Temporada 2 Capítulo 3
El cañón olvidado
Pincho entra en la cueva realmente aterrado, gritando suplicando ayuda; nos despierta a todos de un saltó en la cama, dormilón se pone tras de mi pierna y las chicas a mi lado.
- ¿que quieres pincho?
- la chica que estaba conociendo, se la llevaron; por favor, Rape salvala.
- ¿quien se la ha llevado?
- en el cañón olvidado, las máquinas.
- ¿máquinas? ¿cañón olvidado?
- ¿que haciais allí? - pregunta rosa gris
- buscar una cueva... - lloriquea pincho
- no vayas Rape, es una trampa; que vaya el Alpha. - contesta sonrisa bonita.
- ¿el Alpha? ¡Me ha dado la espalda!...Rape por favor.
- si hubieras entrenado cómo te dije, podrías salvarla tu.
- entrenare todos los días contigo, te lo prometo; pero por favor, salvala.
- chicas, id y avisad al Alpha.
- no vayas...
- ...no, por favor.
- ...papa...
- tranquilas, soy fuerte; no me vencerán fácilmente.
Ambas sonríen preocupadas, mi hijo me mira con orgullo.
- avisare a mi padre.
- ¿vamos? - pregunta Pincho
- ¡vamos!
- gracias, gracias; gracias, gracias.
Nos llevamos el resto de la tarde corriendo hacia un lejano lugar, por el camino recojo frutas que me mantendrán con energía a la hora de la pelea.
Llegamos a un boquete en el suelo, del que salen luces...
- ella esta ahí abajo.
- voy, ¿vienes?
- no, solo te entorpeceria.
- esta bien, como que me llamó Rape; te la traeré.
- eh...gracias y suerte.
Bajo abajo y doy varios saltos entre tierra de un lado y otro lado de tierra para llegar abajo sin lastimarme. Es algún tipo de ruina, estoy en un pasillo medio derrumbado; hay dos caminos, izquierda y derecha.
Miro ambos con la esperanza de ver alguna pista de adonde se la llevaron, pero no; no hay ninguna, simplemente cójo hacia la izquierda. Este camino se divide en dos, pero uno de ellos está derrumbado; así que sigo por el otro, en este hay algunos cuerpos de animales con flechas clavadas por los laterales. Miro las paredes que tienen agujeros, no hace falta ser muy listo para saber que es una trampa; observó hasta donde llega, demasiado lejos para saltar.
Miro el camino de vuelta dispuesto a darme la vuelta, pero recuerdo la desesperación de Pincho; entonces veo que todos los animales que están muertos, caminaban por el suelo, entonces cójo carrerilla y empiezo a correr por la pared.
Como pensé, corro por la pared todo el pasillo; sin activar la trampa, y al atravesarlo, piso el suelo jadeante.
- el entrenamiento si que mereció la pena, espero tener el poder para rescatarla.
Llego al segundo pasillo una vez que me repongo, el olor es nauseabundo; huele a carne quemada, veo cuerpos quemados frente a mi y varias bocas en techo paredes y suelo.
Empiezo a pisar el suelo y debo moverme con velocidad, cuando pisas una baldosa; una boca escupe fuego, así voy haciendolo hasta que acabo el pasillo y solo mi cola se quemó un poco.
El tercer pasillo veo cuerpos aplastados, el hedor y su aspecto; dejan mucho que desear, avanzó por el pasillo y este se empieza a estrechar.
Corro hasta que esta bien estrecho y aprieto las paredes, mientras avanzó lentamente; no consigo frenar su avance del todo, pero si reducirlo...cuando estoy apunto de llegar al fondo, las paredes me aplastan y no puedo moverme; empieza a dolerme suavemente, mientras hago fuerza y me retuerzo para conseguir pasar.
Cuando recuerdo porque estoy aquí y durante un segundo consigo abrir un poco las paredes, para pasar; cuando casi me rompían algo, caigo de bruces al final del pasillo dolorido y llorando de frustración.
Me levanto y llego a una casa subterranea, al abrir la puerta; veo que lleva abandonada mucho tiempo pero que se conserva bien, busco por toda la casa pero no veo a nadie.
Esta llena de suministros en buen estado, tiene todo tipo de armas tsufurs; armaduras y escudos energéticos, agarro un par de mochilas y un par de bolsas y cargo todo. Lo que no puedo cargar, me lo como o lo dejo bien oculto; en un panel hay 3 botones, los leo un segundo.
Botón azul apagar trampas
Botón naranja quitar trampas 5 minutos
Botón rojo conectarlas.
Pulso el naranja y paso por todas las trampas, dejo las bolsas al principio; para coger el camino de la derecha, pero antes me pongo una armadura de mi talla y agarro una espada de energía.
Voy por el camino de la derecha, este tiene una bifurcación de tres caminos; el del centro está derrumbado, el de la derecha mírame y no me toques...como no planeo morir tan joven aplastado bajo la tierra, cójo el camino de la izquierda; tras un rato andando, dos columnas se vuelven humanoides robóticas.
- intruso detectado.
- intruso detectado.
- vaya, llego el momento de la acción.
Ambos se dirigen hacia mi a la vez, acabo con uno de un solo espadazo; el otro me golpea en la armadura que algo amortigua, y luego lo acabo con otro espadazo.
La espada no se usarla muy bien, pero acabar con enemigos robóticos; no sería tan sencillo sin ella. Sigo caminando, cuando encuentro otros 4 separados; saltó contra el primero y acabo con el, esquivo al segundo para matarlo de un corte. El tercero me impacta, bloqueo al cuarto; esquivo al cuarto mientras mató al tercero y acabo al fin con el cuarto.
Sigo caminando un poco cansado y con algún moratón, veo unidades que no se activan por errores causados por el tiempo; unidades que no tienen baterías, unidades abatidas en combate por perros pinchos u otras razas.
Les agradezco o no lo lograría, esta siendo muy arduo y difícil todo esto.
Llego a una sala donde múltiples razas están enjauladas...
Gracos de carne
Una extraña variedad de estos últimos más huesudos pero más altos con cráneo por fuera de hueso.
Perros pincho, pájaros de fuego; peces de tierra, leones escorpión y un sin fin más de razas raras. Todos al verme me pedían auxilio.
- voy a liberaros, si me atacais me defenderé.
Todos asienten en señal de que lo han entendido.
Los libero y todos huyen por donde he venido, algunos me lo agradecen; otros me dicen que me deben una, muchos se olvidan de mi y corren cómo alma que lleva al diablo.
Algo me dice que retroceda y me marche, ya he liberado más de 20 razas distintas; seguro que la novia de pincho estaba entre ellos, de algunas razas solo había 1 individuo pero de otras hasta 4 o 5.
Pero la curiosidad me lleva a continuar el camino.
En la siguiente sala, al final de esta hay una columna grande; que se monta al verme, en esta sala hay 4 cristaleras grandes. Me preparo para el combate y recargo energía para recuperarme un poco, este combate tiene pinta de ser un tanto más difícil; así que me preparo para ello, no se siquiera si podre ganar o no.
El primer impacto lo da el, me placa y me tira contra el muro; atravese su cuerpo con la espada, eso daño simplemente su carroceria. Me levanto dolorido, la armadura amortiguo un poco; pero no suficiente, intenta darme un puñetazo, lo esquivo y le cortó el brazo.
El lanza un rayo con su visor, que desvío con la espada; le impacta a un cristal y lo desquebraja, seguramente lo mismo que me haría a mi si me diera.
Corro a su alrededor mareandolo un poco, le cortó una pierna y cuando cae; le cortó la cabeza, jadeante sudoroso y sangrando.
Cojeando me acerco al cristal que desquebrajo...
Graco de carne:
Ventajas:
Mucha carne
Pequeño
Rápido
Desventaja:
Inofensivo
Graco de hueso:
Ventajas:
Poca carne
Grande
Duro
Desventaja:
Incomible
Perro pincho
Ventaja:
Pincho
Dientes
Garras
Desventajas:
No son rápidos
ni fuertes
ni duros
Hibrido:
Ventajas:
Carne intermedia
Tamaño intermedio
Rápido
Duro
Pinchos
Desventajas:
Incomible
Dentro veo un bebé recién nacido, con sus ojitos cerrados; con un aspecto de tipo duro a la par que adorable, le hago hueco en mi mochila y me lo llevo.
Me asomo al siguiente cristal:
Tsufur mejorada.
Adentro hay una muchacha Tsufur desnuda con pinta de asustada, tiene el pelo lleno de pinchos; una cola con pinchos con un craneo al final, huesos en varias partes protegiendo su cuerpo.
Me late el corazón rápido al verla y no se porque.
Abro un hueco en la cristalera, ella sale y me mira.
- ¿puedes llevarte al bebé?
- si, claro; gracias.
Le entregó al bebé y voy a la tercera cristalera.
En la tercera cristalera, veo una kimera con partes mecánicas.
- eres libre, puedes marcharte.
El ser me miró y se marchó.
En la cuarta cristalera, veo simplemente una kimera; repito el mismo proceso y, este se marcha también.
Por último en la quinta cristalera, veo una perro pincho amarilla a dos patas; con una armadura de hueso exterior, a parte del pelaje de pinchos normal.
Repito el proceso.
- gracias.
- de nada.
Aunque algo me dice que debería tener cuidado con lo que suelto, creo que todos tienen el derecho de vagar libres; hasta que demuestren lo contrario, igual que yo que he tenido mi oportunidad.
Sigo avanzando y veo tres caminos, uno a la izquierda; uno al centro, otro a la derecha y no se cual elegir.
El de la izquierda pone sala del tesoro, en el del centro laboratorio; en el de la derecha pone cadena de montaje, voy a la sala del tesoro.
Cuando llegó, dos columnas pequeñas se abren y se transforman en dos robots guardianes.
- intruso
- intruso
Repiten ambos, suspiro y me preparo para combatir.