miprimita.com

Relatos de Mita (III)

en Grandes Series

Relatos de Mita, III

Tercera parte:

 

From: azul52[SMPT:...@uol.com.ar]

Sent: Mon, 12 oct. ... 09:24:47

To: .....@malimail.com

Subjet: TENGO....

Tengo celos de esas piernas que acariciaste en el cine, tengo celos de las tetas que tus manos ansiosas recorrieron en la oscuridad, tengo celos de la mano que agarró a vergi hasta hacerlo escupir su ofrenda, tengo celos de esa boca que tus labios besaron, tengo celos de esa raja caliente y viscosa que tus dedos recorrieron. Me haces sufrir ...., no me cuentes esa cosas, por favor no lo hagas más, yo comprendo que tengas sexo, que tengas que ir con alguna mujer a descargar tus ansias de sexo, tus ganas de macho. Eres malo, me haces daño, no sabes cuanto... Por lo que me cuentas a esa mujer ya la conoces de hace tiempo, sólo espero que no sea alguna de tus asistentes, esas chicas que a veces me contestan cuando te llamo al trabajo, tengo celos de ellas también, me imagino que con alguna de ellas te habrás acostado, no lo se, pero tengo celos.

Pese a mi enojo te comprendo papaíto, he aprendido a conocerte, se perfectamente que eres un hombre muy apasionado, muy experimentado, que necesita estar con una mujer, a propósito me haz platicado de algunas de tus aventuras, eres tremendo!, no se cómo eres capaz de todas esas locuras, pero te conozco, a pesar de no estar juntos sé cómo sientes y de lo que eres capaz de provocar en una mujer. Hasta en mi haz despertado cosas prohibidas.

Te cuento. Hace días, hará unos dos o tres, cuando estaba en .... viendo las causas encomendadas, estaba esperando recibir copias de algunos documentos y vi a un hombre, casi podría jurar que eras vos!, igualito que en la foto que tengo junto a mi cama, tan varonil, tan bien vestido, tan hermoso!, ay papaíto!, sentí que las piernas se me doblaban pensando que el cielo me había hecho el milagro de traerte a mi lado. Era tal mi turbación que no escuché mi nombre cuando el encargado me llamaba para entregarme las copias certificadas, lo juro. Ese hombre seguía ahí, esperando, creo que se percató de mis insistentes miradas porque me dio la espalda. Como pude salí de ese lugar y al bajar las escaleras me acordé de ti y al instante sentí mi cosita mojada y caliente, sería que al bajar las escaleras frotaba mis muslos o sería que de repente sentí ganas de ti, como haya sido no pude más.

De forma providencial encontré el sanitario, entré con la intención de refrescarme un poco, pero lo que hice fue meterme a un privado, no tenía ganas de pis, pero trataba de refugiarme un poco, estar a solas y pensar en vos. Me bajé el calzoncito y al tocarme puchis con la mano la saqué mojada, viscosa y oliendo a sexo, ay cielito azul!!!!, que locura. Me lo hice ahí mismo, si cariñito lindo, me di dedo en ese lugar, acallando mis gemidos abrí las piernas para buscar con mi manita derecha el botoncito, lo encontré duro, excitado. Hice circulitos con un dedo sobre él y al momento me llegó el orgasmo, pero fue tan rico y excitante que tuve que morderme los labios para no gritar. Minutos después, cuando estaba lavándome las manos para quitarme el olor a sexo entraron dos mujeres, una de ellas al momento dijo ´oye que aquí huele a pucha´, al momento ambas rieron, yo por supuesto salí casí corriendo sin voltear a verlas. Bueno bebé, luego te escribo más, besitos en ya sabes dónde, Azul, celosa!

 

---

Fecha: ..., oct 19 ...., 10:23:41

Desde: ...@elsitio.net

Para: ....@latingüey.com

Asunto: Azul angustiada

Hace varios días que Azul no puede dormir, pasa las noches casi en vela, la ausencia de ..., el no poder escuchar su voz la tiene mal, su habilidad para transportarla a maravillosos mundos, ama esos juegos nocturnos, cómo añora Azul todo eso, ama esa voz que la sedujo desde el primer momento, ama esos juegos nocturnos que se entretejian entre ambos...., Azul quiere besar y lamer suavemente esos labios, jugar con su lengua, besar su mentón, bajar con su lengua por el cuello, seguir más abajo hasta los vellitos de su pecho, llegar a su ingle, lamerlo hasta escucharlo gemir, acariciar a vergi, desnudarla, dejar a la luz su piel eterciopelada y besar la pelada cabecita, jugar con sus dos compañeras de viaje, amasarlas con sus manos, ponerlas gorditas.

Azul quiere recostarse en su cama desnuda, toda perfumada, bajar su cabeza hasta colocarla en su vientre y mirar esa carne erecta, Azul quiere llevar su mano a esa carne dura y rodearla delicadamente con su mano, formar con sus dedos un delicado anillo sobre el tronco y subir y bajar lentamente, Azul quiere descubrir la cabecita trémula y mirar con ojos ansiosos como la puntita se moja, mira que con cada vaivén la cabecita queda pelada y Azul inconcientemente abre sus labios ansiosa de que el chorro de lechita salga impetuosa y atraparla con sus labios.

Azul quiere acostarse boca abajo en la cama y que la lengua de ... cuente cada una de las vertebras de su espalda, quiere que la lengua golosa suba y baje hasta el nacimiento de sus glúteos, Azul quiere que esa boca bese y muerda sus nalgas, que esas manos acaricien suavemente sus carnes, que abran los firmes promontorios y la lengua juguetona inspeccione sus cavidades, Azul quiere que ... con su lengua entre donde nadie nunca entró, quiere que sepa que ahí nadie llegó, que sensaciones maravillosas siente al sentir la filosa lengua jugando con su apretado conducto, Azul siente que aquello apretado se abre, se distiende a cada lengüetazo, provocando oleadas de placer que se expanden hasta la punta de sus pies, hasta que a punto de explotar le suplica que ... la penetre con vergi, que entre despacio, suavemente, hasta instalarse en lo más profundo de Azul y entonces moverse como él sólo sabe hacerlo..... Te deseo, Azul.

 

---

 

Fecha: ..., oct 27 ...., 11:54:20

Desde: echarry..@elsitio.net

Para: ....@latingüey.com

Asunto: RESPUESTA A CÓMO SERÁ

Tengo un espejo de aumento en casa. Esta noche luego de leer nuevamente su escrito voy a, por fin, saber bien como es mi ...., y mañana cuando venga a trabajar te la describo en detalle mi cielo querido. Me enloqueció la foto en la que vergi ha entrado un poco, toda húmeda, me la enviaste recién, me parece que somos vos y yo, de ver aquello siento que mi cuerpo tiembla, no acabo de entender como vergi pueda entrar en mi chiquito, como vos le dices, en mi colita, digo yo, te necesito mi cielo. Azul

 

---

 

Fecha: ..., oct 28 ...., 14:03:51

Desde: ...@elsitio.net

Para: ....@latingüey.com

Asunto: ¿¿¿¿¿ASÍ????

¿Así, mi amor?, ¿querés que sea tuya?

Quiero ponerme así, con las nalgas paradas y que vos, desde atrás penetres a puchis, lo quiero todo dentro, hasta sentir en la entrada las bolitas, y que vayas hasta el final, saques vergi y vuelvas a sumergirlo en mi, todo!, hasta que sientas como puchis te succiona, te aprieta, está hambrienta de tu elixir de amor..., y sigas, sigas..., moviendote.

Si vos te fijas amorcito, en la foto a la chica se le nota esa carnocidad entre su puchis, los labios internos expuestos, partiendo en dos la raja de su pucha. Ya en otros mails te expliqué que puchis no es así, mis labios internos no sobresalen de mi rajita, pero ahí están, y cuando estoy excitada, como cuando me llamas por teléfono y lo hacemos, entonces toda la pucha se distiende, abro mi raja y puedo extender los labiecitos, suaves, delicados, mojados de mis jugos, pero como te digo normalmente mis labios menores se esconden dentro de puchis, no como en la foto que enviaste, en este caso hasta me parecen feos, esa carne tan grande y gruesa!!!, yo siempre creí que lo normal era una puchis como la mía, pero se desde hace tiempo que también se dan casos en que las puchis pueden ser así como la de la chica de la foto, no se si se tratará de experiencia sexual o no, pero creo que eso corresponde a cada chica, como ocurre con los hombres, tú sabes, y yo también, que los hay con pingas grandes y gruesas, y otros con eso muy chiquito, a mi me gustas tú cielito azul!, me encantó tu pija!, aunque sólo la conozca por foto –espero me cumplas y la conozca en vivo y a todo color.

Te cuento. Como recordarás te dije que con frecuencia voy al gimnasio para mantenerme en forma y no subir de peso, en ese lugar hay regaderas para que las mujeres se duchen luego de los ejercicios, yo casi nunca las utilizó, me apena que me vean desnuda, así sean mujeres, pero de vez en cuando, cuando sudo en exceso si lo hago. Ahí he visto de reojo a chicas, maduras y jóvenes, desnudas. Muchas de ellas con la puchis depilada, o bien mujeres maduras con algo de panza con toda su pelambrera expuesta, pero en ocasiones he podido ver que sus puchis son casi como la mía, apenas se les veía la rajita. Pero una ocasión miré sin querer a una chica joven, tendría por ahí de 20 años, muy guapa y con buen cuerpo, y lo que me sorprendió fue ver su depilado monte de venus y sobre todo ví que sí tenía por fuera de la raja esa carne exageradamente crecida!, los labios menores estaban muy crecidos, gruesos y colgantes, me sorprendió aquello.

Bueno corazón azul, espero que la foto te guste, pues así quiero ser tuya, así quiero que me penetre vergi, besitos a mi rey. Azul

Nota: este mensaje contiene un archivo adjunto HTML, un código HTML puede potencialmente contener scrips malignos, usted lo abre bajo su propio riesgo, (anexo –image/jpeg)

El mail adjunta una fotografía de sexo explícito, vaginal, (nota del autor).

----

 

Fecha: , oct 26 ...., 10:23:41

Desde: azul50(...@elsitio.net)

Para: ....@latingüey.com

Asunto: TE...

TE QUIERO VERGI!!!!!, Azul quiere leche...

Un dulce sueño interrumpe el descanso de Azul, me descubro tendida ante ti, ... acostado sobre mi cama. Azul igual, con la cara hacia vergi, tendida al lado de su amor, con su mano acaricia gustosa y excitada la protuberancia erecta. De forma lenta mira casi junto a sus ojos como su manita sube y baja, empuña el tronco carnoso y erecto de ..., ansía esa carne en su boca e inconciente la abre esperando el chorro de semen de ...., Azul siente que su cuerpo está caliente y sus piernas abiertas tratan de atrapar las de su amor azul. Lo siente tranquilo, dejándose acariciar, como un prisionero amoroso, que sumisamente deja que su ama lo haga suya.

La mano de azulita sube y baja, su mirada ansiosa se percata de la húmeda gota que asoma por la punta y quiere lamerla con lengua atrevida, pero ... no se deja, quiere que Azul siga con sus juegos, ella sabe que luego vendrá lo mejor, .... no dejará escapar una gota de leche. Se la dará plena, en la pucha caliente y viscosa, olorosa. Azul pide "dame leche papaíto", ... se hace del rogar, hace sufrir a su esclava, ella sigue con lo mismo, acariciando el grueso palo, duro, firme, grande, como le gustan a Azul, hasta que por fin ... le pregunta: "¿quieres leche?", un instante después el rostro de Azul recibe chorros impetuosos que empapan su ojos, sus mejillas, su boca, su nariz, su frente, el pelo lácio que peina su frente. Luego la lechosa sustancia resbala por su rostro, Azul siente en los ojos los chorros espesos que impiden su visión mientras su manita sigue su impetuoso moviento en el grueso mastil, hasta que la siente floja, que pierde fuerza y dureza..., "ay .... dámela, sigue, como tú sabes cielo querido mio".

Querido mío quiero que tu leche bañe mi rostro como la chica de la foto, espero te excite.

Nota: este mensaje contiene un archivo adjunto HTML, un código HTML puede potencialmente contener scrips malignos, usted lo abre bajo su propio riesgo, (anexo –image/jpeg)

El mail adjunta una fotografía de sexo explícito, oral, la mujer de la foto recibe en el rostro la corrida, (nota del autor).

 

----

 

 

Fecha: ..., oct 29 ...., 16:43:51

Desde: azul52(...@elsitio.net)

Para: ....@latingüey.com

Asunto: TE...

"Te cuento que ayer fui al ginecólogo. Como cada año, me resisto, pero al final tengo que aceptar y acudir a la clínica, es la misma de siempre, pero ahora fue diferente, al menos en algunas cosas. Por principio no estaba disponible el médico que me atiende siempre, es un doctor ya entrado en años, él me conoce de siempre, tuve que aceptar que me atendiera otro doctor, un médico joven, me sentí apenada, pero al final tuve que desnudarme, ponerme la batita y subirme a la mesa, ese médico me hizo el tacto, la revisión de rigor, yo estaba muy nerviosa, siempre me pasa, me apena que alguien me vea en ese lugar tan íntimo, pero nunca ha habido problema.

"Fíjate que cuando el médico metió uno de sus dedos en puchis para revisarme, al sacarlo, la cuevita hizo como "plop", así como si se hubiera cerrado de pronto. El médico me comentó, "que bien que está su vagina, todo está muy bien", me preguntó si tenía relaciones con frecuencia, me dio pena confesarle que algunas veces, insistió en que cuantas en un promedio a la semana, le dije que no, que la verdad yo casi no, el dijo "si, se nota, su vagina está muy... apretada", luego tomó la muestra para el papanicolau y me molestó un poco el aparato que usan. También me checó las tetas, repasó sus dedos sobre ellas y tuve que confesarte que las puntitas se endurecieron al tacto, creo que el percibió aquello, junto con mi turbación y preguntó "¿hace cuánto que no lo hace?, ¿algunas semanas?", como pude le di a entender que si, entonces me preguntó que si me masturbaba, apenas asentí, él sonrió y me dijo "pues ande, consigase un novio!", yo estaba roja de pena.

"Ya cuando iba para mi casa, pensé en ti, en cómo será cuando nos conozcamos, que me abras de piernas y seas tú mi ginecólogo, que veas mis más íntimos secretos, la rajita de puchis, que abras mis labios secretos y pases tus dedos entre ellos, que tu lengua busque mi botoncito del amor, y lamas y lamas, succiones toda la pucha abierta, que escurre sus jugos y huele rico, a sexo, a hembra en celo, luego que metas tus dedos y explores mi interior, que sientas como puchis te succiona, te quiere adentro y me lleves al cielo una y otra vez hasta que te implore que metas a vergi dentro mío, para hacerme gozar, mucho, de manera interminable. Todos esos pensamientos hicieron que llegara a casa caliente, mojada de la cosita, te juro que tenía las pantys húmedas y oliendo a sexo, mucho olor, no tuve más remedio que sentarme en la sala y meterme el dedo haciendo un lado el calzón, de inmediato tuve un orgasmo tumultuoso.

"Besitos mi cielo azul, ya sabes..., quiero eso.

 

Fin de la tercera parte.

 

Comentarios:

micifuz6@yahoo.com.mx

micifuz66@starmedia.com

Mas de Micifuz6

Una prima un poco puta...

Renta congelada

Los pelos de la tía Celia

Memorias del Martí (4)

Laura por detrás (2)

La casa de los suspiros (1)

Hijo querido (10)

Las tetas de Paola

Manualidades (2)

Madre consentidora (4)

Memorias del Martí (3)

Hijo querido (9)

Cuidando a la tía Chofi, 2

Cuidando a la tía Chofi

Una tarde desolada y lluviosa

Hijo querido (8)

Recuerdos del barrio (13)

Hijo querido (7)

Novia recatada o casi

Recuerdos del barrio (12)

Hijo querido (6)

Los empeños de Griselda (1)

Recuerdos del barrio (11)

Todo... a un precio o nalgas a plazos

Curiosidad científica

Laura por detrás

La Chiquis y su tío

Hijo querido (5)

Recuerdos del barrio. Décima Entrega

Recuerdos del barrio. Novena Entrega

Una experiencia zoofílica

Recuerdos del barrio. Novena Entrega

Hijo querido (4)

Hijo querido (3)

Recuerdos del barrio. Octava Entrega

Recuerdos del barrio. Séptima Entrega

Recuerdos del barrio. Sexta Entrega

Recuerdos del barrio. Quinta Entrega

Hijo querido (2)

Recuerdos del barrio. Cuarta Entrega

Recuerdos del barrio. Tercera Entrega

Recuerdos del barrio. Segunda Entrega

Recuerdos del barrio. Primera Entrega

Hijo querido

Y a tu mamá... también

Mara o Rosita

Memorias del Martí (2)

La vecina

Jenny

Perrito

Memorias del Martí (1)

El brujo

Mirando la tele con papá

Una noche con papá

Nadie se debe enterar

El chiquito de Carmen

La Venganza

Secretaria eficiente

Anny, la mamadora

Manualidades

Reencuentro con Ana

Tina

La mamadora

Ana, la mamadora

Confesiones (10)

Mi sobrino me ama

La aventura de Carmen

Paola y su mamá

Ofelia o Señora con bebé

Confesiones (09)

Mariana

La mamá de Benito

Esther, la benefactora

Confesiones (8)

Esther, los inicios

Confesiones (7)

Confesiones (6)

Confesiones

Marlene

La Cajera

Ahí te encargo a la comadre

Sexo con mi ex mujer

Ofelia

La turista (2)

Mi tía favorita (04)

Lucero

Trini (1)

Alicia

Atrapada

Isabel

La tía Bety

Mi tía favorita (03)

Mi tía favorita (02)

Madre consentidora (III)

Chico malo

Lolita

La Nana Francisca

Relatos de Mita (IV)

Relatos de Mita (II)

Relatos de Mita (I: Inicio de serie)

El difunto Evodio

Cristina

Leonor

La turista

Susana

Rebeca, la tetona

En el cine

Amanda, adicta al sexo

Karina

Lucero y Toby

Admirador secreto

Madre consentidora (II)

Madre consentidora (I)

La suegra

Juanita

Amante furtivo

Amada

La maestra Chayo

Lanita (I)

Peluquero

Mi tía favorita (01)

El chantaje

Eva y los hombres

Trio