Pagafantas: comprando condones
Nuestro amigo ha conseguido una cita ¡una que esta dispuesta a acostarse con el! Pero el tiene que comprar los condones.
Nuestro heroe entra en la farmacia y compra todos los tipos de preservativos que hay en la farmacia.
Cuando llegan a la casa del pagafantas, ella dice que no se fia de esos condones y le propone probar su “eficacia”
Ella coge su movil y llama a todos sus exnovios los cuales, se ofrecen a “garantizar” la seguridad del producto.
Los exnovios son tios de dos metros musculosos y guapos con vientres de tabletas de chocolate y sin ni un euro en sus bolsillos (curiosamente todo lo contrario de nuestro heroe)
Ellos se meten en el dormitorio y tastan con la chica los condones, su colocacion, su resistencia a los dientes femeninos, su resistencia al bombeo y la capacidad de llenado del profilactico.
Nuestro heroe, no solo debe soportar ver como esos dioses se follan a su chica, sino que por peticion de ella debe llevarles algo de picar y de beber (preferiblemente whisky escoces de 30 años)
Cuando ellos se van, le dicen que los condones han pasado la prueba.
Nuestro heroe entra en la habitacion, ella está desnuda y animosa, diciendole.
-Ponte un preservativo y follame.
-no quedan ¡se los han gastado todos!
-uy, pues, para otro dia – dice la chica vistiendose y dandole un beso en la frente de nuestro heroe, el cual, tiene una habitacion llena de condones llenos de leche de macho que limpiar.
¡manten la dignidad! Pagafantas ¡tu momento llegará!
Pagafantas: romance en el cine
Nuestro heroe coge de la mano a una chica para llevarla al cine, una de esas peliculas aburridas y largas (5 horas) cuando se sientan, la chica le susurra que va por palomitas y si podria darle dinero para comprarlas mientras el protege sus asientos predilectos
El le dá 30 euros, pero ella le pide quinientos, el le pregunta por que, pero ella apoya sus pechos en la nariz de nuestro heroe para convencerlo.
Cuando ella se vá, sale del cine y coge alcohol para desinfectar la mano y los pechos que entraron en contacto con nuestro heroe, llama a su novio y se van a un restaurante, allí piden bogabante, caviar, champagne y despues de van a un hotel y hacen el amor con ganas, cuando terminan, ella vuelve al cine y se encuentra a nuestro heroe dormido porque la pelicula es soporifera.
Ella lo despierta aplaudiendo y se enfada con el por haberse quedado dormido y que no le perdonara hasta que le compre un collar de diamantes.
¡manten la dignidad! Pagafantas ¡tu momento llegará!
Pagafantas: la noche bajo las estrellas
Nuestro heroe ayuda a una amiga a cargar las veinte toneladas de equipamiento de montaña, escalando los enpinados montes solo para ver el culo de su amiga, que sin querer desprende una roca que impacta sobre la boca de nuestro heroe, da igual, dicen que los dientes dificultan los besos en la boca.
Al llegar a la cima, nuestro heroe se ofrece a hacer la tienda de campaña mientras su amiga descansa sobre la hierba, tras cuatro horas de titanicos esfuerzos consigue levantar la tienda, es en ese momento su amiga le propone dormir fuera, bajo las estrellas.
La cara de nuestro heroe es para retratarlo.
Bajo las estrellas, ella duerme mientras que el está despierto, siente los pechos de su amiga que duerme abrazada a el, como si fuera un osito de peluche, mientras en los pantalones del heroe se levanta una tienda de campaña, el suave tacto de la piel de su amiga, su olor de mujer, mantienen a nuestro heroe despierto como la luz del dia.
Una idea se le acaba de pasar a nuestro heroe, es sucia, indigna y haria que su madre lo castigase a un mes sin postre, coge la mano de su amiga y la dirige a su miembre levantado, en ese momento, su amiga, medioadormilada se despierta y grita.
-¡IIIIIIIIIIIIIIHHHHHHHHH! ¡UN BICHOOOOOOOO!
Entonces con su bota de clavos pisa furiosamente la entrepierna de nuestro heroe gritando de asco mientras nuestro heroe sufre un tormento peor quel el que le provocaron a Rambo en vietnam, cuando termina el histerismo de la chica, no le da importancia al sufrimiento de nuestro heroe y va a la tienda de campaña, sin invitarle a entrar ni nada.
¡manten la dignidad! Pagafantas ¡tu momento llegará!