miprimita.com

Vergas

en Otros Textos

Vergas

Un texto de homenaje e esa parte de la anatomía masculina tan vilipendiada y malentendida, como respuesta al texto "Culos" de nuestro amigo Ernesto (trazada30).

Vergas flácidas, en reposo, dulces y pacíficas como un niño dormido.

Vergas arrugadas y viejas, de ancianos libidinosos, de inconmensurables viejos verdes que acechan a niñas impúberes para beber los jugos de sus coñitos suaves y dulces como melocotones, para violarlos con sus lenguas lujuriosas, porque ya no se yerguen sus carnes vencidas.

Vergas aherrojadas por años de pudor y vergüenza, ocultas en vestiduras talares.

Vergas subrepticias, colándose de noche por los entresijos más secretos, persiguiendo el placer oculto, furtivo, inconfesable...

Vergas cortas y gruesas como el cuerpo de sus dueños —barrigas, bigotes canos, calvicie incipiente—, hechas para asaltar los coñitos vírgenes de chicas pijas.

Vergas enhiestas y desafiantes, garrotes firmes, duros, implacables, dispuestos a reclamar el derecho de pernada en los coños puros de siervas morenas y silvestres con olor a trigo.

Vergas oscuras, hechas a hurgar, a hendir debajo de la piel, y a sembrar su blanca semilla en vientres aún cerrados, ignorantes del celo y del ardor de la carne.

Vergas como trancas de puerta, contundentes, forestales, cubiertas de venas retorcidas y verdes como sarmientos de vid.

Vergas amargas como el vino del desengaño, estoicas para soportar los cuernos, taciturnas y negras como la venganza.

Vergas pequeñitas y tiernas, pequeñas pollas de bebé, erguidas antes de despertar, surtidores, apéndices tolerados sólo en los querubes de los cuadros clásicos, o en las estatuas rococó o barrocas.

Marmóreas vergas de titanes y dioses, ocultas convenientemente por la vergüenza episcopal bajo infamantes hojas de parra.

Mutiladas vergas de estatuas griegas, sepultadas por los siglos bajo toneladas de polvo, ceniza, indiferencia.

Gloriosas vergas erguidas de jóvenes mancebos, llenos de fuerza y gracia.

Rijosas vergas, semejantes a las de potros y toros en celo, añorando derramar su preciosa leche en el espasmo final del más feroz combate.

Vergas deliciosas, ardientes, insaciables, interminables vergas largas,como lanzas, como saetas, como émbolos, entrando en la carne, matando de lujuria y besos, apagando momentáneamente el fuego de las ansias con la frescura generosa de su nieve nunca enfriada.

Pollas vulgares, hambrientas, implacables, viciosas.

Pollas húmedas de los violadores que acechan por calles oscuras, por antros infectos, sórdidos, donde el pecado empolla su parvada de buitres.

Pollas de fuego, pollas de nieve, pollas que marcan con su oscuro sello el alma y el cuerpo para siempre.

Pollas de los torturadores en la cámara subterránea, cebadas e insensibles como fieras, mordiendo la carne como los azotes, descoyuntando cuerpos, sembrando el dolor y el miedo más allá de la memoria y el olvido.

Pollas armas de guerra, pollas de los homicidas, de los estupradores, de los canallas que pueblan la noche y se alimentan, como vampiros, de la sangre ajena.

Pollas mulatas mamadas por bocas rosas, ordeñadas por culos blancos, por rojos coños abiertos y goteantes de jugos, ávidos, dispuestos a devorarlas.

Hambrientas pollas de emigrantes, humilladas, perseguidas, vejadas, indefensas.

Garrotes hundidos en coños y culos anónimos, desconocidos, inermes, disponibles.

Llorosas vergas satisfechas después de un buen polvo.

Gotas de rocío, incipientes humedades preseminales brotando de la punta de coral de una verga erguida y dispuesta.

Arietes penetrando la carne torturada, temblorosa, ansiando a más tormento.

Leños inclementes que rasgan, desgarran, abren y rompen, como dientes feroces, como puñales, como clavos, como hierros de marcar, al rojo vivo.

Rectas vergas como varas dispuestas a descargar su crueldad sobre la piel ansiosa de castigo.

Curvas pollas como cimitarras, como garfios piratas, como sables, como ganchos de carnicero, como alfanjes entregados a dar voluntaria muerte.

Vergas masturbadas por manos de maricones ávidos de recibir su envite agónico hasta el fondo del culo.

Pollas mamadas a escondidas en cines, en autos, en carreteras solitarias, en baños públicos, en gimnasios.

Cerezas encarnadas, frescas, como fresas, como frutas recién cortadas, glandes turgentes entre el musgo oscuro del pubis.

Borboteo espasmódico, cálida lluvia hirviente de deseo, surtidor enhiesto nunca domeñado, viscosa esencia de hombre.

Masculinas, gemelas turgencias al sur del paraíso. Perfumada comarca de los besos. Breve, oculta, secreta heredad del placer.

Frutal riqueza oculta por púdicos cuadros cinematográficos que prefieren brindarnos la turgencia de las nalgas, a la desafiante y erguida imagen del deseo.

Mas de hierobula

El principio del mundo

La primera sumisa (4)

Cunnilingus 2: O cómo comerle... bueno, ya se sabe

Qué guarra sois (Crónicas prohibidas 15)

Voy a poseeros (Crónicas prohibidas 14)

Tres agujeros (Crónicas prohibidas 16)

Tres (Trío MHM 1)

Un trío HMH muy especial... (Crónicas proh. 13)

Le encanta que le den por el culo (Crónicas 12)

Trío de mujeres (Crónicas prohibidas 10)

Cunilingus (Cómo comerle el coño a una mujer)

Quiero que te corras en mi culo (Crónicas proh. 9)

Sodomiza y viola a madre e hija (Crónicas proh. 8)

Una venganza... (Crónicas prohibidas 5)

El castigo (Crónicas Prohibidas 4)

Sodomízame (Crónicas prohibidas 6)

Soy tu puta... (Fóllame 3)

Me conviertes en la puta de tu padre y otras cosas

A ver cómo te lo montas (o consejos para...)

Menudo lío (6: Ménage à trois)

Menudo lío (7: Mi amo me anilla y me azota)

Desvirgada

Menudo lío (4: Quiero que me poseas...)

Menudo lío (3: Poseída por todos)

Desvirgada de nuevo...

La violaron los dos...

Menudo lío

Casia (5: Mi hermano es muy puto…)

Aventuras y desventuras de un albañil

Xochitl

Fóllame (2: Es una puta deliciosa...)

Cómo me emputeciste 2: Agujeros llenos de leche

Cómo me emputeciste 4: La puta que no sabía que...

Cómo me emputeciste 5: Voy a convertirte en una...

Cómo me emputeciste 3: Es una verdadera puta...

La Bibliotecaria (7: Me follaron por todos los...)

Cómo me emputeciste...

El alumno (2: Préñame)

La Bibliotecaria (6: Carta de la sumisa... II)

La Doma (3: El director y la alumna)

La Bibliotecaria (5: Carta de la sumisa Cristina)

La Bibliotecaria (4)

Fóllame (1)

Crónicas prohibidas (3: La subasta)

La Doma (2: El director y la alumna)

La bibliotecaria (3)

La bibliotecaria (2)

Crónicas prohibidas (2)

El alumno

La Doma (1: El director y la alumna)

La bibliotecaria

Crónicas prohibidas (1)

Sodomizada y violada

El más oscuro nombre del olvido (8)

El más oscuro nombre del olvido (7)

El más oscuro nombre del olvido (6)

El más oscuro nombre del olvido (5)

El más oscuro nombre del olvido (4)

El más oscuro nombre del olvido (3)

El más oscuro nombre del olvido (2)

El más oscuro nombre del olvido

Casia (2)

Casia (3)

La vendedora de lencería (1)

Casia (4)

El escritor de relatos (1)

Carta a mi nuevo amo

Casia (1)