Florencia ¿Continúa Discriminada?

Ricardo Erecto

Ésta es la continuación de la historia “Florencia es Discriminada”, publicada con este link: http://www.todorelatos.com/relato/77117/

Ya de regreso y habiendo perdido su virginidad tanto en la concha como en el culo, suponía que no sería discriminada, pero no ocurrió así. Ninguno de sus conocidos sabía de la aventura que había corrido y continuaron evitándola. Ante esta situación, Florencia decide pedir ayuda a su primo Rogelio.

-¡Hola! ¿Rogelio? Habla Florencia.-

-¿Cómo estás Florencia? No esperaba tu llamado.-

-Necesito tu ayuda. ¿No quieres que vayamos a bailar a la disco el sábado que viene?-

-¿Van todos tus compañeros y amigos?-

-No lo sé, pero es para que vayamos juntos, sin compañías.-

-¿Me dejarás que te toque el culo?-

-¡Hay Rogelio!, tienes obsesión por mi culo.-

-Y… sí. ¿Dónde quieres que nos encontremos? ¿Voy a tu casa?-

-No. Nos encontramos enla confitería ElMolinoRojo y de allí nos vamos a la disco.-

-Bien, ¿El sábado a las 11?-

-No, más temprano. A las 10. Podemos comer algo y luego vamos.-

-Es un lugar caro como para comer.-

-No te preocupes, Yo me haré cargo de todo. Tengo un plan y quiero que me ayudes.-

-Si es para cogerte, estoy más que dispuesto.-

-¿Otra vez? ¡Eres incorregible!-

-Hasta el sábado.-

-Adiós.-

El sábado siguiente se encontraron a las 10 en punto. Florencia llegó unos minutos antes porque quería elegir una mesa en el centro del salón, bien visible desde todos lados.

-Me tienes intrigado con tu plan.-

-Mira, a pesar de no ser virgen, todos me discriminas igual, por eso he pensado en un plan.-

-¿Qué? ¿Debo ir uno por uno de tus amigos y decirles que hemos cogido y no eres más virgen?-

-¡No seas tonto! Quiero que me vean en compañía de un muchacho. Ellos no saben que eres mi primo y tienes que mostrarte muy… digamos … muy calentón, que me acaricias el culo, me tocas las tetas, me besas, etc. etc. Es decir todos sabrán que ya no rechazo a los muchachos.-

-Curiosa propuesta. Te imaginas que magrearte no me disgusta en absoluto.-

-Desde ya mientras estemos aquí en la confitería, quiero que me toques las tetas cuantas veces puedas y cuando salgamos, quiero me pongas la mano en el culo. Habrás visto que he venido con una falda corta, es para cuando bailemos, metas tus manos debajo de la falda y me acaricies por encima de la bombacha y que todos nos vean.-

-Florencia, te has desatado. Siempre te creí tan distante de todos y ahora me propones esto.-

-Si no quieres o te compromete, olvídalo.-

-Quiero y no me compromete. Lo único que falta es que nos echemos un polvo en la disco.-

-No sería una mala idea, pero si quieres luego nos vamos a un hotel. Como no sabía en qué podía terminar esto me he traído el dilatador de ano enla cartera. Puedocolocármelo antes de salir de la disco.-

-¡Caramba! Lo tienes todo fríamente calculado.-

-Todas estas cosas me la enseño mi primo Rogelio.-

Así fueron charlando de distintas cosas y recordando momentos del barco y con cierta frecuencia, Rogelio, que estaba sentado al lado de Florencia, se acercaba, le daba un beso y… le acariciaba una teta.

Así llego la hora de retirarse. Florencia tenía el auto estacionado a menos de una cuadra dela confitería. Antesde levantarse le recordó.

-Sabes que me tienes que llevar no de la cintura sino del culo. He visto por lo menos ocho compañeros del curso que te miraban con envidia.-

Se levantaron y de inmediato Rogelio se puso al lado de Florencia y su mano, que comenzó en la cintura, fue bajando hasta apoyarse en el firme y redondo culo de su prima. Varios se dieron vuelta para mirar y envidiar a ese desconocido que estaba con ella.

Así caminaron hasta el auto. Antes de abordarlo Florencia se acercó a Rogelio y abrazándolo buscó sus labios en un profundo beso.

Ya dentro del auto preguntó:

-Florencia, ¿ese beso fue de utilería o fue en serio?-

-Mitad y mitad. Pensaba darte un beso de utilería, como lo llamas, antes de subir al auto, pero me salió así, más apasionado.-

Llegaron a la disco y entraron. Había mucha gente y varios conocían a Florencia. Se dirigieron a la barra y pidieron unas copas, livianas, porque ambos no estaban acostumbrados al alcohol.

-En cuanto salgamos a bailar, me metes la mano debajo de la falda y me acaricias el culo.-

-Con lo corta que tienes la falda, no sería difícil que te vean las bragas.-

-No importa. Tienes permiso para mostrar mis bragas. También tienes permiso para tocarme las tetas debajo de la blusa.-

-Nos van a sacar a los empujones por escándalo.-

-Nadie se animaría a sacarme a mí a los empujones de aquí. Mi padre es unos de los dueños.-

Comenzaron a bailar y efectivamente luego de unos pasos Rogelio tomó a su prima con ambas manos debajo de la falda y comenzó a acariciarle el culo. Florencia sonrió de satisfacción.

-¡Que bien lo haces! Apriétame más que seguramente la tienes dura y quiero sentirla.-

-Claro que la tengo dura. No quería apretarte para que no lo notaras.-

-Me gusta sentir tu pija contra mi cuerpo. Apriétame más.-

-Es que se está levantando la falda y ya debes tener media bombacha a la vista de todos.-

-No me importa. Sigamos así.-

Bailaros tres o cuatro piezas más, siempre con las manos en el culo y atrayéndola hacia sí. Cuando finalizó el tema nuevamente Florencia tomó la iniciativa y comenzó a besar a Rogelio. Nada de todo eso pasó inadvertido para los concurrentes y algunos comentaron cosas tales como:

“Ese tipo sí que tiene suerte.”

“Nunca pensé que Florencia se iba a dejar tocar así, ni siquiera en la intimidad”

“¿Viste las bragas que tiene? Tiene medio culo a la vista”

“Parece que Flor se despertó. Ese tipo la tiene dominada. Nunca la he visto así de caliente y desprejuiciada.”

Y otros comentarios por el estilo corrieron entre los varones, para gran disgusto de las mujeres presente.

Se sentaron a descansar un rato, momento que Rogelio aprovechó para meter su mano debajo de la camisa, e incluso del corpiño de su prima y acariciarle los pezones. Florencia no cabía en sí de su alegría. Y pensar que se había enojado con su madre cuando había arreglado el viaje con su primo.

Después de todo había perdido tiempo evitando ser magreada por otros muchachos y debía recuperarlo. Su primo sí que sabía acariciar. ¿Todos acariciarían así? En sus fantasías pensaba hacer un concurso de caricias. Todo aquel que quisiera magrear su cuerpo, podía hacerlo y habría un ganador. Comenzó a reírse sola por lo cual su primo preguntó el motivo y ella le contó.

-Si no supiera que la bebida que tomamos no tenía alcohol, pensaría que estás borracha.-

-Rogelio, estoy aprendiendo muchas cosas y tú me has ensañado a reflexionar.-

-Y creo que a coger también.-

-Por supuesto, me has enseñado a coger. A propósito, ¿te parece que me ponga el dilatador?-

-Si tienes ganas de recibirla también por el culo, póntelo.-

Florencia se levantó y fue al baño. En el camino varios de sus compañeros, que antes no la saludaban, la paraban para saludarla. Finalmente llegó al baño, se encerró en un privado y se colocó el dilatador en el culo. Sonreía pensando que todos los que la saludaron, ninguno podía suponer a qué había ido al baño verdaderamente. Cuando regresaba junto a Rogelio se preguntaba si se notaría que tenía algo en el culo. A llegar le peguntó.

-Se nota algo.-

-No, a la vista no se nota nada pero cuando bailemos comprobaré si no me has mentido…-

-¿Me vas a meter la manos hasta palparlo?-

-Claro, no quiero que me mientas,- rió.

Salieron a la pista y nuevamente Rogelio puso sus manos debajo de la falda y efectivamente se encontró con algo duro que se perdía en el ano.-

-Veo que no me has mentido. Lo tienes bien adentro.-

-Como quiero que me la metas luego, bien adentro.-

Así bailaron un rato hasta que finalmente salieron para dirigirse a un hotel por horas, pero Florencia sugirió:

-Mejor vamos a un hotel con buenas comodidades y nos quedamos todala noche. Avisamosa nuestras casas que estamos cansados y que nos vamos a un hotel y que mañana estaremos de vuelta en casa.-

-Me parece bien. Llamémoslos.-

Una vez hechos los llamados se dirigieron a uno de los hoteles más caros dela ciudad. Pidieronuna habitación.

-¿La señora tiene algún requerimiento en especial?-

-No ninguno. Estamos muy cansados y creo que nos levantaremos tarde.-

Los acompañaron hastala habitación. Apenasse cerró la puerta se abrazaron y comenzaron a desnudarse. Ambos estaban muy excitados y con ganas de satisfacer sus necesidades. Florencia antes de terminar de desnudarse se arrodilló y tomo la pija entre sus manos y la llevó ala boca. Pasabala lengua una y otra vez sobre el glande como quién saborea un helado cuando notó que podía correrse en cualquier momento, se quitó las bragas, se recostó en la cama con las piernas abiertas y separadas invitando a ser penetrada. De inmediato sintió la pija abriéndose paso en su vagina. Ambos, debido a la excitación que comenzó en la confitería donde se reunieron, se corrieron muy pronto. Prolongaron el contacto con un largo beso en el cual sus lenguas se entrecruzaron.

Se mimaron un rato con caricias y besos hasta que Florencia nuevamente se puso la pija en la boca para endurecerla, cosa que logró bastante rápidamente. Se quitó el dilatador del culo.

-Señor Rogelio, este culo necesita ser ocupado por su pija. Por favor, ¿puede penetrarme?-

Estaba descubriendo que Florencia tenía siempre una ocurrencia a mano. Se colocó en posición y a falta de crema lubricante, usó una crema para el cuerpo que había en la mesita de noche. Apuntó su pija al agujero y comenzó a penetrarlo.

Mientras acariciaba el clítoris de su prima, Rogelio llegó al orgasmo pero continuó marujeando la sensible parte hasta que ella también se corrió.

Como la primera noche en el barco, se quedaron dormidos abrazados hasta la mañana siguiente.

Cuando despertaron Florencia fue la primera en hablar.

-¿Has descansado bien?-

-Muy bien. Un polvo antes de acostarse es muy recomendable.-

-Quería pedirte algo.-

-Hummm. ¿Qué quieres?-

-Que hagamos un 69 antes de bajar a desayunar. Quiero saborear tu semen.-

-Será “un placer y un honor” como dije la primera vez que cogimos, chuparte esa conchita preciosa que tienes.-

Se pusieron en posición y cada uno emprendióla tarea. Rogeliose vino antes y toda la leche descargada pasó por la garganta de Florencia que la saboreó como el mejor manjar. Por otra, parte su primo continuó el trabajo oral hasta que ella también se corrió.

-¿Te tragaste la leche?-

-Antes de desayunar un poco de leche sienta bien. Era bastante abundante la descarga pero me la tragué toda.-

-Bueno creo que ahora podemos bajar a desayunar y luego nos vamos.-

-¿Estás muy apurado? Yo quería otro polvito después de desayunar.-

-Me parece que tanto tiempo sin coger te han despertado unas ansias muy fuertes.-

-Puede ser. Bajemos y luego me la pones de nuevo.-

Desayunaron sin apuro y luego regresaron a la habitación

-Quisiera que me la pongas a lo perro, desde atrás. Así cogimos una sola vez, en el barco.-

-Como quieras, pero primero debemos entrar “en calor”.-

Comenzaron a desnudarse mientras Rogelio acariciaba las tetas y en especial los pezones, que muy pronto se pusieron duros como puntas de limones. Florencia se puso en cuatro y ayudando a ubicar  la pija, abrió su capullo para facilitar la entrada.

Rogelio, como era su costumbre cuando estaba ubicado a espaldas de Florencia, comenzó a sobarle el clítoris mientras hacía el movimiento de entrada y salida. Ambos se movían con frenesí y poco después se corrieron. En la posición en que estaban pronto comenzó a deslizarse por el muslo de la muchacha, el semen depositado enla vagina. Selavaron y entonces sí se vistieron para dejar el hotel.

Mientras iban a la casa de Rogelio conversaron de cosas intrascendentes hasta que Florencia dijo:

-Ha sido una experiencia maravillosa tanto en el crucero como estas horas desde que nos encontramos ayer. Quiero que me hagas poner una anilla en el ombligo con tus iniciales. El día que seas un ingeniero famoso, podré decir. “Él me hizo colocar este anillo en el ombligo”.-

-Florencia, estás mucho más loca de lo que pensaba. Olvida semejante cosa.-

-Pero ¿por qué? Quiero que me lo hagas poner.-

-No cuentes conmigo. No me gustan los “piercings”-

-Entonces me ocuparé yo de ponérmelo.-

-Con tu ombligo puedes hacer lo que quieras. ¡Es tuyo!-

Llegaron a la casa de Rogelio. Se despidieron y quedaron en hablarse por teléfono para saber cómo le iba a Florencia con sus amigos.

El sábado siguiente Florencia  fue a la misma disco a bailar. Había muchos conocidos que ahora la saludaron afectuosamente. Alguno de ellos le preguntaron por el muchacho que la había acompañado y si era su novio.-

-No, para nada. Es un amigo con el que hicimos un viaje juntos pero nada más.-

Uno e ellos la invitó a compartir una pieza musical. Bailaron bastante más que una y hasta se animó a tomar a Florencia un poco por debajo de la cintura, pero sin llegar al culo. Estaba temeroso de algún desplante. Florencia  no se inmutó como tampoco cuando acercó su mano a las tetas, aunque por encima de la camisa.

Ya entrada la madrugada, comenzaron a irse cada uno a su casa. Florencia, que había ido con su auto le preguntó:

-¿Quieres que te alcance hasta tu casa? No me desvío mucho.-

-Bueno, te acepto, porque a esta hora es difícil conseguir taxi.-

Subieron al auto y conversaron de nimiedades. Florencia evitó cualquier referencia a Rogelio o a los cambios que ella había sufrido. En la puerta d la casa se despidieron con un beso, de esos en el aire aunque se toquen las mejillas.

Cuando arrancó el auto Florencia se reía casi a carcajadas. Había dejado a todos desconcertados, en especial a Joaquín, a quién había llevado hasta su casa.

Justamente Joaquín hizo correr la noticia como un reguero de pólvora. ¡Florencia le había ofrecido llevarlo a la casa!

El sábado siguiente decidió no ir a bailar y se contentó con ver unos videos en su casa. Alrededor de las diez de la noche, algo aburrida, decidió llamar Rogelio para charlar. Él estaba en la casa estudiando. Tenía un examen difícil el lunes siguiente.

-Rogelio, ¿cómo estás?-

-Medio cansado. Estoy estudiando, por eso no he salido. ¿Tú tampoco saliste?-

-No, no quise. Es parte dela estrategia. Elsábado pasado fui a bailar ala disco. Todospreguntaban por ti, si eras mi novio y todo eso. ¡La estrategia funcionó! Estuve bailando con un compañero casi toda la noche y me tomó debajo de la cintura, pero sin llegar al culo. También me tocó las tetas. Creo que ando por buen camino y todo gracias a ti.-

-Yo diría gracias a tu madre que ideó lo del viaje. El resto vino casi solo.-

Siguieron conversando un rato más hasta que finalmente cortaronla comunicación. Rogelioestaba contento por su prima, finalmente estaba encontrando el camino de relacionarse con gente de su edad. Él mismo estaba contento por la posibilidad de adelantar sus estudios gracias a la “beca” de la madre de Florencia. Todo esto ocurrió hace unos seis meses. Florencia y Rogelio se hablan por teléfono periódicamente. Ella ya no tiene necesidad de encuentros íntimos con su primo. Las ofertas de acostarse le llueven todos los días y … no las desperdicia. Ha comprobado que no todas las mamadas son iguales ni tienen el mismo sabor…