miprimita.com

Yo quería y no quería

en Transexuales

YO NO QUERÍA Y QUERÍA

Siempre había deseado alguien que me hiciera sentir, y sin que yo lo buscara llegó dándome una gran noche de placer en la playa. Solo el 40% de esto es real el resto es una fantasía que desearía me ocurriera.

Hola amigos, naci varón pero siempre me he sentido una mujer, y siempre he vivido en un puerto al sur del estado de Veracruz México. Cursé una carrera universitaria y hace varios años puse un cibercafé en el cual además de dar los servicios comunes se dan asesorías en matemáticas.

Desde siempre he sido travesti de closed, pero en los últimos años no me aguanto las ganas, y pensando que unos blue jeans de dama no llamarían la atención, comencé a usar esa clase de prendas; debo reconocer que esto ha sido más fuerte, ya que de poco cada vez me he ido atreviendo a más, ya que ahora el 90% de mis pantalones son de dama, incluyendo varios rosados y colores muy femeninos; tengo muchas blusitas y una buena colección de pantis, (otro día les platico).Aunque me encantan las faldas y los vestidos (que si he usado a escondidas) aun no doy el gran paso y por ahora no las uso, la verdad no si me atreveré, pero lo que si siempre ando con mis pantalones y blusitas atendiendo mi negocio.

Yo soy morena clara delgada 1.65 m; me he ido dejando crecer el cabello y me lo voy cortando como mujer por lo que al principio a la señora del salón de belleza le sorprendía, pero nada que no se pueda arreglar con dejar una buena propina. Algo que me ha ayudado es que tengo un problema físico que hace que la gente me vea con ternura y acepte mi forma de vestir.

Pues resulta que estado yo atendiendo como siempre el negocio, me llega un albañil (obrero de la construcción) le calculo unos 40 años, muy velludo y 1.75 de alto como decimos acá con una pancita caguamera mmmmmmm a pedir que le ayudara a preparar sus exámenes de la prepa abierta, lo cual yo acepte con gusto y le indiqué mi método y los horarios quedando en que llegaría al otro día con lo necesario. Esa noche me hice una buena chaqueta pensando en él.

Al día siguiente no me resistí y me puse unos jean muy justos, una blusa ombliguera y mucho perfume de frutas. Él llegó bien bañado oliendo a loción muy varonil a la hora indicada y empezamos. Algo había en el ambiente, no sé, esto no me había pasado.

Cierto día yo me puse el pantalón rosado y la blusita blanca de licra que se me pega completamente al cuerpo y que también deja al descubierto mi blanca pancita, que rasuro siempre para que luzcan estas prendas. Las clases las doy en el patio fuera del área de computadoras donde atendía mi hermano. Mientras yo revisaba un ejercicio que le había dejado, él se atrevió a pasar sus dedos por mi estómago. Sentí riquísimo y no me aguanté, le hice saber que me agradaba y le dejé hacerlo mientras estábamos solos.

Así pasó el tiempo y él aprobó su primer examen y me dijo que me quería invitar al concierto de una banda grupera local, el cual sería el sábado en la noche en la playa. Y aunque me agradó, no dejo de sorprenderme, y por no dejar, le dije que porque no mejor invitaba a una amiguita; a lo que respondió que había dejado a su mujer en otro estado del país y por el momento no quería líos, además de que no conocía a nadie a quien proponérselo, por último dijo

Allá encontraremos, nunca falta.

Me sentía feliz, como una chica a la que el muchacho que le gusta la había invitado a salir, que era lo más correcto, no supe como ocultar mi entusiasmo.

Eso fue el miércoles, el jueves solo algún toqueteo, mi mano en su rodilla, si estábamos solos, pero no tanto como lo deseábamos. El viernes, al terminar la ultima clase de la semana el me recordó, y nos pusimos de acuerdo ya que primero iríamos a cenar.

Al día siguiente me levante como siempre a abrir mi negocio, pero me sentía especial todo lo veía bonito y hasta las tonteras que algunos clientes suelen hacerme las vi triviales, quería que esas horas pasaran volando

Llego la hora de cerrar, nunca lo había hecho tan aprisa, entré a la casa, algunas bromas con mi familia a la que le conté que pensaba ir al la tocada en la playa.

Me fui a mi cuarto, ya tenía preparado mi pantalón negro, una blusa violeta a cuadros con algo de brillo y una panti negra de encaje muy femenina.

Me bañé, me vestí, saqué de cierto lugar un perfume que me había encantado pero es algo costoso, al menos para mi, y guardaba para algo especial. Me hubiese gustado maquillarme pero aun no podía hacerlo. Ni yo sabía que esperar de esa noche, la verdad estaba excitada y temerosa.

Salí de casa y me dirigí al lugar en que habíamos quedado esperé como 5 minutos y el llegó y tomamos un taxi. Ya dentro, él pasa su brazo por mi cuello y comenzamos a platicar como una pareja, hasta me atreví a doblar mi brazo para tomar la mano con que me abrazaba tal como veo suelen hacerlo las chicas.

La cena estuvo buena, era una de esas mesas que suelen estar pegada a la pared, él me hizo sentar junto a la pared y luego él entró no recuerdo como pero estábamos tomados de la mano por debajo de la mesa; sentía su aliento junto al mío, en varios momentos me daba miedo que nos besáramos públicamente ya que poco faltó.

Acabando nos fuimos a la playa.

Anduvimos caminando platicando mientras comenzaba el espectáculo. Él me compro una pañoleta y reímos cuando me la puso, la verdad éramos otra pareja más

Me enloquecía verlo con la camisa abierta mostrando el rico vello de su pecho, hacia mil esfuerzos para aguantarme y no tocarle esa región; vi a una chica llenar de besos y caricias el pecho de su novio y yo me estaba muriendo de la envidia.

Se oyeron las primeras notas de la música y corrimos a ocupar lugar, no había sillas, todos de pie, era mucha la gente, empujones por todos lados, él para protegerme me rodeó con sus brazos, mi espalda quedó sobre su pecho, él no quería ¿o sí? pero eran tantos los empujones que el presionó y nuestros cuerpos quedaron muy juntos.

Empecé a sentir como su miembro comenzaba a tomar vida y se frotaba contra mis pompis, tuve un escalofrió riquísimo, él sintió mi reacción de aceptación y comenzamos a movernos, la aglomeración era enorme así que a nadie se sorprendería que estuviéramos tan juntos aparte que todos estaba pendientes del escenario. Ambos buscamos la forma de que su miembro se ubicara en mi canalito, cada vez sentía que se paraba más, yo estaba en la gloria.

Ya nada me importaba yo estaba disfrutando sentía riquísimo sus vaivenes que simulábamos el seguir el ritmo de la música, cada vez era más rápido y potente, al mismo tiempo yo acariciaba sus brazos y jugaba con sus vellitos, sentí besitos en los oídos y el cuello, me sentía dichosa.

Así pasamos gran parte del concierto hasta que él me dijo al oído

Vámonos a buscar otro sitio.

Feliz acepté su proposición, y, como pudimo, salimos de la muchedumbre, bajamos a la orilla del mar y comenzamos a alejarnos. Después de caminar, bajo un cielo estrellado, volteamos y ya solo se veían lucecitas del escenario. Por ahí encontramos un gran tronco de los que suele traer el mar, el cual aprovechamos para sentarnos y sin decirme "agua va" comenzó a besar mis labios, en mi vida me lo habían hecho, pero pude responder y disfrutar cada caricia; así tuve la oportunidad de acariciar su pecho sintiendo sus deliciosos vellitos mmmmmmmm.

Después de un tiempo dejé su pecho y mi mano bajó a su pierna comenzando a acariciarle. Empecé a subir, toda mi vida había querido saber que se sentía al tocar un miembro que no fuera el mío y esa era mi oportunidad. Se lo tomé sobre el pantalón y lo fui palpando y acariciando, poco a poco volvió a ponerse duro, muy duro, la suave brisa marina aumentaban mis sensaciones, ambos estábamos sentados en el troco besándonos y sintiéndonos; de repente, provocó un gran beso, como el buzo que está próximo a sumergirse y empiezo a besarle el pecho al tiempo que me voy poniendo en cuclillas sin dejar de sentir la piel de mi amado.

Mis rodillas tocan la fina arena y mi cara queda enfrente de su paquete, al que le paso mi cara. Levanto coqueta mi cara al tiempo que mis manos buscan zafarle el cinto y abrir su pantalón, lucho por quitarle el bóxer y su pene sale como impulsado por un resorte. No tengo palabras para describir la sensaciones que en ese momento tuve, lo olfateo, lo siento, comienzo a masturbarlo sin dejar de verlo asombrarme y excitarme, lo empiezo a masturbar, su cabecita me llama y no aguanto las ganas de darle un besito, y pasar mi lengua por ella, no dejo de masturbarla y darle besitos y lengua en la punta, me siento en la gloria, se me olvida todo, lo único que deseo es estar besando y chupando esa rica cosa.

Escucho sus gemidos y la agitación de su respiración, trato de que mis caricias se acoplen al compás que él me marca.

Después de un tiempo, siento como su cuerpo se tensa y su respiración se vuelve aun más agitada, sé que esta a punto de venirse, me enloquece, acelero mis movimientos tanto la masturbación como mis besos y lengüita en su glande, no resisto las ganas, tengo miedo de ahogarme, pero bueno, abro toda mi boca y me meto una buena parte de ese trozo de carne, que comienzo a acariciar cambiando la presión de mis labios y jugueteando con mi lengua. Él se viene no deja de sacar leche, me encanta me la saco pero quedo en la puntita recibiendo el delicioso néctar, bárbaro, ¡es mucho!

Se calma y se resbala por el tronco, quedando sentado en la arena con la espalda sobre la madera, yo me encuentro perdida en el espacio, sin ninguna reacción, de repente vuelvo a mi ser y lo veo a él así en la arena sentado recargado sobre ese tronco, sonrío lo beso en la boca, le ayudo a ponerse los pantalones, y me acuesto en la arena poniendo la cabeza sobre sus piernas viendo las estrellas. De repente él rompe el silencio.

Te digo algo

Si (le respondo)

Ël – Desde la primera vez que fui por tu casa me gustaste, no sabes cuantas veces me he masturbado pensando en ti.

Yo – No te creo. (Respondí coqueta pasando mis dedos por su cara)

Él – Si aunque si es verdad lo de la prepa, no niego que me encantas…

Él se va agachando a la vez que levanta mi cabeza y comenzamos a darnos un riquísimo beso interminable. Mientras su mano pasaba por mi contorno hasta llegar a mis caderas y comenzó a acariciarme el pompis yo deje escapar un suspiro y dije

-Yo – Me encanta

-Él (en voz muy baja) - Deja que te haga el culo.

-Yo –Aquí estas loquito.

-Él – Si, vas a sentir riquísimo

-Yo – pero nunca lo he hecho

-Él –No te va a pasar nada…

-Yo – bueno, pero hasta donde yo aguante.

-Él – Si claro.

La verdad, por lo que había pasado en el espectáculo, me encontraba deseosa, pero por otro lado me moría de miedo, pues me podría hacer daño, aparte de que seguido pasaban los marinos a cuidar la playa.

Me hizo poner en cuatro patas sobre la arena, él detrás de mi primero sobre mi pantalón, para después yo misma me fui animando y me levante para zafarme el pantalón, la vanidad me dio sentimiento que el no vería mi coqueta panti. Siempre se me hacia sexy que mi amante me bajara la ropa, por lo que le dije a el que ya me había abierto el pantalón, pero que fuera él quien me lo bajara; lo que aceptó gustoso, primero me alzó la blusita y me acarició divino mi cuerpo y empezó a meter la mano entre mis pantalones, de repente empezó a palpar en torno a mi cadera palpando en torno de la lencería y me dijo al oído

Mmmmmmmmmmmm Por lo que siento, traes una prenda muy sexy, ¡Que no sabes cuanto me gustaría ver!

Me gustó su observación, pues ya me sentía satisfecha.

Sus manos comenzaron a bajar ambas prendas, acariciaba mis pompis y algún dedo se introducía por el canalito, sentí que el buscaba algo entre sus bolsillos y se puso en los dedos y empezó a meterme primero un dedo. Uyyyyyyyyyyy que dolor, luego el otro. Los metía y sacaba con rapidez, yo tenía sensaciones encontradas entre dolor y placer, de repente sacó sus dedos y me dijo

Lista, ya va de veras.

Me pidió que le diera algunos besitos en su cosita, para luego volver detrás de mi y comenzar a presionas su miembro contra mi canalito y de poco a poco me la fue sumiendo, primero, no lo niego un dolor tremendo, el cual se fue transformando en un increíble placer, el empezó con un mete y saca increíble, me encantaba.

Así pasamos algún tiempo, hasta que él se la sacó y se acomodó a tal suerte que su espalda descansaba en el tronco, para luego jalarme, él juntó sus piernas mientras que me puso de espaldas suyas para luego hacerme sentar sobre su miembro y volvérmelo a introducir, pidiéndome que yo me moviera como si estuviera cabalgando, la cosa mas deliciosa. De repente todo mi cuerpo se tensó, y comencé a sentir vibraciones en todo mi cuerpo, estaba experimentando algo jamás vivido.

Seguimos con nuestro galope, mis sensaciones iban en aumento, a cada momento algo nuevo, ¡me sentía en la gloría!

De repente sentí como él alzó su pelvis para metérmelo aun más, yo bajé y permití que me lo metiera casi todo, sus manos hicieron mayor presión a mi cintura y su empuje era mayor que los anteriores, dejando escapar de sus labios un gran alarido. Yo volví a tener las mismas sensaciones que hace un momento pero con una mayor intensidad.

Terminando lo anterior ya no tuve fuerzas y me deje caer en la arena, me di cuenta que yo había tenido una gran eyaculación.

Paso el tiempo y ahora me pregunto como me acomodé la panti y el pantalón, pues cuando recuperé la consciencia estaba tirada pero con mi ropa bien puesta. Él estaba a mi lado con una gran sonrisa diciéndome.

Zorrita

Le miré con una gran sonrisa, para luego darnos un gran beso.

Mas de EJERCICIO

La asombrosa historia de la Thermo mix

La verdadera historia del Inquisidor Ortuño

Vengándome de Sara

He visto el futuro

La tormenta

El Monasterio del Tiempo

La cuenta atrás

Bucle

Ejercicio XIXX: Cambio de fecha.

Ejercicio XXIX: Viajes en el tiempo

Ejercicio XXIX

Redención

Los pecados capitales de una madre

Manos

El poder de Natacha

El toro por los cuernos

El hombre que me excita

Valentina

Pulsión maternal

XXVIII Ejercicio: Los siete pecados capitales

La hormiga

Masturbación fugaz

Las musas (¡y su puta madre!)

Querido Carlos...

Asmodeo

En la oscuridad

La maldición

El desquite de Érica

Eva Marina

La viuda

Noche de copas

La despedida

La llamada

Cine de madrugada

La pareja de moda

Testigo 85-C

Diez minutos

Las tetas de Tatiana

Por el cuello o por los cojones

Fisioterapeuta

Guapo, rico y tengo un pollón

Inmóvil

¡Siéntate bien!

La obsesión de Diana

El Cuerpo

Descenso

Mía (Ejercicio)

Serrvirr de ejemplo

La espera

Despatarrada

Primera infidelidad

Caricias

Mi amante, Pascual

Sexogenaria

La heteroxesual confundida.

La ira viste de cuero

Homenaje

Indefensa

Reencuentro

XXVII Ejercicio: relación de relatos

XXVII Ejercicio de Autores: microrrelatos

El principio del fin

Como Cristiano Ronaldo

Supercalientes

Paso del noroeste

Pérdida personal

Naufraghost

Marinos y caballeros

La manzana, fruta de pasiones y venganzas

El naufragio del Te Erre

En un mundo salvaje

La última travesía del “Tsimtsum

Sentinelî

Me llamaban Viernes.

Naufragio del Trintia: Selena y Philip

La isla

El huracán Francine

Fin

La sirena del Báltico

Nunca Jamás

El Último Vuelo del Electra

Relatos XXVI Ejercicio

Naufragios: Namori se está ahogando

Naufragios: amantes en potencia

Naufragios: Libertad

Naufragios: Outdoor Training

Naufragios: Naufragio

Naufragios: Crucero de Empresa

Naufragios: Háblame del mar, marinero

Naufragios: Enemigos

Naufragios: La Invitación

Naufragios: El naufragio del Zamboanga

Homenaje a todos

XXVI Ejercicio de Autores

Final del Ejercicio XXV

Sus ojos

Vecinos de dúplex en la costa

Pauline o la lascivia del poder

¡No hay huevos!

La hermana mayor que todos compartimos

Ana y la pausa de los anuncios

Moonlight

Guerrera en celo

Aburridas

El canalla

Y todo por una apuesta

Un gol por la escuadra

Dos primos muy primos

Mi hija apuesta por nuestro futuro

La puerta oscura del transexual

Relación de relatos del Ejercicio XXV

Ejercicio XXV

Final del ejercicio XXIV

El fin del racionamiento

Amores eternos

La clínica

Halley

La mujer más guapa del mundo

Cuatro años y un día

El hombre de mi vida

Algo muy especial.

Marcha atrás

El friki

El payaso y la preñada

Justicia o venganza

Noche de cuernos

Velocidad de escape

Mi adorable desconocida

Accidente a plena luz

Relación del relatos del XXIV Ejercicio de Autores

XXIV Ejercicio de Autores

Votación temas XXIV Ejercicio de Autores

Convocatoria ejercicio XXIV

Final del XXIII Ejercicio

El holandés errante

El Pirata

El torero

En el cielo

Campanilla y el sexo

Ser Paco Payne

Príncipe azul

Silvia salió del armario

Cambio

Mátame suavemente

Un divertido juego

Tres palabras

El semen del padre

Salvajes

Día de la marmota

Los tres Eduardos

Sheena es una punker

El legendario guerrillero de Simauria

El converso y la mujer adúltera

Órdago a todo

La bicicleta

Janies got a gun

Difurciada

Relación de relatos del XXIII Ejercicio

XXIII Ejercicio de autores de Todorelatos

Votación de las propuestas para el XXIII Ejercicio

Convocatoria del XXIII Ejercicio de Autores

La historia del monaguillo o el final del XXII

La reducción

Es palabra de Dios

Tren de medianoche

Hermana mayor

Una historia inmoral

Venceremos... venceremos... algún día

El vicario

Cielo e infierno

Reencuentros en la tercera fase

La Señora Eulalia

La pregunta

Juguetes rotos

Génesis 1,27

La entrevista

La mafia de los mantos blancos

Las cosas no son tan simples

XXII Ejercicio: lista de relatos

XXII Ejercicio de Autores de TodoRelatos

Votación de las propuestas para el XXII Ejercicio

Convocatoria del XXII Ejercicio de autores

Avance del XXII Ejercicio

Resultado del XXI Ejercicio de Autores

Con su blanca palidez

Adios mundo cruel

Tribal

Mi sueño del Fin del Mundo

El Pianista Virtuoso

A ciegas

La Ceremonia

Blanca del Segundo Origen

Hotel California

El tren del fin del mundo

100 años después

El fin del mundo. La tormenta solar perfecta.

Un último deseo

El convite

Demiurgo

Diario

El Gato de Chesire

Relacion relatos XXI Ejercicio

XXI Ejercicio de Autores

Votaciones para el XXI Ejercicio de Autores

Propuesta de ideas para el XXI Ejercicio Autores

Revisión de las normas

Gracias por participar del XX Ejercicio de Autores

Aprender a contracorriente [gatacolorada]

Vida estropeada [Estela Plateada]

En las crisis ganan los banqueros[ana del alba 20]

El rescate de Benilde [voralamar]

Se alquila habitación [Ginés Linares]

Sin tetas no hay trabajo [doctorbp]

El Préstamo [Lydia]

Liberar tensiones [Bubu]

Parásito [SideShift]

El Sacrificio de mi Mamá [Garganta de Cuero]

Ladrona [Neón]

Maldita Crisis [EROTIKA]

Las ventajas del poder [gatacolorada]

La crisis del coño [ana del alba 20]

¿Por Qué Lloras? [Silvade]

del amor. La máquina [erostres]

Los viajeros temporales [Estela Plateada]

Relato casi erótico [Alba_longa]

Grande y felicísimamente armado [voralamar]

El Fotógrafo [Vieri32]

¿Algo para reír o para llorar? [MilkaMousse]

Nyotaimori [Ginés Linares]

Muñecos Rotos [pokovirgen]

Relación de relatos del XX Ejercicio de Autores

XX Ejercicio de Autores

XX Ejercicio de Autores: Votación de tema

Propuesta de ideas para XX Ejercicio de Autores

Gracias por participar en el XIX ejercicio

Legión de Ángeles

Eva al desnudo

En el fondo de su mente

Las viejas tamaleras

Una canción en 100 años

Del amor, la guerra y otras lindezas

Canción de despedida

Noches de luna llena

Almas

El sobre azul

Nunca subas a la chica de la curva

Aunque tu no lo sepas

El Cid

La puta de mi novia y su despedida

Por toda la casa

El suicidio del Samurai

Causa y efecto

La fiesta de Navidad

Diálogos para un ejercicio

La barbería

Por los beneficios

Cenizas del deseo

M & M… y sí, son unos bombones adictivos

Lazos oscuros y desconocidos

Relación de relatos del XIX ejercicio

XIX Ejercicio de autores

XIX Ejercicio de autores: Votación de tema

Propuesta de ideas para XIX Ejercicio de Autores

Brevísimo balance del XVIII Ejercicio de Autores

Con todos ustedes....¡el increíble bebé barbudo!

Noche mágica

Pínchame, amor (Segunda parte)

Noche de suerte

Extraños en la noche

Por fin pude ver a mi esposa montada en un joven

La chica de la revista

Una manera de sentir

Vida de casado

Después de la feria según Lucas

Trovadores de la noche

La morochita villera

Después de la feria según Marcos

Amo las mujeres que desagradan a otros

Cómo recuerdo el día en que llegó a mi casa

La primera noche de mi nueva vida

¡Pínchame, amor! (1)

La prueba

La mejor noche de un actor porno

Paparazzi

Ivette, mi princesa árabe

El montoncillo y la gata

Pasión y lujuria en la Barceloneta

Relación de relatos del XVIII Ejercicio de Autores

Noticias sobre el XVIII Ejercicio de Autores

XVIII Ejercicio de autores

XVIII Ejercicio: Votación del tema

Propuesta de ideas. XVIII Ejercicio de Autores

Crucigrama. GatitaKarabo.

Flores. Dark Silver.

¡Maldita sea! Izar

Fugados. Dark Silver.

Superbotellón. MariCruz29

El Pelao. GatitaKarabo.

Raquelísima. Moonlight.

Oración. Masulokunoxo

El despertar. GatitaKarabo

Media tarde. Trazada.

La noche es bella. Lydia

Apetecible. Paul Sheldon.

Play. Un Típico Sobi.

Zanahorias de Haití. Masulokunoxo.

Charla de alcoba. Trazada.

XVII. Ejercicio de autores.

XVII Ejercicio. Votación del tema.

Propuesta de ideas. XVII ejercicio de autores

PsicóTRico.

Mi primer día.

Desde el fondo de la pecera

Un chico normal

La increíble historia de Mandy y su locura felina

Carta blanca

Amigo mío, ¿qué hice mal?

La psicología del miedo

El diablo nunca

El salto atrás de Paco.

Contacto humano

Identidad

Una muñeca vestida de azul.

AVISO - XVI Ejercicio - RELATO PSIQUIÁTRICO

XVI. Ejercicio de autores. Relato psiquiátrico

Votación del tema. XVI Ejercicio

Propuesta de ideas. XVI ejercicio de autores

¿Qué es el ejercicio?

La leyenda del demoniaco jinete sodomizador

¿Por qué las ancianas tienen obsesión...?

El visitante

Amantes en apuros

El hotel

El cementerio

La leyenda urbana de TR, ¿Quién es el Calavera?

Mascherata a Venezia

La cadena

Mujer sola

Electo ateneo

La Dama de los Siguanes

Libertina libertad

Máscaras

El engaño del Cadejo

Los veintiún gramos del alma

Examen oral

En el espejo

El Greenpalace

Una leyenda urbana

Sorpresa, sorpresa

Gotitas milagrosas

Información del XV ejercicio

XV Ejercicio de autores - Leyendas urbanas

Propuestas e ideas para el XV ejercicio de autores

Cambio de carpas

Con mi pa en la playa

Con sabor a mar

La luna, único testigo

Duna

Selene

Acheron

Una noche en la playa

¿Dónde está Fred?

Fin de semana en la playa

La noche del sacrificio

Nuestra playa

Aquella noche en la playa

La indígena

Sacrificio a la luna

El Círculo de Therion

Hijo de puta

Como olas de pasión

Hija de la luna

XIV ejercicio de autores – ampliación de plazo

La noche de los cuernos

Citas Playeras S.A.

XIV Ejercicio de Relatos Una noche en la playa

Información sobre el XIV Ejercicio de Relatos

Inocente ¿de qué?

Una oración por Rivas

La soledad y la mujer

El te amo menos cotizado de la Internet

Esquizos

Ella

Pesadilla 2

Dios, el puto y la monja

Mi recuerdo

Remembranzas

Nada es completo

Pesadilla (1)

Un momento (3)

Pimpollo

Hodie mihi cras tibi

Hastío

La sonrisa

La madre de Nadia Lerma

Tu camino

Duelo de titanes

XIII ejercicio sobre microrelatos

Mujer Amante - Vieri32

No tengo tiempo para olvidar - Lymaryn

Un ramito de violetas - Lydia

Palabras de amor - Trazada

Bend and break - GatitaKarabo

Tú me acostumbraste - Avizor

Por cincuenta talentos de plata - Estado Virgen

El peor pirata de la Historia [Caronte]

Mi encuentro con el placer [Apasionada29]

Äalborg [Sywyn]

El pirata que robó mi corazón [Lydia]

A 1000 pies de altura [Lymarim]

Trailer [Zesna]

Me aburrí muchísimo [Parisién]

En el océano de la noche [Kosuke]

U-331 [Solharis]

Sansón y Dalila

Kitsune

El sueño de Inocencia

La esencia de Zeus

Ángeles y demonios

Hércules y las hijas del rey Tespio

Lilith

Invitación para el X Ejercicio: Mitología Erótica

Aun no te conozco... pero ya te deseo

Tren nocturno a Bilbao

He encontrado tu foto en Internet

Entre tres y cuatro me hicieron mujer

Memorias de un sanitario

Sex-appeal

Sexo, anillos y marihuana

Talla XXL

Goth

Cayendo al vacío

Afilándome los cuernos

Plumas y cuchillas

IX Ejercicio: 2ª Invitación

IX Ejercicio de relatos eróticos

Pesadillas de robot

Mi dulce mascota

Promethea

Déjà vu

Involución

El instrumento de Data

Eros vence a Tanatos

Fuga de la torre del placer

El corazón de Zobe

Comer, beber, follar y ser feliz

Pecado

El caminante

Maldito destino

Yo te vi morir

Decisión mortal

Madre

Angelo da morte

Pecado y redención

Mátame

Cuando suena el timbre

Azul intenso

El purificador

El último beso

Ella quería tener más

Mi instinto básico

Fábula de la viuda negra

Hospital

Seven years

Por una buena causa

El opositor

¿Tanto te apetece morir?

Satanas Death Show

Días de sangre y de swing

Voy a comprar cigarrillos y vuelvo

Relatos Históricos: Al-Andalus

Relatos Históricos: La copa de Dionisios

Invitación para el nuevo Ejercicio sobre CRÍMENES

Relatos Históricos: Franco ha muerto, viva el gay

Relatos Históricos: Qué golfa era Carmela

Relatos Históricos: 1968

Relatos Históricos: El soldado

Relatos Históricos: Campos de Cádiz

Relatos Históricos: El beso

Relatos Históricos: 1929 en Wall Street

Relatos Históricos: El primer vuelo

Relatos Históricos: Así asesiné al general Prim

Relatos Históricos: El primer gaucho

Relatos Históricos: En bandeja de plata

Relatos Históricos: Yo, el Rey

Relatos Históricos: La maja y el motín

Relatos Históricos: El niño del Kremlin

Relatos Históricos: Tenno Iga No Ran

Relatos Históricos: Un truhán en las Indias

Relatos Históricos: Las prisioneras de Argel

Relatos Históricos: Mar, mar, mar

Relatos Históricos: Un famoso frustrado

Relatos Históricos: Cantabria indomable

Relatos Históricos: El caballero don Bellido

Relatos Históricos: Clementina

Relatos Históricos: En manos del enemigo

Relatos Históricos: Nerón tal cual

Relatos Históricos: El juicio de Friné

Relatos Históricos: Alejandro en Persia

Relatos de Terror: Ojos violetas

Relatos de Terror: Silencio

Relatos de Terror: Nuria

Relatos de Terror: El nivel verde

Relatos de Terror: El bebé de Rosa María

Relatos de Terror: La puerta negra

Relatos de Terror: Aquella noche

Relatos de Terror: Sombras

Relatos de Terror: No juegues a la ouija

Relatos de Terror: Lola no puede descansar en paz

Relatos de Terror: Rojo y diabólico

Relatos de Terror: Asesino

Relatos de Terror: Aquel ruido

Relatos de Terror: Fotos en tu desván

Relatos de Terror: Estúpido hombre blanco

Relatos de Terror: Confesión

Relatos de Terror: Despertar

Relatos de Terror: No mires nunca atrás

Relatos de Terror: Viaje sin retorno

Relatos de Terror: La pesadilla

Relatos de Terror: La playa

Por un puñado de euros - por Yuste

Trópico - por Trazada30

Registro de tráfico ilegal - por Esther

Llámame si quieres - por Solharis

Una noche de invierno - por Dani

Clásico revisitado - por Desvestida

Lengua bífida - por Alesandra

Obediencia - por Némesis30

Hotmail - por Espir4l

Recuerdos - por Némesis30

Ese día estaba yo muy ansiosa - por Esther

Una noche de primavera - por Dani

La sopa - por Solharis

Diez minutos - por Sasha

Celos - por Scherezade

25 líneas dulcemente apasionadas - por Alesandra

Hay que compartir - por Espir4l

Trescientas palabras - por Trazada30

Esa sonrisa divertida - por Trazada30

Una noche de otoño - por Dani

La mujer de las pulseras - por Yuste

En el coche - por Locutus

Ciber amante - por Scherezade

Despertar - por Espir4l

Mi obra de arte - por Lydia

Los pequeños detalles - por Némesis30

Por el bien común - por Wasabi

La oportunidad llega sola - por Elpintor2

Sola - por Scherezade

La vida en un segundo - por Iván Sanluís

La ciclista - por Genio

16 añitos - por Locutus

45 segundos a euro - por Alesandra

Necesito una verga - por Esther

No soy tuya - por Donnar

Más que sustantivos - por Wasabi

Maldito alcohol - por Lachlainn

El preso - por Doro

De ocho a ocho y media - por Superjaime

Esperando - por Scherezade

Ladrón de coches - por Sociedad

Taxista nocturno,servicio especial - por ElPintor2

No me importa nada más - por Hera

Una noche de verano - por Dani

Vampirillos - por Desvestida

Siempre hay un hombro amigo - por Yuste

En mi interior - por Nemésis30

Almas - por Egraine

El tren de lavado - por Lydia

Despertar placentero - por Lince

Piel de manzana - por Sasha

Me fascina - por Erotika

Hace muchos años - por Trazada30

El dragón - por Lobo Nocturno

La fila - por Locutus

La cita - por Alesandra

Tardes eternas - por Ornella

La realidad supera la imaginación - por Genio

Instinto primario - por Espir4l

La sorpresa - por Solharis

38. La verdad en el fuego

Gönbölyuseg

Carta a un desconocido

Enfrentarse al pasado

Alejandría

La venganza de Aracne

Un relato inquietante

El libro maldito de Bartholomeus Nazarí

El apagón

El pasillo oscuro

Ejercicio 2 Las apariencias engañan - Va la novia

Naufragios: Libertad

Naufragios: Outdoor Training

Naufragios: Crucero de Empresa

Naufragios: Naufragio

Naufragios: Háblame del mar, marinero

Naufragios: Enemigos

Naufragios: La Invitación

Naufragios: El naufragio del Zamboanga