Una técnica de señal de TV, marimacho

- "Hola… Soy de la Central de Cableado Vodafeme", dijo una voz por el intercomunicador… - "Llamaron Vds y dijeron que tenían un problema con la recepción de los canales de TV… Vengo para solucionarlo."

- "Si, yo avisé… Estoy en el apartamento 180,en la planta 18… Suba, por favor", contestaron por el intercomunicador.

- "Por fin vinieron", le dijo Anna a su compañera de habitación, Lois… - "No te das cuenta de lo mucho que extrañas la televisión hasta que no la tienes"… Lois levantó la vista de la revista que estaba leyendo y dijo con una sonrisa:

- "Te estás convirtiendo en una teleadicta, cariño… El único ejercicio que has estado haciendo últimamente es usar el control remoto."

Después de mirar cara a cara a su amiga, Anna salió a la sala de estar para abrir la puerta cuando escuchó el sonido del timbre.

- "Pase… El decodificador está por aquí", le dijo a la reparadora rubia de unos treinta y tantos años que había llegado para solucionar la avería… - "Algunos canales están bien, pero la mayoría se ven así como nevados.”

La rubia le dio una sonrisa rápida y respondió:

- "¡No hay problema… Creo que sé lo que está mal, pero me llevará un tiempo arreglarlo."

Cuando la rubia abrió su caja de herramientas, Anna le preguntó:

- "¿Te apetece una taza de café… Hace bastante frío afuera y parece que has tenido un día largo?"

- "Sí", respondió… - "Eso suena muy bien… Y por cierto, mi nombre es Virna."

-  "Yo soy Anna", respondió ella… "Y esta es Lois", dijo mientras asentía con la cabeza su compañera que acababa de salir de la habitación."

- "Me alegra conocerlos a las dos", dijo mientras abría la tapa de la caja de control.

Después de unos veinte minutos, Virna preguntó:

- "¿Hay más televisores en el apartamento?… Este que hay en la sala de estar ya se ve bien en todos los canales."

- "Si… En el dormitorio", respondió Lois… - "Ven, te lo enseñaré."

Una vez en el dormitorio, Virna sólo tardó unos minutos en comprobar y asegurarse de que todas las cadenas llegaran correctamente… Cuando terminó, preguntó:

-  "¿Hay televisores en otras habitaciones?"

- "¡No… Eso es todo", contestó Anna.

Virna echó un vistazo a la gran cama que había en el dormitorio y rápidamente dedujo que Anna y Lois compartían la cama juntas… Y probablemente mucho más… Así que decidió arriesgarse y les preguntó sin rodeos:

- "¿Cuál de vosotras dos es la dom?"

Momentáneamente aturdidas por una pregunta tan íntima y personal, Anna tartamudeó respondiéndole:

- "No creo que sea de tu incumbencia… Ahora, por favor, vete si has terminado."

- "No me digas", respondió Virna… - "Debería haberlo adivinado de inmediato siendo las dos, mujeres… Debo estar perdiendo reflejos… Y por cierto, cariño, nunca me vuelvas a dar ordenes o conseguirás irritarme y… ¿Tú me entiendes o te lo digo más claro?"

Tanto Anna como Lois intercambiaron miradas temerosas, mientras se daban cuenta, al mismo tiempo, de que Virna era una dom y que no tendría reparos en pegarles si la irritaban.

- "Vaya", dijo Virna sarcásticamente,… - "no me gusta ver a dos jóvenes lesbianas tratando de follar entre ellas… Qué jodida risa me dais las dos… Así que dime, Anna,… ¿cuando folláis entre sí quién está arriba de las dos?"

Cada vez más asustada, Anna respondió débilmente:

- "¡Lo negociamos!"

- "¿Usáis un arnes," preguntó un poco más suavemente.

- "No", respondió Lois… - "Sólo utilizamos nuestros dedos."

- "Miraros las dos", dijo Virna… - "Ambas necesitáis algo de disciplina, y yo soy la única que os la podría dar."

- "N-no nos lastimarás, ¿verdad?", dijo Anna con un escalofrío.

- "Voy a follaros a las dos y haceros que os corráis como si nunca os corrido antes… ¿Te parece que eso es que te voy a lastimar?" le dijo mirándola y gruñendo, Virna.

Anna se dio cuenta de que Virna tenía muchas características varoniles: el pelo corto, la voz áspera, la constitución robusta y el aire de invencibilidad que generalmente estaba reservado para el macho de la especie… Sin embargo, había algo en ella que aunque hacía que la temiera, también la hacía sentirse dependiente de ella, y por una razón que no podía entender, Anna se sentía sexualmente excitada y atraída de estar ante esta gran marimacho.

Apoyándose contra la puerta, Virna miró a las dos mujeres asustadas y les ordenó:

- "¡Muy bien, chicas, es hora de que os quitéis la ropa y dejéis que Virna os vea desnudas."

Lentamente, ambos comenzaron a quitarse sus ropas, mientras la marimacho miraba con despreocupación… Siempre le era divertido ver a jovenes lesbianas exponerse por primera vez, y estas dos estaban haciendo un gran espectáculo para ella.

Cuando ambos estuvieron desnudas, Virna se acercó a ellas y comenzó a palparlas por todo el cuerpo, dedicando especial interés a sus coños.

- "Mmmmm… Mis dos pequeñas tienen los coños mojados… Esto es muy bueno porque indican que vais preparándoos para la gran polla que os va a meter mamá Virna."

Ambas chicas se estremecieron mientras Virna probaba sus coños, y por primera vez se dieron cuenta de lo adictivo que podía ser tener sexo placentero con ella.

- "Está bien, señoritas… A la cama", ordenó Virna, mientra miraba con avidez los dos culos regordetes cuyas nalgas se balanceaban de un lado a otro mientras se dirigían a la cama.

Mientras Anna y Lois la miraban con absoluta fascinación, Virna dejó caer su cinturón de herramientas al suelo y lentamente comenzó a quitarse la ropa de trabajo.

Mientras que las dos eran delgadas y de complexión pequeña, Virna, era completamente diferente… Su sujetador era de talla muy grande, y en lugar de bragas de mujer, llevaba calzoncillos de hombre azul claro, que en circunstancias normales habrían parecido bastante cómicos, pero en este caso la hacían parecer aún más imponente.

- "Una de vosotras dos, pequeños coños, quiere ayudarme a quitarme el sujetador ", preguntó amenazadoramente."

Casi demasiado asustada para moverse, Lois levantó la mano y se ofreció hacerlo.

- "Te ayudaré yo, Virna", le dijo.

- "Buena chica", respondió la marimacho mientras levantaba sus brazos para que la joven pudiera deslizar el sostén gigante por sus hombros… - "Ahora, sin perder tiempo, os quiero ya chupando mis tetas"… Virna se acostó en la cama y tanto Anna como Lois se apoderaron de un pecho y comenzaron a chupar el correspondiente pezón, grande y grueso.

Pronto, los únicos sonidos que se escucharon fueron los fuertes ruidos procedentes de la succión de los pezones por parte de Anna y Lois… Y, por supuesto, los suspiros que emitía la marimacho mientras amamantaba a estos dos lindos retoños de tetas pequeñas.

Tanto para Lois como para Anna, este era un tipo de sexo completamente diferente y nada parecido al de dar y recibir que realizaban ellas cuando estaban solas… Ahora, esto era sexo de una dominación total de una mujer que era muy experta en hacer que sus ‘siervas’ obedecieran todas sus órdenes… Y encima, de buena gana.

Después de unos buenos diez minutos de succión, Virna acarició el culo de cada mujer y les preguntó en voz baja:

- "¿Estáis lista para follar ahora?"

Un escalofrío les recorrió mientras imaginaban lo que la marimacho iba hacerles… Y con voz casi susurrada respondieron:

- "Sí… Estamos preparadas."

Ahora era el momento de la inauguración, y con poca fanfarria, Virna se colocó de pie al lado de la cama, se quitó sus bóxers mostrándoles un arnes de correas con un consolador de goma negro, largo y gordo, que colgaba entre sus gruesos muslos.

Tanto Anna como Lois jadearon audiblemente ante la vista de la gran polla negra… A pesar de que ninguna de las dos había sido follada por ninguna clase de polla, cada uno de sus coños comenzaron a babear incontrolablemente por el solo hecho de pensar que iban a ser ensartadas por el gran dildo que llevaba entre piernas, la marimacho.

Anna estaba visiblemente temblando cuando Virna la levantó sin esfuerzo de la cama y, estando de pie, la colocó en posición para penetrarla… Anna echó sus brazos alrededor de los hombros de la marimacho mientras envolvía sus piernas alrededor de su cintura, con lo cual facilitaba la penetración… Virna le ordenó a Lois que cogiera la gran polla y la pusiera a la entrada de la vagina de su amante.

Mientras Virna penetraba lentamente a Anna, ésta se encontraba tan lubrificada que la gran cabeza del consolador entraba sin oponer ninguna resistencia a pesar de estar penetrando un coño virgen.

Pensando que toda la gran polla estaba dentro de ella, Anna se relajó unos segundos… Y fue entonces cuando la marimacho, se la clavó hasta el fondo de una “estocada” provocándole uno de los orgasmos más grandes de su vida.

Con la cara de Anna enterrada entre sus tetas, Virna golpeó el pequeño coño en sumisión total con un asalto brutal que habría destrozado el coño incluso de una mujer con experiencia… Cuando finalmente Anna tuvo una serie de corridas que le impedían sostenerse en esa posición por estar totalmente agotada, Virna la dejó caer de nuevo sobre la cama, donde quedó con las piernas abiertas, mostrando el coño afeitado, obscenamente abierto.

- "Ahora es tu turno", le dijo Virna a una Lois congelada por todo lo que había visto… - "¿También quieres que te folle, ¿verdad?"

Con voz débil, Lois suplicó:

- "P-por favor… Nooo… Tengo miedo."

- "Puede que tengas miedo", dijo la marimacho con una sonrisa… - "Pero voy a follarte quieras o sin querer… ¡Tú eliges!"

Con la baba saliéndose por la comisura de su boca, Anna le susurró a su amiga:

- "¡No te resistas, ni pelees… Sólo conseguirás que te duela más."

- "Así es", dije Virna… - "Si te resistes, va a dolerte más… Así que ven a mamá y sé una buena niña."

Casi en trance, Lois esperó a cuatro patas –la postura en la que la había  colocado Virna- mientras ésta le frotaba la cabeza de su polla arriba y abajo de su coño apretado… Se tomaba su tiempo para intentar aumentar la tensión en el coño de Lois.

- "Eres una chica con suerte", dijo Virna sin problemas… - "Ser follada por detrás, te hace sentirte como un verdadero coño… Creo que te encanta ser follada de este modo, ¿no?"

La tensión en el coño de Lois se estaba volviendo casi insoportable, y sin previo aviso, le dijo:

- "¡Dios… Por favor… Fóllame… Mi coño está en llamas!"

- "Oooh", dijo suavemente Virna… - "Mi pequeña lesbi quiere ser follada, ¿verdad, cariño?... Tranquila que vas a conseguirlo."

Con un poderoso empujón, Virna golpeó y se la metió hasta quedarse prácticamente pegada por detrás a Lois, lo que hizo que ésta casi se desmayara por la mezcla de dolor y placer que estaba recibiendo."

- "Ooooh", chilló ella… - " Me estás rasgando el coño… Oooh, cómo me duele."

Con sus enormes tetas rebotando, Virna golpeó el coño indefenso sin hacer caso a sus quejidos hasta que la pobre Lois tuvo una cadena de cuatro o cinco orgasmos convulsivos seguidos, dejándola totalmente destrozada.

En breve, Virna estaba de pie mirando a sus dos pequeñas lesbis… Por un lado, en estado de shock, por el ataque cruel perpetrado a su pequeño coño por el gran consolador gordo que exhibía entre las robustas piernas de la marimacho, estaba Lois completamente agotada… Por otro, Anna, tumbada sobre la cama, donde quedó con las piernas abiertas, mostrando el coño afeitado, obscenamente abierto.

Entonces, la marimacho agarró a Anna por el pelo y arrastró su cabeza sobre su entrepierna y le dio la siguiente orden:

- "¡Come mi coño, perra… Y será mejor que hagas un buen trabajo o voy a usar este consolador para metértelo entero en el puto culo que tienes."

La mera idea de ese monstruo en su culo fue suficiente para hacer que Anna le quitara rápidamente el arnes y enterrara su rostro en el coño peludo de Virna, empezando a trabajarlo con su lengua.

- "Mmmmmm, chupas bien", suspiró Virna… - "Justo como una buena pequeña lesbi debería hacerlo… Oh sí… Eso es… Chupas muy bien el clítoris de mamá… Mmmmmmm… Síiisssss."

El aroma acre de la orina y el jugo de coño que soltaba Virna, por el gran placer que estaba recibiendo, llenó la nariz de Anna, casi haciendo que se apartara, pero en su mente estaba la amenaza de su trasero ensartado por ese enorme consolador… Eso fue suficiente para hacerla seguir chupándole el coño y tragando todo lo que soltaba.

A Anna le pareció una eternidad el tiempo en que estuvo chupando el coño de Virna, aunque en realidad sólo fueron cinco minutos más o menos, hasta que la gran perra se estremeció con fuerza cuando una oleada de pasión se disparó a través de su coño y penetró en su duro clítoris.

Finalmente todo terminó, con Anna y Lois tendidas juntas como dos pedazos de basura después de haber sido folladas, una tras otras y utilizadas como mamadoras.

Cuando Virna estuvo completamente vestida y lista para irse, dijo en tono uniforme:

- "A partir de ahora vendré al menos una vez a la semana, así que será mejor que estéis preparadas, ¿de acuerdo?"

Ninguna de las dos se había movido de su posición desde que se las folló, pero Anna logró responder:

- "Estaremos preparadas."

- "De acuerdo, chicas," contestó Virna… - "¡Oh, y por cierto, no voy hacer ningún cargo por la reparación… Sólo lo marcaré como una interferencia de línea externa."

Después de que se fue y salió por la puerta, Lois dijo con una risita:

- "¡Bueno, al menos el televisor funciona y nos ha salido gratis la reparación."

Y Anna le respondió con un pequeño gemido, diciéndole:

-  "¡De eso nada… Es lo más caro que hemos pagado… Y encima, seguiremos pagando a base de recibir pollazos y lamer su coño con descargas de orina cada vez que se corre… El pago durará mucho tiempo porque esta Virna es insaciable... ¿O es que acaso ya has olvidado como nos ha dejado hechas polvo?"

F I N