Hasta el día de hoy 54

Tenía a esta chica justo donde y como quería, el problema como ya dije es que me daba un poco de reparo por si la daba algo después de putearla tanto y tantas veces. Llevaba en total más de veinte minutos al borde de un orgasmo, llegándole la sensación de varias formas distintas, desde su coñito, desde sus pechos, desde su culito... pero desde ningún sitio había sido capaz de alcanzarlo. Ahora la cuestión es que debía de hacer para que alcanzara el orgasmo... quería que no se olvidara, pero sin que ello significara engancharse a mí por esta situación. Así que en vez de la putadita como estuve tentado de hacerle, elegí otro camino intermedio con ella...

De forma muy, muy suave empecé a estimularla con dos dedos su culito, mientras otros dos dedos se encargaban suavemente de introducirse dentro de su coñito... moviendo en ambos sitios rítmicamente, haciéndoles juntarse ambos en su interior, rozándose dentro de ella, jugueteando entre ellos, llevándola lentamente otra vez de nuevo a la cima, a situarla una vez más lista para un orgasmo. La tenia justo donde quería, al borde de la locura, sin fuerzas para hacer nada salvo gimotear y suplicar en susurros... ya que ni hablar normal podía casi... entonces, cuando note que estaba al borde de desencadenarse el orgasmo, rodee con mis labios su capuchoncito, su botoncito del placer, para suavemente iniciar una succión sobre el... incrementando su intensidad poco a poco, hasta desencadenarla un orgasmo brutal, tan brutal que quedo completamente inconsciente debido a todo el cumulo de sensaciones que se desato en su cuerpo, su mente simplemente se desconecto ante tal avalancha.

Después de soltarla del todo y comprobar que estaba bien, procedí a lavarme y arreglarme debidamente para marcharme, pero antes debía de hacer una cosa más con ella, una última putada, aunque reconozco que mas que putada podría considerarse una humillación para ella. Después puse una silla en los pies de su cama, sentándome en ella con el respaldo hacia adelante, apoyando los brazos en el mientras esperaba a que se recuperara mirándola. Ahora debía de conseguir dos cosas más de ella...

a) Que me entregara a la otra petarda en bandeja, pero sin que fuera consciente de que la estaba utilizando para ello.

b) Que se la quitara cualquier idea que pudiera tener con respecto a intentar nada mas conmigo, y si era posible que prefiriera evitarme como fuera.

Para esto tenía que lograr por un lado picarla en su amor propio y por otro, llevarla al borde de la vergüenza y la humillación, pero de forma que entendiera que si de esta se había librado, la siguiente podría ser desastrosa para ella... Ahora vería si mi plan funcionaba de verdad, o por el contrario había metido la pata y conseguido justo el efecto contrario, que no os penséis que estaba muy seguro de cuál de los dos efectos tendría todo esto.

Cuando se despertó vi como intentaba enfocar su atención a lo que había a su alrededor, síntoma claro de desorientación, estaba intentando saber donde estaba y que había pasado. Vi en su cara como lentamente a medida que iba recordando se iba tranquilizando, por lo menos hasta que fijo su mirada en los pies de la cama y me encontró allí, sentado en la silla, mirándola fijamente. Hizo intención rápidamente de reincorporarse, deteniéndola yo al decirla...

- Yo: Antes de levantarte, yo que tú me sacaba esas velas del coño y del culo...

- Ella: ¿Que?, ¿Cómo?...

- Yo: Que te saques las dos velas que tienes metidas en el culo y el coño antes de incorporarte, no sea que te las metas hasta el fondo y luego tengas problemas con ello...

Ni os digo la cara que puso al tocarse y notar que en efecto tenía algo dentro de ambos orificios. Al tirar de los objetos comprobó dos cosas, la primera que todo le molestaba al tocarse en la zona vaginal y anal, y la segunda fue que en efecto lo que tenia dentro eran sendas velas aromáticas, que creo que por la cara que puso reconoció como suyas, después puso cara de estar intentando recordar como habían llegado esas dos velas a ese sitio... Veía como la pobre hacia esfuerzos por intentar ponerse al día lo más rápidamente posible sobre todo esto. Evidentemente de las velas no pudo recordar nada, ya que se las introduje yo cuando estaba sin sentido para hacer todo esto un poco más... como diría... un poco más, "excesivo".

Vi que empezaba a hacerse preguntas, mirándome a mí de una forma como si esperara respuestas por mi parte. Me limite a esperar a que se decidiera a iniciar su interrogatorio, algo que sabía que haría antes o después, pero al ser la única persona que la podía explicar que era lo que había pasado... porque la pobre estaba bastante pérdida.

- Ella: ¿Que ha pasado? ¿Esas Velas...?

- Yo: Lo que ha pasado es que no me has aguantado dos asaltos, te has corrido enseguida con cualquier cosa que te hiciera, lo de las velitas ya ha sido el acabose, te has desmayado y todo, al final para quedarme yo agusto me he tenido que hacer una paja, porque si tengo que depender de ti... lo llevo claro.

- Ella: ¿Como...?, ¿Pero qué dices...?

- Yo: Digo que para la fama de puta que tienes follando, desde luego eres un petardo de cojones. Si llego a saber que al final iba a acabar teniéndome que hacerme una paja te iba a haber acompañado hasta aquí tu puta madre guapa.

- Ella: ¿Pero qué coño dices imbécil...?, ¿Como que follando soy una petarda...?, ¿Pero tú quien coño te has creído que eres, ¡¡gilipollas...!!?

- Yo: Mira zorra imbécil, no voy a discutir contigo... no mereces la pena. Pero tu mírate bien tonta del coño, estas en la cama destrozada del todo, con el culo abierto como un bebedero de patos, con el coño completamente irritado, con todo el cuerpo lleno de tus flujos, con la puta cama tan empapada en ellos que parece que te hayas meado como una cría... pero sin restos de leche mia por ningún sitio salvo en tu estomago, y eso porque te la tragaste... ¿Pero tú de veras piensas que me has dejado satisfecho sin haberme corrido nada más que con esa mamada de cría de colegio que me has hecho al principio...?, tía, tu no vales ni para puta...

- Ella: Pero que cojones dices estúpido, todos dicen que yo...

- Yo: ¡¡¡Que tú, ¿Que...?!!!, pero si te has corrido en mis manos como una perra, has gritado y me has pedido que te follara como una puta cuando no vales ni para tomar por culo follando, que me has dejado a dos velas y me he tenido que hacer yo mismo una paja para poder correrme... menudo petardo que me has demostrado ser, no sé de donde coño has sacado la fama esa de golfa que tienes, pero ni una cría de 16 años me hubiera dejado así... A ti te han dicho los tíos que te hayan follado que eras la ostia para poder seguir teniendo un coño donde meterla, o una guarra que les chupara la polla, porque otra explicación no tiene viendo lo nula que eres en la cama zorra idiota...

Cuando vi que iba a empezar a hablar de nuevo y que esta vez estaba empezando a cabrearse aproveche la ocasión para darla el golpe de gracia. Además había una cosa que me estaba sorprendiendo y si no me equivocaba decidí aprovecharlo en mi favor, me había fijado en que sus pezones se estaban endureciendo otra vez a marchas forzadas con la conversación... increíble, se estaba poniendo otra vez cachonda la desgraciada, ¿a que todavía me jodìa el plan esta zorra...?. Me levante y me fui raudo a por ella que al verme ir de esa forma se intento echar para atrás en la cama, haciendo un gesto de dolor, ya que con tanto trote como le había dado la debía de doler todo el cuerpo...

Llegue a su altura, poniéndome de rodillas a su lado en la cama, con una mano la empecé a estrujar un pecho, pellizcándola el pezón, mientras la otra la metía en dirección a su coño, pero sin tocarla ya que sabía que solo lograría causarla molestias... Sin embargo puse mis dedos sobre su perineo, jugando con el índice en su culito... a los pocos segundo paso lo que yo quería, empezó otra vez a mojarse sin poderlo evitar...

- Yo: Pero mírate, si ya estas otra vez encharcada, ¡so puta...!

Después de eso retire la mano de allí lamiéndome los dedos de sus jugos, cogiéndola a continuación por la barbilla, obligándola a fijar sus ojos en los míos, entonces suavemente y sin levantar la voz, casi podríamos decir que en un susurro la hice una advertencia...

- Yo: Mira zorrita... procura desde ahora mantenerte lejos de mi alcance, porque si sigues buscándome volveremos a jugar los dos, pero si después me vuelves a dejar a dos velas, la próxima vez no saldrás tan bien librada... porque me encargare de que te arrepientas de seguir intentando jugar otra vez conmigo. De paso le dices a esa otra golfa, a tu amiga, a esa otra que se intenta divertir también a mi costa que se mantenga alejada también de mí. Si sigue así, al final me va a encontrar, y tú te has encargado hoy ya de terminar con la poca paciencia que me quedaba con vosotras... ¿Enterada zorra?...

- Ella: Si...

- Yo: Eso espero, por vuestro bien.

Me levante después de eso, parecía que de verdad esta vez estaba asustada. Cuando me iba para casa pensé que efectivamente había logrado mis objetivos. Estaba seguro de que se mantendría alejada de mí y que para no quedar por debajo de la otra, intentaría que su rival sufriera también las consecuencias de haberse equivocado de presa. Estaba seguro de que algo haría para que su "amiga" no la ganara, y mucho menos el que se pudiera ir de rositas después de lo que ella había pasado.

Después de esto pasaron varias cosas en relación. Por un lado la otra petarda arrecio de repente con sus intentos de "jugar" conmigo, no sé porque si o porque no, pero es un hecho que de pronto se volvió más agresiva conmigo. Otra cosa que paso fue que de repente mis adoradísima Eva y Teresa me empezaron a mirar con caras raras, eso sí, caras raras envueltas en una sensación general de mala leche y enfado gordo para conmigo, algo que sinceramente en esos momentos y dado que ellas eran las que lo habían liado todo, me traía totalmente al fresco lo que pudieran estar pensando o incluso sospechando que pasaba.

Una cosa que también paso pero que fue algo completamente independiente de todo este asunto fue que recibí una llamadita desde Alemania. Si bien reconozco que en los primero 10 segundos me puse terriblemente contento de recibirla, pronto se me paso dicha alegría, se me paso justo después de descolgar y al ver desde donde me llamaban preguntar eso de... ¿Si?, ¿Erika?... Después de eso se me paso por completo la alegría, menuda llamadita, me calentaron ya las orejas en los primeros 30 segundos, para pasar a explicarme lo inteligente que era en los cinco siguientes minutos, después de ello solo pude ir hablando para ir pidiendo perdón por cada cosa que me decían desde el otro lado... Joder que día me dio la llamadita.

Una parte buena, por decirlo de alguna manera, o más bien por encontrarle algo bueno es que me dieron varios consejos sobre cómo terminar definitivamente con esta otra petarda, para hacerlo de forma que se las quitaran a las dos la ganas de seguir jodiendo la marrana. Como comprenderéis me puse la mar de contento por poder tener alguien con quien poder hablar de esto y pedirle consejo, aunque no sé yo si hice bien haciendo caso a esos consejos, porque si yo pensaba que era un bestia, joder con los consejos... Ya os contare más adelante lo de esta llamada y en que quedo, ahora seguiremos con lo de estas dos petardas. Solo comentaros una última cosa al respecto, no dije ni media de esta llamada, porque estaba maquinando una idea de cómo devolverlas a estas el favor por su jueguecito a mi costa.

Lo de la segunda fue más de lo mismo, que poca originalidad las niñas, me llevo también a su casa para "tomar algo" mas cariñosa que la ostia. Una vez allí empezó a acorralarme, impidiendo toda posibilidad de huida. Para su desgracia tuvo mala suerte, pero que muy mala suerte. En vez de empezar por chuparme la polla como la otra, está directamente se debió de haber quitado las bragas nada más entrar en su casa, ya que lo primero que hizo fue ir al baño. Cuando logro que me "excitara" se arranco como una loba conmigo, salto sobre mí, un tierno corderito, según debía de pensar ella, sacándome la polla y metiéndosela hasta los huevos antes de que pudiera reaccionar. Cuando vio mi reacción debió de mal interpretarla, debió de pensar que trataba de correrme ya, cuando solo pretendía afianzarla encima mío... me soltó un sopapo suavecito, diciéndome que si me atrevía a correrme ya dejándola a dos velas me iba a arrepentir toda la vida de ello...

Joder que mal me sentó eso viniendo de esa estúpida de los cojones, mas teniendo en cuenta de que en sus prisas ni se molesto en bajarme bien la cremallera del pantalón, con el riesgo de engancharnos con sus dientes lo que no os digo según donde lo hiciéramos la gracia del asunto. Después de eso la hice levantarse por la fuerza, para su asombro cuando pensaba que era para salir por patas por culpa del sopapo, se encontró tumbada sobre la mesa de su salón, con el culo en pompa, la falda arremangada sobre su cintura y mi polla apoyada en su culo... Después de eso para su desgracia ella tuvo mala suerte y yo buena.

Tuvo la mala suerte de que mi polla estaba bien lubricada y de que con el cabreo me sudara los cojones hacerme daño, por lo que la metí la polla hasta las amígdalas de golpe, entera, hasta los cojones... sin piedad. Yo tuve la suerte de no hacerme el mas mínimo daño al hacerlo, lo que se transformo en un inicio de embestidas brutales sobre su culo... La pobre pego un alarido de escándalo al sentir como le reventaba el culo de ese modo tan salvaje, después sintió como la mordía el cuello y los hombros con cierta fuerza, causándola mas daño todavía...

También poco después, cuando su dolor se relajo algo empezó a sentir mi mano sobre su sexo, mi pulgar sobre su clítoris, sintiendo también meterse dos dedos en el interior de su encharcadisimo coño donde se empezaron a mover rápidamente, buscando que tuviera nuevas sensaciones. Mientras tanto mi otra mano la sujetaba con fuerza por el pelo, levantándola la cabeza, poniendo mi boca sobre su oreja... susurrándola lo puta, lo golfa y lo perra que era, lo que la iba a hacer, como se lo iba a hacer, mordisqueándola también levemente la oreja mientras la decía todas estas cosas, sintiendo como poco a poco la muy puta se iba volviendo receptiva a mis manejos.

La hice llegar a un orgasmo rápidamente, sin que por ello dejara de joderla el culo bien jodido. Un poco después del primero le hice llegar un segundo orgasmo con mis caricias sobre el clítoris... después de eso me retire por completo, haciéndola ponerse de rodillas y metiéndola la polla en la boca sin contemplaciones, follándoselo sin piedad también mientras la obligaba a mirarme a los ojos. Unos minutos después hice como con su "amiga", me corrí en su boca obligándola a tragárselo todo para no ahogarse con ello. Cuando después de correrme la solté se derrumbo agotada sobre la alfombra del salón, la recogí antes de que acabara en el suelo, cargando con ella en brazos para acabar dejándola sobre su cama. Después de esto volví a follàrmela sobre su cama, llenándola el coño de polla.... La volví a llevar a un nuevo orgasmo otra vez.

Tras esto por fin pude colocarme entre sus piernas, justo lo que estaba esperando que pasara, que me permitiera hacerlo así sin posibilidad de impedírmelo, como en ese momento. Me amorre a su coño, un coño precioso y riquísimo, eso debo de reconocérselo. Estuve martirizándola con mi lengua y mis dedos en su coñito, en su culito, en su clítoris, esta vez la hice llegar al orgasmo en tres ocasiones más antes de empezar a torturarla a mi modo, sin piedad. Esta vez sin embargo no me arriesgue a que no hubiera plumero, llevaba siempre encima una pluma desde la vez anterior, no podía arriesgarme a no contar con tan maravilloso instrumento de tortura cuando esta zorra decidiera intentar “violarme”.

Esta vez sin embargo lo hice todo de acuerdo con los consejos que me habían dado por teléfono, bueno sería más preciso decir que seguí  los que considere oportuno poner en práctica, estuve picándola desde el principio, mientras me la follaba, con que no lograba que me corriera, que solo disfrutaba ella y no yo, que era una negada como su amiga, etc... Le provoque un cabreo con todo esto del quince, pero pese a eso la pobre no lograba nada de nada conmigo, y ya no os digo cuando perdió por completo el más mínimo control que hubiera podido pensar que tenia sobre la situación. Cuando después de esos tres orgasmos consecutivos se empezó a recuperar se encontró como su "amiga", atada a su cama, con los ojos tapados y amordazada, pero sintiendo como la seguían trabajando suavemente el coñito... no dejándola pensar con claridad las sensaciones que recibía.

Empecé a torturarla como con la otra según vi que se empezaba a recuperar, usando la pluma sobre su clítoris, sobre sus pezones, manteniéndola al borde del orgasmo durante casi media hora, sin dejarla correrse para nada... terriblemente excitada, llorosa, gimotearte y suplicante, todo ello por no poder correrse de ninguna fona, sin poder hablar por la mordaza, sin poder moverse por estar atada... una situación totalmente agónica para ella. Cuando vi que estaba al límite le retire la mordaza, dejándola gritar, llorar, amenazar y suplicar todo lo que quiso para que la dejara correrse de una vez...

Mientras hacía esto le había estado dilatando muchísimo el coño y el culito... todo sin dejar de machacarla con que era una pifia en la cama, que follaba de pena y que solo disfrutaba ella... A esta sin embargo según me aconsejaron desde Alemania si la hice la putadita, después de media hora sufriendo se iba a correr con ella, sinceramente tenía mis dudas por si la daba algo pero decidí hacer caso a lo que me dijeron... A los quince segundos de iniciarse su orgasmo se colapso por completo, quedando inconsciente, teniendo las contracciones del orgasmo por inercia, porque su cuerpo necesitaba ese desahogo, pero sin que fuera consciente de ello. Debo de decir que no pude dilucidar qué es lo que la putadita había tenido en ella como efecto... pero ni idea. Después de esto me incorpore rápido para comprobar que estuviese bien del todo, quedándome tranquilo cuando comprobé que así era.

Una vez hecho esto la desate, retirándola la vende y colocándola como me dijo mi consejera, aunque en este caso no estaba muy seguro de hacer lo que me dijo..., me parecía una pasada todo ello, pero... bueno al final lo hice, aunque no tal y como quería ella que lo hiciera. La coloque boca abajo, con la almohada doblada bajo su estomago, levantándola el culo y dejándoselo en pompa, en una posición perfecta para ser follado, después de lo cual lo retoque adecuadamente con alguna hortaliza. De hecho la deje con un pepino metido en el coño y otro en el culo... le hice unas fotitos y me largue de allí. La bruta de Ingrid me aconsejo que la metiera un pepino por el culo y otro por el coño, una hortaliza que seguro la chica tendría en su cocina, si no tenia dos sustituir el del culo por una zanahoria o algo así. Sin embargo me dijo que si encontraba una berenjena, esa se la metiera en el coño en lugar del pepino, que no me preocupara, que eso iría al pelo para que se tomara en serio el alejarse de mí, aun sin leerla la cartilla como a la otra... Pero joder, es que al ver el tamaño de las berenjenas que esta tenía en casa... hostias que burrada, la hubiera destrozado el coño por completo si hubiera dicho lo que me dijo Ingrid, que también menuda bruta de cojones la niña, ostias.

Como digo con esta me largue de su casa sin decir ni media. De repente me dejaron las dos tranquilo, por lo menos durante casi una semana. Después parecían que querían decirme algo las dos, al final fui yo el que se acerco a ellas... El resultado fue que les mostré a ambas las fotos de las dos, una con las velas y la otra con los pepinos... advirtiéndolas que esto había sido en castigo por dejarme a medias, que si querían volver a las andadas la próxima que pasara lo mismo de dejarme a medias... mas las valía no fallar esta segunda vez. La forma en que dieron instintivamente un paso para atrás fue graciosa, casi tropiezan y todo. Al final resulto que solo querían disculparse y rogarme que no dijera nada de nada a nadie, algo que las dije que haría, pero que a la inversa igual, que si me enteraba de lo contrario tomaría medidas contra ellas, algo que vi que se tomaron muy enserio las dos.

El resultado de todo esto es que me divertí de lo lindo con estas dos, jodi y putee a tres que yo me sé porque no pudieron averiguar nada de lo que había pasado y por fin me salía algo bien en referencia con las tías, daba palmas con las orejas del contento. Ana, Eva y Teresa estuvieron intentando saber que había sucedido sin lograr sacar ni media de ninguna de las dos, que por razones obvias y mas con las fotos no decían esta boca es mia a nadie. Simplemente daban como excusa que se habían cansado de jugar conmigo, que me consideraban una especie de caso perdido. Lo siguiente que hicieron las tres fue venir a mí a pedirme explicaciones de lo que las había hecho como si ellas les hubieran contado algo, para su desgracia no pique, dejándolas a las tres con dos palmos de narices con todo el asunto y además montarlas el pollo padre por romper su promesa, al final se fueron con las orejas gachas y el rabo entre las piernas, al menos de momento, hasta que consideraron que se me había pasado ya el cabreo.

Pero no os creáis que por eso se rindieron, que no, que Eva y Teresa al final se cabrearon conmigo porque estaban seguras según ellas de que me las había follado a las dos... Para cabrearlas aun más me limitaba a sonreírlas cada vez que me acusaban de ello, les sonreía y me relamía, pasándome la lengua por los labios. Al final terminaron dejándolo por imposible a los quince días. Solo les dije lo que había hecho cuando termino el año y empezábamos las vacaciones, separándonos durante las mismas, justo el último día. Efectivamente se pusieron las dos echas una fiera, mas cuando las explique todo sin omitir detalle y con todo tipo de especificaciones sobre lo acontecido, como había disfrutado, lo muy putas que habían sido conmigo esas dos... decir que se pusieron celosas las dos era quedarse cortísimos y no digamos ya del cabreo que agarraron las dos, sobre todo cuando las recordé que al día siguiente nos separábamos por las vacaciones con lo que me escapaba de aguantar su mala leche por todo esto... dicho con una sonrisita socarrona en los labios.

Como ultima pataleta me dijeron que como se enteraran de que mientras estaban fuera me follaba a la primera zorra que se me abriera de piernas por ahí, me la cortaban, de hecho me lo hicieron prometer al final, pero que desconfiadas que son cuando están celosas. Por contra yo las dije que esperaba no enterarme por ahí de que ellas follaban con cualquiera..., que me habían hecho prometer mientras que yo confiaba en ellas, que no me decepcionaran. Para contra atacar me dijeron que ellas se veían obligadas porque me conocían, y conocían lo que hacía a la que se me acercaba demasiado... además me lo dijeron destilando veneno de lo rabiosas que estaban, todo en clara alusión con lo de esas dos. Entonces en tono socarrón me disculpe por el despiste de no haberles contado una cosita de mis vacaciones... con carita y voz compungida les solté que estuvieran tranquilas que como me había olvidado de decírselo, no sabían que en Agosto ya había quedado para pasarlo con Erika e Ingrid en Alemania por lo que no habría ese problema. Entonces con voz maliciosa les restregué por los morros que ese verano solo follarìa con Erika, Ingrid y muy probablemente Kara... Si no llego a echar a correr me muerden las dos, joder que cabreo que pillaron conmigo por "mi olvido".

La llamada que recibí ese día era de Ingrid, para preguntarme porque narices no había llamado para ir a verlas en navidad, que había tenido a Erika pegada al teléfono todo el puto mes de diciembre esperando mi llamada. Por lo que me dijo se estuvo comiendo el tarro cosa fina con que yo no la llamara para ir, algo referente a su sentimiento de culpabilidad por no haber podido verme antes o algo así. Digo esto porque no lo entendí muy bien, y dado que el primer saludo de Ingrid de directamente llamarme "cacho cabròn" en tono de un cabreo, nada, pero que nada amistoso, no tuve cojones a pedir explicación ninguna sobre nada de nada, solo me limite a pedir perdón por todo lo que me empezó a acusar, cualquiera, joder que fiera.

Cuando me dejo por fin explicar porque no había llamado y la dije que era porque pensé que Erika solo estaba dándome largas, que no quería llevarme otro palo lo más suave que me llamo fue gilipollas. Después de calmarse me explico detenidamente lo que me haría si la daba otro disgusto así a Erika, o de cualquier otro tipo, para después exigirme de una vez las fechas en que iría a verlas. La dije acojonado del todo por cómo se ponía la cosa que del 10 de julio al 20 de Agosto todos los que ellas quisieran aguantarme allí... Si os digo que no estaba acojonadito por todo ello mentiría, nunca creí que Ingrid tuviera semejante mala ostia, por otro lado temía la posible reacción de Erika cuando se enterara del motivo, que era lo que más miedo me daba en realidad. Al final Ingrid me dijo que no le diría a Erika nada de mis dudas, que mejor que se lo dijera yo cuando fuera, que solo la diría que había llamado para decir cuando iba en verano con ellas...

Al final decidimos, o más bien decidió ella que pasaría 20 días en Agosto bajo castigo de cómo me dijo... "cortarte los cojones como no aceptes venir o pongas a última hora alguna escusa para escaquearte..., ¡¡¡¡¡¡¡¡GILIPOLLAS, QUE ERES GILIPOLLAS!!!!!!!!". Podéis creerme que no dije esta boca es mia después de esto, además de estar más contento que unas pascuas por poder volver a estar con Erika y saber todo esto de ella... pero que más feliz que unas pascuas porque lo hubiera pasado así de mal por mi culpa, no os podéis hacer a la idea de lo feliz que me hizo enterarme de ello y de lo que me costó disimularlo para que Ingrid no se enterara, porque la creía muy capaz de matarme si llega a enterarse. Por otra lo que antes dije, tenía cierta aprensión por como reaccionaria Erika al enterarse de mis dudas, pero joder, el hecho de que estuviera tan mal por mi falta de noticias... ¡¡Joder!!, es que daba palmas con las orejas.

Después de esto se calmo y me pregunto por todo un poco, al final la conté también lo de esas dos, dándome sus consejos para salir del lio después de bufar como una gata enrabietada durante un buen rato, sobre todo cuando se entero de por donde venia todo el problema. Al final quedo ella en mandarme los billetes y todo, porque según ella, no se fiaba ni media de mi persona, así que ella se encargaría de que no me pudiera rajar a última hora de ir a dar la cara ante Erika por todo lo que le había contado... Eso sí que me dio miedo, ostias.

Todo esto del viaje a Alemania quede con Ingrid en no decir nada a nadie para evitar que Erika se enterara, así dado lo mal que según ella lo había pasado darla una sorpresa que la compensara. De todas formas como yo entonces ya tenía en mente el usar esto para darlas en los morros a ciertas señoritas no le puse pegas, diciéndole a Ingrid, eso sí que haber que hacía con la sorpresa, que tampoco era que lo pasase mal hasta el último momento. Ella me dijo que no me preocupara, que ella se encargaba de todo...

Al final saque ambas carreras con sendos 9.5 de media en ambas. Durante ese trimestre Ana empezó a salir con un chico de la Uni que a mi sinceramente no me acababa de hacer nada de gracia para ella, opinión compartida por Eva y Teresa. Se lo comente a Ana, le dije que no me gustaba el tío ni lo más mínimo, añadiendo que como el "llavero" (por su novio, 1.65 de altura) la hiciera daño le iba a convertir en alfombra después de despellejarle vivo. También le dije que desde luego tendría todo mi apoyo para que le funcionara la relación. Una cosa no tenía que ver con la otra, nuestra relación era así, me gustara o no si ella lo había elegido para mí era sagrado, pero como la hiciera daño...

El mes de Julio lo pasaríamos Ana y yo con nuestros padres y nuestras hermanas en canarias. En Agosto Natalia se iría a Paris con su novio, con el que se había estado viendo fin de semana si, fin de semana no durante todo el año, y Claudia se iría por ahí con amigas. Ana se iría al norte donde sus abuelos maternos y nuestros respectivos padres de crucero... Lo mío con las vacaciones fue de traca, cuando dije que en Agosto me iría a Alemania con unas "amigas", mi santa madre tuvo la ocurrencia de llamar corriendo a Erika para decirla que ya que iba justo a su ciudad, podría hacer el favor de echarme un ojo... Ella inmediatamente se ofreció a "alojarme" en su casa siendo aceptado en el acto por mi madre... Manda cojones que con 19 años casi, todavía me trataran así... en fin.

No os digo la que lio la santa señora... por lo visto le reventó la sorpresa a Ingrid, encima Erika se lo tomo como que yo no quería ir a verla a ella pero que aprovechaba para ir a su misma ciudad para estar con otras... la ostia la que lio mi madre. Al final Ingrid me llamo muy enfadada pero comprensiva con que yo no tenía nada que ver en esto, no la había quedado más remedio que decirla la verdad a Erika sobre la sorpresa... El alegrón fue de aúpa por lo visto, y el cabreo de escándalo... Miedo me daba verla, la que me iba a caer encima según Ingrid iba a ser de cuidado.

CONTINUARA.