego salta a la vagina de Laura y le dedica un cunnilingus. Así estuvo saltando de sexo en sexo, hasta que mi miembro volvió a endurecerse. Las luces de las velas se encendían y apagaban al ritmo de nuestros nuevos gemidos.

• Virgilio sigue tu aquí

Yo me dirigí a la entrepierna de Laura a continuar la labor de preparación. Lilith se dirigió hacia la parte superior y empezó a besarle los labios, las orejas, el cuello y los pechos. La habitación volvió a tener un color azulado.

• Virgilio es la hora. Penetra a Laura con suavidad. Se cariñoso y dulce.
• Si Virgilio tómame. Entra en mí.

• No te pares Virgilio. Estoy llorando pero de alegría. Por fin seremos amantes. ¡Te amo Virgilio!

Alcance el tope y me estuve quieto. Me dirigí a besar a Laura.

• Oh Virgilio. Cuanto tiempo he deseado esto. Debí haberte dicho que te amaba hace mucho tiempo, pero no pude. Perdóname. Pero ahora nos resarciremos y recuperaremos el tiempo perdido.

Al ver su pasión y el placer que le empezaba a provocar. Empecé a sentir una emoción por ella. Si , era muy similar a lo que sentía por Liliana. Ella ahora iba a ser mi compañera de aventuras en nuestra nueva etapa de nuestras vidas. Seriamos aliados. Estábamos destinados a una misión única. Y seriamos amantes.

• ¡ Te quiero Laura !
• ¡ Oh dios ¡ ¡ Gracias por este momento ¡ ¡ Gracias Yaveh ¡ ¡ Gracias Asherat !

Lilith nos miraba con cara de amor maternal.

• ¡ Eso es mis hijos ¡ ¡ Amaros ¡ ¡ Es el mandamiento que os dio Jesús ! ¡ Amaros los unos a los otros ! ¡ Y vosotros os estáis amando en su forma más completa ! ¡ Es hora de que Asherat y Yaveh oigan vuestros cantos !

Nos relajamos y empezamos a gemir. La habitación se lleno de luces rosas y azuladas. Ya no pudimos hablar, nuestra respiración estaba dedicada a proporcionar oxigeno a los jadeos. Laura me abrazo con brazos y piernas enrollándose a él, haciéndose un remolino. Intentando ser uno. Nos dedicamos miradas de ternura y deseo. Yo empezaba a tener un vaivén descontrolado. Mi clímax se acercaba.

• ¡¡¡¡Virgilio!!!!

Mi pene sintió las contracciones de las paredes vaginales de Laura. La habitación estaba poniéndose azulada. Esa sensación y mi estado emocional me llevaron a dejarme llevar.

• ¡¡¡¡ Laura !!!

Una explosión cósmica estallo en mis genitales que empezaron a verter semen en el interior de Laura. El calor y el sueño empezaron a apoderarse de mi cuando la habitación dejo de brillar de colores rosados y azulados. Me tumbe al lado de Laura y nos cogimos de la mano. Mirándonos con dulzura. Nos besamos apasionadamente aún a pesar del cansancio.

• Te quiero Laura
• Te amo Virgilio
• Os amo a los dos, Laura y Virgilio. Mis hijos, mis amantes, mis discípulos, mis apóstoles - sentencio Lilith
• Te queremos Lilith – dijimos al unisonó.

Lilith abrió un armario y saco unas sabanas y unas mantas. Nos la echo encima mientras nos regalaba besos. Luego Lilith se acostó a mi derecha. Yo quede en el centro y a mi izquierda estaba Laura. Había sido un día terriblemente complicado y jamás sospeche que lo terminase acostado en la cama con dos mujeres. Mis amadas Lilith y Laura.

• Es hora de descansar y dormir mis niños.

Lilith pronuncio una voz en arameo y se apagaron todas las luces. Era hora de soñar que esto no fuese precisamente un sueño.

Continuara … ( Por favor comentad el relato )