Hasta el día de hoy 46
Cuando llegue por la noche a casa me acosté rápido, lo último de lo que tenia gana era de vérmelas con mi hermana en ese preciso instante. Necesitaba poder pensar para enfrentarla con calma, porque había varias cosas de las que me iba a pedir explicaciones, evidentemente de lo que hubiera pasado con Sara, con la que por cierto seguro que estaría hablando de camino a su casa, sonsacándola, como si lo viera. Luego también estaba la historia del “pardillo” de su hermanito, debía ir con pies de plomo sobre todo con eso, si se sentía burlada lo pasaría francamente mal con ella… y creedme que es de las que los cabreos la duran.
Pero como siempre ocurre llego el día siguiente y sinceramente creo que esperaba un milagro o algo así que me librara de la charlita de mi hermana del alma, pero como os podéis poner eso no ocurrió. Cuando me levante estaba casi todo el mundo ya levantado, desayune con muy poquitas ganas de que el día siguiera su curso, ya que entonces llegaría el momento inevitable con Natalia. Para mi sorpresa al cabo de poco tiempo me di cuenta de un extraño detalle, mi hermana parecía intentar evitarme tanto como yo a ella y Erika me miraba como el león que mira a su próxima presa, lo que ya de por si me empezó a dar muy mala espina sobre la situación.
Al final mis abuelos nos pidieron a Natalia y a mí que nos acercáramos al pueblo de al lado a por algunas cosas que hacían falta para estos dos días que quedaba y de paso dejarles echa a ellos la compra para toda la semana siguiente. Mi gozo en un pozo, de viaje en el coche con mi hermanita para que me pudiera interrogar a solas… pero me lleve una sorpresa justo cuando salíamos para el otro pueblo.
- Erika: Luis cuando vuelvas tu y yo tenemos que hablar.
- Yo: Claro Erika, ¿de qué exactamente?
- Erika: De Sara y algunas otras posibles cosas…
Ni os digo la cara de gilipollas que se me debió de quedar cuando me dijo esto, no entendía a qué coño venia ahora con esto y más delante de Natalia que por si no estuviera ya suficientemente cabreada solo la faltaba esta para acabar de rematarlo… Para colmo me di cuenta de que las chicas estaban nerviosas por alguna razón, incluidas mis primas Ana y Claudia. Me fui a enterar de los motivos durante el viaje con mi hermana… Estuvimos sin hablar por el camino como unos diez minutos, al final imagino que dado que como podréis suponer yo estaba en la gloria sin hablar y como podéis imaginar no tenía pensado iniciar ninguna conversación tuvo que ser ella la que la iniciara.
- Natalia: Lo siento Luis.
- Yo: ¿El que sientes Natalia? –No entendía a que venían estas disculpas.
- Natalia: Veras, es que anoche cuando llegue estaba tan cabreada por lo tuyo con esa Sara que Erika me pregunto y sin darme cuenta se me escapo lo de tu lio con esa chica…
- Yo: ¿Cómo que se te escapo un poquito…? ¿Qué poquito…?
- Natalia: La verdad es que no fue nada, solo lo que vi en el callejón, pero luego me empezó a preguntar y no sé cómo me saco todo lo que me conto Sara, así que no veas como esta de enfadada contigo ahora…
No me lo podía creer, resultaba que Erika había interrogado a Natalia y esta había cantado como un canario. Ahora la pobre se sentía fatal por haber traicionado a su “hermanito”… de verdad os juro que si me lo llegan a contar nunca me lo hubiera creído.
- Yo: Bueno tranquila que no pasa nada… ya veré como lo soluciono con ella…
- Natalia: Vale, me alegro de que te lo tomes así… ¿pero ahora te importaría explicármelo a mí también…?
- Yo: ¿Explicarte el que Natalia…?
- Natalia: Pues solo dos cositas tontas cariño, lo que paso ayer con Sara y ese disfraz de pardillo imbécil que llevas siempre puesto… con eso creo que de momento me conformo…
- Yo: Mira Natalia lo de Sara no sé bien que paso… se empezó a meter con Arantxa igual que había hecho anteriormente el imbécil de su novio… nos liamos a insultarnos los dos, a desafiarnos podríamos decir… y al final pues lo que te imaginaste, que nos acabamos enrollando los dos.
- Natalia: ¿Y te parece bien enrollarte con una tía que tiene novio…?
- Yo: Joder Nati… no me vengas con esas, primero el problema sería de ella, ya que yo no tengo novia y no estaba engañando a nadie, pero en el caso de que pudiera pensármelo por su novio… que le den por el culo a ese gilipollas. Si estas esperando que diga que me arrepiento lo siento, pero ni de coña… ese gilipollas se lo merece, eso y muchísimo más.
- Natalia: Vale de acuerdo, no diré que ese gilipollas no se lo tenga merecido, pero de todas formas no me gusta que hayas hecho eso, no me gusta que te liaras con la pareja de alguien, por mucho que tú no te veas como responsable… espero que no seas así normalmente, no me jodas Luis.
- Yo: Tranquila Nati, esto es un caso especial, te aseguro que si llega a ser otra persona no habría pasado nada de nada, no soy de esos hermanita.
- Natalia: Vale te creeré, y que me dices de lo otro… eso de parecer un puñetero pardillo cuando no es así
- Yo: No se dé que me hablas Nati…
- Natalia: No me jodas hermanito… no me vengas jodiendo que te la cargas. Por lo que me conto Sara te desenvuelves muy bien como para no tener experiencia anterior… Vamos que tu de pardillo lo justito.
Esto era lo que me temí desde por la noche, que Sara se hubiese ido de la lengua y yo sin saber qué coño podía haberla contado a mi hermana. Tampoco podía explayarme no fuera que solo me estuviera tirando de la lengua para ver si picaba, pero aun así estaba claro que lo del pardillo ya no colaba, que algo de experiencia si tenía supiera ella con quien o no… ahora mi principal problema era darla una explicación satisfactoria para que se quedara tranquila pero sin mentar a nadie en concreto por si acaso no sabía nombres, algo realmente peliagudo.
- Yo: A ver Natalia, virgen no soy, pero tampoco es que me haya tirado a cien tías… joder alguna cosilla si he tenido por ahí, pero no querrías que lo fuera pregonando a los cuatro vientos solo por fardar…
- Natalia: Claro y voy yo y me lo creo…
- Yo: Joder Natalia, me he liado con algunas chicas, incluida alguna del insti. Si tengo esta fama es porque no voy pregonando a los cuatro vientos con quien coño follo o dejo de follar… ¿qué opinan que sigo siendo virgen?, peor para ellos, tampoco creo que tenga que dar explicaciones por eso, las chicas con las que estuve y yo sabemos que es mentira…
Mi hermana me empezó a mirar de una forma bastante rara, pero que muy rara, no veáis el mal rollo que me estaba dando con esa miradita inescrutable que ponía la jodìa. No era capaz de discernir qué era lo que estaba pensando de todo esto, no sabía si la cosa iba bien, mal o terroríficamente mal. Decidí atacarla un poquito, a ver por donde respiraba la cosa…
- Yo: Joder Natalia, ¿Qué pasa, que he hecho mal no dándomelas de machote?..., según tu que debía hacer, abrir la boca y dejarlas como unas putas para ser “guay”…
- Natalia: No Luis, todo lo contrario… es raro que un chico pase por lo que tú has pasado pudiendo callar a la gente. Ya me hubiera gustado encontrarme con alguien como tú en el instituto, pero todos a los que yo me arrime eran unos bocazas de cuidado, se comían una y contaban veinte… esas chicas estarán encantadas contigo…
- Yo: Desde luego no las he oído quejarse porque no hable con nadie de estas cosas… ¿entonces perdonado?
- Natalia: Ni de coña màjete… yo no soy cualquiera, soy tu hermana y podrías habérmelo dicho aun sin entrar en detalles, y no dejarme hacer el gilipollas todo este tiempo intentando que te “espabilaras” un poquito…
- Yo: Joder Natalia y que quieres que te hubiese dicho… “mira no te molestes en buscarme ligues hermanita, que aunque no te lo creas ya estoy harto de follar con chicas”. Si te suelto eso o algo así me das de guantazos por idiota, además que seguro que intentarías sacarme detalles de todo eso, y de los más escabrosos… ¡¡¡Y JODER NATALIA!!!, ¡que me da mucho palo hablar de estas cosas leches…!, y mas contigo.
Me miro intensamente, después se echo a reír y se tiro a mis brazos dándome un besito en la mejilla, entonces empezó a desbarrar…
- Natalia: Por supuesto que quiero saber con quienes, cuando y todos los detalles escabrosos de mi hermanito con sus ligues…
- Yo: Vete a la mierda Nati…
- Natalia: Jajajajaja, esaborío que eres chico… venga dame algún detallito morboso Luisito…
- Yo: Deja de joder Nati… que sabes que estas cosas me dan mucho palo…
- Natalia: Te dan palo conmigo… ¿por ser tu hermana o por ser chica?
- Yo: Joder que pregunta, pues me da palo porque eres mi hermana y además eres chica. No pretenderás que me pongo a contarte qué y cómo lo hago cuando estoy con alguna, ¿no?...
- Natalia: Pues mira, sería un detalle, y no tienes porque cortarte cielo… yo no soy virgen y también tengo tetas y coño como las demás, así que no creas que me iba a sofocar o espantarme porque me cuentes detallitos jugositos… ¡eh hermanito lindo!...
Todo esto me lo dijo la cabrona abrazándose a mi por el lateral… al oído muy bajito para evitar que nadie pudiera oírnos, ya que acabamos de aparcar y bajarnos del coche para hacerlas compras… Aproveche la ocasión para hacerme el escandalizado e intentar salir por la tangente…
- Yo: ¡¡Nataliaaaaaaaaaaaaaaaaaaa…!! –Mas escandalizado os aseguro que no podía parecer… y además que empezaba a estarlo de verdad, joder que bruta que me estaba saliendo mi hermana.
- Natalia: Jajajajajaja, vale, vale no he dicho nada… mira que eres tímido hermanito… jajajaj… -Su risa se corto en seco…, se quedo mirándome muy fijamente.
- Yo: ¿Qué…?
- Natalia: No será esto de escandalizarte otro truquito tuyo ¿verdad…?
- Yo: ¡¡¡Vete a la mierda!!!
Menos mal que esta última explosión de indignación sirvió para que se quedara algo más tranquila, o que por lo menos desechase momentáneamente sus sospechas de que podía estar tirándome otra vez el farol, tal y como con lo de las chicas… Al final después de comprar cuando volvíamos resulto que no pensaba tomar “medidas” contra mí, ya que para ella era más que evidente que cuando regresara a Madrid había cierta persona de origen Alemán que estaría encantadísima de tomar medidas por ella, por mis padres y por todo el resto de la humanidad… la muy cabrona parecía que se estuviera relamiendo pensando en la que se me avecinaba con Erika.
Lo que era incapaz de entender del todo era como coño se las arreglaba siempre Erika para manejar a todo el mundo a su antojo. Tenía muy claro que me acababa de salvar el culo con mi hermana al hacerse ella cargo del castigo, tenía claro que estas se la cobraría de algún modo, antes o después. Como siempre no pude por menos que asombrarme de cómo era capaz de maniobras Erika, en este caso llego, incluso al punto, de poner a Natalia “de mi parte” ante la que se me avecinaba con ella, porque aunque no os lo podáis creer mi dulce hermanita estuvo intentando “interceder” por mi ante ella, eso sí, siempre de esa forma tan peculiar suya que tanto me mosqueaba. Mi querida Natalia estuvo intercediendo para que Erika no fuera “extremadamente” dura conmigo en el castigo, según ella con que fuera “muy dura” la valía… todo ello mientras procuraba que yo no perdiera detalle de sus esfuerzos para que no “sufriera mucho al regresar a Madrid” según sus propias palabras… Pero que hija de… mi madre.
Lo más terrorífico de todo este asunto es que por increíble que pueda parecer, mi hermanita… ese doberman que tanto me protegía, fue la encargada de “echarme un capote” para que esa noche me pudiera escaquear para echarle un polvo a Merche… si no lo hubiera visto nunca lo hubiera creído con mi hermana. Durante gran parte de la noche en la peña Erika estuvo pegada a mí como una lapa y claro nadie tenía narices a acercarse a mí para perdernos por ahí a dar una vuelta, y las chicas menos que nadie. Una vez que se acerco Maite y se puso en plan “amiga del alma” Erika la hecho una mirada gélida que la dejo tiritando a la pobre, después de eso no se arrimo ni dios más a mi… incluidas mis primas y las chicas, Erika estaba en un plan que ya, ya…
Al final supongo que un poco mortificada por el hecho de habérselo terminado contando todo a Erika, fue la propia Natalia la que me “libero” de mi prisión. Eso sí, solo cuando Sara se hubo largado del todo de la fiesta, antes ni se movió la jodìa. Supongo que para ella al estar con Arantxa y Ana no podía despendolarme, aunque visto lo de la noche anterior… no sé tuve muy claro cómo es que se fiaba de mi. También debo decir que si me salve fue gracias a que Sara fue bastante oscura en sus comentarios hacia mi persona y lo que paso… por lo que me entere por ella más adelante mi hermana no logro sacarla nada en claro mas allá de que nos habíamos enrollado los dos… y además la dejo claro que ella no se arrepentía en lo mas mínimo de haberlo hecho conmigo… joder con la niña, en el fondo la agradecí que me dejara tan bien, ¡pero coño!, digo yo que delante de mi hermana se podía haber reservado un poquito, ¿no?.
Más adelante también me explicarían la chicas, que cuando Natalia la intento ir tirando de la lengua sobre lo de la noche anterior, ellas simplemente se limitaron a decir que estaban con Arantxa que se había ido llorando como una madalena después del numerito con su Ex, supongo que eso la dio a pensar que si había podido liarme con Sara fue porque estas estaban ocupadas “consolando” a Arantxa… también me dijeron que puso como condición que no se separaran de mi ni un instante, por lo menos una de ellas debía estar conmigo siempre. Cuando según ellas la preguntaron el porqué de eso, que si había pasado algo la noche anterior… Natalia las dijo que no, pero que simplemente no quería que si me veía con el ex de Arantxa pudiéramos liarnos a tortas… cuando me lo contaron no me podía creer la escusa tan tonta que las dio, si no llegan a saberlo indudablemente se hubieran olido la tostada al completo…
Esta vez tuve la “suerte” de que ellas se quedaron hablando antes de llegar al pajar mientras Merche y yo nos íbamos para allí. Por una vez podría estar con una de ellas en el pajar sin que tuviéramos espectadores… porque las últimas veces solo nos falto ponernos a vender entradas. Cuando llegamos a lo alto mientras nos empezábamos a desnudar mutuamente Meche y yo no parábamos de besarnos y acariciarnos por todo el cuerpo… hasta quedarnos completamente desnudos unos junto al otro, tumbados sobre la paja.
Empecé jugando suavemente con su cuerpo, acariciándola lentamente mientras la besaba en los labios, el cuello, las orejas… mordisqueándola el mentón. Mientras mis manos no paraban de acariciarla los pechos, el ombligo, el estomago para llegar finalmente a su sexo, donde estuve jugando con dos deditos sobre su rajita… amagando con entrar en ella pero sin hacerlo… provocando que alzara sus caderas de vez en cuando intentando introducirlos en su interior. Esta primera vez la acaricie la rajita, el perineo y el culito, evitando rozarla tan siquiera su clítoris… en unos pocos minutos la lleve a su primer orgasmo. Puedo deciros que según sus propias palabras la había encantado el poder correrse solo con mis caricias… algo que según ella nunca la había pasado con ningún chico antes.
Después de eso cambiamos de posición, siendo ella la que decidió jugar con mi cuerpo, empezó a imitarme en casi todo, incluido en acariciarme el culito, jugueteando con un dedito en el. Poco a poco me iba poniendo cada vez más cachondo. Al final acabo chupando mi pene, metiéndoselo en la boca y engulléndolo por completo hasta los huevos. Empezó a chupármelo metiéndoselo y sacándoselo de la boca rápidamente, casi como si me la estuviera follando por ahí… mientras sus uñas me arañaban los testículos con suavidad logrando ponerme a mil por hora. Por como lo hacía comprendí que era la primera vez para ella, seguro que alguna de estas se lo había explicado… ya sabéis, enseñanzas de cierta Valkiria rubia. No pude aguantar demasiado, la avise cuando me estaba llegando para que se retirara, pero en vez de eso simplemente se la saco de la boca dejando dentro solo la puntita del glande… acariciándola hasta que descargue por completo en su boca… me miraba golosa a los ojos mientras me enseñaba como se tragaba toda mi leche sin dejar escapar ni una sola gota de ella.
Después de esto volvimos a cambiar los papeles, la hice tumbarse para esta vez ser yo quien la hiciera sexo oral. Como es habitual en mi empecé por mi truquito cabròn de meterla en una espiral de sensaciones… llevarla al borde del orgasmo para luego variando el ritmo de mis lengüetazos y caricias sobre su cuerpo dejarlo escapar sin que ella pudiera evitarlo… llevándola poco a poco a la desesperación por el orgasmo que nunca llega… Aunque ya sabia lo que iba a hacerla por habérselo visto a las otras no puedo evitar sufrirlo también, después me contaría que iba preparada para no dejarme hacérselo a ella también, pero no pudo impedirlo, eso si, según ella cuando la llego el orgasmo fue todavía muchísimo más intenso que cualquier otro que hubiera recibido hasta ese momento. El desearlo tanto la ponía muy receptiva cuando por fin llegaba, potenciando de esa manera su placer.
Después de haberme deleitado con su néctar me situé sobre ella, introduciéndome lentamente en su interior mientras nos besábamos… empecé a bombearla suavemente al principio para después ir aumentando la velocidad de penetración y su profundidad, arrancándola gemidos y jadeos de placer cada vez más fuertes y más altos. Unos pocos minutos después la llego el orgasmo, después de recuperarse la hice situarse sobre mí para que me cabalgara, mientras lo hacia la masajeaba los pechos sin piedad, acariciándolos, retorciéndolos cuando se terciaba, cambiando de placer a dolor y viceversa para enloquecerla un poquito más, hasta que también la llego de este modo el orgasmo. Pude comprobar que era un poco adicta al dolor cuando follaba, le gustaba ese puntito de dolor… el justo para que después rápidamente se transformara también en placer….
Sin decirla nada se coloco a cuatro patas, mirándome entonces y pidiéndome que la “hiciera” el culito como a Maite… pero que ella quería un poquito de dolor, que no la importaba si se lo rompía, que quería probarlo. Entonces metiendo dos dedos en su coño para lubricarlos empecé con lo que me había pedido que hiciera, mientras metía y sacaba ambos dedos de su coñito ella movía el culo como loca al movimiento de ambos dedos en su interior. Según los saque se los metí otra vez, pero en esta ocasión por el culo y sin piedad… pego un grito de aúpa, pero pronto se relajo dejándome maniobrar para dilatárselo, y porque no decirlo porque también tenía entonces dos dedos de la otra mano trabajándola el coño, follándoselo sin parar mientras con la otra mano la dilataba el ano.
Una vez que según me pareció ya estaba lista, sin mediar palabra o aviso la perfore el culo sin piedad y sin miramientos, enterrándosela hasta lo más profundo de sus entrañas. Soltó un gemido brutal al sentir como mi polla la perforaba hasta llegar a escuchar el sonido de mis huevos chocar con sus cachetes… Nada más llegar al fondo y sin dejarla recuperarse empecé a machacarla el culo sin piedad, como un pistón, sin miramientos de ningún tipo. Me incline sobre ella para poder machacarla el coño mientras la reventaba el culito, tardo pocos minutos en correrse… yo seguí sin piedad machacándola hasta que por fin me corrí también, sacándosela del culo y echándola la leche sobre su espalda…
Después de esto volví al sexo oral con ella, para hacerla entonces mi jugada final con mi lengüecita. Cuando la tuve a punto hice mi maniobra, la pince el clítoris con mi lengua, frotándoselo con ella en toda su superficie… llevándola a un orgasmo devastador… y largo, muy largo dejándola casi en estado catatónico… Pareció que se meaba de la cantidad de flujo que soltó al correrse esa vez. Tardo casi veinte minutos en recuperarse del tratamiento. Después de eso vivimos despacio hacia la fiesta hablando, se nos unieron las demás por el camino, tuve la suerte de enterarme de que Arantxa, Merche y Maite el año siguiente irían a Madrid a la Uní, si bien no todas a la misma si estarían las tres por allí “sueltas”, genial del todo.
Según estábamos llegando a la peña vi como salía mi hermana con Claudia… se pararon en seco al vernos a todos juntos, por su forma de gesticular, principalmente de Claudia hacia Natalia me dio la impresión de que esta estaba apuntito de salir a ver donde se había metido su “inocente” hermanito, sobre todo sabiendo ahora que no era tan inocente como aparentaba, pero supongo que el ir junto con seis chicas la daba la suficiente confianza para pensar en que me habría portado bien… salvo que se la ocurriera pensar que me había montado una orgia con las seis a la vez claro… Evidentemente ese es un comentario que conociéndolas a estas como las iba conociendo jamás se me ocurriría soltar delante de ellas, no fuera a ser que las dieran ideas “extrañas”… o más extrañas de las normales.
El domingo fue un día de transito, recogimos todo lo de la peña dejándolo como la patena, evidentemente si queríamos seguir disponiendo de ese local para futuras fiestas todo debía de quedar en perfecto estado y esta vez nos toco a nosotros el domingo echar una manita. Debo de indicar que tanto Teresa, Eva, Erika, Ana y Claudia se lo pasaron a lo grande según sus propias palabras. Lo único que me dio algo de mala espina es que tanto Arantxa, Merche y Maite parecía que opinaban algo así como que después de todo lo vivido también tenían su parte de derechos sobre mi persona, sobre todo dado que también estarían el año siguiente en Madrid estudiando.
Ese mismo Domingo por la noche fuimos a llevar al aeropuerto a Natalia y a Claudia que se volvían a Inglaterra a sus estudios, antes de irse y cuando me abrazaba para despedirse mi hermana Natalia me dijo al oído que había hablado con Erika para que no fuera muy dura conmigo, pero que no me olvidara que esta a ella se la debía. Que se me fueran quitando las vergüenzas con ella ya que el año siguiente estaría en Madrid conmigo viviendo en casa los dos juntitos… algo que en ese momento no llegue a interpretar, pero que a posteriori tendría muchísima importancia para cerrar más si cabe mi relación con Natalia, Ana y Claudia.
Después de esto volvimos poco a poco a la rutina del instituto, las clases con una Erika cada vez más dura con nosotros con los estudios… eso si debo de decir que a la larga todos se lo agradecimos ya que nos permitió sacar unas notazas de órdago y pasar la selectividad luego con muchísima holgura y sin agobios. Durante todo este tiempo fui monopolizado prácticamente por Erika… pero según pude observar ni a Eva, ni a Teresa les parecía importar lo mas mínimo esta monopolización por su parte, es mas diría que la alentaban, aunque ellas también tuvieron su pequeña parte de mi persona en este poco tiempo que nos quedaba juntos. Supongo que lo hacían porque se acercaba lenta pero implacablemente el día de la marcha de Erika.
Después de todo esto no hubo nada más que merezca la pena reseñar, solo ocurrieron cosas sin la menor importancia. Al final el curso nos salió redondo del todo, Ana aprobó con una media de 9.8 de nota y yo con un 9.7, Eva y Teresa aprobaron con unas notas medias de 8.6 y 8.8 respectivamente, para tremenda alegría de sus padres. Después de esto los cuatro pasamos tranquilamente la selectividad, superamos sin el menor problema y con gran holgura como dije antes, el corte para nuestras carreras. Ni os digo como se quedaron mis padres y mi hermana cuando les dije que pensaba hacer dos carreras a la vez… no me metieron en un siquiátrico de milagro. Afortunadamente Erika los convenció de que era más que posible para mí el hacerlo… cierto que también ayudo el enseñarlos que en su día ella hizo lo mismo que pretendía hacer yo… sinceramente no sé ni cómo tragaron, aunque me dejaron claro que todo esto era a expensas de mis notas, si están iban mal debería dejar una de las dos para no joderme mi futuro… algo a lo que no estaba dispuesto en lo más mínimo, además que pensaba sinceramente que haría tal y como le prometí a Erika, sacaría las carreras a como diera lugar.
Después de todo esto llego el fatídico día que yo tanto temía, el día de la marcha de Erika de regreso a Alemania... el adiós a la mujer que tan importante había sido en mi vida estos últimos años... mi amante, mi cómplice, mi amiga..., mi amor..., mi Erika.
CONTINUARA