FIN DE SEMANA CON MIS AMAS 2.
En vista de que nuestra esclava particular se encuentra hospitalizada por cuestiones que ustedes entenderán, narro sus experiencias contadas por ella misma.(capitulo 2).
Continuación del capitulo 1:
Al ratito bajaron mis dos amas muy hermosamente vestidas, desde la piscina observa que ninguna de las dos llevaba bragas, estaba segura que tampoco brasier, bajo aquellos diminutos vestidos estaban desnudas, se despidieron de mi ama Mariana de beso y a mí ni me determinaron, mi Mariana salto a la piscina donde me recostó contra la pared y procedió a darme lengua de una manera desaforada, estaba muy caliente, sus pezones rozaban los míos, mis brazos rodearon su cuello atrayéndola más hacía mí, mi lengua se entrelazaba con la suya mientras su mano acariciaba mis nalgas buscando mi ano, noto que no llevaba puesto el consolador, se separo bruscamente de mi, -anda puta, busca tu juguete, siempre tienes que estar con el puesto-, me dijo enfurecida; salí de la piscina y me dirigí a buscarlo regresando con él, me acosté al borde de la alberca y me lo introduje, mi ama salió de allí y dándome una fuerte nalgada me tomo de la mano dirigiéndonos a su alcoba.
Iba detrás de ella mirándo su contorneando cuerpo, ella insinuaba sus senos y sus pezones, su precioso y paradito trasero, toda en ella me fascinaba.
Ella voltea y me pregunta:-qué miras zorra-, -Te miro a ti, disfruto viendo tu cuerpo mi ama-, le digo humildemente. Sonríe y me dice:- te gustaría hacer algo más además de mirar puta?-. le digo:-lo deseo con ansía, ama-.
Al entrar ella se volteó y me puso contra la puerta. Mientras con una mano me cogía un seno y con la otra me acariciaba mis nalgas y me besaba apasionadamente. Empezó a agarrar mi ya erecto clítoris y lo acariciaba con la palma de su mano, me agarraba las nalgas y las apretaba suavemente. Aquello me gustaba. Agarré sus nalgas las apreté y la volteé a ella que ahora estaba contra la puerta. La empecé a besar su cuello mientras que con una de mis manos le acariciaba sus hermosas tetas.
Juego con mi lengua en su sexo caliente. La chupo y la lamo alternativamente. Paro un momento para que lo desee aún más y continuo con más deseo y pasión. Sorbo la humedad de su sexo que mi lengua continúa recorriendo de arriba hacia abajo. Paro nuevamente para acariciarla suavemente con la yema de los dedos, en pequeños círculos. Acerco mi cara nuevamente a su dulce cueva pero esta vez para olerla, para sentir su olor de mujer cada vez más caliente.
Subo más allá de su sexo y empiezo a besarle el vientre. Pequeños besos, cortos que alterno en diversas partes. Comienzo a acariciar su ombligo con mi lengua y bajo nuevamente hacia su monte de venus trazando una línea con la saliva de mi lengua. Quiero sus nalgas. Se lo hago saber y se voltea. Las agarro con mis manos y se las sobo. Las junto y las separo. Introduzco mi dedo índice entre ellas para recorrerla. Acerco mi cara, le doy suaves mordiscos, arrastro mis dientes por ellas como si tratara de comer cada pedazo. De abajo hacia arriba y de arriba hacia abajo. Mi lengua se cuela entre sus nalgas y termina nuevamente en su sexo. Vuelvo a bajar y subir varias veces más. Su sexo ya no está húmedo, sino mojado. Se voltea nuevamente y empiezo a besar y lamer sus muslos que agarro con mis dos manos como una pieza que voy a empezar a saborear... Y saboreo con gusto, sorbiendo su piel dándole pequeños mordiscos que la hacen gemir. Desciendo de sus sabrosos muslos hacia sus piernas y sus pies donde le dedico tiempo a cada uno de sus dedos que chupo y beso alternativamente. Cambio a su otra pierna pero voy más rápido... mi ama me pide entre gemidos que quiere que le mame nuevamente su concha que la haga acabar con mis labios. No me hago rogar. Ella separa sus labios mayores y yo empiezo a jugar con su sobresaliente clítoris. Arquea su cuerpo. Y mientras le chupo introduzco dos dedos en su ya mojada cueva. Los muevo a su ritmo, la masajeo por dentro. Estoy a mil. Ella me presiona con sus manos, para que no pare. Mi lengua está ahora hurgando la entrada de su concha. No aguanta más y se produce el estallido de sus jugos en mi boca, pero yo no paro, decido prolongarle el placer un rato más. Miro con gusto su cara de satisfacción. La empiezo a besar por todo su vientre, subo hasta sus pechos y le dedico otro rato a sus pezones. Pero ella quiere más. Me coloco el consolador con el arnés, ella agarra con fuerza mi falso pene y lo hala hacia ella. Hacia su concha. Me dice que me quiere dentro de ella. Sonríe maliciosamente y con su mano dirige la polla hacia su deseada entrada. Pero no se lo mete dentro aún. Prefiere torturarme. Lo mueve de arriba abajo a través de los húmedos labios de su concha y cuando menos me lo espero, se lo introduce y se deja caer. Empieza a moverse con fuerza con energía como si quisiera que esa polla plástica le llegara hasta la garganta. Mis manos sostienen sus nalgas, que no paro de acariciar. Parece poseída por el placer. Me está cogiendo. Gozando y haciéndome gozar. Introduzco uno de mis dedos por su culo, la volteo y ahora soy yo la que está encima de Mariana. Quiere que vaya más rápido. Que la reviente, me dice, metiendo un dedo en mi culo. Mi cuerpo está sudando y gozando. No da más y estallo en un gran orgasmo llenándola toda con mis jugos. Me quedo sobre ella unos minutos y nos damos un prolongado y largo beso en el que se entrecruzan nuestras lenguas y nuestra saliva.
Dormitamos un rato abrazadas mientras ella duerme sobre mi pecho. Pero me despierta su boca, su lengua que juega de nuevo con mi pene falso, Mariana ha empezado a chupar, a lamer, a mamar con dedicación. Lame todo aquel gran palo y posa sus labios sobre la punta a la que castiga con su lengua como si fuera real. Mariana deja de chuparlo y me ordena que me quiere nuevamente dentro de ella. Se baja de la cama. Se arrodilla y se pone en cuatro. Alza su culo, sus nalgas mostrándomela con lascivia, dejando ver también su hinchada vulva. Penetro su cueva nuevamente y empiezo a cabalgarla pero me dice que me quiere en su culo. Le saco el consolador. Me agacho y empiezo con mi lengua a acariciarle su ano. Se lo beso y le introduzco la lengua ligeramente. Con mi dedo índice le empiezo a acariciar su entrada. Le introduzco un dedo. Acariciándola hacia adentro y circularmente. Luego dos y hasta tres dedos. Me dice que me quiere dentro ya. Que es una orden. La obedezco sacando mis dedos e introduciendo un par de veces más mi consolador en su concha para lubricarlo. Acerco la punta de aquel pene a la entrada de su ano y lentamente se lo empiezo a introducir. Ella dice que quiere más, todo dentro de sí. Y se lo meto hasta el fondo. Ella grita y me dice que no pare. Empiezo a cabalgarla con mayor rapidez. Mi ama Mariana insaciable, me dice que me quiere agradecer la enculada que le acabo de hacer. Yo le digo que soy yo la que tiene que agradecer por gozar tanto con ella. Responde que el agradecimiento es mutuo y empieza a chupar mi concha pero poniendo esta vez en mi cara su concha para ser saboreada y degustada nuevamente por mi. Así estamos por varios minutos mamándonos en un indescriptible 69 .Acabo en su boca, ella chupa y lame con fruición tragándose mis jugos. Ella acaba en mi boca en un poderoso orgasmo y siento poco después otro liquido más caliente y amarillo entrar en mi boca. Es su orina que provoca en mi una orinada en su cara que ella también traga, exhaustas nos quedamos dormidos.
Me desperté cerca de las 2 de la mañana; oí ruido, eran mis amas Carolina y Marta que regresaban de su cacería, ambas venían tomadas y acompañadas por una pareja, Marta con un tipo de unos 25 años que solo llevaban una pantaloneta y una camisa de sport y Carolina con una voluptuosa mujer de unos 20 años con una falda corta y un top ombliguero, ambos de color y altos, cada pareja se paro al borde de la piscina a besarsen, el tipo restregaba descaradamente su paquete contra la concha de mis ama Marta, vi como Marta sin desprenderse de aquella boca que la devoraba, bajaba su mano y sobaba por debajo de la faldita de la morena lo que parecía ser una concha abultada, sus senos eran descomunales, mis dos amas reían y cogidas de la mano se encaminaron a la salita; con gran sigilo baje las escaleras para espiarlas. Pusieron música y se dedicaron a bailar, casi no podían sostenersen en pie de lo tomados que estaban, mientras mi ama Carolina se pegaba al cuerpo de aquella mujer, Marta sentada al lado del tipo se dejaba meter mano bajo su faldita y yo observaba claramente aquel paquete, que era bastante llamativo. La chica descaradamente cogía con sus manos el culo de mi ama Caro, quien agarrada a su cuello lamía la lengua de aquella negra, parecían una sola, ambos la disfrutaban, dos hembras negras calientes dándose lengua y metiendose mano, parecia de película. Ya mi ama Marta había bajado la pantolenta a su amigo y friccionaba con su mano una descomunal y gorda verga sin soltarse de su lengua, su mano subía y bajaba sobre aquel tolete gordo, sentí celos y un poco de rabia pero no podía apartar mi vista de todo aquello. Caro y su amiga dejaron de bailar y se dirigieron hacia el gran sofá donde estaban Marta y su amante de turno, Al ir al sofá la negra la agarro por detrás e hizo ademán de follarla en su culito, tan sólo cubierto por la tela de una falda de corto vuelo. Caro sentó a su amiga allí, comenzaron a besarse y sin ningún recato se arrodillo y bajo la pantaleta de la negra, dejando al descubierto para mi sorpresa una asquerosa verga negra, muy grande, llena de venas que me recordó la de aquel caballo con el que me habían obligado a follar, era un travesti espectacular, sus manitos se apoderaron de aquella barra y su boca se abrió al máximo para recibir aquel glande y proceder a realizar una espectacular y fantástica mamada, mientras aquella chica/chico la cogía por el pelo haciendo que mi ama tragara aquella negra polla.
Marta dijo:-Vaya pollas tan grandes-, entonces me di cuenta que el tipo estaba masturbando a Marta ya que tenía su mano bajo su falda, mi excitación iba en aumento, me encontraba desnuda y arrodillada espiando a mis amas.
De repente, mi ama Marta se levantó y dijo:- Tengo un plan, lo hemos estado hablando con Caro, queremos hacer una pequeña orgía, pero sólo hay una condición para ello, que ambos tienen que hacer todo lo que digamos, nosotras tendremos el control de la situación en cada momento, seremos sus amas-, ambos se miraron y masturbándose sus erectas pollas accedieron a su petición.
Marta se acercó a su amigo y termino de quitarle totalmente su pantaloneta y camiseta, la enorme polla saltó en total erección, alcance a divisar que estaba húmeda de líquidos preseminales, Marta se la empezó a lamer, dándole lengüetazos por todo el tronco y jugando con su lengua con el glande, se notaba que el tipo sufría de placer, de repente Caro se acerco y le agarró la polla y se la metió en la boca, las dos le estaban haciendo una mamada increíble, sus lenguas se encontraban sobre aquella barra totalmente ensalivada, el travesti las observaba sin dejar de menearse su aparato, Caro se retiro y se fue hacia su amiga a chuparle la polla, qué vista tenia!!!!, mi ama Carolina de cuclillas con un culo imponente y su honda raja, y mamando una polla, su melena le caí por la espalda, y se movía al unísono de los movimientos de la chupada que le estaba haciendo a aquel travesti. Marta se subió encima de la polla y empezó a cabalgar, la polla le salía y entraba de su coño de forma casi brutal. Carito seguía en lo suyo mamándole la polla a su amiga, de pronto se levantó y trajo consigo a su amante, y cogiéndole la polla con la mano se la ofreció a Marta que empezó a chupársela con fuerza, incluso se quitó de encima de la verga que la cogía para dedicarse en exclusiva a esa nueva polla, Caro se unió a ella, entre las dos se devoraban esa verga de una manera magistral, los dedos de Caro se hundían en el ano de aquella negra travesti.
Caro cogió la verga del amigo de Marta y se la ofreció a la travesti -chupala- le dijo, ella encantada se agacho devorándose encantada aquella herramienta y dejando al descubierto su formidable culo de donde colgaban dos enormes bolas y una gran pija totalmente depilada, luego le ofrecio la verga del travesti al tipo, el hombre reacciono negándose a aquello aduciendo que no era ningún marica, a lo que Caro reclamo:- Pues si quieres follarme tendrás que hacerlo, Marta y yo lo hemos planeado todo, queremos ver como un tipo se lo chupa a otro, nos da mucho morbo-
El tipo accedió a las exigencias de mis amas y empezó a chuparla, se turnaban los tres para mamársela a aquella hermosa travestí, que solo cerraba los ojos y se dejaba hacer, ellas se la chupaban cada vez con más vicio, pasándole la lengua por el glande en rápidos lengüeteos, y obligando al tipo a hacer lo mismo, a esas alturas parece que ya no le disgustaba, el tipo gozaba con aquélla verga en su boca tanto o mas que mis cachondas amas.
Marta empezó a chuparle la polla desde abajo y Caro hacía lo mismo, le pasaban tan sólo la lengua por el costado de la polla mientras el otro tipo le pasaba la lengua por el glande sin dejar de halarse su propia pija violentamente, la travestí abrió sus piernas y se dejo caer sobre aquella barra tragándosela en su totalidad sin ninguna dificultad, el espectáculo era de primera: el travestí ensartado en aquella polla siendo pajeado por el tipo, mis amas prendidas a sus suculentos senos, la travestí meneaba sus nalgas gimiendo de placer, subía y bajaba sus nalgas empalada en aquella barra, luego de un tiempo de estar dándole verga al travestí, el tipo que la cogía se separo de ella y nuevamente les ofreció la pija a aquellas hembras que retomaron los chupetazos y turnándose se comían aquella tranca, de repente y sin previo aviso, el frotándose la verga se empezó a correr, ante la sorpresa de todos se la sacaron rápidamente de la boca, y aquella verga siguió soltando chorros, les llenó a los tres las caras de semen, Marta y Caro reían con cara de vicio, le lamían la cara a la travestí para recoger todo el semen que podían. Marta se volteo y se le ofreció de forma incondicional, él la follaba con furia, como para vengarse de la mamada que le había tocado dar, la cogía incluso por el culo, se la follaba a lo bestia, como si estuviera poseído, la polla entraba y salía de su culo a gran velocidad, se la notaba incomoda, y no es de extrañar ya que esa polla era mucho más gorda que la de la amiga de Caro, Marta estaba casi desmayada de placer. Cuando estuvo por acabar se la saco y se la acerco a la boca para que se la chupara.
Se la estaba mamando de maravilla, cuando le pasó la lengua por entre su boca y su glande el tipo no pudo aguantar más y se corrió de nuevo en su boca, otro tanto idéntico hacia Caro con la verga de la travestí, mis amas tenían sus bocas llenas de verga y sus caritas embarradas de semen, no pude resistir aquello y salí de mi escondite a limpiar con mi lengua las caras de mis amas, este semen sabia muy distinto al del caballo, chupe y chupe y lamí el rostro de mis amas, quienes después de verse limpias, me obligaron a limpiar las chorreantes vergas de sus amigos. El tipo y la travestí se marcharon en el mismo instante en que apareció mi ama Mariana quien se había despertado por el ruido, las tres se encerraron en su cuarto, posiblemente a coger, yo me saque mi consolador del ano, ya empezaba a amanecer y me quede dormida junto a la piscina, había terminado nuestro primer glorioso día..................................