Undécima entrevista a los autores de TodoRelatos.
La cafetería ahora recibirá a uno de los más nuevos y grandes valores que han aparecido en TodoRelatos: de evolución inusitada, de descripciones preciosistas y títulos con envidiable capacidad somnífera, Longino se ha ganado un lugar especial en la página.
Me senté al piano que había alquilado para la ocasión y chasqueé los dedos para que una de mis camareras se acostara sobre el roble del instrumento musical.
Como siempre, me he tomado la molestia de tomar medidas de seguridad para protegerme de los autores a quienes entrevisto. Y Longino no sería excepción viendo su historial de relatos; mundos post apocalípticos, violaciones poéticas, incendios engulléndose inocentes poblados indígenas y hasta punkers lanzando patadas voladoras entre el humo de marihuana. Esa misma mañana me encomendé a la Virgencita de Guadalupe para que me protegiera de sus garras.
Nada más abrirse la puerta de entrada de par en par, el detector de metales parpadeó y aulló con fuerza. Sonreí de lado; mi otra camarera se acercó para retirarle la lanza que empuñaba y la gladius enfundada en su cinturón. Lo sabía, lo esperaba. Un cuervito blanco salió disparado de su bolsillo, revoloteando intensamente en mi cafetería para luego huir hacia la ciudad. Confieso que eso no lo esperaba.
Mosqueado, se sentó a mi lado al piano. La camarera, bastante más afable al saber que estaba desarmado, le acercó una copa de whisky con un cubito de hielo; el suficiente para enfriarlo y no aguarlo. Y mientras yo empezaba a tocar las notas de Pretty Fly de Offspring tal pianista atormentado, arrancando un sensual gemido de quien reposaba sobre el roble del piano, comenzamos la tanda de preguntas y respuestas:
Hola Longino, gracias por aceptar ser parte de mis entrevistados.
De nada hombre, yo por un whisky lo que haga falta, aunque podrías haberte estirado y ponerme algo más decente que este garrafón barato. Espero por lo menos que me adules como si no hubiera un mañana… y dile a la camarera que baje del piano y se siente en mis rodillas, vaya anfitrión.
Ya lo oíste, Sancho… digo, Sofía —bastó otro chasquido para que abandonara el piano y se hiciera lugar en las rodillas del autor—. Sabes, no soy de beber whisky pero lo haré por ti. Entre nosotros dos, la última vez que lo hice terminé masturbándome frente al espejo mientras le metía lengua a mi reflejo.
¡Bebe coño!, ¡brindemos por muchos lectores y lectoras pajilleros!
¡Hala! –Chocamos las copas—. ¿Por qué elegiste el nick “Longino”?
Para la tradición Católica, Longino fue un santo que puso fin al suplicio de Jesucristo y luego se convirtió abandonando el paganismo. Para otros muchos fue un cabrón que le metió un lanzazo al Mesías. Esa dualidad es lo que me mola de un personaje así. Seguramente fuera un capullo que debía pagar impuestos abusivos y aguantar unos niños llorones. Sería un calzonazos en casa y su jefe le tendría manía y le pondría guardias cada dos por tres. En ocasiones se pasa a la historia por las cosas más tontas.
Anda ponme otro whisky que este debía tener el vaso agujereado.
¡Marchando!... Cuéntame, ¿cuáles fueron tus primeras experiencias con la escritura?
Pues lo cierto es que hace unos veinte años compuse un soneto ensalzando las virtudes de pillarse un buen pedo. Tras aquella experiencia etílica no volví a escribir hasta que publiqué en TR, hace un año y medio. Joder tío saca esa botella que tienes para las grandes ocasiones, este brebaje es matarratas.
No te me amaricones, venga, bebe... Mmmffff… ¿Qué te hizo decidir a escribir relatos eróticos?
Me avergüenza un poco la verdad porque va a parecer soberbio. Yo solía ser lector de Todo Relatos, en principio para tocar un poco la zambomba. Luego descubrí algunos autores que lo hacían verdaderamente bien, junto a estos, en las páginas de novedades se podían leer relatos ejem, cómo decir…, un tanto flojetes…
Pensé inconsciente de mí, que yo podía hacerlo, no tan bien como los autores a los que seguía, pero sí mejor que algunos que publicaban. Cuando releo Celia me doy cuenta de cuán equivocado estaba y lo importante que es aprender a andar antes de salir corriendo. Mezclaba tiempos verbales, tenía más faltas de ortografía que palabras, en fin un desastre.
En ocasiones escuchas una canción, ves una peli, o lees un libro y te dices: ¡Coño!, ¡cómo mola!, y si le doy un giro a esto, con otros personajes, otras situaciones, etc. Luego vas y cambias lo que era un chico por una chica, los narcotraficantes por una mafia de curas resentidos y una suegra perversa por medio y te parece que aquello que te inspiró se fue al carajo, pero este trabajo lo quieres porque ha ido saliendo poquito a poco y sin buscarlo.
Pedazo de muslos que se gasta la jodía camarera, podría ponerse a correr contra Usain Bolt.
Hoy por hoy, ¿en qué aspectos sientes que has crecido como autor?
Hombre en el ortográfico es claro. Antes no acentuaba ni un puto pronombre personal, confundía v y b a mogollón y g y j, bueno aunque esto si lo hacía Juan Ramón Jiménez no debe ser tan malo.
He aprendido, gracias a ti, que el narrador, si lo es en tercera persona, debe ser más aséptico en sus opiniones. Mis narradores ya no llamarán panchito o payopony a nadie.
También ahora intento adjetivar tan solo lo necesario, antes me gustaba y terminaba llenando el texto de epítetos.
Y así un sin fin de cosas que son las que me animan a continuar, progresar casi es más divertido que el mero hecho de escribir.
¿Co… —bebí otro trago—, cómo encontraste TodoRelatos?
Escribí en Google “relatos eróticos” bueno realmente lo escribí sin acento que total el Google no se queja. Sí, ya sé que no resulta gracioso ni trascendental, ¿qué le vamos a hacer? ¿Esta camarera está demasiado prieta, ¿no?
… Tu… categoría preferida…
Mientras haya inspiración creo que la categoría es lo de menos, en cualquiera de ellas, se puede meter la pata hasta el fondo y también hacerlo decentemente. Sí es cierto que en algunas recibes más opiniones y eso mola, pero por el resto no tengo preferencias, salvo por que es más sencillo hacer historias realistas en gays, lesbianas, hetero, etc. que en filial, orgías, tríos, zoo, etc. A lo mejor estoy equivocado y resulta que todo el mundo practica la zoofilia o el sexo orgiástico, si es así yo debo ser un pardillo reprimido porque más allá de tríos de todo tipo, cadenas, látigos y exhibicionismo me modero bastante.
Una categoría en donde nunca publicarías… -Lo cierto es que la bebida era bastante fuerte, carajo.
En no consentido he publicado y tan solo he sido capaz de hacerlo desde el punto de vista del sufrimiento. No podría hacerlo desde el punto de vista del morbo.
Cuando te sientas para escribir un relato, ¿ya tienes una idea fija en la cabeza o prefieres dejarte llevar?
Menos los detalles la idea la tengo totalmente construida. Esas pequeñas chorraditas, algún secundario puntual, etc. van saliendo sobre la marcha. De repente estás escribiendo y te dices: “Aquí quedaría muy chulo que se rascase el culo o que se tirase una ventosidad”, vamos lo que viene a ser un pedo, que luego Machi se me queja de preciosista. :P ¡Bebe hostia! Que no me bebes nada.
¿Qué… —otro choque de copas—, oye, qué tanto de realidad hay en tus relatos?
Pues realidad como tal, imagino que nada. Otra cosa es si hablamos de realismo, intento que por lo menos el lector pueda sentirse identificado con situaciones y escenarios medianamente realistas.
Aunque no descarto que algún día tenga una vecina como la de Julia o viva una orgía durante una manifestación. Bueno, seamos realistas sí lo descarto.
¿Qué podemos saber de tu persona?
Los personajes dicen mucho de uno mismo. Me gustan las mujeres con personalidad y fortaleza. También me gusta la gente que piensa, duda y arriesga e intento que mis personajes lleguen ellos solitos a las conclusiones sin que nadie les teletransporte allí.
Intento huir de los personajes atormentados y dramáticos en exceso, aunque imagino que todo va por épocas, depende como se sienta el autor saldrán sus hijos. Cuervo blanco, El pianista y Caricias Especulares tienen personajes atormentados y yo personalmente estaba en un momento muy feliz. A ciegas o Bilirrubina tienen finales muy tristes a los que los propios textos me empujaron.
A lo mejor esa es una característica mía: Dejar que las personas y los personajes fluyan cada uno hacia su propio lugar.
Joder qué complicado es ponerse trascendental, menos mal que este matarratas ayuda.
¿Saben las personas de tu entorno que escribes relatos eróticos?
Mi chica y mis amigos sí. De mi familia un par de hermanas y cuñados. Mi madre sabe que me gusta escribir y quería leer algo de lo que había hecho. Le tuve que decir que eran subiditos y aún así quiere leerlos. Católica apostólica y con más de setenta años no sé yo si será lo más adecuado que me lea.
De hecho mi lectora más crítica es mi pareja, que por cierto siempre suele coincidir con tu opinión.
Burff… ¡Quema esta mierda!, ¿eh? -me aflojé la corbata y el cuello de mi camisa-, ¿qué sientes cuando escribes tus relatos? ¿Cómo los vives?
¡Joder Vieri! Aquí te has puesto muy metafísico. Pues me siento delante del ordenador con las piernas bien estiradas bajo la mesa. En ocasiones escribo con la taza de café al lado. Antes no dejaba el cenicero ni un segundo pero ya son seis meses libre de nicotina. Ya sé que no es lo que me has preguntado, tú pregunta lo que quieras que yo responderé lo que me dé la gana.
Ahora en serio, paso varios días pensando en ellos, metiéndome en la trama a base de imaginación y ensoñaciones. Luego a los cuatro o cinco días comienzo a escribirlo, normalmente de tirón la trama y luego vuelvo a las escenas eróticas o pornográficas a detallarlas. Estas tengo que escribirlas de a poquito a poco pues me agota esa mezcla entre el morbo de pensarla y la concentración de escribirla.
Nombra algo… que jamás harías que sí ha hecho un personaje de tus relatos…
En uno de mis relatos violan a la amiga de la prota, aunque no creo que vaya por ahí la pregunta. Intento que mis protagonistas lleguen a hacer lo que hacen tras suficientes estímulos, yo creo que con esos estímulos también me plantearía hacer cualquier cosa, no me considero una persona con muchas barreras.
Hombre lo de tirarse a la madre de uno mismo me parece un poquito fuerte. Normalmente las madres no todas tienen 35 o 40 años y están buenísimas.
También tengo una Labradora Retriever, ¡joder! Se me ponen los vellos como escarpias nada más de pensarlo, pobrecilla con lo bien que está ella todo el día durmiendo.
¿Tu relato propio favorito?
Pues aquí me tengo que quedar con dos. Escultural y Génesis 1,27. En ambos me recreé en exceso pero la idea limpia de cualquier adorno era suficientemente buena para lanzarte a escribirla. Tal vez me gustaron tanto que por eso me flipé y los adorné más de la cuenta. Pero vamos cuando los releí antes de publicarlos, te quedas pensando ¡Coño!, ¿esto ha salido de mi cabeza?
¿C-cuál es en tu opinión tu relato menos atractivo?
Eso es como preguntarle a un padre a cuál de sus hijos quiere menos. Está claro que los hay muy flojos al principio pero fueron los que me ayudaron a mejorar. Cartón, piel y fuego fue un relato que debía haberse escrito en primera persona y con menos adornos y adjetivaciones. Como siempre los comentaristas aportan mucha sabiduría. Tal vez es el que me resulta más insignificante. La poesía también se me da como el puto culo, no soy muy bueno expresando mis sentimientos. Te podías enrollar y poner unos cacaos o unas chips ¿no?
Bueno… todo mi presupuesto se fue en el alquiler del piano…. Psss, oye… ¿te gustaría ver tus relatos publicados en un libro?
¿Pagarían?, es coña, me da igual. Si así fuera por lo menos firmaría esta entrevista como Pablo y no como Longino. Cuando se escribe bajo un seudónimo no se persiguen muchos reconocimientos vamos creo yo.
¿Tienes… —la camarera sentada en el regazo del autor, con la falda ligeramente arremangada, revelaba el liguero de su media de red; se inclinó hacia mí para secarme la frente perlada de sudor—, tienes una anécdota que contar con respecto a la creación de tus relatos o a los comentarios recibidos?
En cuanto a los comentarios los que más me han marcado son los de Moonlight, por darme una visión crítica en el contenido y en el continente que me ha ayudado mucho. “mmm” también fue de muchísima ayuda, gracias a ella corregí muchas de mis faltas de ortografía.
Una anécdota curiosa sucedió con Escultural. Todos los comentarios señalaban que debía de haber estado horas frente a las estatuas humanas observándolas. Siendo ciego como soy, aquello hizo que me partiera el culo durante un buen rato. Como siga así además de serlo voy a ponerme ciego perdío —vació la copa de un trago e imité el gesto.
Una idea que llegó a mí de manera curiosa fue en Génesis. Comencé buscando en Wikipedia súcubo, de ahí comencé a enlazar artículo tras artículo hasta llegar a Lilith y las tradiciones Judaicas sobre una mujer previa a Eva.
Otro caso curioso fue el de El pianista. Intenté recrear la canción de Billy Joel. El primer borrador lo leyeron tres personas: Besante, mi chica y tú, a los tres les pareció muy básico y simplón. Luego de mirar en Wikipedia sobre el blues, a Nueva Orleans, al desastre del Katrina y al relato definitivo.
Se presentan muchos escollos a la hora de escribir debido a la ceguera…
En general no muchos, sí hay situaciones en las que no tienes claro si de una ventana a otra resultará verosímil que se lleguen a ver ciertas cosas o la distancia lo haría imposible. Cuando estás en un atolladero de este tipo optas por ser como los políticos, escribir sin contar demasiado, vamos lo que vienen a ser generalidades sin trasfondo.
Tus relatos son muy gráficos, muy descriptivos. ¿Crees que tu ceguera te ha ayudado a desarrollar ese estilo narrativo característico?
Pues no sabría qué contestarte, tal vez me guste escribir tal y como lo veo en mi cabeza. Puede ser que deje poco margen a la imaginación del lector.
Esto… ¿Tus relatos favoritos de la web? Dime tres.
Es complicado, he leído relatos muy buenos y series muy completas. “Boomerang” de Erostres es un relato muy curioso, también lo es “Buscando bronca”, de Ginés Linares, pero temo olvidarme de autores y relatos muy buenos. Por eso mencionaré aquí los tres primeros que me impresionaron por su morbo y su calidad allá por 2008 o 2009: “Una nochecita en mi taxi”, de talibos y “Fiesta de pijamas”, del mismo autor, también cómo no: “Tu puta madre”, de Moonlight.
¿Qué debería tener un relato erótico para que te guste?
Me encanta que los personajes sean normales, de esos que te puedes cruzar por la calle, la camarera del bar de la esquina, o el repartidor que llama a tu puerta.
Lo siguiente que me gusta mucho es que haya un morbo previo al polvo, que la temperatura vaya subiendo poco a poco.
Si encima tiene algo de trama y personajes interesantes ya es la leche.
¿Quiénes… quiénes son tus autores favoritos? Otros tres.
Pues vista la respuesta a los relatos me quedaría con: Moonlight, Talibos y GatitaKarabo, de esta última no puedo destacar ningún relato porque todos son buenísimos. Una lástima que a día de hoy tan solo Talibos continúe publicando. Si me pusieras un whisky de 25 años en roble americano, por supuesto diría que mi autor favorito es Vieri32.
Anda ya —sonreí ligeramente mientras chupaba mi corbata—. ¿Cómo te tomas los mails de los lectores que recibes?
Normalmente son para pedirme un relato en el archivo original y para felicitarme. El mail más curioso que recibí fue uno criticando la ortografía de El mulo. Hubiera sido normal si no fuese porque la crítica venía únicamente motivada por una observación que hice a un relato de Shadow. Es que hay lectores muy fieles. No se puede ni imaginar lo mucho que se lo agradecí.
Luego hay algunos comentarios tan crípticos que no sabes muy bien si les ha gustado el relato o no. Recuerdo que en Caricias especulares, Moonlight me hizo un comentario que aún no sé muy bien qué significaba. Es que soy un poco cortito, ¿sabes?
¿Qué importancia le das a los comentarios a tus relatos?
Son la única razón de ser de publicar en TR. Retroalimentan, enseñan y corrigen. Sin esa retroalimentación me seguiría encantando escribir pero desde luego no publicaría.
Las críticas… Háblame de las críticas –y otra vez chocamos las copas cuando la camarera nos las llenó.
En ocasiones simplemente con que te digan: Se te fue la pinza con tal personaje, te pasaste con el dramatismo o no me gustó el empleo de tales palabras, es más que suficiente para sentir que te han leído con interés, que valoran tu esfuerzo.
Otro tema son las críticas que no analizan el texto pormenorizadamente esas se aceptan bien pero dejan un regusto a que no se han leído el relato con interés. Por ejemplo Silvade te analiza pormenorizadamente, puedes estar o no de acuerdo con él, pero se ha tomado mucho interés, otras críticas que me encantan son las de Machirulo y las de Ana del alba, concretas y sinceras a la par que educadas. Críticas del tipo: No estoy en una etapa muy sexual por lo que no sé qué decirte. Pues eso no dicen nada. Aquellas de no me llegó, no me gustó. La verdad que preferiría que dijeras un poquito por qué.
Estrellitas... ¿Qué tanta importancia les dan a las… valoraciones?
Las valoraciones no tienen ninguna importancia si no superan las 20. Cuando un relato aparece en el top, sus lecturas y comentarios se multiplican exponencialmente, es el único sentido que le veo a las estrellitas. Aunque desde luego los comentarios lo son todo. Si un relato mío tuviera 30 valoraciones de excelente pero solo 3 comentarios me quedaría un poco plof… Eh, eh, eh, ¡despierta, maleducado!
¿¡Qué dices!? –cuando levanté la mirada juraría que había tres Longinos a mi lado. Mostrando porte y solemnidad, me recogí el hilo de saliva que colgaba de mi boca y actué como si nada sucediera—. ¿Qué… qué consejos nos dan ustedes para escribir un buen relato erótico?
Vivid, leed y follad.
¿Cómo hacéis para hablar los tres al mismo tiempo? ¿Cuánto tiempo habéis entrenado?
No, si ya decía yo que este matarratas pasaría factura. Claro, no pones nada de picoteo y luego pasa lo que pasa.
¿Pffafa´dia mfadoiaf?
Hombre me alegra mucho que me hagas esta pregunta. No quiero extenderme mucho en la cuestión por no aburrir a los lectores, puesto que sería un tema a tratar en profundidad, por su trascendencia y delicadeza. Pero sácate la zapatilla de la boca hombre, que casi no te entiendo una pregunta tan importante.
¿Qué proyectos podéis adelantarnos para el futuro?
En breve publicaré un texto bastante rarito sobre zoo, imagino que me caerán hostias como panes. También tengo pensado continuar con las locuras de Julia y alternar con algún texto más romántico o sensible.
La participación en el XXIII Ejercicio de autores también es un objetivo a corto plazo.
En la inmensa mayoría de vuestros relatos los protagonistas principales son mujeres. ¿Por qué enfocar el relato desde la óptica de una mujer?
Me gusta que me hagas esta pregunta. Lo cierto es que como hombre me tengo muy conocido y me gusta como soy aunque siempre estoy abierto a evolucionar. Por el contrario las mujeres me gustan de una determinada manera pero encuentro atractiva a cualquiera, a las tímidas, a las introvertidas, a las pizpiretas, etc. Cualquier variación de la personalidad o el cuerpo de una mujer me resulta atrayente. Las bajitas y rellenitas por eso mismo, las altas por altas, las morenas, rubias o pelirrojas, todas son encantadoras
Es más sencillo cambiar de piel, a la de una chica que te resulta atractiva, que considerar interesantes a hombres muy diferentes a ti mismo –el Longino de la derecha le regaló una sonrisa pícara a la camarera que sensualmente se restregaba por él. Seguro que se había hipnotizado por sus cuatro enormes tetas. Se lo iba a decir a su señora ni bien termináramos.
Celia, Iris y Lilith. Jóvenes fieras por fuera, tiernas en el fondo. ¿Os gusta esa dualidad?
Celia e Iris son mis dos personajes favoritos, diminutas de estatura y con muchas pelotas. Pues lo cierto es que es con lo que más disfruto. Esa dicotomía entre duras por fuera y con los problemas de cualquier otra mujer por dentro. Me encantan ese tipo de personajes. Esa lucha por intentar domar una fierecilla. Jaja, no ahora en serio me motiva mucho más una mujer dura y segura de sí misma, el reto es mucho más divertido. Picar y picar hasta que se llegue a lo tierno. No me motiva una mujer que vaya con su sensibilidad expuesta en una bandeja para que todo el mundo la vea.
Sí, soy consciente de que muchas mujeres me atizarán por ese comentario.
Pero si sois tres no debéis temer a nada. Cuando uno muere, lo revivís con las esferas del dragón… -volvimos a chocar copas.
No, no, insensato que la última vez que las busqué Vegeta me pegó una tunda de palos que aún me duele al sentarme. O me acompaña Gokú o paso de las canicas.
La ruptura de las personalidades de vuestras protagonistas es algo muy común en vuestros relatos.
Pues lo cierto es que lo pensé a raíz de una observación tuya sobre La exhibición de Julia. Las dos chicas de A ciegas, cambian radicalmente sus vidas por una destrucción de su ciudad. Celia pasa de chica histriónica y con carácter a golfilla desatada y de ahí a vengadora sanguinaria. Alex en Bilirrubina cambia de chica superficial a alguien que se quiere comer la vida por sufrir una Hepatitis. Y así en las dos chicas de “El mulo”, en “Caricias especulares”, en “Skatergil”, en “Julia” o en el caso del padre Hernando de Trujillo por el consumo de drogas.
Tal vez el otro recurso que más he utilizado sea el personaje secundario como válvula de escape a los problemas y los sentimientos del personaje principal. Así pasó en cuervo blanco y en El pianista.
A esta camarera también le voy a producir una ruptura, pero no de la personalidad precisamente.
Tú, el Longino de la izquierda… suéltalo… digo, suéltala que aún no he terminado… Y háblame de Celia. Ya lo tenéis justificado todo. Tanto tiempo después, ¿no os ha picado el gusanillo de continuar la serie?
¡Joder que sí me pica!, no hay día que no piense en Celia. El problema es que me gusta más su personalidad y sus aventuras absurdas que el sexo. Estoy a punto de retomarla pero no en TR.
No sois los únicos entre los entrevistados con alguna serie sin terminar, ¿qué opináis al respecto? ¿Un autor está realmente obligado a terminar sus series?
Desde luego que sí. Publicamos para que nos lean y por tanto debemos tener un cierto compromiso con los lectores. He estado tentado muchas veces de borrar lo que hay sobre Celia, si la mantengo es porque está tan mal escrito que me mola ver lo que he podido aprender desde entonces.
Julia. Una ama de casa particular; una mujer tan bien recreada por un hombre parece tarea difícil. O tu señora te escribe la serie, o fuisteis amas de casa en otra vida. Pero en serio, ¿cuál es el truco?
Leer, leer y volver a leer. Soy un lector compulsivo y hay autores que recrean la personalidad de las mujeres de forma magistral. Antonio Gala o José Luís Sampedro son de los hombres que mejor escribían sobre mujeres. Luego imagino que tan solo es necesario tener un poquito de empatía o haberse criado con cinco de ellas. Mi chica siempre me dice de broma que tengo un puntito femenino.
Me encanta escribir desde puntos de vista muy alejados al mío propio. Es como disfrazarte o actuar en una obra de teatro.
Parece que a Julia le espera una gran aventura...
Vamos a ver hasta qué punto se puede llegar a degradar y emputecer sin perder esa normalidad que intento transmitir. Me gustaría que lo llegase a probar todo pero sin forzarla a nada que ella no quiera, como siempre los personajes marcan el ritmo de los acontecimientos, ellos mandan y yo obedezco.
Sé que os habéis fijado como meta el tener por lo menos un relato en cada categoría de TodoRelatos. De las que ya habéis cumplido, ¿cuál fue la categoría más difícil de escribir? Y de las categorías que os faltan, ¿cuál veis como la más complicada?
Por el momento la más compleja fue control mental. No quería hacer el típico texto de mentalismo o hipnosis. Intenté hacer una especie de dominación muy sutil mediante una personalidad fuerte y manipuladora.
Hasta ahora pensaba que zoo, pero gracias a un comentario de besante se me encendió la luz.
Ejercicio de autores... ¿Qué conclusiones habéis sacado con vuestras experiencias con los otros autores?
Solo he participado dos veces, en total han sido cinco relatos que me han estimulado mucho por el tema de forzarte a escribir sobre una cuestión determinada previamente.
Como lector he disfrutado de relatos muy entretenidos y de gran calidad. Tal vez no sean los más morbosos de la web pero sí hay variedad y calidad. De nuevo la retroalimentación tanto durante el ejercicio como en el foro Trovadores ayuda mucho a mejorar. Las críticas que reciben mis relatos del Ejercicio son muy sesudas y curradas, de estas que te dejan pensando y de las cuales al final obtienes conclusiones muy interesantes. Este punto tal vez sea el que verdaderamente me lleva a participar.
Como regalo añadido se conoce gente muy simpática con la cual se puede intercambiar opiniones de todo tipo.
Antes, en TR se levantaba la polvareda cada vez que se publicaba un relato en catalán. Claro, a diferencia de vuestro texto, ellos no solían venir traducidos. ¿Qué opináis de los relatos publicados en otros idiomas?
Escribí un poema en catalán y otro relato en el cual insertaba alguna frase en guaraní. La web debe tener textos en castellano o español, si se incluye algún otro idioma hay que hacerlo con mucha sutileza y respeto hacia los lectores.
Decidme lo más positivo que se os ocurra de esta puta página de mierda… hip…
La retroalimentación de los comentarios. También la gran calidad de muchos autores que desinteresadamente nos hacen gozar con sus textos.
Ahora ponedle verde al webmáster… ¡enga!
Espera que me remangue la túnica que esta golfilla parece que quiere cachearme por si llevo más armas. Pues a ver: La versión móvil no permite ninguna interactuación, el sistema de estrellitas es una patraña y el administrador está mising.
¿Qué propondríais para rescatar a este cadáver decrépito en el que se ha convertido la web? ¿Eh? ¿¡EH!?
Se podrían hacer miles de cosas para dinamizarla: Concursos literarios, zona de foro, notificación de respuesta a los comentarios, un mejor buscador, etc. siempre orientadas a incrementar la interacción y por tanto el número de visitas. El webmaster parece más interesado en mantener el nivel de ingresos de la web que en invertir e incrementar las ganancias.
Pero qué carajo… ¿Y estos punkers de dónde salieron? Enga, Longino, mostrémosle cómo nos las gastamos los autores eróticos… ¡patada voladora!
¿Mande? ¡Deja de retorcerte por el suelo que vas a espantar a tu clientela! Y no son punkers, vienen de un concierto de Coldplay…
Solo necesito… necesito su aliento en mi pene…
Pues espero sinceramente que no sea el mío. ¿Estás llorando, Vieri?... Toma, te paso un pañuelito para que te limpies...
Psss… oye… Longino… muchas gracias por responder mis preguntas… Si me disculpas, voy al baño, y si encuentro un desodorante roll-on voy a pasarla pirata metiéndomelo por el…
¡Epa! ¡Ha sido un verdadero placer! Aunque toques el piano de puta pena y tu camarera tenga más vello en los muslos que un estibador de puerto. ¡Coño!, ¿y esto?, si la camarera venía con sorpresa, ¿serás mamón Vieri?, me pones garrafón y un travelo por camarera. Joder pedazo de tetas que tiene. Lo de la camarera te lo perdono que se le ve muy atenta y no le importa arrodillarse peeero lo del whisky te lo aaapunto. ¡Dios!
Relatos destacados: Escultural y Génesis 1,27