El sonido del tintineo de la campana me despertó, mierda, tenia que ir si o si, me arregle lo mas rapido que pude y bajé hasta el comedor donde me esperaba esa diablesa.

-esclavo, quiero tostadas con mermelada para el desayuno y zumo de naranja – dijo Rocio.

-si, ama - ¿Qué querian? O eso o ser la putita de un preso.

Preparé el desayuno lo mejor que pude y se lo traje en bandeja.

-mientras desayuno, limpiame la concha, con la lengua.

-si ama.

Me metí bajo la mesa y vi que ella me esperaba, llevaba la falda de su instituto subida y las bragas bajadas, empecé a lamerla con ganas, la verdad es que su delicioso olor me embriagraba, mi lengua recorria su interior, mordisqueaba su clitoris hasta que ella acabó en mi boca.

-muy bien esclavo, haz las tareas del hogar mientras voy al colegio, que esté todo reluciente.

-si ama – respondí.

En cuanto ella se fue,descargue mi frustracion.

-que esté todo reluciente, como mi chochete, jodida guarra.

Hice las tareas domesticas, en cuanto llegué a la habitacion de Roció pensé ¿podria borrar los archivos esos?.

Miré en el ordenador, pero estaba protegido por una contraseña, intenté entrar con varias claves, ninguna valida, distraidamente vi la jaula de la araña de los cojones y …¡BINGO!

LINDA

Solté un aullido de alegria, tengo acceso y encontré el puto video, borrando, si, si ¡SI! apagué el ordenador y me fui a ver la tele.

Cuando Rocio llegó, me dijo bruscamente.

-¡hoy he tenido un mal dia! Esclavo, hazme un masaje.

-que te jodan – le respondí.

Roció me miró sorprendida.

-perdona, ¿Qué has dicho?

-que te jo-dan – eso dije.

-veo que quieres ir a las duchas de la prision ¿no? – preguntó.

-lo dudo, he borrado el archivo de tu ordenador, ahora vas a ser una niña buena ¿capischi?

Rocio sacó un USB y mi cara era la imagen del conejito asustado, lo puso en el video y me mostró las imágenes de su violacion.

-dije, copias, no copia ¿Cuántas copias tendria? ¿en la escuela? ¿enterradas? ¿en un buzon? A ver, esclavito, eres mio, meperteneces, eres de moi ¿capischi?.

Agaché la cabeza sumiso, puta.

-ya no me apetece ese masaje, me apetece un poco de hipica, desnudate y espera aquí.

Ella subió a su habitacion mientras yo me desnudaba con pocas ganas y bajó con un traje de equitacion, con espuelas.

-a cuatro patas esclavo.

Obedeci, me puso una pera en la boca atada a unas correas y elegantemente me montó.

-arre

Empecé a gatear sintiendo el peso de Rocio sobre mi, la cual me golpeaba con su fusta en mis nalgas, notaba que se me abrian heridas en mi culo, pero lo peor eran las putas espuelas en mi cadera.

-¡más rapido montura! ¡quiero notar el viento en mi cara!

Gateé lo mas rapido que podia, hasta que caí agotado.

-esclavo, ven a mi baño.

-si, ama –dije.

Al llegar al cuarto de baño, ella me ordenó que la desnudara, le desabroché la camisa, boton a boton, no podia apartar la vista de su escote, pero al ver su cara, veia que sonreia maliciosamente.

Su camisa cayó suavente, al igual que su chaleco.

Lo que costaba era quitarle las botas de montar, pero descubrian unos pies suaves y hermosos de largas uñas.

Desabroché el cierre de sus pantalones y los bajé.

-despacio esclavo.

Se los bajé lentamente mientras ella me acariciaba la cara con la fusta, podia ver sus bragas de Hello Kitty, poco apropiadas para una diablesa como ella.

Luego le abri el cierre de su sosten, descubriendo sus hermosos pechos, luego le bajé las bragas despacio.

Ella se metió en la bañera y me hizo meterme con ella.

-limpiame esclavo.

Cogi una esponja y se la pasé por su hermosa piel aterciopelada y nacarada, su suavidad me ponia, ella notaba la ereccion apuntando a su concha, lejos de enfadarse, acariciaba mi verga con sus muslos mientras yo pasaba la esponja por sus pechos.

-veo que estas caliente, esclavo, te dare una buena noticia, podras vaciar tus huevos.

Rocio se giró y me susurró al oido.

-La profe de educacion fisica me confiscó el movil solo por hablar en clase, esa malfollada necesita que la pongan en su sitio, ve a su casa y violala hasta que tenga un retoño, vive sola, quiero que ella te sienta toda la noche.

Por la noche.

Debo de estar como una cabra, vestido de negro, con un pasamontañas, entrando en una propiedad privada para… para…¡cielos!

La profe vivia sola, en una casa aislada de la ciudad, abrí la puerta con la copia que me dio Rocio.

La casa era bonita, la habitacion principal era el gimnasio (¿Qué esperaban de una que daba educacion fisica?) pero la chica no estaba, según Rocio ahora estaba haciendo unos kilometros de bicicleta.

Lo que me dio tiempo a acceder a su ordenador e ir a una pagina web hecha por Rocio, el ordenador estaba en el dormitorio y apunté la camara web a la cama, apagué el monitor y recibí la llamada de Rocio por el pinganillo de mi oreja.

-bien hecho esclavo, tengo buena imagen, ahora ve por su cena.

La cena de la profe esa, una manzana roja, cogí una jeringa y le inyecté lo que habia, no sabia lo que era, pero mejor que no lo sepa.

Oí a la profe llegar, ella era rubia, de largos cabellos lisos, posiblemente de ascendencia alemana, bastante joven, creo que unos 24 años, tenia poco pecho pero tambien tenia unas hermosas caderas.

Desde el armario donde me oculté, vi que era muy elastica, hacia unos ejercicios de gimnasta muy sugerentes.

Cuando terminó sus ejercicios, fue y devoró la manzana y se dirigió a la ducha.

Cuando oí un golpe, salí del armario, vi a la profe casi sin fuerzas y la cogí.

-¿qu-quien es usted? ¿Qué me pasa? – me preguntaba la profesora.

La puse en la cama, ella estaba desnuda, totamente depilada, indefensa.

La besé en el cuello, en los pechos, en el ombligo mientras mis manos acariciaban su concha y sus piernas.

-por favor, dejeme, tengo unos ahorros, lleveselos, por favor, no me haga esto – decia la profe

Mis labios acariciaban cada centimetro de su piel, besaron sus indefensos labios y mis manos agarraron sus nalgas, durante media hora estuve profanando su cuerpo con mis labios y manos, ahora a acatar las ordenes de Rocio.

Me desabroché los pantalones.

-n-no, por favor – me suplicó ella debilmente.

Pero yo, despacio, como me ordenó Roció, acaricié su concha con la punta de mi pija y de un golpe se la metí.

-nooooo – dijo la profe llorando mientras estaba bajo el efecto de la droga, me moví despació, sintiendo su concha aún seca.

La profesora no decia nada, no hacia falta, unas lagrimas brotaron de sus ojos celestes, poco a poco aumentaban mis envestidas, ella ya empezaba a lubricar, pero eso solo significaba que su cuerpo la traicionaba.

Mis embestidas aumentaron y terminé dentro de ella, la profe rompió a llorar mientras yo me vaciaba en su utero, manteniendome dentro como me ordenó Rocio.

Al separarme, agarré la profesora y mostré su coño chorreando de semen a la cam.

-bien hecho esclavo, he llamado a mis compañeros de clase y están todos conectados a la pagina, me han pedido que le hagas a la profesora lo siguiente – dijo Rocio por el pinganillo.

sugerencias, por favor