miprimita.com

Petra

en Lésbicos

Todo comenzó  cuando me incorpore a mi primer trabajo en una oficina. Recién había terminado la universidad y aunque no era un trabajo relacionado con lo estudiado lo me incorpore para no tener que volver a casa de mis padres en el pueblo.

Me llamo Claudia, tengo casi 24 años, físicamente estoy bien, me cuido, voy al gim y lo que más me gusta de mi cuerpo son los pechos. De tamaño normal, aureola sonrosada y pezón pequeño. Había veces que me quedaba viéndolos y admirándolos. Solía vestir ropa que permitíaimaginar más que ver lo que había debajo.

Cuando me incorpore a la oficina me pusieron una semana para que aprendiera con Petra que era a la chica que iba sustituir ya que ella había ascendido en la empresa. Era una mujer alegre de unos 28 ó 30 años e hicimos buenas migas, pero sin llegar a ser amigas.

Acabado el tiempo de formación comencé a realizar mi labor, cuando tenía alguna duda acudía a Petra ya que me lo había indicado así.

Nos veíamos todos los días pero no más allá de saludarnos. Ella estaba en un nivel superior al mío y yo me relacionaba con mis “iguales”.

En la hora del café, un día entró Petra a la pequeña cocina que disponíamos, se sirvió un café y salió.

-Esta guapa Petra –comento la compañera con la que estaba-

-Pues si –conteste yo

-Que no te oiga decirlo –y comenzó a reírse-

-¿Por qué te ríes? –pregunte-

-Eso es que no lo sabes –y bajando la voz me dijo- a Petra le gustan las mujeres y si te oye igual te tira los tejos.

-¿Qué me dices?

-Es conocido y no lo oculta –me respondió- Eso sí, si se insinúa alguna compañera de trabajo, siempre de forma delicada, y esta le dice que no, no vuelve a insistir.

-Eso está bien por su parte –dije yo, no sé por qué-

Volvimos a nuestras labores y me olvide del tema. Por la noche, ya en casa me vino a la cabeza el comentario. Nunca había sentido deseo por una mujer, aunque cuando era una adolescente de 12 años con una amiga que me enseño como debía masturbarme hicimos prácticas para aprender a besar y no meter la pata con los chicos. Toda esa era mi experiencia con mujeres.

Fue pasando el tiempo, coincidí con Petra algunos días en un bar desayunando y eso llevo a llamarnos cuando una iba a bajar por si a la otra le apetecía. Se hizo habitual que dos o tres días a la semana desayunáramos juntas. Debo decir que nunca me hizo ninguna insinuación, aunque si me cogía de la mano o me apartaba el pelo de la cara, pero en rigor a la verdad creo que era sin ninguna intención.

Lo que si observe eran sus “ataques” a algunas mujeres tanto del trabajo o de la cafetería. Tengo la seguridad que por lo menos tres fueron exitosos, se las llevó a la cama.

Comencé a preguntarme porque no intentaba nada conmigo, evidentemente le iba a decir que no, no me van las mujeres pero es que no le gustaría, no le resultaba atractiva. Por fortuna estos pensamientos pasaban rápido.

A mediados de otoño pille la gripe y falte al trabajo unos días, cuando me incorpore y me vio, rápidamente vino a preguntarme como me encontraba y ya quedamos para desayunar juntas.

-Voy al servicio –dije cuando terminamos los cafés-

Me estaba lavando las manos cuando Petra entro. Espero a que terminara y cogió mis manos entre las suyas.

-¿De verdad, mi hetero preferida, está bien? –me pregunto-

Me quede mirándola ante ese frase pero mi mente se movió mucho. Era un interés por mi salud, me tiraba los tejos, me estaba probando. Guarde silencio, no se me ocurría nada. No supe cómo reaccionar. Ella sí.

Me llevo de la mano a una de las cabinas. Me abrazo con mucha delicadeza y me beso la mejilla, luego nos miramos. Ella esperaba mi reacción, pero no tuve ninguna.

Me beso de nuevo, esta vez en el cuello y nos quedamos otra vez mirándonos. Me sentía rara pero me estaba excitando. De repente sentí un impulso y busque su boca, tenia los labios cerrados,  pero los entre abrió un poco. Me dejo hacer, era evidente la experiencia que Petra tenía en estas situaciones. Nos morreamos un rato hasta que se hizo hora de irnos. Salimos como si no hubiera pasado nada y en la oficina fue igual.

No me podía concentrar en el trabajo. ¿Qué me había pasado? Yo la había besado, yo le abrí del todo los labios, yo le metí mi lengua en su boca, yo había jugado con lasuya, yo, yo, yo…. Y lo peor era que no me sentía nada mal, pero no sé, yo no soy lesbiana, joder.

Ese día no pasó nada más, yo hubiera querido hablar con ella, pero se marchó antes de la hora de salir.

Esa noche no podía dormir, solo rememoraba lo sucedido en el aseo y cada vez me sentía más húmeda. Sucedió lo que tenía que suceder y me masturbe pensando en que era Petra la que me masturbaba. Fue genial.

Al día siguiente llegue un poco más pronto, quería que me viera cuando llegara y si podíamos hablar un poco mejor ya que le iba a decir que era mejor no seguir, pero no, me entere que estaría unos días de viaje.

Cuando volvió del viaje me saludo de la forma habitual, lo único fue la sonrisa que me dedico. Me sentí alagada pero quería decirle que no iba a seguir adelante.

No la vi en toda la mañana, poco antes de la hora de la comida, me llamo por teléfono y pregunto que si lo hacíamos juntas. Me temblaron las piernas a pesar de estar sentada.

-Claro –conteste-

-Te busco –dijo y colgó-

Comimos en la cafetería, en silencio. Me sentía algo incomoda. Debió notármelo.

-Estas incomoda, Claudia.

-No, que va –mentí-

-Lo estás y creo saber el motivo.

-Ni te lo imaginas.

-Estas incomoda porque tu cabeza dice una cosa y tu chochito otra –me dijo, cogiendo mi mano-

-Eres una bruja.

-Suele pasar las primeras veces, Claudia. No te preocupes. Solo tienes que decir lo que deseas hacer.

Fui a protestar pero me lo impidió.

-Ahora no es momento, voy al baño antes de subir a la oficina.

En cuanto desapareció por la puerta de los aseos me levante de la silla y fui para allí. Pensaba decirle que si era momento.

Entre, el aseo estaba vacío, de las tres cabina una sola tenía la puerta cerrada por lo que no había duda de donde estaba Petra. Empuje muy despacio la puerta. Allí estaba, de pie, como si me esperara.

Entre y cerré. Solo fui capaz de colgarme de su cuello y llenarle de besos la cara, el cuello y luego comerle la boca, esta vez con participación activa de Petra.

Nos tocamos por todas partes, pechos, culo, etc. Sentí como metía la mano por mi pantalón, comenzó a acariciar mis bragas mientras que seguíamos besándonos.

Aparto un poco el borde, busco mi clítoris y comenzó a hacerle circulitos con su dedo. En seguida comencé a gemir.

-Se hace tarde –dijo de pronto-

Volvimos a la oficina y cada una siguió con sus actividades.

Pase un día raro, estaba súper excitada. Me notaba mojada en todo momento y no podía apartar de mi cabeza lo sucedido en la cafetería.

Desde que llegue a casa hasta que pude dormirme me masturbe varias veces. Tenía sentimientos contradictorios, por un lado me decía que no me gustaban las mujeres, por otro me decía que Petra era diferente, que me gustaba y lo mejor que me excitaba muchísimo.

Al día siguiente me llego por comunicación interna del PC un mensaje de Petra.

“¿Quieres se mía?”

Al leerlo me dio un vuelco el corazón. Deseaba a Petra y  quería ser suya, eso me quedo claro la noche anterior. Así que le conteste.

“Quiero”Conteste.

Mas de BrunoR

Hermanas

Lola

Lola -2-

Educando a la administrativa-5-

Educando a la administrativa-6 final-

Educando a la administrativa-3-

Educando a la administrativa-4-

Educando a la administrativa-2-

Educando a la administrativa

Camino

Vacaciones de verano

Judith (3)

Judith (2)

Venganza

Judith

La curiosidad de Melisa

Retomando el pasado

Licenciado

Cristina (2)

Cristina (final)

Cristina

Mi novio y su hermana (3)

Mi novio y su hermana (1)

Mi novio y su hermana (2)

Mi novio y su hermana (4)

Petra (fin)

Mis vecinos (4)

Mis vecinos (3)

La limpiadora

Mis vecinos (2)

Mis vecinos (1)

Trapy

Trapy

Los hermanos

Lorena

LA ESCUELA (6) secuela

La escuela (5) final

La escuela (4) la fiesta

La escuela (3) pobres senos y premio

La escuela (1) la entrevista

La escuela (2) el primer dia

En el metro

Hermanos

De pablo a paula (7)

De pablo a paula (6)

De pablo a paula (5)

De pablo a paula (4)

De pablo a paula (3)

De pablo a paula (2)

De pablo a paula (1)

Secuestrada y esclavizada (3)

Secuestrada y esclavizada (1)

Secuestrada y esclavizada (2)

Sometido por un compañero

Mi vecino mi amante (2)

Mi vecino, mi amante

De vacaciones por la selva (2)

De vacaciones por la selva

La conversion

Compañeras (2)

Compañeras

Mi primera experiencia Zoo

Bitgirl(2)

Bitgirl(1)

Historia de andrea (3)

Historia de andrea (1)

Historia de andrea (2)

Laura

Cronica de mi primera humillacion (2-final)

Cronica de mi primera humillacion (1)

Amo-perro

Lo que él quería era a una puta.

La vecina canguro

“ chic@”--2ª parte

“ chic@”--1ª parte

Humillaciones (6)

Abusador (4)

Humillaciones (5)

Humillaciones (4)

Humillaciones (3)

Abusador (2)

Abusador (1)

En la cuadra

Humillaciones (2)

Humillaciones

El perro de la abuela

La presa

Vacaciones truncadas

El lobo

Mis sumisas (3)

Mis sumisas (2)

Mis sumisas (1)

La cazadora

Cuando a mis 42 años

Mi historia-iv

Mi historia-ii

Mi historia

La rubia iii

La rubia ii

La rubia-i

Una familia peculiar 8

“ chic@”--2ª parte

“ chic@”--1ª parte

Una familia peculiar 7

​atada en el bosque

Una familia peculiar 6

Una familia peculiar 5

Mery horror

Una familia peculiar 4

Una familia peculiar 3

Una familia peculiar 2

Una familia peculiar

Tara y lyly