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Amar dos veces 7

en Lésbicos

AMAR DOS VECES 7

Las teclas de mi  computadora se presionaban una tras otra, mire el rejo de mi mano, me disponía a levantarme para dirigirme a la cafetería, pedir la misma comida que siempre y regresar a mi oficina.

-desde hace cuánto estas allí?.

Marie: un par de minutos.

-y porque no lo dijiste?.

Marie: lo hice, pero al parecer cuando te concentras no haces caso a nada.

-y que haces aquí?

Marie: vine a buscarte para ir a comer.

-como lograste entrar?

Marie: bueno si preguntan soy la novia de un tal Juan.

-y quien es Juan?.

Marie: no tengo idea, cuando llegue escuche al guardia decir que vendría la novia de Juan  a traerle unas revistas, y dije que era la novia.

-y que tal aparece la verdadera novia?.

Marie: por eso tenemos que irnos ahora, así que apúrate.

-pero yo como aquí.

Marie: a tu oficina le falta vida_ se acercó y comenzó a mirar las paredes, para alzar algunas cosas que estaban sobre mi escritorio_ pero en fin, toma algunas cosas y en marcha.

-pero que agarraría?.

Marie: si estas lista mejor_ me tomo de la mano para levantarme de mi asiento jalándome hacia afuera.

-aguarda debo llevar mi bolso.

Marie: yo lo traigo.

Espere un momento y no salía, se me hacía extraño  ya que mi bolso estaba a la vista, ya iba a ir para ver si estaba bien, y la veo correr apresurada.

Marie: vamos apúrate.

-porque?.

Marie: solo hazlo_ detrás de ella estaba la recepcionista de piso, que se acercaba a pasos agigantados_ no tuve tiempo de poder preguntar, ya que parecía que huía de todo, fuera de la empresa  las cosas pasaban con normalidad, los automóviles tan deprisa como siempre, me vi obligada a cruzar la calle y caminar como cuatro cuadras detrás de Marie sin decir palabra ella se reía y hablaba sin parar no le prestaba mucha atención mi mente divagaba más en tratar de entender que hacía en ese preciso momento el porque me prestaba para una locura como esta.

-adónde vamos?.

Marie: a comer ya te lo dije, me estas prestando atención?

- sí, pero a qué lugar?.

Marie: sabes que es lo curioso, tu dispositivo tiene mucha información y todas muy útiles pero no dice nada con respecto a lugares donde venden buena comida cerca a tu trabajo.

- eso es porque no he comido cerca de aquí así que aunque encuentres el nombre del restaurante no te dará más referencia que eso.

Marie: bueno al parecer nos obliga a escoger algún lugar y entrar a probar.

- que?, así no más sin recomendaciones de algunos clientes o sugerencias de comensales.

Marie: si así no más_ miro con atención el local, volvió a sonreír y entro.

Mire hacia ambos lados y con algo de duda entre, tomamos asiento y en un momento un joven llego para entregarnos la carta.

Marie: tráiganos la especialidad de la casa.

Joven: por supuesto, enseguida regreso.

Me quede estupefacta, porque el joven se había ido y no pidió mi orden.

-pero yo no escogí nada.

Marie: pedí la especialidad de la casa si con eso no nos convence ningún plato que este en la carta valdrá la pena.

-pero no sabes cuál es esa especialidad.

Marie: si, no es asombroso.

-claro que no, no sé a qué atenerme.

Marie: eres alérgica a algún alimento?

-no pero...

Marie: entonces no hay problema, relájate hay que darle una oportunidad a todo.

-esto va fuera de lo habitual.

Marie: recuerdas que quedamos que me apoyarías en esto de la apuesta?.

-a esto te referidas con esas cosas que mencionaste.

Marie: si, iré a los servicios, me acompañas?

-ve tu primero, luego iré yo.

Marie: está bien.

Saque un pomo de desinfectante para echarlo en un pañito para limpiar la parte de la mesa donde iba acomodar mis manos, Marie regreso sin demora, me levante para ser ahora yo quien vaya a los servicios, llevando entre mis manos un líquido desinfectante, no confiaba mucho en esta clase de lugares ya que había muchos gérmenes, aceptable en sitios donde la frecuencia de personas iba en aumento, de regreso Marie parecía escribir un mensaje, al verme la note nerviosa y guardo su celular.

Marie: bueno aprovechemos este momento para hacer un espacio en tu agenda.

-para qué?_ dije mientras me sentaba.

Marie: este fin de semana, todos iremos a los juegos mecánicos y de allí paintball.

-nunca hemos hecho eso, porque ahora sí?.

Marie: por eso mismo, porque nunca lo han hecho.

-no sé si sea buena idea.

Marie: debes colaborar, será divertido.

-eso no lo sabes, cada persona es diferente así que lo que le gusta a uno no le agrada a otro.

El mismo joven que hace rato se fue regresaba con una fuente con platos, deposito en la mesa alguno de ellos, junto a los cubiertos.

Marie: se ve delicioso, gracias.

El plato de entrada era una ensalada al mirarlo se veía bien, mire a Marie esperando que comiera.

Marie: adelante.

-primero tu por favor.

Marie: porque? temes que no te guste.

-la verdad sí.

Marie: me agrada tu honestidad, está bien_ se metió una cuchara a la boca y comenzó a masticar, para mi sorpresa tuvo un gesto de agrado cosa que me incentivo a hacer lo mismo, note los sabores combinarse en mi boca.

Marie: esta rico verdad.

-para ser honesta si y mucho.

Marie: es asombroso que tú me digas eso, a primera vista cualquiera pensaría que nada te agrada.

-entonces la mayoría se confunde, hay muchas cosas de las que disfruto.

Marie: así como cuáles?.

-disfruto de los días lluviosos, una buena tasa de chocolate caliente con tres malvaviscos flotando en el, disfruto la sensación de las sabanas limpias sobre mi cuerpo, leer un buen libro al lado de una chimenea mientras me calientan sus brasas, disfruto al montar un caballo y bueno también al hacer cuadros estadísticas de planificación de inversiones.

Marie: que paso contigo?

-como?.

Marie: en algún momento cambiaste, por lo que escucho pareces alguien mucho más sensible de lo que muestras a los demás.

-y tú eres más imaginativa de lo que creí, el hecho que me gusten cosas tan simples como esas, no significa que actuar con la razón sea un disfraz, realmente es como pienso.

Habíamos terminado de comer, la plática fue muy amena, al mirar mi reloj casi me caigo al tratar de pararme.

-dios ya es tarde, me tengo que ir.

Marie: claro.

Saque mi billetera desdoble algunos billetes, lo puse al lado de mi plato.

-yo invito.

Marie: claro que no, déjame a mí hacerlo, al fin y al cabo yo fui la que te saco de tu oficina.

-claro que no, me sentiría mejor así.

No sé por qué pero sonreí, para irme lo más rápido que pude, en la oficina la tarde paso deprisa, entre documentos y trabajo, aunque la recepcionista pregunto quien había sido la chica que estaba en mi oficina, la encontró buscando entre mis documento cosa que le pareció extraño, tuve que decirle que era mi prima, tiempo después pensé: que podía haber buscado Marie entre mis cosas?, las personas de la oficina comenzaron a salir, mientras terminaba de guardar mis documentos y apagaba el computador, me puse mi abrigo y metí mis manos en mi bolsillo, al salir parecía perderme entre varias personas, de pronto me detuve para ver a Marie frente a mí, al darse cuenta que no iba hacia fue ella quien camino a mi encuentro.

Marie: la empresa tiene mucho personal, esperaba que no me viera la recepcionista de la mañana.

-que haces aquí.

Marie: vine a compensarte por el almuerzo.

-no es necesario…

Marie: yo sé que no, pero quiero hacerlo, sígueme.

Caminamos por varias calles, hasta que entre unas casas antiguas dentro de un callejón por un camino alumbrado apenas por unas luces, sale un pequeño perro moviendo la cola, Marie se agacha para acariciarlo y jugar con él por un momento, mire a ambos lados algunas personas salían y entraban a un local el cual en un par de minutos estábamos sentadas pidiendo un poco de vino.

-yo no tomo vino.

Marie: lo sé por eso aunque la botella parezca de vino, no lo es, solo es jugo de uva.

-segura?

Marie: jamás te daría algo que no quisieras tomar.

-no lo sé.

Marie: vamos pruébalo, si no te gusta, pedimos una soda.

-bueno_ puse la copa sobre mi labio, y bebí un sorbo, y sí que no estaba nada mal.

Marie: por tu expresión parece que te gusto.

-la verdad si, y no sabe nada a alcohol, como conoces este lugar?.

Marie: suelo venir seguido, aquí se reúnen varios artistas, y también posibles compradores, así que es un buen lugar donde relajarse y hacer negocios.

-debí imaginarlo, el decorado las pinturas, todo es muy artístico.

Marie: puedo hacerte una pregunta?.

-bueno creo que si.

Marie: porque no quisiste entablar una relación con tu hermana?.

-la verdad, no lo creí necesario, su familia nunca ha querido saber nada de mí y mucho menos tener algo que ver conmigo.

Marie: pero no la trataste, no sabes cómo es, ni lo que realmente quiere.

-tu logita a mi pesar es correcta, no sé si sería bueno ni para ella ni para mi tener problemas solo por tratarnos.

Marie: hay problemas que vale la pena tener, si a cambio conoces a personas maravillosas.

-como podrías saber que es así?

Marie: te gusto la comida de hoy verdad? Así como el jugo de uva.

-sí, pero eso que tiene que ver?.

Marie: que fueron cosas nuevas, cosas que van más allá de lo que estas acostumbrada, no podrías hacer eso con tu hermana que tiene mucho más valor.

-en la mañana hubo una posibilidad de 50% de que me guste y 50% de que no me agrade, es algo incierto determinar los resultados.

Marie: si y todo en la vida es así, pero dime solo una cosa, te darías una oportunidad de tratar a tu hermana.

-porque sería una oportunidad para mí?.

Marie: ganarías mucho, bueno la situación es esa, lo arias o no?

-podría hacerlo.

Marie: que bueno, porque mañana, hice planes para que salieran a cenar, pasear, o hacer la actividad que deseen pero que lo hagan juntas.

-pero cómo?

Marie: no te enojes sí, pero tome su número de tu oficina, le escribí en la mañana, y saque una cita para ti, para serte honesta me cae muy bien, he hablado con ella prácticamente todo el día.

-sabes que esto va más allá de todo, creo que tengo que irme.

Marie: no te enojes, sé que no te agrada no tener la razón, y menos que hagan actúen por ti, pero hay cosas que no deberían dejarse pasar, es tu hermana, ustedes no tienen la  culpa de lo que hubiera pasado entre sus familias.

-opinas mucho de algo que no entiendes.

Marie: como entenderlo, si no hablas de ello, ni tus amigas conocen muy bien lo que sucedió en tu pasado, entiendo que no lo quieras decir, pero al menos no te cierres a la idea de poder cambiar las cosas.

-gracias por la bebida_ camine hacia la puerta sin mirar hacia atrás.

Trataba de ser consecuente y mientras daba vuelta en mi cama recordé algunas anécdotas que me contaba mi tía, me parecía tanto a ella en todo aspecto mi forma tan lógica de ver las cosas lo difícil que se me hacía entender al resto, pero para ella fue algo más sencillo ya que contó con la ayuda de mi madre, que no solo fue su defensora y amiga si no que le explicaba las cosas tan sencillas que ella podía entenderle, sabía que podía contar con una hermana que ese sentimiento era único, algo que yo no sabía, volví a ver entre mis pensamientos el rostro de Kara cuando se fue, talvez ahora con lo que dijo Marie me sentía algo culpable, en ese momento mis ojos comenzó a cerrarse jamás me quedaba despierta hasta tan tarde a no ser que había descansado en la tarde, me desperté exaltada por el timbre de mi despertador, camine hacia la ducha y luego de un baño me sentí mejor no sabía muy bien si ir a la cafetería, pero si no lo hacía me sentiría rara, mientras caminaba pase de largo, apenas di dos pasos y regrese, aunque era inevitable mi encuentro con Marie, debía de afrontarlo y más porque las cosas ya no estaban como ayer.

Alexa: Justo a tiempo, Alba es verdad que el fin de semana aceptaste ir con nosotras al paintball?.

-di mi palabra y eso are.

Raúl: eso es increíble, estoy entusiasmado no puedo esperar el fin de semana.

-pediré mi café para llevar, tengo muchas cosas que hacer, si me disculpan.

Me acerque a caja hable con Margarita la muchacha que siempre nos atendía, al regresar a la mesa para despedirme del todo, Marie se paró y dijo que me acompañaría que igual tenía que pasar por esa calle, no pude decirle que no, todo el camino estuvimos en silencio, fue al llegar a la puerta donde mi miro, metió la mano a su bolsillo y saco un papel.

Marie: ten aquí está la hora y el lugar donde estará Kara esperándote, en verdad deseo que vayas_ se dio la media vuelta y la vi desaparecer entre la calle.

Todo lo que restaba del trabajo me la paraba viendo el papel, al final termine cambiada parada frente la pastelería viéndola atreves de la luna, mientras movía una cuchara en una taza de té, Kara parecía nerviosa, pase lentamente, ella alzo la vista se paró tan pronto me vio.

-puedo sentarme.

Kara: por favor.

-solo quisiera decir que…

Kara: perdón si  involucre a Marie en esto, ella no tiene la culpa yo insistí en poder hablar contigo, bueno ella es espectacular, según se no te gusta que hagan las cosas sin tu consentimiento, y yo…

-siempre sueles hablar tanto?.

Kara: en realidad…

-cuando estas nerviosa.

Kara: sí.

-solo quiero decir que ella en parte tiene razón, no me tome el tiempo de tratarte y compararte con tu familia no fue lo correcto, aparte la última vez que nos vimos no actué muy gentil por decirlo así, y quisiera disculparme por eso.

Kara: wooo… yo solo quería saber cómo era tener una hermana.

-francamente no sé cómo actúan las hermanas, pero quiero tratar, al final de repente valdrá la pena.

Kara sonrió de oreja a oreja, comenzamos a platicar primero de aspecto de los más comunes, supe que estudiaba literatura, amaba leer y también escribir, era muy dulce y sencilla su crianza estuvo a cargo de su abuela, ya entendía porque era distinta a su hermano a diferencia de el que fue criado por la familia de su madre, no me di cuenta como paso el tiempo si no fuera por la dueña del establecimiento que nos dijo que cerraría no me da daba por enterada, salimos y paseamos por varios lugares, me ofrecí para llevarla a su casa, y como la vi dudar tanto y lo lejos que se encontraba, le dije que se quedara en mi departamento, nos pasamos platicando casi toda la noche, para mi sorpresa no me daba sueño, ella era la que más hablaba entonces entendí a lo que se refería mi tía, a una conexión que era difícil de explicar, cuando amaneció, tuvo mucha curiosidad de conocer a mis amigas, no veía porque no hacerlo, al principio todas no entendían de donde apareció algún familiar mío aparte de mi tía, después de un rato ya bromeaban de que no se parecía a mí y que eso era bueno, Marie era la más asombrada, Raúl termino por invitarla a los juegos el fin de semana ella acepto encantada, mientras hablaban, aproveche para hablar a solas con Marie.

-esto es difícil para mí, pero tenías razón valió la pena, y quería pedirte disculpas por cómo me comporte contigo.

Marie: tranquila, estas dejando de la lado lo que crees que eres, para dejar a la luz tú verdadero yo.

-no, simplemente se aceptar mis errores.

Marie: eso también, ya veremos luego.

Apenas sonrió, vi cómo se cerraban sus ojos y se formaba un hoyuelo en su mejilla, no pude dejar de mirarla, recogió un poco de su cabello para ponerlo detrás de su oreja para mirar hacia la mesa, donde las chicas reían sin parar, voltio a verme.

Marie: pasa algo?.

-eres hermosa.

Marie: cómo?_ fue apenas un susurro lo que dije, y tuve pánico de que me hubiera escuchado, me miro con ternura.

-ahhh… nada, que… pues… mejor vamos a la mesa_ voltee torpemente golpeando a la joven que traía los cafés para la mesa, al final, pague la cuenta, y acompañe a Kara a tomar una movilidad, esperando ese fin de semana donde, sin que lo sepa las cosas empezarían a cambiar si no lo estaban haciendo ahora.