Capítulo 1: Reunión 23A.6
Son las 5 de la mañana, con los nervios he dormido malamente; menos mal que prepare la maleta ayer, sino a mi madre le daba algo de tanto repetirmelo.
El grupo de WhatsApp Reunión 23A.6 echa humo, parece que fui el único que paso mala noche; miro el grupo mientras intento despertarme, sin mucho éxito.
4:48 María: ¡Buenos días, compañeros! ¿alguien más esta deseando montarse en la caravana?
4:48 Pedro: María, me despertaste...anoche una oveja se puso de parto y estuve hasta hace poco ayudandola.
4:48 Alfonso: ¡Buenos días! Despertasteis a mi novia.
4:49 Pilar: ¡Cabrones! Que podría haber dormido un poco más.
4:50 Alex: gracias a vosotros, pinchito mañanero.
4:50 Alfonso: que buena idea, me pongo a ello.
4:51 Maria: ¡Capuyos! No se come delante de los pobres.
4:52 Pedro: no necesitaba saber eso...
4:52 Lidia: ...ya ves que no...
4:52 Silvia: menos mal que no está mi novio, en este grupo.
4:54 Manu: estos dos como siempre, en la misma línea.
4:55 Miguel: ¿sino que pasaría Silvia?
4:56 Silvia: ¡¿que va ser?! Pinchito mañanero y no me deja ir.
4:57 Pedro: ¿tan malo seria?
4: 59 Silvia: ¡el acabose!
5: 00 Pedro: ¿el no venir?
5: 00 David (yo): 100 y pico de mensajes...os voy a matar.
5: 00 Miriam: ¡Buenos días! Ya empezáis tan temprano...
5: 01 Silvia: jaja no me refiero a eso.
5: 01 Pedro: ¿entonces?
5: 02 Maria: el sexo.
5: 02 Lidia: el sexo
5: 03 María: ique inocente eres, Pedro!
5: 04 Carmen: ¡no creo que hayas puesto eso, Alex!
¡Carmen salio del grupo!
5: 05 Alfonso: ¡eh aquí el quiz, de porque mi novia no está en el grupo!
5: 06 Maria: y porque te quieres tirar todo lo que se menea.
5:06 Alfonso: eso también.
Tras ver como me ignoraban completamente y los líos que ya empezaban a liar, me centre en levantarme; desayunar, ducharme e ir para ya.
Por encima leí entre todo lo que tenia que hacer, que todo se arreglo.
Como deje el whatsapp llegue temprano, con la caravana de los solteros; tanque lleno, alacena y nevera llena. Hemos quedado en un terreno de arena en el centro de Cádiz, para poder llegar todos con cierta facilidad; espero 5 minutos, cuando escucho llegar un coche.
Me asomo a la ventana y es María, pero no viene sola; salgo de la caravana; ella sale corriendo salta y me abraza con piernas incluidas, la abrazo con fuerza mientras mi corazón palpita con fuerza.
Ella se me suelta al poco y nos sonreímos los dos.
- ¿que tal hijo pródigo?
- deseando estar en casa
Ella se rie a carcajadas.
- pues llegas y te vas
- mi hogar esta donde estáis vosotros.
Ella vuelve a reir y niega con la cabeza.
- anda, ayúdame con las maletas.
- ¿quien es tu amiga?
Digo al ver que de su coche se baja una muchacha tan preciosa cómo María y con un cuerpo de infarto, con el pelo morado; que me sonríe, me observa pero no dice nada.
- ah, ¿no lo dije? Creo recordar que si.
- no...creo que no, me acordaría.
- bueno, no creo que haya problemas ¿o si? - dice dándole la mano a su amiga y haciendo que se de una vuelta sobre si misma.
Su amiga lo hace sumisamente.
- ¿cuanto tengo que poner?
Su voz también es bonita.
- tranquila ya echaremos cuentas, así que eres la reina del whatsapp.
- bueno, desde que te fuiste; alguien tenía que mantener el grupo junto, ¿no crees?
- supongo...
Ayude a subir sus maletas.
- ya elegiste cama ¿eh?
- si bueno Maria, cada chico elegimos una; ya cada chica que elija con quien dormir.
- ¿quieres que duerma contigo?
- cómo quieras
- ¿no vas a dormir con tus gemelas?
- si, supongo que si; pero sigue habiendo hueco.
- lo pensare.
- yo dormiré contigo María
- si Virginia
- ¿le explicaste a tu amiga el problema de las camas, no?
- si, todo.
- no me importa.
- entonces no creo que el consejo de varas mágicas diga nada.
Ambas se rien y yo observó a Virginia resoplando, María niega con la cabeza; y les enseñó la caravana a ambas, mientras llegan los demas.
Me pareció que Virginia tonteaba un poco conmigo, pero también me lo pareció de Maria; quizás este oxidado o simplemente, están jugando conmigo.
Poco después llega Pedro por un lado, Lidia y Manu por otro.
- ¿que pasa Pedro, Manu?
- ¿y a mi no me saludas? - se molesta Lidia con su peculiar acento argentino.
Ellos me saludan con poco interés, se van directos a saludar a las chicas como es obvio.
- si, pero a las damas no se les saluda de lejos.
Ella me sonríe y nos acercamos para darnos un abrazo, además de un solo beso; respetando su tradición.
- tu siempre tan correcto, no has perdido modales en tu viaje.
- al contrario los he ganado.
- ya lo veremos en el viaje...este viaje va a dar para mucho.
- pero para mucho - le sonrió.
Ella me sonríe igual, llega Alfonso en su moto; mientras María y Virginia charlan con Manu y Pedro, Lidia se une a ellos y observa la caravana por si misma.
Por otro lado, el novio de Silvia la trae; Míriam y Melissa vienen en un solo coche para variar, Pilar llega bajándose del bus. Carmen y Alex por las esquinas matándose o besándose, la verdad no lo se...ni tampoco me importa demasiado.
Saludo a Alfonso, este me devuelve un abrazo.
- eh colega, volvio mi escudero de faldas.
- quizá en este viaje te ayude alguna vez.
- ¡seria fantástico!
- solo hay trato si respetas a María, ya lo sabes.
- bueno, ya veremos...
Antes lo digo, antes se va con ella.
Corro a saludar a las gemelas que ambas me abrazan a la par, siempre me ha gustado esa sensación; hasta que el novio de Silvia nos interrumpe, la verdad es que me cae muy mal y no tiene nada que ver con que me liaría con Silvia.
- ¿si?
- ¿podemos hablar un momento?
- claro, habla.
- a solas.
- ...esta bien...¡no toquéis nada!
Voy a hablar con el, mientras el resto se queda cerca de la caravana; Alfonso a ligar ya con Virginia y María, Pedro con Lidia y con Manu y Silvia se reúne con las gemelas además de con Pilar.
Me alejo hasta el coche de el.
- ¿que quieres Jesús?
- tio, no he podido convencer a Silvia de no venir; así que la responsabilidad de lo que pase con ella, es tuya.
- ¿y eso que quiere decir?
- que si se lía con otro, te destrozo.
- ¿perdona? Medio metro...¡¿que has dicho?!
- yo soy medio metro pero tengo mucha mala leche y amigos muy malos.
- yo tengo a Pedro.
- ¿a quien?
- al gigante negro
- me lo llevo por delante.
- tu veras, yo no vengo a este viaje a hacer de niñera de nadie; y además ella es mayorcita para saber lo que hace.
- no lo es y no lo sabe.
- bueno, Jesús haya tu con tus pensamientos; ya tienes mi respuesta.
- y tu estas avisado.
Jesús encendió el coche, mientras yo daba zancadas para volver furioso; me encontré de frente con Silvia.
- ¿que te ha dicho? - pregunto con su cara inocente y una sonrisa de niña buena.
- nada especial - fingi una sonrisa y seguí para adelante.
Luego le di la vuelta a la caravana por donde no había nadie y le di una patada.
- odio que me amenacen...
- ¿quien te ha amenazado? - suelta Manu llegando detrás mía.
Suspiro y le cuento la historia.
- tranquilo, si el tiene mala gente; nosotros tenemos a Pedro.
Bromea, haciéndome reir.
- vamos con los demás, que las gemelas preguntan por ti.
- no se para que, si luego se lían con otro.
- tranquilo, que luego duermen contigo.
Me guiña el ojo y eso me hace reírme.
Volvemos con los demás cuando llegan Patri y Miguel con la otra caravana, esta es más lujosa; pero más pequeña, Pilar viene a saludarme y acto seguido las gemelas.
- Hola, ¿que pasa David?
- Hola ¿cómo estás Pilar? Creí que no vendrías.
- por los pelos...me alegra que vuelvas a casa.
Nos dimos los dos besos de rigor.
- estaré un año, ya veré luego lo que haga.
- me gustaría, que no te fueras; la verdad
- y a mi.
Ambos nos reímos cuando llegaron las gemelas y se me abrazaron cada una por un lado.
- ¿tu duermes con nosotras, no? - pregunta Mel zalamera.
- ¿cual es nuestra cama? - dice Mir con un toque sensual.
Pilar se va silenciosamente y las llevo agarrados hasta nuestra cama, ellas se tumban para probarla y yo las miro sonriente.
- mmm...que cómoda
- me gusta - dice Mir.
Ambas retozan en ella, el resto ha ido a ver la otra caravana.
Cuando terminamos todos nos organizamos por caravanas, en la de parejas solo van 6; en la nuestra 9 personas, pero el viaje comienza.