SOMBRAS DEL PASADO
5. PROMESAS QUE CUMPLIR
Un par de semanas después de que Sofía se quedara en mi casa conmigo temporalmente me llamaron de Japón por un problema en la sede central de una de las corporaciones, además que por lo que me comentaron podía ser grave, así que al día siguiente salía para Tokio vía Moscú.
Ni os digo la sorpresa que se llevo Sofía cuando se entero de mi viaje. De hecho se entero porque al entrar de regreso de trabajar me pillo hablando por teléfono en Japonés y claro… la curiosidad. Por esto del viaje tuvimos el primer conato de bronca o más bien de que la pusiera de patitas en la calle… cuando la dije que al día siguiente salía para Japón me empezó a preguntar por estas prisas en tono de interrogatorio y estuvo a punto de liarse, menos mal que se dio cuenta de mi mirada a tiempo…
- Sofía: Perdona por la pregunta, no tengo derecho a ello…
- Yo: Bien, me alegro de que te hayas dado cuenta tú solita, espero que no se te vuelva a olvidar otra vez ese pequeño detalle…
Vi que se quedaba un poco bastante aplanada y tampoco me pareció plan portarme así con ella, sobre todo hacérselo pasar mal después de lo que le había pasado, supongo que me recordó a mi mismo en cierta forma… Me conforme con haberla dejado las cosas claras, aunque de todas formas tendría que explicarle algunas cosas ya que me esperaba que tardaría bastante en volver, mínimo una semana.
- Yo: Mira Sofía, si quieres saber algo pregunta, si puedo te la contestare sin mentiras, no tengo nada que esconder, pero no me interrogues… ¿vale?, me sienta muy mal…
- Sofía: Si, vale.
- Yo: Veras tengo servicio de exclusividad en proporcionar determinados servicios de apoyo y mantenimiento para sus sistemas de operaciones a una serie de corporaciones internacionales Japonesas, cobro muchísimo dinero por esta causa, pero a cambio de ello me pueden pasar estas cosas, en 24h puedo como ahora verme obligado a coger un avión para el Japón o para cualquier punto del planeta donde una de estas corporaciones me necesite, no es lo normal pero puede pasar como estás viendo en esta ocasión.
- Sofía: Tan bueno eres como para que vengan hasta aquí para contratarte… supongo que allí también habrá gente muy buena…
- Yo: Es el mismo trabajo y para las mismas empresas que realizaba cuando estaba viviendo en Japón, y sin falsa modestia, si, como te puedes imaginar si soy bueno en mi trabajo, de hecho y ya que te he dicho que te diría la verdad, soy uno de los mejores del mundo en esto.
No me costó nada interpretar la mirada de Sofía, por un lado le había parecido una fantasmada pero por otro lo de que tuviera que hacer esos viajes hasta un sitio tan lejano como Japón… como mínimo se sentía confusa y desconcertada con todo esto. Eso sin contar que de repente la persona humilde y sencilla que conocía, que no hacia alardes nunca de nada le acababa de soltar que era en su trabajo de los mejores del mundo… no del país, no, del mundo… podéis imaginar lo que pensaríais cada uno si os sueltan algo así y completamente en serio.
- Sofía: ¿Cuando regresaras de Japón?
- Yo: Depende de lo que pase y de lo que sea el problema, hasta que no esté solucionado no puedo volverme, pero por lo que me han explicado calcúlale al menos diez días, sino más.
- Sofía: Te llamare para ve que tal estas…
- Yo: Olvídate de eso, ya llamare yo cuando regrese…
- Sofía: En serio no me importa, tampoco me saldrá tan caro…
- Yo: Sofía, cuando estoy trabajando desconecto el móvil, de hecho no se pueden pasar a donde voy a estar, y si soy el mejor es porque soluciono los problemas antes que nadie… me puedo llegar a tirar 19h seguidas con el problema día tras día hasta resolverlo, por lo que sea no me canso fácilmente cuando estoy completamente concentrado lo que me permite estas sesiones de trabajo maratonianas, aunque después necesite descansar todo lo que no lo he hecho en los días antes… por eso me pagan tanto Sofía, y por eso es por lo que no podrías comunicar conmigo aunque quisieras…
Realmente pensaba que no mas de una semana pero prefería curarme en salud, por si las moscas. Le deje dinero a Sofía para las compras de la casa… ni os digo el mosqueo que se pillo por eso, según ella ya hacía bastante dándola alojamiento… con sonrisita socarrona me dijo que ya que había sido tan amable de dejarla un cachito de cama al menos ella pagaría su comida e incluso la mía sin problemas. Lo del cachito de cama venia porque desde la primera noche se metió en mi cama conmigo… y cuando venia Carol también, entonces se metían las dos… menos mal que la cama era a medida y era enorme… sino entre las dos seguro que me hubieran terminado echando. No se quedo muy convencida de lo que la explique de mis viajes o mi trabajo, pero como esa tarde llego Carol, puso la misma cara que Sofía, pero esta le corroboro que efectivamente era como yo decía, y que si la jodìa era porque contactar conmigo sería imposible salvo causa de fuerza mayor, y siempre atraves de mi empresa… lo que según ella la jodìa todavía más… así que se quedaron las dos jodidas con esto, ver para creer.
No soy ningún imbécil así que empezaba desde hacía bastante a ser plenamente consciente de los sentimientos que Sofía empezaba a tener por mí, sin mencionar los de mi hermana, pero de esos ya tratamos antes. Pero tenía claro que no pensaba dar el más mínimo paso en esa dirección y no porque no me gustara la posible idea de una relación seria con Sofía, a pesar de su pasado… la consideraba una persona en que se podía confiar siempre que se la tratara de la forma adecuada. Bajo mi punto de vista lo de su ex lo tenía muy claro, ella nunca estuvo realmente enamorada de él… por algún motivo se engancho a el por esa libertad que la ofrecía para estar con quien quisiera… Os podrá parecer prepotencia por mi parte, pero vía desde hacía tiempo que a Sofía le afectaba bastante cualquier cosa relacionada conmigo y otras mujeres, no podía decirme nada porque ella no era mi novia, y para más inri ella tenía novio y yo no novia… Al igual que mi hermana ella también me había pillado en alguna ocasión con alguna chica saliendo de mi casa al ir muy pronto por la mañana algún fin de semana, y su reacción había sido muy parecida a la de Carol… de celos por la situación, pero teniéndoselos que comer por no tener ningún sitio al que agarrarse para poder echarme nada en cara. De momento solo estaba cocinando nuestra relación… ya se vería si consideraba que merecía la pena arriesgarme con ella o no… Confesare ahora que algunos de esos encontronazos, no todos evidentemente, si habían sido propiciados a posta por mí para ellas dos… sabiendo que habría muchas posibilidades de que esos días aparecieran, unas veces funciono y se tropezaron, otras evidentemente no. O no fueron o la chica en cuestión se fue antes de que llegaran… pero os aseguro que prisas ninguna, si algo había aprendido era a tener paciencia para evitar cometer errores.
El viaje fue enormemente agradable, sobre todo desde Moscú a Tokio. En la zona de “business class” donde viajaba íbamos solo tres pasajeros y los otros dos iban juntos en los primeros asientos. Por la noche se echaron a dormir con antifaces y tapones para los oídos… con lo que solo quedamos despiertos la azafata y yo, que me sentaba en uno de los últimos asientos… Debo de aclarar que no era la primera vez que coincidía con dicha azafata, ya que cada mes solía hacer un viaje de inspección a Japón, siempre vía Moscú por lo que no era la primera vez que ambos nos sentábamos a charlar… este día sin embargo fue distinto ya que mientras hablábamos bajito sin querer derramo parte del café encima de mi camisa… no le di mayor importancia al hecho, sonriendo me fui para el lavabo para limpiármela un poco.
Estaba en el servicio en ello cuando abrió la puerta la azafata para ayudarme con la limpieza… como siempre pasaba se quedo sorprendida con las cicatrices… la verdad es que tenía ganas de sexo y la azafata vi que estaba ultra receptiva conmigo o con mis cicatrices, no sé y sinceramente tampoco me importaba si eso me permitía follar con ella allí mismo. Dado que estábamos en primera y los otros ocupantes estaban dormidos y con tapones que no podían oírnos, me la lleve de la mano a uno de los últimos asientos, junto a la ventanilla, el más discreto.
Una vez en el me tumbe quitándome los pantalones también, me coloque un preservativo, ella mientras se arremango la falta quitándose el tanguita que llevaba, después se empalo sobre mi… mientras se movía sus dedos seguían los surcos dejados por las garras del gato sobre mi torso… veía como la brillaban los ojos. Le empecé a estrujar los pechos con fuerza, arrancándola gemidos de placer… sus uñas empezaban a coger fuerza sobre las cicatrices arañándomelas, señal de que estaba cerca del orgasmo… Entonces con una mano la cogí por detrás de la cabeza obligándola a agacharse para besarnos y con la otra le empezaba a masajear el culito… con muchísima suavidad… cuando sentí que le llegaba el orgasmo le introduje un dedo, moviéndoselo rápidamente en el interior de su recto… frotando mi polla desde allí por su interior… se corrió como un grifo, el largo aullido que soltó al llegarla el orgasmo quedo ahogado en mi propia boca, segundos después me corría yo también.
Después se puso recostada contra el respaldo del asiento de delante nuestro… me coloque otro preservativo y volví una vez más a penetrarla el coño. Empecé a moverme con fuerza mientras la besaba el cuello… mareándola los pechos mientras tanto… se esforzaba mucho por ahogar en lo posible sus gemidos y grititos… el final pocos minutos después nos volvíamos a correr los dos. Después de esto nos despedimos, ella se fue a su sitio y yo me eche a dormir un par de horas… Me despedí de ella cuando bajábamos del avión en el aeropuerto de Narita, en Tokio.
Mi odisea duro exactamente seis días, normalmente me tomo siempre dos más para recuperarme del palizón que supone el estar tantas horas al pie del cañón, algo que normalmente siempre hacia para no viajar en ese estado de agotamiento. Pero cuando termine y llame a Carol para comentarle lo de que me quedaba dos días mas aunque ya había terminado, que si querían me podían llamar… la note supe nerviosa, cuando la pedí hablar con Sofía me dio largas… me olio fatal todo esto, algo raro pasaba con Sofía y desde luego no era que me estuviera poniendo cuernos porque no teníamos ninguna relación de ningún tipo para algo de ese estilo, de forma que tenía que ser sobre su salud o similar, así que la dije que la llamaba para decirla que regresaba ese mismo día.
Cuando llegue al aeropuerto me encontré con mi hermana esperándome… dada la hora que era Sofía seguro que estaría trabajando si se encontraba bien, al igual que debería de estar haciéndolo mi hermana, lo que unido a su nerviosismo deduje que algo grave pasaba. Si hubiera sido de mi madre me hubiera localizado si o si, o me lo hubiera dicho por teléfono en cuanto la llame, de forma que solo podía ser Sofía y esta probablemente no le había permitido decirme nada… seguro. De camino a casa me explico todo lo que “realmente” había sucedido, aunque me costó ponerme serio para que me contara “la verdad” y no el edulcorado cuento de hadas que me tendría preparado Sofía para cuando llegara a casa y me la encontrara de esa guisa, con marcas por todo el cuerpo de un palizón.
En resumidas cuentas que su ex considero que a él no le dejaba ninguna puta por otro tío, humillándolo con eso según su forma de verlo, mas cuando le dijo Sofía según parece, contado por ella misma, que comparado conmigo él era un eunuco. Por lo visto cuando discutieron terminando en ruptura Sofía soltó por su boquita de todo para hacer todo el daño posible, lo mismo que el intentaba con ella, así que el otro se lo tomo fatal. Lo de que su novia follara con otros y luego se lo contara genial, pero lo de que lo hiciera con quien él no quería, y no digamos el dejarlo ridiculizándolo de paso con el otro tío… haciéndole encima sentir que le dejaba porque no era capaz de satisfacerla o algo de ese estilo ni os digo como le puso al maromo.
Como según parece para este tipo Sofía era algo de su propiedad, considero que no podía dejarlo estar así, ¿Qué pensarían de él los demás?... dejando follar a su novia con otros y que lo dejaba para irse con un macho que había conocido de esa forma. Se ve que para auto reafirmarse decidió dejar claro quién era el que mandaba… de forma que le dio una paliza a Sofía, si no fue a mayores es porque en ese momento pasaba gente por allí y lo espantaron. Sofía oyó perfectamente la voz de su Ex, de hecho él la dijo que eso era por abandonarlo, que ninguna puta de tres al cuarto lo humillaba de esa forma. Pero como el agresor había estado encapuchado, los testigos lo describían de forma distinta y Sofía al estar recibiendo de esa forma sin haber podido ver a su agresor por estar protegiéndose no era un testigo “fiable”… además dos amigos de él atestiguaron que lo estuvieron “viendo” toda la noche, porque estuvieron viendo pelis porno de putas en casa de uno de ellos y jugando a las cartas, todo en plan socarrón y con “sonrisitas”. No os digo como les sentó esto a los compañeros de Sofía que si la creyeron lo que declaro de su Ex, pero una cosa como ya he dicho es saber y otra distinta probar o demostrar… desgraciadamente no podían probar nada de nada.
Por lo que le contaron a mi hermana cuando fue a urgencias a llamada de ellos por petición de Sofía… estaba abriendo el coche después de estar de copas con unas amigas cuando la sacudieron en la espalda con un objeto contundente, ellos pensaban que un bate o algo de similares características, mandándola contra el coche por el impacto, según le dijeron esto la dejo sin respiración y sin defensa… la arrancaron el bolso de las manos, donde ella llevaba su arma reglamentaria, después la estuvo pateando el agresor en el suelo hasta que los testigos le hicieron emprender la fuga… pero como estos se contradecían en altura, peso, corpulencia, etc… además el tipo iba encapuchado y nadie le vio la cara con lo que no podían hacer nada contra el Ex ya que además tenía la coartada de sus amigos. Lo de que lo vieron y las películas de putas según me dijo mi hermana cabreo mucho a los compañeros de Sofía cuando les tomaron declaración, porque eran conscientes de que se estaban burlando de ellos… por “fortuna”, (lo pongo entrecomillado porque hubiera sido ya el acabose por el lio que le hubiera supuesto además de pasar luego algo con ella) Sofía al menos no perdió su arma reglamentaria… esta seguía en el bolso a pocos pasos de ella cuando llegaron sus compañeros llamados por los testigos, solo la hubiera faltado eso a la pobre.
Podríamos decir que yo todo esto no me lo tome muy bien que digamos, pero claro, estando como estaba acostumbrado a no “exteriorizar” lo mas mínimo… algo que procedía de mi adolescencia, agudizado por mi estancia en Japón ya que allí esto era hasta cierto punto “normal”. Digamos que a las dos mi falta de reacción agresiva y furibunda las dejo de lo más tranquilas, mi hermana sabía lo que había pasado con su ex y Sofía tonta no era, además por la forma de observar mis reacciones no dudaba que mi hermana le hubiera contado lo de su ex, que de hecho si nos encontramos con él fue porque “yo” le fui buscando a posta. No penséis en eso como una traición de mi hermana por favor, en el fondo entendía su preocupación, la veía cara de estar segura de que yo no me estaba quedando tan tranquilo como aparentaba en esos momentos…
Esa misma tarde hable con mis jefes para tomarme unos días libres por “agotamiento” ya que había sido una total y completa paliza la que me había dado. Con mi adorable hermanita y mi queridísima mejor amiga estuve de lo mas cariñoso y pegajoso, al punto que aplaque lo suficiente sus miedos de que pudiera hacer algo drástico sobre el Ex de Sofía… estaba en un plan de “tan buen tipo” que por momentos casi parecía el Mahatma Gandhi, aunque si dijera que podríamos incluir también lo de apóstol de la no violencia, hubiese sido ya pasarse un poquito, de tanto no las llegue a convencer, sobretodo sabiendo ambas mis antecedentes de delicadeza con quien molestaba a alguien que yo quisiera.
Cuatro días después los compañeros de Sofía la fueron a ver para contarla, debo de decir que los pobres no podían evitar que se les escapara un sonrisita o los gestos de maliciosa alegría cuando lo contaban, que su Ex estaba en la UCI (Unidad de cuidados intensivos), por lo visto algún “encapuchado” había intentado robarle la cartera… no se había logrado llevar nada de nada porque “también” lo espantaron los testigos… pero le había dado tiempo a romperle seis costillas, las dos rodillas, los dos tobillos, las dos muñecas, los dos codos, los dos hombros, romperle el coxis también… todo dolorosísimo pero nada que pusiera en peligro su vida, aunque las consecuencias de semejante tratamiento… imaginadlas. Según los sanitarios que le atendieron en el sitio, les dijo que el agresor le había dicho que el ataque era porque no le gustaban los maricones que golpean a traición a las putas… después de esto me di cuenta que todos… y digo todos… incluidas Sofía y mi hermana dirigieron como por casualidad sus miradas hacia mi persona…
- Yo: ¿Qué?...
- Sofía: No nada… -Pero vi una sonrisita escapar de sus maltrechos labios.
- Compañero: Nada hombre, si tu eres un Ángel…
- Compañero: Si, un Ángel echado del cielo a escobazos…
- Carol: Yo solo te miraba para decirte que hicieras café… pero trata la cafetera con delicadeza “hermanito”, que eres muy bruto a veces…
Se echaron a reír todos con la salida de los compañeros de Sofía que hablaron, y el remate ya fue la salida de mi hermana con la cafetera… aunque la indirecta de todos ellos estaba clara. Todos los allí presentes parecían tener claro sobre quien señalar si tuvieran que decir quien lo podría haber hecho… sobre mi dulce personita, si es que soy un incomprendido total.
Que por cierto me olvidaba, también comentaron que los dos “testigos” que “vieron” y “jugaron” a las cartas en casa de uno de ellos con el Ex de Sofía, también estaba en el hospital los dos… según parece “alguien” también encapuchado, los había echado a ambos directamente en los ojos legía concentrada para uso industrial… se había tomado la molestia incluso de romperles por así decirlo todos y casi cada uno de los huesos de sus manos y muñecas… Según los compañeros de Sofía si no quedaban ciegos y sin poder volver a usar mas sus manos para nada, “incluido jugar a las cartas”, esto último lo dijeron mientras me miraban, sería un milagro… no hace falta decir que yo tenía cara de no haber roto un plato en mi vida, ¿verdad?.
Aquí quiero hacer una pequeña aclaración al lector, no confundir por favor a los compañeros de Sofía, con la policía. Ellos antes que policías eran compañeros y como tal desde luego no eran los que llevaban ese caso en concreto, por lo que estaban como amigos y compañeros de trabajo, no como policías, espero haberme explicado bien para que no haya confusiones. Evidentemente si me interrogaron los que llevaban ambos casos sobre el Ex y los otros dos, pero lamentablemente tenia coartadas muy solidas para las horas que fueron las agresiones… no diré que coartadas pero fue lo suficientemente solidas como para dejarlos satisfechos, o más bien sin poder hacer nada de nada al respecto. Aunque tanto Sofía, como mi hermana, como los compañeros de Sofía estaban todos seguros, y más después de haber podido ver cómo me las gastaba yo, que lo de estos tres había sido cosa mía al 100%.
En todo este tiempo me llamo mi jefa para preguntarme como estaba, la dije que bien, que acababa de regresar de una semanita en Japón y como tenia a un amiga mala en casa me cogería también lo que quedaba de esta semana presente, que no iría hasta el lunes siguiente. Ella me dijo que no faltaba más, que lo que me hiciera falta… que si necesitaba más días que solo tenía que cogérmelos también, que sin problema. Que no me preocupara de nada… os juro que me pareció un tanto sarcástica, pero dada mi especial situación no había problemas, tenia estas “libertades” por contrato, así que…
Cuando llegue al trabajo a la semana siguiente, ya que como os he contado me había decidido tomar toda la semana libre en vez de solo cuatro días… me encontré con una sorpresa la mar de desagradable… Mi adorable jefa, Adriana Vega, me había expedientado por faltar al trabajo dos semanas “por mi cuenta y riesgo”, el resultado era un mes de empleo y sueldo mas una amonestación con aviso de despido para la próxima falta grave que cometiera… La Jefa afianzaba su poder en la sección a mi costa, se ve que ella si había tomado la decisión por su “cuenta y riesgo” sin preguntar, seguro que al jefe de personal le iba a encantar cuando le diera la carta que me había mandado “su departamento”… ya que era personal el que te podía sancionar con el visto bueno de la asesoría jurídica, claro… otro jefe al que le iba a encantar lo del papelito de la sanción cuando supieran que el de las dos semanitas era yo… se iban a partir de risa, sobre todo pensando en que se enterara de esto la dirección, para morirse del cachondeo ya lo veréis.
Que mala idea había tenido la pobrecita… y yo que me pensaba mantener lejos de ella por no recordar mis sombras del pasado y calentarme… en fin, uno propone y dios dispone. Peor para ella… y mas diversión para mí.
CONTINUARA