Como saben tengo 12 años viviendo en el D.F., Llegue cuando tenia 10 añitos y no habia vuelto a colombia a pesar de que le insistia a mis padres de que deberíamos ir de vacaciones para visitar la familia, pues alli estaban todos mis tios, primos y demas familiares.

Cuando cumpli los 16 años nos llego una invitación de una prima a su matrimonio, asi que hicimos maletas y nos fuimos para bogota, al llegar en el aeropuerto nos estaban esperando los primos y primas que hacia varios años no veia y que yo no recordaba, entre ellos estaba mi primo juan, un muchacho que ahora tendría unos 18 años y que lo encontraba muy simpatico, estuvimos unos dias en bogota y luego mis primos nos invitaron a un pueblo de boyaca, donde ellos tenian unos amigos y estaban en ferias y fiestas, ese pueblo era duitama, como a 4 horas por carretera de bogota, nos fuimos con mis padres y llegamos a una casa de campo, grande y bastante antigua, con habitaciones imensas y recuerdo que el baño quedaba fuera de la casa, en una especie de prado, era un baño rudimentario y sufria mucho, pues era tierra fria y el agua era bastante helada, cuando tenia ganas preferia aguantarme a salir a ese frio tan tenaz.

Un dia anunciaron en el pueblo que para amenizar las ferias llegaría un conjunto de vallenatos desde la guajira, nosotros habiamos estado todo el dia en la casa jugando y recordando viejos tiempos, como a las 7:00 de la noche nos fuimos todos para la plaza a ver el espectáculo, recuerdo que cuandio llegamos habia una cantidad de gente impresionante y todos nos perdimos, cada uno cojio por su lado, mi primo juan me agarro fuertemente de la mano para que no me perdiera, asi que terminamos los dos contra la baranda de la plaza de pie y sin podernos mover de la cantidad de gente que habia, el aguardiente rodaba por todas partes y a pesar de que no queria a instancias de mi primo me tome varios tragos, pues el calor de la gente y esa musica era algo muy excitante.

Yo estaba vestida con una blusa blanca colegial y una falda hasta la rodilla, encima llevaba una ruana que llaman "maxiruana, es larga y llega hasta mas debajo de las rodillas, esto por el frio tan bravo que hacia, me acomode como pude contra la baranda de pie y mi primo se hizo detrás mio, a cada rato sentia los empujones y gritos de la gente, mi primo pegaba descaradamente su miembro contra mis nalgas, sabia que no era culpa de el, pues estabamos como sardinas alli, habia mucha gente.

Con el paso del tiempo, el baile y el aguardiente empeze a notar cada vez mas fuerte el paquete de mi primo contra las nalgas, no se por que pero me volvi y le di un beso, a lo cual el me respondio de una forma muy caliente, yo estaba mareada y exitada, el habia subido la ruana y pegaba mas su tranca contra mi culo, sentia la dureza de su miembro el calor que emanaba, yo sentia mi rajita ardiendo; como pude baje la mano y por encima del pantalón le acaricie su polla, el reacciono echándose hacia atrás, pero luego metio su lengua en mi oreja y se arrimo mucho mas, metio sus manos por debajo de mi ruana y me agarro fuertemente las tetas, mis pezones estaban a punto de reventar la blusa, empezo a masajearlos suavemente mientras pegaba mas su cosota contra mi nalga, me levanto la falda y ahora su miembro quedaba contra mi panty, el se movia acompasadamente, disimulando que bailaba para que nadie lo notara.

Nuevamente baje la mano por detrás y como pude le desabroche la cremallera del pantalón y le saque el miembro, estaba supercaliente, todo mojado y era muy grande y gordo, suavemente empece a masajearlo mientras el continuaba agarrado de mis piruchas, en un momento, no se como, corri mi panti con la mano y deje que el posara su vergota contra mi culo, era muy rico sentir esa enorme verga como me calentaba y como sentia la respiración de el en mi nuca, me voltee y nuestras lenguas se unieron una vez mas, pero esta vez mas fuerte, yo estaba a mil, el jadeaba a mis espaldas y su tranca pujaba por entrar, como estabamos de pie, separe las piernas y con la mano guie aquella maravillosa tranca hasta mi vulva que estaba caliente y chorreando mis jugos, senti como su miembro se abria paso entre mis labios vaginales y como me introducia centímetro a centímetro aquella gloriosa tranca, cerre mis piernas y aprisione aquel miembro sintiendo su calor en mis entrañas, juan jadeaba y me dijo me vengo, rapidamente lo saque de mi concha y senti su chorro espeso y caliente en mis nalgas, me sentia en el cielo, mis pantis estaban mojados de su semen, estaba enmbarrada y su semen mezclado con mis jugos resbalaba por mis temblorosas piernas, nos fuimos rapidamente de alli, nos dirigimos a una farmacia y compromamos condones y una crema lubricante y nos fuimos para la casa, ya que sabiamos que alli no habia nadie.

No mas entramos nos tumbamos en una cama, me abalance sobre juan, le baje los pantalones y me meti en mi boca aquella hermosa tranca que rapidamente empezo a cobrar vida, sentia como se hiba agrandando entre mi boca, lo chupe una y otra vez, luego me arrodille sobre la cama y juan unto mi ano de esa crema, se puso un condon y sin mas preámbulos introdujo su cabezota en mi culito, senti morirme, sentia que me partiria en dos, queria safarme, pero juan me tomo con fuerza y me decia, no te preocupes, no te lastrimare, queria gritar, sentia esa cosota abriendose paso en mi agujerito, juan suavemtente lo metia y sacaba, el dolor empezo a ceder y mi ano a dilatarse, lo estaba recibiendo todo en mi culo, juan no paraba de bombear, pareciamos dos locos, sudando a mares, luego cambiamos de posición, juan se acosto en la cama bocarriba, yo me arrodille frente a el y con una mano guie aquella cosota rica nuevamente en mi ano, despacio, muy despacio......sentia como me entraba todo, como iba desapareciendo en mi culito, hasta que pude sentir las bolas en mi trasero, me lo habia introducido todo, era increíble por que aquella vergota debia medir como 22 cms y era muy gruesa, sin embargo, alli estaba yo, feliz, ensartada por mi culo, cuando juan me dijo que se iva a derramar, me lo saque del ano, le quite el condon y me lo meti en mi boca, hasta que se derramo y pude sentir sus chooros en mi garganta, calientes, espesos y amargos, le pasaba la lengua una y otra vez por aquella hermosa tranca hasta que se lo deje brillante y limpiecito, después de esto, nos vestimos rapidamente y nos fuimos para el parque otra vez.