MI CHICA QUINCE - 10
A la mañana siguiente no nos podíamos casi ni mover… nuestros cuerpos parecían un parte de guerra, y no me refiero a nuestros sexos únicamente, arañazos, mordiscos, chupetones… Por la noche en caliente ni nos dimos cuenta, pero ahora en frio… joder como dolía todo eso. Las curas fueron divertidísimas para los dos… entre risas nos dijimos que para la próxima antes de meternos en la cama teníamos que cortarnos las uñas antes de que no nos quedara piel por su culpa…
Tras las curas a la ducha, otra gozada sentir el jabón por las heridillas… era un escozor continuo por todo el cuerpo, amén de que nuestros sexos todavía continuaban informándonos de que más nos valía dejarlos tranquilos por unos días… Nos sentamos a la mesa a desayunar entre risas… antes habíamos recogido toda nuestra ropa, que quedo esparcida por todo el trayecto desde la puerta de entrada hasta los pies de la cama de Raquel. Lo primero que tuve que hacer entre las risas de mi querida novia fue ponerme a coser los botones de mi camisa que saltaron, bueno los que encontramos…, para poder abrochármela y quedar un poco decente… aunque al faltarme algunos botones… mejor dejarlo.
Por suerte tengo una novia que vale su peso en oro y es muchísimo menos perezosa que yo un domingo por la mañana… al ver cómo me quedaba de ridícula la camisa me soltó un “espera que enseguida vuelvo” y se largo de su casa dejándome allí solo con la boca abierta. Regreso un poco más de media hora después con una camisa nueva, según me dijo ese domingo al ser primeros de mes abrían las grandes superficies comerciales, de modo que había ido a por una camisa… riéndose me dijo que al fin y al cabo había sido ella en su… “impaciencia” quien me la rompió. Se puso seria…
- Raquel: Cariño, creo que todavía te debo una explicación por lo del coche…
- Ismael: Pues mira cielo, yo pienso que no, que no me debes nada… así que déjalo estar…
- Raquel: Pero es que…
- Ismael: Mira Raquel, el hablar anoche con tu tía (y el que ella me insinuara que solo estaba con Raquel por dos cosas, por follàrmela y para sacarla todo el dinero posible, aunque obviamente esto no se lo iba a decir) me dejo más que claro los problemas que has podido tener con tus anteriores chicos por ese motivo… así que por mi todo correcto amor.
Vi que se quedaba pensativa mirándome, la conocía lo suficiente como para suponer que estaba evaluando si quería saber más o no sobre esa conversación… El problema que estaba viendo en mi relación con Raquel, es que ambos veíamos bastante claramente atraves del otro cuando algo no estaba del todo correcto, supuse que se debió de percatar que algo no le había dicho sobre mi conversación con su tía, pero decidió dejarlo correr. Pero que conste que ella era consciente que de haberme preguntado por ello le hubiese dicho lo que quería saber.
Tenía pensado irme a casa pronto, pero Raquel no me lo permitió, o mejor dicho me dijo que no pensaba llevarme hasta después de comer, que tenía planes para nosotros… tenia perfectamente planificada nuestra mañana. Me puse serio cuando me dijo eso, y me empecé a partir de la risa cuando me dijo los planes que había hecho para las más de dos horas que nos faltaban para comer… sus planes eran sentarnos en el sofá los dos juntitos, y ya que no podíamos follar por culpa de nuestro combate de la noche anterior, al menos nos podríamos dar minimitos, había panificado la cabrona dos horas de besos y mimitos en el sofá… No os hacéis a la idea el ataque de risa que me dio y como me puse de entusiasmado a cumplir con los planes de Raquel…
Estábamos preparándonos la comida cuando entraron en la casa María, Ana, Alex y Marta, Ana dijo a Raquel que le había llamado su madre diciéndola que tenían que hablar las dos muy seriamente sobre no haberla dicho nada de que Raquel por fin tenía un novio que era normal… las risas de los cuatro eran para oírlas…
- Raquel: Cariño, lo siento, anoche con todo lo que paso se me olvido decirte que mi tía Andrea es la madre de Ana…
- Ismael: No te preocupes cielo, no pasa nada… entiendo que con las prisas de anoche por llegar aquí no pensáramos en nada de nada… (Pero pensé que ciertamente Andrea debió de quedarse embarazada muy joven, no me extraño la preocupación por la “vida” que llevaba su sobrina)
Ahora fuimos los dos los que nos empezamos a reír como dos críos… Tuvimos que pasar de preparar comida para dos a preparar comida para seis por los cuatro “gorrones” que se nos habían incorporado, como les llamo Raquel cuando Alex riéndose le dijo que esperaba que ampliara el menú o nos íbamos a morir de hambre repartiendo lo de dos para seis. Durante la comida me di cuenta que Raquel y su familia debían de ser todos iguales, cuando Marta pregunto que donde fue la fiesta de la noche anterior, y Raquel la dijo que en casa de su tía, la madre de Alex y de Ana, Marta dijo que Alex le había comentado que era un chalecito muy mono… Cuando Ana, María y Marta se levantaron a la cocina a por el postre…
- Ismael: Alex, eres consciente del cabreo que se va a agarrar Marta cuando sepa de tu madre por no habérselo dicho…
- Alex: ¿A qué te refieres?, Marta ya conoce a mi madre, aunque ella no esté mucho tiempo aquí, hemos comido en el centro los tres juntos más de una vez… además te informo de que se caen genial…
- Ismael: Mejor me lo pones, Alex, me refiero a lo del chalecito… el primer día que la lleves a verla a su casa y vea el “chalecito” no sabes la que te va a caer encima… no te enfades pero la conozco bien, si cuando se entere del nivel económico de tu familia no ha sido por ti, créeme que vas a tener muchísimos problemas con ella… yo que tu iría mirando de cómo decírselo y me preparaba para la tormenta que te va a caer encima macho.
- Raquel: Alex opino igual que el… de echo a mí la tormenta me callo ayer cuando vio mi coche… menos mal que es razonable y no terminamos discutiendo por ello…
- Ismael: De momento, me lo estoy empezando a replantear…
- Raquel: (Me dio un puñetazo flojito en el hombro) Idiota, que eres idiota…
En ese momento regresaban Ana, María y Marta de la cocina, por lo que pregunto Marta nada más sentarse las dos debieron oír los últimos comentarios que me hizo Raquel…
- Marta: No me digas que quisiste ir a la fiesta con tu Clío en lugar de con el de Isma…
- Raquel: No, por lo que casi discutimos fue por mi Mercedes SLK… no le gusto que no le hubiese dicho que lo tenía…
- Marta: (Con la boca abierta por la sorpresa) Tienes un mercedes SLK… (Le salió del Alma la pregunta) ¡¡Joder!!, ¿pero tú cuanto ganas con tu trabajo?
- María: (La pobre metió la pata hasta el fondo) Muchísimo dinero créeme, y eso que para las empresas de mi tía Andrea hace el trabajo gratis, aunque no veas cómo se enfada con ella por no querer cobrarla…
Alex respingo al ver la cara de Marta tras la contestación de María… Me dio hasta pena por todas las explicaciones que iba a tener que darla y la que le iba a caer encima en cuanto se quedaran solos los dos, porque pese a que Marta no dijo ni media al respecto, su cara era el vivo reflejo del cabreo… Para terminar de arreglarlo Ana intento echarle una involuntaria manita al cuello de su hermano…
- Ana: Pues no sé por qué no quieres cobrarla prima, sabes que ella solo pagaría por tu trabajo si de verdad vale. Sabes que no ha hecho su fortuna siendo la hermanita de la caridad… si lo vale lo paga, y… (Raquel la corto)
- Raquel: (Señalo a Marta con leve gesto de cabeza) Ana creo que lo mejor por el momento es que no mentemos el dinero o las empresas de tu madre…
Fue entonces cuando María y Ana se dieron cuenta de la cara de cabreo de Marta, y de la cara de acojone que estaba empezando a poner Alex. Ambas comprendieron que Alex debía de haberla ocultado ciertos detalles sobre la familia de los que Marta se acababa de enterar de sopetón, a traición y con alevosía… ambas cambiaron en el acto de tema, pasando al socorrido tiempo que hacía, que no es que fuese muy original, pero ciertamente viendo la tormenta que se avecinaba sobre Alex… era un tema que hacia juego, ¿o no?.
Según terminamos de comer, metimos todo a la carrera en el lavavajillas y salimos los cuatro de allí por pies, Ana y María decidieron que estaban interesadísimas en poder acompañar a Raquel a dejarme en casa… Salimos los cuatro de allí a la carrera dejando solos a los dos tortolos… Mientras bajábamos por la escalera le pregunte a Raquel…
- Ismael: Oye cariño, abras dejado guardados bajo llave las escopetas y los cuchillos, ¿no?
- Raquel: Anda Isma, no me seas cabròn, déjate de bromas que sabes de sobra la que se va a liar entre esos dos
- Ana: La culpa es suya por no decírselo antes a Marta, que hubiera aprendido de ti con Ismael…
- Raquel: Ana, créeme que cuando necesite qué alguien me ate una piedra al cuello para tirarme de un puente serás la primera a quien se lo pida, muchas gracias… por tus “ayudas”… (La pobre Ana se quedo un poco así con la contestación, y más después de lo sucedido entre ellas)
- María: Raquel, y eso a que ha venido ahora si se puede saber…
- Ismael: Es que yo me entere anoche cuando tu hermana apareció con su mercedes en mi casa a recogerme… la que ellos tienen ahora la tuvimos tu hermana y yo ayer María… y creo que por alguna extraña razón no quiere que me lo estéis recordando cada dos por tres… (Mi voz era socarrona, socarrona)
- María: No me jodas que tu tampoco sabias nada de… uyyy la hostia vaya dos…
- Raquel: María por favor, podríamos cambiar de tema y dejar este… ¡¡¡ya!!!
Cuando llegamos al coche los cuatro, al Clío claro, por muy estúpido que os pueda parecer Raquel iba mas cómoda en el por la ciudad que con el Mercedes, nos montamos en el, María y Ana iban sonrientes, mirando irónicas a Raquel, mientras que yo iba a su lado con los brazos cruzados sin decir ni media, pero con una sonrisita sardónica en los labios mientras la miraba de reojo.
- Raquel: Ismael ya vale, ¿no?...
- Ismael: Pero si no he dicho nada cariño…
- Raquel: No me jodas, quieres… que se lo que estas pensando… y vosotras dos igual… a mi no me hace ninguna gracia…
Ana, María y yo nos echamos a reír con el cabreo consiguiente de Raquel, que se mosqueo con los tres de narices por nuestras risas. Cuando me dejaron en la puerta de casa le di un beso a Raquel, que me respondió la mar de fría conmigo, me encogí de hombros y me dirigí al portal… no había terminado de abrir la puerta cuando Raquel me callo encima por sorpresa, dándome un morreo de campeonato…
- Raquel: Aunque seas tan cabròn no puedo evitar quererte…
- Ismael: Considéralo mi venganza por no haberme dicho nada… te quiero cielo, y cada día más…
Después de esto Raquel regreso al coche entre silbidos de su hermana y su prima que habían estado gritándonos entre risas para que nos separáramos porque según ellas nos íbamos a ahogar por no respirar. Me quede en la puerta del portal hasta que vi como se alejaba el coche con las tres. Pase el resto del domingo tranquilo en casa viendo la tele, por la noche llego mi hermano con otra amiga y me fui a mi habitación para dejarle el campo libre con ella. Apenas una hora después de estar en mi habitación empezó el concierto en la habitación de mi hermano.
Después de cenar y antes de acostarme cogí el móvil con la sana intención de borrar las fotos que había guardado en él, y me di cuenta de un detalle curioso… Yo tengo la mala costumbre de ser un poco agonías con él y andar siempre borrando las listas de llamadas o de mensajes, solo dejo la lista de llamadas enviadas porque obviamente es mas cómodo mirar ahí los números habituales que en la agenda, por otro lado mi móvil es de los que te dejan reportes por todo lo que hagas con el… por eso al mirar los mensajes para ver si tenía que borrarlos me encontré con dos reportes de mensajes enviados, al comprobar los reportes vi que Raquel se había enviado a su móvil dos de las fotos usando el bluetooth, concretamente las dos que estuvieron a punto de provocar nuestra discusión… que se hubiese enviado la mia podía comprenderlo, ¿pero la de Inma… para qué?. Me apunte el dato para preguntarla al día siguiente en la Uni.
Una de las cosas que más le gustaban de mí a Raquel era que no me mostraba con ella ni celoso ni posesivo, pero también era consciente de que eso era porque confiaba en ella para que ella misma fuese quien pusiese a los chicos en su sitio si se daba el caso. Raquel por su parte no es tan celosa como podáis suponer, distinguía muy bien de la chica que pretendía entrarme de la que se ponía excesivamente pesada conmigo pese a haberla dejado claro lo que había, ahí sí que era cuando ella marcaba el terreno de una forma contundente. Obviamente a ambos nos molestaba que intentaran tirarle el anzuelo al otro, pero confiábamos plenamente en nuestras parejas, de modo que se podría decir que en ese aspecto estábamos la mar de tranquilos, nos teníamos plena confianza… aunque la situación nos jodiera un poquito de todos modos.
Durante los tres primeros días de la semana Raquel no acudió ni pudo quedar conmigo, ya que la salió un trabajo de última hora que no pudo rechazar, por ello se me fue por completo de la cabeza el tema de las fotos que se mando. El jueves y el viernes antes de la fiesta estuvimos como siempre, la mar de acarameladitos en cuanto nos encontrábamos. Debo de decir que Raquel por iniciativa propia siempre me contaba cuando algún chico se había puesto pesado en exceso y había tenido que ponerse seria con él, yo debo de decir que hacía lo mismo con ella cuando era en mi caso con una chica, poquísimas veces comparadas con las de ella, todo esto decidimos hacerlo para evitarnos posibles problemas en el futuro entre los dos vistos nuestros largos antecedentes de golfeo. Cuando lo hablamos supusimos los dos que poco a poco lo iríamos dejando, pero que de momento sería lo mejor para fortalecer nuestra relación…
Me conto que durante el trabajo uno de los modelos masculinos se puso pesado con ella, que le corto tres veces, pero el muy imbécil debía de pensar que era irresistible y que la “gatita” solo se estaba haciendo la dura, mas como se suponía que era Raquel de facilona. Me comento que la abrazo delante de dos de las otras modelos diciéndola que no se hiciese tanto la estrecha que seguro que no había catado una verga como la suya y se llevo la mano a ella masajeándola. Me dijo Raquel que salió de allí mordiendo de rabia pero sin decir nada por no liarla, dada la importancia del trabajo, el resultado fue que el tío se envalentono con ello y la siguiente vez la abordo delante de todo el mundo, incluidos los técnicos, fotógrafos, el resto del personal y el cliente que se les quedaron mirando a los dos… riéndose el capullo le dijo en voz bastante alta para que todos le oyeran, sin duda para dárselas de ligón, que no se hiciese la estrecha, que sabía de buena tinta lo putita que era…
Riéndose me dijo Raquel que no termino de decirlo cuando a los diez segundos estaba retorciéndose en el suelo mientras se sujetaba los cojones, después de eso la tuvieron que separar para que no lo pateara y lo desgraciara vivo, le costó el trabajo, porque el cliente le puso de patitas, además por lo que me dijo Raquel la voz se correría y le costaría volver a encontrar un trabajo de esa categoría, había ido a ser expulsado por alguien a quien mas valía no tener en contra en ese mundillo y lo que el imbécil no sabía es que este cliente además era intimo amigo de su tía. No me gusto lo que me conto, ella se dio perfecta cuenta de ello, alegrándose de ver que me preocupaba y que tenía ganas de matar al capullo… Cuando me pregunto qué opinaba sobre cómo se defendió, me dio la risa arrastrándola conmigo a ello, la bese y felicite por saber defenderse también entre las carcajadas de ambos, estuvimos un buen rato comiéndonos a besos en cuanto dejamos de reírnos del capullo.
El viernes Alex y Marta ya habían hecho las paces, aunque al pobre de Alex le costó lograrlo lo que no está en los escritos. Si ya Marta estaba enfadada de por sí, encima el mismo domingo se había presentado por sorpresa Andrea, la madre de Alex para hablar con Raquel sobre lo de ese trabajo que os dije antes. Cuando se entero del porque del cabreo le dio toda la razón a Marta, diciéndola además delante de Alex que hacía muy bien en estar tan cabreada con él, que nada de perdonarlo, que él era quien tenía que ganarse su perdón, le dijo entonces a su hijo que más le valía ir pensando como compensar a su novia por no haber confiado en ella con todo el tiempo que llevaban juntos, y es que por lo que me conto Raquel, Andrea veía a Marta como su nuera ideal, la perfecta pareja para su hijo.
Raquel tuvo a bien invitarlos a todos ellos a la exposición de fotos, a su hermana, a sus primos, a Marta e incluso a mi hermano Andrés… que se apunto en el acto… De lo de mi hermano me entere el jueves por la noche tras darme este una colleja por no proceder de mí la invitación y haber tenido que enterarse de ello por mi novia. El viernes cuando le pregunte a Raquel esta me informo de todo el mundo al que había invitado, incluida su tía que declino la invitación por no poder ir al estar fuera… Sinceramente que todo esto por parte de Raquel no sabía bien por donde tomármelo.
El viernes Raquel decidió ser ella la que me recogiera para irnos… no sé bien porque me dio mala espina desde que me lo dijo. Andrés me pidió mi coche ya que yo iría con Raquel en el suyo, tal y como sospechaba apareció con el mercedes y no con el Clío, además apareció sola, según me dijo, sus primos, su hermana y Marta irían en el coche de Alex. Una vez en el coche rumbo a la academia no pude por menos que preguntarla…
- Ismael: A que viene todo esto Raquel…
- Raquel: A que te refieres cielo…
- Ismael: Has invitado a todo el mundo, bueno, a las personas que nos son más cercanas, y en lugar de ir con mí coche o el Clío como siempre te traes el mercedes…
- Raquel: Antes prométeme que no te vas a enfadar conmigo…
- Ismael: Raquel, que pasa...
- Raquel: Prométemelo por favor…
- Ismael: ¿Me has engañado con alguien?
- Raquel: No joder, no seas idiota cariño, además ya te conté el roce que tuve con el gilipollas aquel, que no es eso… es otra cosa, pero por favor prométemelo…
- Ismael: Te lo prometo Raquel. Y ahora empieza a hablar, porque estas empezando a preocuparme de verdad, ¿qué pasa…?
Por lo que me conto, esos tres días estuvo trabajando para su tía, Andrea estuvo todo el tiempo con ella. Según parece su tía la estuvo preguntando por mí, por nuestra relación, por… en fin, por todo lo referente a nosotros y como nos había ido en este tiempo, me dijo que se lo conto todo y me especifico el todo, y efectivamente fue todo, todo… joder con Raquel, no me extraño que quisiera que le prometiera que no me enfadaría con ella.
Por lo que me dijo le cayó una bronca por no tener controlada a su prima cuando se le escapo que todos nuestros problemas fueron en gran parte porque se acostó conmigo y como fue… Ni os cuento, a mi me daban los cuarenta males escuchándola, y eso fue solo el aperitivo. No os voy a ir recordando todo lo que ha pasado en estos capítulos, pero para haceros una idea cuando Raquel termino de contarla, su tía no sabía si felicitarla por haber conseguido tenerme tan pillado por ella pese a todo o darla de leches por ser tan idiota, sin mencionar lo que averiguo de su hijita Ana y su sobrinita María...
Por lo que se ve Andrea la dijo que llevaba todo este tiempo intentando mantenerse a mi altura, menospreciándonos a los dos. También por lo visto la dijo que estábamos metiendo la pata manteniéndonos juntos protegiéndonos el uno al otro sin mostrarnos de verdad, que estábamos en un plan empalagoso a más no poder por no ser completamente francos y abiertos, que ya era hora de que saliéramos al mundo aceptándonos los dos como éramos… que dejásemos de hacer el idiota de una puñetera vez.
No diré que entendí algo porque no entendí nada de nada sobre a lo que se podría haber estando refiriendo Andrea con eso. Por lo visto tras la charlita de su tía, ella decidió por su cuenta que iríamos a mi fiesta como fuimos a la suya, por todo lo alto, y que además tanto su familia como la mia debía de asistir para ver mis logros… creo recordar que tras escuchar tan peculiar explicación tuve que contar hasta 1000 para no saltar… sobre su cuello. No obstante me dio la impresión de que me ocultaba algo que no me había contado sobre la conversación con su tía y que quizá en parte tuviese que ver con eso tan extraño que dijo… Cuando me estuvo explicando y repitiendo todo lo que hablo con ella, note ciertos momentos en los que titubeaba, se detenía por un instante buscando como seguir… me dio la sensación de que trataba de evitar decirme alguna cosa concreta sobre lo que hablo o lo que le dijo su tía… el único motivo para no preguntarla directamente sobre ese asunto, fue que no me dio la impresión de que me lo estuviese ocultando por gusto, sino que valga la paradoja, esto lo hacía porque no sabía muy bien como decirme lo que quiera que fuese que me escondía… intentare explicároslo mejor porque vaya lio que he armado.
Veréis, evidentemente tonto el todo no soy, para estar en esa tesitura conmigo estaba claro que lo que Raquel me quería decir era algo que no me iba a gustar ni media o que la deba muchísima vergüenza decirme, que conociéndola como la empezaba a conocer, también pudiera ser… tras haberla tranquilizado al respecto de lo que me conto, diciéndola que la entendía y que ya hablaríamos tranquilamente si ella quería, se relajo casi por completo, y digo casi porque observe que me lanzaba discretas miraditas de preocupación, mordiéndose los labios al hacerlo, para mi estaba clarísimo con todas estas señales que quería decirme eso que de momento me estaba ocultando, pero que no sabía cómo podía hacerlo… lo que como podéis suponer a mi no me tranquilizaba en lo mas mínimo.
Cuando llegamos a la academia y entramos empezaron las presentaciones, presente a Raquel a todo el mundo. Lo cierto es que nada más entrar ya de di cuenta de que a los chicos no me iba a hacer falta ir a buscarlos para presentarles a mi chica, se acercaron a nosotros por iniciativa propia para conocer a mi novia. Esto es como todo, los hay geniales, los hay majos, los hay raros y los hay gilipollas como ellos solos… y de estos últimos había alguno que otro suelto por allí. Cuando me venía a buscar no bajaba del coche salvo en ocasiones muy puntuales, y casi nadie de la clase la había visto bien vista a parte de Inma y un par de personas más. Cuando termine la ronda de presentaciones a Raquel nos fuimos directos a por Inma y su novio, los había dejado a ambos los últimos apropósito, ya que las fotos eran por parejas de compañeros, cuando dejaran entrar donde estaban todas expuestas lo mejor sería ir con ellos y la gente a la que hubiesen invitado.
Nos acercamos a los dos y nos presentaron a tres amigas de Inma que esta había invitado, nosotros les presentamos a nuestros invitados también... Raquel me dio un discreto codazo para que mirara a mi hermano, vi como Andrés se estaba preparando para intentar ligarse a alguna de las amigas de Inma, que por cierto eran bastante guapas las tres, también me di cuenta de que a estas Andrés no parecía serles indiferente tampoco. Enseguida pensé que se nos preparaba una noche la mar de interesante.
Las fotos estaban expuestas en una enorme aula de la academia, todas ellas debidamente identificadas por grupos de trabajo, cuando pasamos allí a verlas estuve pendiente principalmente de Raquel y del novio de Inma, no sabía muy bien cómo se las tomarían cuando las vieran todas… No ocurrió nada con respecto a las fotos, pero hubo otra cosa que no me gusto ni un solo pelo, al novio de Inma podríamos clasificarlo como un chico nueve, o casi. Raquel iba pegada a mí y el iba pegadito a Inma… como digo estuve pendiente de ambos por el tema de las fotos y no me gusto nada lo que vi, no pare de ver cruces de miraditas entre Raquel y el todo el tiempo.
Sinceramente las de él no me preocupaban lo mas mínimo, las miradas que él la echaba eran las mismas que le estaban echando otros treinta tíos por lo menos… Raquel era una preciosidad y destacaba entre todas las féminas allí por donde iba, por eso a lo de las constantes miradas de los tíos sobre ella me había terminado por acostumbrar, pero nunca le había visto a ella mirar de ese modo tan raro a ningún tío… y eso si que no me hizo la menor gracia, sobre todo porque intentaba que no me diera cuenta de ello.
Estuvimos como una hora y media dando vueltas mirando, comentando las fotos… aprecie al cabo de la media hora que Inma se había dado perfecta cuenta de cómo miraba su novio a Raquel, afortunadamente no parecía haberse percatado de las miradas de Raquel sobre él, sino estaba seguro de que hubiese habido más de un problema conociendo a Inma. Tuvimos un problema con dos imbéciles, Raquel se separo de mi para ir al servicio, en el acto vi como dos de los gilipollas del curso se iban detrás de ella… me moví con la suficiente discreción como para poder estar pendiente de lo que pasara sin ser muy obvio, no me preocupaba que pasase nada con esos por parte de Raquel, pero sí que me preocupaba que se pusieran los dos en plan pesados… ya habían tenido algún problema con alguna de las chicas del curso por ello, una de ellas Inma… y además, personalmente ninguno de esos dos me gustaba en lo más mínimo, no me caían nada bien.
Espere unos minutos dándole margen a Raquel para terminar, una vez considere que debía de haber acabado o estar apunto me puse en movimiento hacia los aseos. Me los encontré a los dos hablando en voz baja a la salida del servicio de caballeros, que estaba puerta con puerta con el de señoras… vi como salía Raquel de él pidiendo permiso para poder pasar… se apartaron los dos justo lo necesario como para que Raquel tuviese que pasar de lado y así poder restregarse contra ella… Raquel me vio aparecer y me sonrió, cuando los dos vieron esa sonrisa miraron en mi dirección, separándose en el acto al verme, dejando pasar libremente a Raquel…
Cuando Raquel llego a mi lado me dio un beso, diciéndome al oído que lo dejara correr, que no había pasado nada… era más que obvia mi cara de pocos amigos hacia esos dos, en ese momento aparecieron detrás nuestro Alex y mi hermano Andrés, aproveche la ocasión para decir a Raquel que se fuese con los demás que yo iba al servicio… cuando nos acercábamos los tres a ellos, vi como esos dos cada vez se acojonaban mas… supuse que el enfrentarse a uno solo lo podrían llevar, pero ahora éramos tres y el mas enclenque era yo… de modo que al pasar junto a ellos deje que Alex y Andrés entraran… antes de entrar les susurre a ambos algo así como…
- Ismael: Si volvéis a intentar otra cosa así con mi chica… pude que cualquier mañana cuando salgáis de casa os encontréis con varios bates de beisbol esperando para saludaros… estáis avisados…
Como ya dije en un capitulo anterior, tengo una buena intuición, se cuando alguien se puede arrancar de forma violenta y cuando no, y estos dos estaban simplemente manteniendo el tipo como podían mientras nos acercábamos los tres, por sus caras cuando entre al servicio tras decirles eso vi que se lo habían tomado de lo mas enserio. No volvieron a acercarse a Raquel para nada durante todo el resto de la noche… lo cierto es que lo de los bates de beisbol tampoco iba del todo en broma, lo cierto es que si lo dije es porque lo pensé, así que...
Después de la academia nos fuimos todos juntitos de cena, pero ya por grupitos, Inma, su novio y sus amigas junto con algunos otros compañeros de clase se vinieron con nosotros… a mí las miraditas entre Raquel y el novio de Inma estaban empezando a mosquearme en serio… como ya dije, principalmente con la de Raquel hacia él. Durante la cena mi mosqueo aumento, al sentarnos ellos dos lo hicieron justo enfrente nuestro, desplazados un sito hacia mi lado, con lo que Inma quedo justo frente a mí y nuestras respectivas parejas enfrente de la persona que estaba a nuestro lado, las miraditas parecían no ceder ni un ápice, aunque en el caso de Raquel no tenía muy claro si además de las miraditas con él, no estaba vigilando también a Inma por si me las lanzaba a mi..., al estar en la posición que estábamos no estaba seguro de hacia quien de los dos miraba cada vez.
Después de cenar nos fuimos por ahí a bailar todos juntos, una vez allí nueva sorpresa para mí. En toda la noche no pude bailar con nadie porque Raquel me monopolizo por completo, se notaba que me quería solo para ella y que no quería a ninguna bailando conmigo… la verdad es que no sabía por donde cogerlo. Lo cierto es que a la media hora de estar así, aparte de estar en la gloria, porque siempre que tenia a Raquel en mis brazos era una autentica gozada, me hacía sentir como en una nube… empezó a parecerme como si Raquel estuviera tan pegada a mi era porque se avergonzaba de algo o… no se… era una sensación como de que estuviera intentando compensarme por algo o así… no sé si he logrado transmitiros la sensación que me dio, y que me preocupó, me preocupó mucho.
En toda la noche no le hice a Raquel en menor comentario respecto a nada de todo esto que os he contado, llevaba el comecocos por dentro. Inma estaba cada vez mas enfadada con su novio por el continuo babeo al mirar a Raquel…, por otro lado Inma de repente no dejaba de cruzar miradas conmigo, me dio la impresión que como disculpándose por su novio, no sé qué interpretaría Raquel, porque a los diez minutos de empezar Inma a mirarme así fue cuando se empeño en que nos fuésemos a su casa, que tenía ganas de estar a solas conmigo. Nos fuimos relativamente pronto los dos hacia su casa… serian sobre las dos de la mañana, todos los demás se quedaron allí, que por cierto creo que Andrés logro camelarse a una de las amigas de Inma por lo que vi.
Cuando llegamos a los cinco minutos estábamos los dos en la cama de Raquel, concretamente yo entre sus piernas lamiéndola el coñito mientras ella gemía y suspiraba cachonda perdida, cuando me situé para comérmela me encontré su sexo completamente encharcado, de hecho al ayudarla galantemente a quitarse el tanga que había usado, me encontré con que la tela que le cubría el sexo estaba que parecía que la hubiesen sumergido en agua… literalmente chorreaba flujos… No creo que ninguno de vosotros o vosotras no veáis por donde fueron mis sospechas respecto al más que evidente calentón de Raquel… pero me calle y no dije nada, necesitaba pensar y en esos momento mi sangre estaba concentrada en otro sitio, de modo que lo deje para cuando estuviese más tranquilo. No quería hacer nada en esos momentos, y menos así, en caliente, quería evitar la posibilidad de decir algo de lo que luego me tuviese que arrepentir… y porque no decirlo también, en ello influyo muchísimo el miedo a perder a Raquel, creo que en cierto modo también fue algo así como meter la cabeza bajo el ala para intentar no verlo.
Estuve lamiéndola lentamente su rajita, acariciándola los muslos a la vez, la estuve llevando despacio pero sin pausas hacia su primer orgasmo de la noche, tardo apenas dos minutos en alcanzarlo, eso me indico el nivel de calentura que llevaba encima mi chica. Nada más terminar su orgasmo empecé nuevamente a jugar con su sexo, poniéndola otra vez a tono, muy lentamente empecé a introducirla uno de los dedos de mi mano en su coñito, moviéndolo con suavidad, metiéndolo y sacándolo de él mientras mi lengua empezaba a trabajarla el clítoris con muchísima suavidad, acariciándoselo con cuidado… sus jadeos y gemidos se dispararon cuando un segundo dedo se unió al primero, trabajando con los dos sobre ella… su cuerpo empezó a tensarse, señal de un próximo orgasmo… al notarlo aumente el ritmo de mis dos dedos, encerrando su botoncito con mis labios aplicándola una suave succión mientras la punta de mi lengua la daba pequeños toquecitos… Se desato en ella un fortísimo orgasmo en cuestión de segundos…
Raquel estaba derrengada sobre la cama, me pidió jadeante que subiera hasta ella para besarla, estuvimos abrazados como unos quince minutos hasta que se recupero, tras esto bajo a por mí aun más si cabe que al principio endurecida polla. Me dolía incluso tras tanto tiempo con el arma en ristre… Raquel es una maestra de las felaciones, una autentica maquina, se la metió del todo en su boca, por completo, hasta la garganta, empezó a trabajarla con ella completamente dentro... me corrí en su boca en cuestión de tres minutos… cuando empezó a soltar leche se la saco, dejando solo la puntita dentro de su boca, según ella era para tener espacio para recoger su comidita… se trago toda mi leche, por completo. Tras ello me metió un morreo de aúpa, su boca sabia a mi leche, y supongo que la mia sabría a su flujo, pero a ninguno de los dos nos importo lo mas mínimo.
Después de esto y una vez que mi soldadito se recompuso me situé sobre ella, colocándome entre sus piernas, ella misma guio mi pene a la entrada de su intimidad, se enfado conmigo y todo cuando empecé a jugar y a puntearla, me pidió, me ordeno que se la metiera de una vez, que no aguantaba las ganas de tenerme en su interior, que dejara de hacer el tonto y le diera lo que llevaba queriendo toda la noche. Entonces de un solo golpe se la calce hasta el hígado, ella soltó un fortísimo gemido, para a continuación decirme…
- Raquel: Siiiiiiiiiiiiii… mi amor….. Por favor….. Sigue dándome…. Dame así de fuerte…. Por favor…… así de fuerte….. diosssssssssssssssssssss…..
No me hice de rogar en lo más mínimo, empecé a moverme en su interior todo lo fuerte que era capaz, metiéndosela hasta el fondo. Se la sacaba casi hasta fuera del todo para después caer a plomo sobre ella, clavándola sin piedad en sus entrañas… pese a que no iba rápido parecía que esto la enloquecía por completo, mantenía el ritmo de un martillo, plac, plac, plac… Seguí fòllandomela sin parar pese al orgasmo que alcanzo a los pocos minutos de estar dándola así, en cuestión de tres minutos tras el orgasmo estaba otra vez como cuando empecé a penetrarla, enloquecida, pero esta vez no pude evitar correrme en su interior cuando alcanzo su nuevo orgasmo… me arrastro con ella al correrse, fue increíble corrernos juntos mientras nos mirábamos a los ojos… ambos quedamos agotados sobre la cama.
Cuando estábamos descansando, ella estaba abrazada a mi mientras que mis manos eran incapaces de permanecer quietas, no paraban de acariciarla, y ciertamente a ella no parecía desagradarla en lo mas mínimo. Parecían tener una especial predilección por el culito de Raquel, no paraban quietas acariciándoselo, junto con su espalda, pasaban de una a otro sin parar… en un momento dado… mientras yo andaba dándola besitos y medio perdido en mis pensamientos sobre todo lo sucedido por la noche, en la exposición, la cena, la disco…
- Raquel: Amor… ¿Quieres hacérmelo por ahí?
- Ismael: ¿Qué…? (Me pillo por sorpresa, estaba totalmente ido, perdido en mi mundo pensando)
- Raquel: Que si quieres que hagamos sexo anal cielo… tus manos parecen muy interesadas (me sonrió con malicia al decirme eso)
- Ismael: Pero te hare daño Raquel, como la otra vez y no creo que…
- Raquel: Amor, ya sabes que no soy virgen por ahí, y créeme que estoy segura que contigo lo disfrutare seguro… por favor no temas hacerlo por si me duele… soy tuya por completo, y ese agujerito va incluido en el lote… además, me gusta hacerlo… (Me sonrió con cara lasciva)
- Ismael: Cuanto hace que no lo practicas amor… bueno aparte de…
- Raquel: Más de un año… ya te conté todo el tiempo que he estado sin acostarme con nadie… pero ahora te tengo a ti y quiero ser tuya por completo… (Me abrazo muy fuerte)
- Ismael: Cariño, no creo que sea una buena idea, tienes trabajo el domingo, no creo que sea lo mejor… te podría afectar…
Vi como se mordía los labios pugnando por decidir qué hacer… acepto lo que le dije de que no era el momento adecuado por su trabajo, pero me dijo que en cuanto pudiéramos lo haríamos, que quería ser totalmente mia sin condiciones. Se durmió en mis brazos en menos de quince minutos, se la veía agotada del todo, estuve dándola besitos y acariciándola mientras se dormía. Antes de caer en los brazos de Morfeo incluso ronroneo como una gatita. Una hora después seguíamos en la misma posición y yo no podía dormirme, dándome vueltas en la cabeza todo lo que había pasado...
Me levante con mucho cuidado de no despertarla, yéndome al salón… antes de llegar me desvié hacia la cocina para beber un poco de agua, tenía la garganta completamente seca. Una vez en el salón me situé delante del balcón, mirando por el cristal hacia afuera con los brazos apoyados en el marco de la puerta del mismo, pensando… aunque había intentado que Raquel no notara nada de nada, lo cierto es que me sentía deprimido, había muchas cosas que no entendía y que temía…
El pasarse la foto de Inma junto con la mia al móvil, las miraditas con el novio de Inma, lo que fuese que me estuviera ocultando por no saber cómo decírmelo… además de mi permanente obsesión por pensar que no estaba a su altura… empezaba a pensar que todo esto ya se estaba acabando, que no tardando mucho Raquel me diría un “lo siento pero he conocido a otro...”, en fin, ya sabéis como funciona, no quieren hacer daño, fue sin premeditación, eres genial… pero… patada en el culo. Lo cierto es que en cierto modo llevaba esperando eso desde el principio… un chico siete con una chica quince… solo en los cuentos de Disney, estaba a punto de llorar.
Me sobresalte, sentí como unas manos pasaban alrededor de mi pecho abrazándome por la espalda, como la cara de Raquel se apoyaba en mi espalda preguntándome…
- Raquel: ¿Que pasa mi vida, que te preocupa…?
- Ismael: (Le sujete las manos con las mías) No podía dormir cielo… solo eso…
- Raquel: No cariño… se que algo te ocurre, llevas raro toda la noche… desde que nos hemos visto no has estado normal mi vida… por favor, dime que pasa… te quiero y me preocupas amor… por favor, confía en mí, ¿dime qué pasa?
Era un pregunta directa y concisa por su parte, prometí no engañarla nunca… decidí seguir cumpliendo con lo que le prometí, estuve unos veinte segundos calmándome para poner todos mis pensamientos en orden para soltárselo todo de golpe y ver donde terminábamos con esto… aunque temía que solo iba a lograr llevarme el palo antes, pero bueno… contra antes sea menos dolerá… eso ni yo me lo creía, pero me prepare…
- Ismael: Pasa amor que no entiendo según qué cosas… (Note como se tensaba levemente)
- Raquel: ¿El qué?, ¿A qué te refieres?
- Ismael: De verdad quieres que te conteste…
- Raquel: Por supuesto que si… sea lo que sea… lo afrontaremos juntos…
- Ismael: Primero a pasarte a tu móvil desde el mío por bluetooth mi foto y la de Inma cuando te las enseñe para que vieras que te ibas a encontrar en la exposición…, la mía vale lo puedo entender, pero la otra… (Sentí como se estremeció). He visto todas las miraditas que le has echado esta noche desde el mismo momento en que entramos en la exposición… (Sus manos se crisparon y se aferro a mí todavía más fuertemente) También me preocupa lo que no me has dicho cuando íbamos… sé que me has ocultado algo que te paso con tu tía (Su cara se separo de mi espalda para apoyarse su frente con fuerza, sus manos temblaban)…
Empezó a llorar, la sentí gemir mientras seguía abrazada a mí, sentía resbalar sus lágrimas, caer de su cara a mi espalda y caer por esta… después gimoteando no paraba de decir que no la iba a perdonar, que pensaría que era una pervertida o algo todavía peor… Sinceramente pese a todo se me partía el corazón de oírla, así que con cuidado me desasí de su abrazo para darme la vuelta y poder abrazarla contra mi… se aferro a mí como si fuese su tabla salvavidas en medio del océano. Lo que dijo de que no la iba a perdonar me llevo a pensar que quizá se hubiese acostado con el novio de Inma o algo así, sexo oral, no se… no puede evitar la pregunta… creo que en mi voz se mezclaron los celos, la cólera y la decepción…
- Ismael: Os habéis acostado, ¿no?, habéis hecho algo y por eso esas miraditas…
- Raquel: No mi vida, te juro que no, entre Inma y yo jamás ha habido nada, no creo ni que ella tenga esas intenciones conmigo amor… te lo juro no es lo que tú piensas… créeme mi vida, por favor créeme… (Rompió a llorar aun más amargamente)
- Ismael: Que tiene que ver Inma en esto… me refiero a su novio Raquel…
- Raquel: (Paro de llorar sorbiéndose los mocos y limpiándose los ojos de lagrimas) ¿Su novio?... ese es un baboso asqueroso… no viste como me miraba incluso delante de Inma… ¿qué pasa con su novio….?
- Ismael: Pues eso Raquel… joder que le estabas mirando con deseo… o eso me pareció a mi…
- Raquel: ¿A él?... no amor, te juro que no era a él, miraba a Inma… pero no era así como tú crees… (Su voz sonó avergonzada)
Os juro que me tuve que sentar en el sofá porque me temblaban las piernas… ahora sí que estaba totalmente desplazado, no entendía nada de nada, esas miradas iban dirigidas a Inma y no a su novio… y seguro que el muy imbécil las malinterpreto igual que yo… me alegre porque eso significaba que no se había estado fijando en otro, que me seguía queriendo… pero solo duro unos segundos, recordé que se había estado fijando en otra tía… enseguida pensé que era irónico, temer perderla por un chico diez e ir a perderla por otra mujer… me hacía sentirme patético… Raquel se sentó a horcajadas sobre mí abrazándome o abrazándose a mí, que ya no sabía ni qué coño era lo que pasaba o que pensar.
- Ismael: Explícate porque no entiendo nada de nada Raquel… pero nada de nada…
- Raquel: Es que… tengo miedo de perderte si lo hago… tengo miedo de que pienses que soy una pervertida, una guarra o peor… por eso no te lo conté cuando te dije lo que hable con mi tía…
- Ismael: Eso que no me has contado es sobre Inma…
- Raquel: (Con los ojos rebosando lagrimas y cara de miedo asintió con firmeza) Si.
- Ismael: ¿Has follado con ella, sexo oral o algo así…?
- Raquel: Nunca nos hemos visto a solas, siempre has estado tú delante cuando hemos coincidido…
- Ismael: Raquel… te juro que no lo entiendo… entonces por el amor de dios… a que narices le tienes miedo… qué coño has hecho para estar tan asustada y temer que yo te pueda dejar…
- Raquel: Prométeme que… (La corte, esta vez enojado de verdad)
- Ismael: No te prometo nada Raquel… esta vez no… habla por favor… me estas asustando Raquel… por favor dime que es lo que has hecho…
Cuando me lo termino de contar os juro que no sabía si darla de ostias, de besos, llorar, reírme, mandarla a un sicólogo o tirarla por el balcón directamente… Cuando nos conocimos y empezamos a salir le conté que me había follado a Inma… según parece cuando se la presente fue como un shock para ella, le recordó a un chica muy parecida que la levanto, o más bien se follo y ella los pillo, al único novio que tubo que se podría considerar como tal. Según su apreciación, Inma era del tipo de chica que si se encoñaba con un chico no paraba hasta llevárselo, hiciese el daño que hiciese… imaginaos de quien pensó que estaba encoñada Inma, mas cuando según me dijo al despedirnos y darnos como siempre el beso antes de entrar en el coche vio la cara que puso Inma de desagrado por lo que veía.
En ese entonces teníamos los problemas sexuales que teníamos… yo acababa a duchas y ella me conto que se aliviaba con un consolador o por lo menos lo intentaba. Por lo que me comento eso tampoco la servía, muchas veces era incapaz de alcanzar el orgasmo… si pensaba en mi recordaba lo pasado con su prima y adiós muy buenas. La solución sería pensar en otro, pero según me explico eso no la hacia la menor gracia… se sentiría como si me engañara, a parte que eso la hacía pensar en la posibilidad de que yo hiciese lo mismo y era peor el remedio que la enfermedad, porque se ponía celosa y se le pasaba el calentón al instante, por lo menos de momento. El hacerlo a palo seco sin pensar en nadie… pues eso… imaginadlo… imposible. Para mi total asombro me dijo que el viernes que conoció a Inma se soluciono ese problema para ella, que llego a un orgasmo bestial con su consolador… la dejo destrozada…
Como supondréis no me hizo la menor gracia el que me dijeran eso, que se había corrido pensando en Inma… su contestación me dejo de cuadros, y la explicación ya fue… de traca y con cohetes. Según me dijo empezó como siempre a intentar desahogarse pensando en que follaba conmigo, pero esta vez en vez de aparecer en su cabeza la imagen de Ana, apareció la de Inma mirándonos… según me dijo lo de imaginarse a Inma mirándonos follar con la cara que puso cuando nos vio besándonos mientras se tenía que conformar con pelarse el coño sin poder tocarme a mí, e imaginarse a ella dejándola claro que desde ese momento solo me podría mirar de lejos porque solo ella follarìa conmigo… la llevo a un orgasmo brutal…
Si dijera que no pensé seriamente en recomendarla que fuese al sicólogo o a un buen siquiatra mentiría… Encima para arreglármelo me dijo que su empeño posterior en ir a llevarme ella y a recogerme era por poder conseguir una imagen de “esa cara” de Inma… que lo logro al tercer día, me hizo recordar que cuando me abrazaba siempre tenía su móvil en la mano… por lo visto era para hacerla la foto, para poder mirarla luego cuando se masturbara. Me dijo además que la cara de Inma no era tanto de celos, como de desaprobación por ella, que sin duda pensaría que lo que pretendía una chica como ella era divertirse a mi costa… que si siguió llevándome y trayéndome fue para darla en los morros con eso y de paso refrescar su imagen para sus masturbaciones ya que se ponía cachondisima… además de que no le gustaba esa reacción de ella, se temía que Inma pudiese estar enamorada de mi aunque quizá ella misma no lo admitiese, Raquel tenía claro que no pensaba correr el riesgo de dejarme a su alcance, y menos con los problemas que teníamos en esa época con el tema del sexo…
No pude evitarlo y le pregunte si cuando ya hacíamos sexo oral ella todavía se desahogaba así… me aseguro que no, que eso solo lo hacia los días que trabajaba y no podía estar conmigo, que entonces sí, recurría a ello. El colmo fue cuando la reclame por haberse pasado la foto de mi móvil, que no entendía eso, nosotros ya fóllabamos normalmente, habíamos pasado la crisis… colorada como un pimiento morrón me soltó que pensó que cuando me folle a Inma fue el día en que hicimos esas dos fotos… Lo cierto es que no me pude callar y le dije que no, que fue unos días después, pero que imito esa pose y me dijo refiriéndose al día que ella me ayudo a llevarla a casa porque estaba borracha, que no había bebido, que si la pensaba dejar escapar. Le dije a Raquel que fue entonces cuando me la folle.
A Raquel le rechinaron los dientes al oírme, dijo…
- Raquel: Ósea, que no fue el día de la foto… fue porque la muy puta se puso como en la foto… será zorra la asquerosa esa… (Todo esto entre dientes y mascando las palabras)
- Ismael: Bueno Raquel, no me has contestado, para que querías la dichosa foto… no lo entiendo…
Se puso colorada, me miro de reojo y me pidió que no me enfadara por lo que me iba a mostrar… salió corriendo hacia su habitación, regreso con un tubo de cartón de esos de guardar mapas, etc, de su interior salieron varias ampliaciones de la foto de Inma con las líneas de una diana y varios dardos… No me lo podía creer, se había pasado la foto, para ampliarla y usarla como diana para jugar a los dardos… no os cuento el ataque de risa que me dio, me caí de lado sobre el sofá, con Raquel todavía a horcajadas sobre mí. Aun riéndome tuve que reincorporarme para abrazar y consolar a Raquel que se puso a llorar como una madalena al ver mi reacción… sin duda por toda la tensión anterior acumulada. Se lo conto a su tía o esta le saco, que no lo tengo todavía muy claro, todo lo referente a sus masturbaciones, incluido lo de los dardos, y esta la dijo que me lo dijera, no fuese que todo esto de Inma se le escapara en algún momento más adelante en medio de alguna pelea y entonces seria muchísimo peor, ya que en este momento como bien la dijo su tía, para mí por lo que ella había podido ver no pasaría de ser una tontería de ella o como mucho un leve cabreo sin más, algo de lo que me reiría sin la menor duda… pero eso sería contándomelo ahora… siendo ella tan clara conmigo como yo demostraba serlo con ella.
Por lo que me dijo Raquel, lo de pensar en contármelo era mucho más fácil decirlo que hacerlo… la daba vergüenza decirme todo esto que le había tocado contarme ahora de mala manera, no sabía cómo decirme que se corría y ponía cachonda perdida con Inma al masturbarse. Como he dicho antes, estaba abrazándola, consolándola, dándola besitos y mimitos, pero sin saber realmente si darla de ostias, de besos, llorar, seguir riéndome, mandarla a un sicólogo o tirarla por el balcón directamente… La que me había hecho pasar la puñetera por esta tontería… bueno, realmente tontería entre comillas, porque tenía su miga, ¿qué no?
Después de esto me la lleve a la cama, estaba la pobre jodida, jodida, jodida de verdad. Para quitar hierro y que se tranquilizara decidí soltar una pequeña gracia… que además no era nada graciosa, pero funciono… lo malo es que se volvió la tortilla y el que tuvo que dar explicaciones fui yo… encima.
- Ismael: No llores cariño… tu preocupada por eso, y yo pensando que ya había llegado el momento en que me dejarías…
Pego un respingo de aúpa, estaba dándome la espalda conmigo abrazándola, no se atrevía a darme la cara… pues fue oírme y darse la vuelta como si le hubiesen mordido. Me pregunto el porqué de pensar que haría eso en algún momento con todo lo que me había demostrado ya que me quería. Yo sabiamente volví al chico siete y la chica quince… y ella se olvido de toda su vergüenza, su congoja o lo que la estuviese pasando para agarrarse un cabreo conmigo de no te menees por según ella, “ser tan gilipollas”.
Lo cierto es que toda esta historia sirvió para estabilizar definitivamente nuestra relación, apartando de nosotros todas nuestras dudas y miedos. Raquel me explico porque yo era alguien muy especial para ella y no quería perderme por nada del mundo. Según parece con todos los tíos con los que había estado le había pasado lo mismo, para ellos solo era la tía que estaba de puta madre, era una zorra de cuidado que follaba como dios y que además podría lanzarlos en su carrera o cuanto menos sacarla algo de dinero. Para aquellos con los que solo había tenido sexo no pasaba de ser la puta que se follaba cualquiera que se la trabajase un poquito… así había sido durante unos años, hasta que aparecí yo en su radar…
No os creáis que fue agradable porque me pego algún palo que otro la señorita mientras me contaba esto. Pese a lo que le dijo a Marta, su interés al principio no fue realmente porque le gustase, sino porque me había visto liarme con un par de chicas, y estas parecían apreciarme y no considerarme un cerdo, eso sí, me dejo muy claro que no se imagino viéndome que ligara tanto, posiblemente de haberlo sabido no se me hubiese acercado para nada pensando que solo sería uno más como los que ella conocía y además más feo y con peor físico, añadiendo después, un “gracias a dios no lo supe, si te pierdo por esa estupidez me pego un tiro”.
Me dijo que llevaba tiempo sin sexo y la picaba el chichi, textual, así que le parecí una buena opción… por lo menos hasta que intento ponérseme a tiro, por aquello de que yo diese el primer paso, lo intento un montón de veces, incluso me conto la ultima que hizo por su cuenta a la desesperada… y según me conto con un gesto un poco torcido, esa vez di el paso, pero para pasar de largo de ella. Lo cierto es que no recuerdo lo que me conto, pero si ella lo dice. Por lo visto me intercepto en la biblioteca, yo iba mirando un libro, ella se planto delante mirando una inexistente carrera en la media por la parte de atrás del muslo, se había subido la mini tanto que dejaba ver el inicio de su braguitas encerrando su espléndido trasero, para asegurarse se había puesto en medio del pasillo, y yo lo que hice fue pedir disculpas, apartarla y seguir mi camino como si no existiera… y esa fue la gota que colmo el vaso, el ligarme empezó a verlo ya como una cuestión de honor… cuando sucedió lo de Marta por algún extraño motivo y pese a lo que me había contado, ya se encontraba enganchada conmigo aun sin saber muy bien como le había podido pasar eso sin conocerme siquiera, entonces aprovecho su relación con Marta para que la ayudara conmigo, aunque a ella tampoco se atrevió a contarla todo esto que ahora me estaba diciendo a mí por temor a que la mandara a paseo al verla tan “amiga” mia, a ella por lo visto se lo dijo de un modo mucho mas light y romántico.
Recordad que os dije al principio que para mí era como si no existieran… además, que si iba concentrado en otra cosa pues… joder, que queréis, yo soy así. Luego vino lo de los problemas por el tema de Ana… teniéndola a ella como novia aguante sin sexo respetándola y dándole tiempo, cuando me lance sobre ella pensó que en el fondo era como los demás pese a lo que me quería, pese a lo que me defendió Marta y todo lo que ella sintió por mí, pero que cuando se entero de que había caído enfermo, supuso el motivo y… Aquí rompió a llorar y tuve que calmarla otra vez, tardo su tiempo en calmarse. En definitiva, que tenia clarísimo que la quería de verdad, y lo más importante, que quería a Raquel y me preocupaba por Raquel, que no la miraba como la tía maciza y que ella era lo más importante para mí por ella misma sobre cualquier otra cosa o consideración… La había aceptado tal y como era, con su pasado, son sus luces y sus sombras… y además era sincero con ella hasta resultar odioso, lo que según me dijo la encantaba en cuanto se le pasaban las ganas de partirme la cara.
Luego me dijo, que su tía Andrea cuando la conto todo la dijo que lo que sucedía es que ella se sentía muy insegura conmigo porque no sabía muy bien como entrarme, ya que no me parecía en nada a los otros chicos con los que había estado, digamos que yo era “terreno nuevo”, y además mi propia inseguridad con lo de calificar a la gente provocaba que diese mis propios bandazos descolocándola por completo y provocando que arreciaran sus temores. Según me conto que le dijo su tía, lo primero que deberíamos de hacer es sentarnos como en ese momento, y soltar todo lo que sentíamos, temíamos, pensábamos o se nos pasara por la cabeza, que es justo lo que hicimos esa noche, reforzando definitivamente nuestra relación.
Y ahora aquí me tenéis, de todo esto han pasado un par de añitos y los dos somos como siameses y seguimos igual de empalagosos pese a lo que diga la tía Andrea, es algo que nos encanta. Ahora soy todo un ingeniero y gano un más que sustancioso sueldo… que no le llega al de Raquel ni a la calderilla, pero bueno. Ese mismo año le perdimos la pista a Inma, dejo a su novio y se mudo fuera... Mi chica se pasa a veces más de una semana fuera por trabajo, eso sí, cuando regresa al día siguiente solo nos falta tener que ir a urgencias de las ganas que nos tenemos tras la sequia forzada, porque el sexo virtual por internet o por teléfono definitivamente no es lo mismo… ahora quiere que nos casemos y ponernos enseguida a por el niño, lo cierto es que su carrera es lo bastante estable como para poder hacerlo así, de modo que no he puesto pegas para ello. También es cierto que su Tía Andrea hablo largo y tendido conmigo para apoyar a su sobrina… sinceramente no sé quien tenía más ganas de que nos casáramos, si Raquel, o su tía Andrea… creedme que no.
De todos modos hay cosas que no cambian, cuando estamos juntos y salimos por ahí pasa lo de siempre, ella es la que esta buenísima, a ella es a la que asedian en cuanto nos separamos, pero ella es la que se pone de uñas en cuanto alguna es más pesada de lo normal, es decir, está más tiempo del necesario para decir hola y adiós… Aun que no os creáis que esto es solo ella, que por mi parte cuando se acercan a ella me pasa igual, solo que yo lo disimulo mejor y no se me nota tanto.
FIN