En la cámara apareció mi mejor amiga, Andrea, la prima de mi novio.

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-Apaga eso. –Dijo mi amiga, tapándose la cara con una mano y empujando la cámara con la otra.

-Solo quiero estrenarla, la compré apenas hoy. –Se escuchó la voz de Rafa, mi novio. –Aparte, ¿Por qué no quieres? No estamos haciendo nada.

-Es que… -Dudó mi amiga.

Rafa llevó la cámara hacia abajo y apuntó ha su verga erecta, tapada por el pantalón.

-Esto es nada. –Dijo mi novio. Levantó la cámara y apuntó de nuevo a Andrea. La mirada de mi amiga estaba clavada en la verga de mi novio, se le notaba lujuria.

-No me grabes. –Le dijo a mi novio cuando se dio cuenta de que lo hacía. Se dio la vuelta apenada.

Vi a Andrea y sus atributos todavía no estaban muy marcados en ese momento como lo estaban hoy en día.

-Solo quiero que nos grabemos mientras lo hacemos. –Dijo Rafa.

-Hay sí. Claro que no. –Decía Andrea.

-Ándale, solo nos grabamos dándonos un beso. –Insistió Rafa. Andrea no dijo nada. – ¿Si? Ándale. –Dijo de nuevo.

-Está bien. –Cedió. –Pero no lo vamos hacer. Ya te dije que mi primera vez será cuando me sienta segura. –Y hasta ese momento puse atención a donde estaban. Rafa y le dio la vuelta a todo el lugar; se encontraban en el canal que estaba cerca de la casa de su prima, un lugar con mezquites, árboles y rodeado de parcelas. Buen lugar para hacer cosas y que nadie se diera cuenta. A 100mts estaba la casa de mi amiga.

La cámara de movió y Rafa puso la cámara donde se veía de cuerpo completo Andrea. Traía una blusa pegadita, se le notaban un poco los pechos, que ya estaban un poco maduros. Abajo, traía una falda y unas sandalias. –Me encanta verte vestida así.

-Me visto así para estas ocasiones, para que todo sea más fácil.

-Sería más fácil coger.

-Que todavía no. Solo vamos a fajar.

Rafa apareció frente a la cámara y se le fue encima a Andrea, y la pegó a un árbol. Empezó a besarle el cuello y agarrarle las nalgas con gran desesperación. Le levantaba la falda y Andrea luchaba por bajársela.

Pareciera que Rafa tenía muchos brazos porque se le veían manos por todo el cuerpo de su prima; por las nalgas, pechos, panocha y la besaba por el cuello, mejillas y boca. Todo lo contrario de Andrea que le faltaban manos para quitarse a Rafa de encima. Pasaron algunos 40 segundos y Rafa se separó de su prima y le miró todo el cuerpo.

-Estas buenísima, prima. –Le dijo Rafa.

-Y siento bien rico eso en mí. –Dijo Andrea señalando la verga de mi novio. La respuesta me sorprendió. La escena que había visto hace unos segundos era muy diferente a la respuesta. Mi amiga luchaba por quitárselo y sin embargo quería más.

Se bajó los calzones Andrea.

-Quiero que me la metas ya. –Dijo. Rafa no dudó y se quitó todo. –Solo hazlo despacio y con mucho cariño.

-Si.

-¿Cómo me pongo? –Preguntó.

-Voltéate y empínate. –Lo hizo.

Rafa iba directo cuando:

-¡Rafa! ¡Andy! –Se escuchó la voz de una persona.

Rápidamente se arreglaron la ropa y se acomodaron como si nada hubiera pasado.

-¿Qué pasó? –Gritó Rafa. Andrea se alejó rumbo a la parcela.

Llegaron los hermanos de mi amiga; uno mayor, de la edad de Rafa y una menor, de 12 años.

-Betty no sabe jugar. –Dijo Fernando, el hermano.

-¿Qué hizo? –Betty hizo una seña de que estaba loco.

-Ven. –Dijo Fernando. Se fueron y regresaron. Llegó Andy.

-Vamos a cambiar. –Dijo Rafa. –Tú te quedas conmigo y Andy y Betty se van a cazar.

Todos asintieron. Se tomaron un descanso de unos 5 minutos y luego se fueron las dos niñas.

-¿Cómo vez? No quería coger conmigo. –Dijo Fernando. –Es mi mujer.

Fernando siempre se nos hizo que no estaba bien de la cabeza.

-A lo mejor no quería.

-Pero yo si quería. Sigo queriendo. -¿Era una insinuación?

-Ponte como siempre. –Le dijo Rafa. Se empinó Fernando agarrándose del mismo árbol donde minutos antes estaba Andrea, Rafa llegó y empezó a darle de perrito pero con la ropa puesta. –Me siento y te sientas arriba de mí. –Dijo Rafa. Cambiaron de posición y Fernando empezó a darle sentones a mi novio. – ¿Ya se te paró?

-Sí, mira. –Se levantó Fernando y saltó una verga enorme. Era demasiado grande y gruesa y llena de pelo.

-Quiero mamártela. –Dijo mi novio.

-Ahí la tienes.

La tomó en sus manos.

-¡Rafa! –Era la voz de Andy.

Fernando rápido se subió el short.

-¿Qué pasó? –Gritó Rafa. Llegaron.

-Te habla Betty.

-Dime.

-Andy no sirve para cazar y ya no quiero estar con Fer.

-Yo voy contigo –Dijo Rafa. –Ustedes ahí quédense.

Se acercó a la cámara y se la llevó.

Caminaron sin hablar mucho. Cuando estaban muy lejos:

-¿Quería coger contigo Fer?

-Sí, ¿Qué le pasa? Está loco.

-No le hagas caso.

-¿Cuándo compraste la cámara?

-Hace días y la traje para estrenarla.

Silencio.

Se metieron entre árboles y parcelas, lanzaban piedras.

-¿Te la enseñó? –Preguntó Rafa.

-¿Qué?

-¿Se bajó el short?

-¿Fernando? Sí, me enseñó esa cosa de ustedes. –Dijo en tono enojada y volteando la mirada hacia el cielo.

-¿Era así? O ¿Más grande? O ¿Más chica? –Bajó la cámara apuntando a su verga que estaba de fuera.

-¡Hey! Tapate eso. –Dijo Betty toda apenada.

-No es nada malo verla, solo quiero saber si estaba más grande que esta.

-Si. –Dijo sin voltear a verla.

-¿Más ancha o más larga?

-Las dos cosas.

-Ven, acércate. Dime ¿Qué tan ancha y que tan larga?

Caminó como hipnotizada hasta donde estaba mi novio. Betty tomó la verga de mi novio y empezó a masturbarlo.

-Te gusta, ¿verdad? –Betty Asintió.

Se separó Rafa de Betty y puso la cámara apuntando a donde estaba Betty. Regresó:

-Mámamela. –Le dijo. –Quería tener la cámara para tu primera vez mamándola.

-Bueno. –Se agachó y sin nada más se metió la verga de mi novio a la boca.

Rafa la tomó de la cabeza y empezó a cogerle la boca.

-Que rico, que rico. –Gemía Rafa y no pasaron más de 10 segundos cuando. –No te salgas, espera. –Se puso duro y se vino. Se podía ver la cara de asco de Betty. –No… los… tires… cómetelos…

No se separó hasta después de un rato.

-¿Te gustó? –Preguntó Rafa.

-No sabe tan mal. –Dijo Betty tomando aire.

-Otro día con más tiempo lo haremos. ¿Está bien? –Dijo Rafa. Betty asintió con la cabeza. –Vámonos.

Se apagó la cámara.

Se encendió de nuevo. Apareció Rafa en la imagen.

-Quiero que lo hagamos ya. –Se escuchó la voz de Andrea, en tono bajo y desesperado.

-Cállate. –Dijo Rafa. –Dame eso. –Le arrebató la cámara a Andrea, que apareció en la pantalla.

-Yo te amo. –Dijo Andrea. –Ahora que andas con July no me haces caso.

-Ella es mi novia y la quiero.

-Y yo te quiero a ti.

-Pero lo de nosotros no se puede.

-Lo sé pero no soporto la idea de que quieras a otra y no a mí.

-Así son las cosas.

-Sino puedo tener tu corazón, al menos deja tener tu cuerpo.

Rafa se quedó callado, pensando.

-¿Cuándo?

-Ahorita que salgan mi mamá y mi tía.

-Pero aquí están Betty y Fernando.

-Tengo una idea, solo no te vayas con ellas ahorita, quédate aquí con nosotros. –Rafa Asintió. Se fue la imagen. Apareció la imagen, reconocí rápido el cuarto de Andrea.

-Lo que vamos a hacer, es que abriré la ventana de mi cuarto, Rafa irá al baño pero se va a salir por la ventana de la cocina, y entrara a mi cuarto y vamos a hacer el amor. Voy a cogerme a Rafa primero que tu Julia. –Dijo Andrea y dicho esto, tiró la cámara y empezó a arreglar las cosas. Solo se escuchaban ruidos.

Se movió la cámara de lugar y ahora apuntó a la cama.

A los 5 minutos se escuchó la voz de mi novio.

-Esto es muy cansado.

-Ya llegaste mi amor. Mira lo que me puse para ti. –Y Andrea apareció en la cámara. Llevaba la misma faldita que usó en el primer video.

-Date una vuelta para verte. –Andrea lo hizo y aparecieron las nalgas de mi mejor amiga, no llevaba nada puesto. -¿Te gusta?

-Sí, te ves buenísima prima.

-Si mi amor, así solo me acuesto y me la metes.

-De acuerdo. –Dijo Rafa mientras se quitaba el pantalón.

Andrea se tiró en la cama boca arriba. Rafa se acercó a la cama.

-¡Andy! –Se escuchó la voz de Betty mientras tocaba la puerta. –Abre la puerta.

Rafa hizo un ademan que indicaba frustración. Se dieron un beso y se susurraron algo que no escuché, mi novio se levantó, se puso la ropa, agarró la cámara y se fue la imagen.

Apareció la imagen, estaba oscuro, se movía de forma ruda la cámara.

-Corre, más rápido. –Se escuchó la voz de Rafa, que le decía a otra persona que no respondió ni apareció en la cámara.

Solo se escuchaba el gemir de Rafa. Puse atención al lugar y reconocí de inmediato, eran los alrededores de la casa de mi novio. Vi que se acercaron a la iglesia que estaba cerca de ahí, y se puso a un lado, como para esconderse.

-Vamos a descansar un rato aquí. –Dijo Rafa. –Mira allá van aquellos. –Dijo apuntando la cámara hacia un par de personas. –Vente. –Le dijo de nuevo a la persona que lo acompañaba.

Le dieron la vuelta a la iglesia, y se metieron por otra calle. Había personas fuera de las casas y luces encendidas. Ellos siguieron su camino esquivándolos. Caminaron un poco más y llegaron entraron a la cochera de una casa que reconocí de inmediato: era la casa de uno de los amigos de Rafa.

-Aquí es. –Dijo Rafa. –Aquí nos metemos y nadie va a sospechar, al cabo estamos jugando escondidas y si no nos encuentran no hay problema. –Y dicho esto sacó una llave de su pantalón y abrió la casa. La casa estaba oscura, no se veía nada.

-Le dije a Arturo que encendiera una luz. Ni modo, me meteré al primer cuarto que encuentre. -Se escuchó abrir una puerta y se encendió la luz. Apareció una recamara. –Aquí lo haremos, es el cuarto de los papas de Arturo. –Y por fin apareció en la cámara la persona con la que estuvo hablando todo el tiempo: era la hermana de mi mejor amiga, Betty.

Acomodó la cámara de tal forma que se viera la cama totalmente.

-Ando bien caliente. Desvístete rápido, ahorita regreso. –Y Betty empezó a quitarse el pantalón y la playera que traía puesta hasta quedar totalmente desnuda. Tenía una matita de bello muy chica en su entrepierna. Por su corta edad, me imaginé.

A los 3 minutos regresó Rafa.

-No encontré nada de lo que me dejo Arturo. –Dijo aunque más bien lo pensó en voz alta. –Te ves bien rica. –Le dijo mientras se acercaba a Betty, la abrazaba y la besaba. –Estas bien tiernita, acuéstate y abre las piernas que me voy a comer tu duraznito. Y lo hizo.

Rafa se desnudó y saltó su verga ya erecta.

Se acercó a su prima y se metió en medio de sus piernas a mamarle la panocha. Sentí mojado en mi entrepierna y solté una lágrima. No fueron más de 10 segundos cuando Rafa se levantó

-Sabes riquísima. Pero ya no aguantó, te la quiero meter. –Se acomodó. –Lo haré despacio. –Y Betty asintió. –Ahí voy, ahí voy. Ya te toqué, no aguantó, me vengo. –Y soltó un gemido, casi grito. Se pudo ver donde le metió la verga a su prima y esta también soltó un grito-gemido de placer.

Estuvieron los dos gimiendo un rato, sin moverse.

-Listo, vámonos. –Dijo Rafa a los 2 minutos.

-Y esto, ¿Qué es? –Preguntó Betty un poco confundida mientras se tocaba la entrepierna.

-Es semen. Ve al baño a limpiarte. Agarra tu ropa para que allá te cambies. –Y dicho esto, agarró su ropa y salió del cuarto rumbo al baño.

Rafa se puso rápido la ropa.

-Ya sal. –Dijo en tono de voz bajo. Apareció en la cámara Arturo. –Te dije, ¿A poco no?

-Te la cogiste bien rico. ¿Cómo sabe su panocha?

-Deliciosa.

-Ya dejaste de ser virgen, ahora es mi turno, pero yo quiero a Andy.

-Ella es mía, ya te dije. Con ella nadie se va a meter más que yo. –Dijo mi novio Rafa.

-Esta buenísima.

-Si. Pero luego te pongo a Betty, yo te hablo.

-¿Crees que afloje conmigo?

-Es bien puta, incluso ahorita le puedo decir y afloja pero no. Los dos dejamos de ser vírgenes ahora, hay que dejarla descansar. Si quieres ahorita te traigo a Fernando para que te de unas mamadas. –Le dijo Rafa.

-Sí, me quedé bien caliente.

-La mama bien rico y aparte se traga la leche. A mi hasta 3 veces en un mismo ratito me ha sacado la leche. –Dijo mi novio con orgullo.

Agarró la cámara y se fue la imagen. Puse detener al video.

Mi mundo empezó a hacerse muy pequeño, me empezó a faltar el aire…

Le di reproducir al video.

Continuara.