Tras perseguir a mi amado Sephiroth por la torre mako de niberheim, no podía negarlo ¡estaba en el mundo del Final Fantasy 7! (¡que guayyyyy!) ¡Soy la primera mujer en pisar otro planeta! XD) empezaba a conocer mejor a los personajes, pero teníamos que andar muchos kilómetros y dormir al raso.

En una de las noches me desperté, tuve un sueño extraño, pero tan real.

Soñé que estaba desnuda, había una presencia masculina delante mió, alguien que no pude distinguir bien, pero que me sentía atraída, sus manos acariciaban suavemente mi cuerpo, mmmm, no se quien era, pero si sabia tratar a una mujer, sentía los labios sobre mi, succionando mis pechos, ¡cielos! ¿Cómo puede un hombre hacer algo tan maravillosamente bien? Le acaricié los cabellos, eran larguisimos, blancos, me pareció ver en su espalda una enorme ala negra que envolvía mi cuerpo, sus suaves plumas acariciaban mi piel, unas plumas negras como la noche sin estrellas, antes de que me diera cuenta, sentí su hombría entrar dentro de mi, sentí como me bombeaba rico, yo jadeaba ante sus envestidas mientras el me besaba con sus hermosos labios, entonces sentí como aceleraba sus envestidas, como yo alcanzaba el clímax.

Mientras me llenaba, yo sentí el mejor orgasmo de mi vida, casi me desmayaba, pero una cosa me atrajo la atención

Antes de despertar, me susurró al oído.

-ahora llevas la semilla que destruirá tu mundo preciosa.

¿La semilla que destruirá mi mundo? Palabras que me daban miedo, pero me parecían tan reales, fui a dar una vuelta, pero algo me atrapó el pie y caí, al ver lo que me atrapaba, vi que era Yuffie que se le caía la baba mientras decía en sueños, ¡ya eres mía materia! (esa ninja no tiene remedio XD).

Vi a lo lejos a Aerith, ¡que guapa era! Con esa coleta tan larga y esos ojos verdes.

-¿podemos hablar Nerwen?

Me sorprendió el tono de preocupación y me senté junto a ella, ella puso su mano sobre la mía y me dijo.

-debes saber que yo, siento cosas, se que no eres de este mundo y siento que conoces muchas cosas de este mundo que ni nosotros sabemos ¿cómo es tu mundo? – dijo Aerith.

Yo dibujé un mapa de los 5 continentes de mi planeta y señalé el sitio donde vivo, le hablé de mi mundo, pero evité hablar sobre que teníamos un juego que representa su misma situación.

-¿has soñado con el? – me preguntó Aerith.

Esa pregunta me pilló por sorpresa, ¿cómo sabia que tenía un sueño húmedo?

Ella me cogió por los hombros y me dijo preocupada.

-nunca te dejes seducir por el, tengo la sensación de que tu mundo estará en peligro si llegas a unirte carnalmente con Sephiroth.

No pude evitar que mis pezones estuviesen en erección, me encantaba Sephiroth, ¡era mi ídolo! Pero poner en peligro mi mundo no era algo que me apeteciera mucho.

-¿me das tu mano Nerwen? – preguntó Aerith.

Yo se la alargué y Aerith me colocó un brazalete con perlas de colores, esas perlas eran materia.

-podrás curarnos a todos y colocarnos barrera, además posee magia de fuego y hielo, así no necesitarás que te protejamos tanto y nos podrás ayudar.

Yo abracé agradecida a Aerith, ella me respondió con otro abrazo, pero notó mis pezones erectos y se sintió cohibida (espero que no piense mal).

Llegamos a una ciudad llamada ciudad cohete, (¡por fin un techo y una cama!), era un lugar con casas pequeñas que coronaba con un gigantesco cohete inclinado (¡ya me acuerdo! ¡Allí nos encontraremos con Cid!).

Una vez allí fuimos a preguntar, nos dijeron que Sephiroth se fue volando hacia el continente vecino.

El único avión que había era de Cid, entramos en casa para preguntarle.

La mujer que nos atendió era muy amable llamada Shera, una mujer de veintitantos de pelo largo y castaño, pero decía que no seria posible, al parecer Cid no iba a darnos el avión así como así, yo mientras me senté en el sofá (como añoraba esa suavidad durante las noches en raso)

Entonces el apareció, era un hombre de 30 años de pelo corto y cigarro en la boca, pero llevaba un humor de perros y apestaba a alcohol, no paraba de gritar a Shera y en cuanto se percató de nuestra presencia.

-¿qué demonios hacen esos okupas aquí? ¡Estupida! – decía Cid a aquella mujer.

-¡ya basta! ¿Qué demonios tienes en contra de ella? – decía Tifa crujiendo sus nudillos.

Pero la buena mujer les separó y Cid se fue tambaleándose hacia el cohete, yo decidí seguirle, sabia perfectamente que le pasaba.

Me dirigí a la plataforma de lanzamiento y subí por las escaleras, entré por la carlinga y le ví, estaba reparando los controles del cohete mientras lloraba, pero al percatarse de mi presencia el me gritó.

-¡¿QUE HACES AQUÍ PUTA?! ¡FUERA!.

-¿ibas a ser el primer astronauta? Pero por salvar la vida de tu ayudante paraste el lanzamiento ¿no? – le dije.

Cid me miraba boquiabierto, seguramente pensaba ¿cómo coño sabia yo eso?

-Shinra dejó de lado el proyecto espacial y jamás tuviste otra oportunidad de ir al espacio ¿no? – continué.

-Shinra.... ¡esos bastardos solo le interesan ganar dinero! ¡No les importan los sueños ni las aspiraciones! Me ofrecieron un caramelo para después quitármelo, ¡¿crees que es justo?! ¡¿CREES QUE ES JUSTO?! – gritaba Cid antes de ponerse a llorar.

En ese momento apareció uno de los habitantes de ciudad cohete diciendo que una delegación de Shinra se acercaba.

-¡¿de verdad?! ¡Han venido ha restaurar el proyecto! – decía Cid con alegría.

-me temo que solo quieren tu avión – dije recordando el juego.

Pero Cid me empujó apartándome de su camino (¡SERÁ –censurado-!).

Bajé del cohete para encontrarme con mis compañeros, podía oír los berridos de Cid desde bien lejos (debe de estar hablando con Palmer, un ejecutivo de Shinra) me apresuré hasta llegar a la casa de Cid, pero antes decidí tomar algunas precauciones futuras.

Me acerqué a Tifa y le pedí las materias más poderosas, ella me miraba extrañada, pero conseguí convencerla.

En ese momento Barret, Cloud y Yuffie se enfrentaban a Palmer (increíble pero cierto, Palmer es más gordo en persona que en personaje de videojuegos) llevaba una pistola de mako (la energía que le sacan del planeta, para los no enteradillos ;)) usé mi brazalete para levantar una barrera a los personajes minimizando el daño de la pistola de Palmer, Barret reaccionó disparando su brazo ametralladora, pero Palmer las esquivaba como si fuera un payaso esquivando pasteles, haciendo que mostrase su culo y diese palmas en el, momento que aproveché para lanzar la magia fuego a su ENOOOOORME culo (¡cuánto tiempo deseaba hacer eso! XD) las llamas abrazaban las posaderas del ejecutivo haciendo que se fuera corriendo, pero no lo perseguimos, el avión empezaba a moverse (¡sin piloto!) y tuvimos que ir a por el, yo corría todo lo que podía, pero sentía que no lo alcanzaría, en ese momento una mano me agarró la mía y me subió al avión, recobrando el aliento sosteniéndome en el brazo que me ayudó, en cuanto me di cuenta que ese brazo pertenecía a Vicent, me apoyé en ese brazo (acariciando mis pechos en el ;D).

¡Pero nos estaban disparando! Los soldados de Shinra nos disparaban alcanzando varios impactos al avión, pero aún así despegamos, pero no pude evitar decir que nos caeríamos al mar.

-¡mocosa! ¡Este avión nos llevará donde queramos! – decía Cid.

Pero en cuanto caímos al mar Cid me miró con malos ojos mientras susurraba que era gafe, pero podíamos navegar usando las hélices del avión, llegamos al continente de Yuffie (mal presagio).

-¡esperad! ¡Conozco este continente! Os guiaré – decía Yuffie.

Pero acto seguido, varios soldados de Shinra nos emboscaron, Yuffié desapareció y nosotros tuvimos que combatir a los soldados, pero esta vez era distinto, Cloud, Barret, Tifa, todos parecían debilitados, en ese momento lancé las bolas de materia que había guardado a buen recaudo, decantando la victoria a nuestro favor.

-¡ey! ¡Esta materia tiene un olor curioso! Familiar – decía Cid.

Tifa olisqueó su materia y me miró sorprendida mientras me decía.

-¿no te lo habrás metido "ahí"?.

Yo respondí afirmativamente (no se me había ocurrido otro sitio)

Cuando nos dimos cuenta de que la materia que teníamos nos la habían robado fuimos inmediatamente a por Yuffie para que le pasasen muchas cosas y todas malas.

Menos mal que había chocobos en ese lugar, unos pájaros que caminaban, solían ser de color amarillo, unos bichos muy rápidos, con unas verduras conseguimos hacernos con unos chocobos salvajes (son increíblemente mansos y se dejan dominar con facilidad) pero no conseguimos para todos, Tifa subió con Cid, Barret montaba solo, Caith smith ya estaba montado en su monstruo disecado, Cloud estaba montado con Aerith (Tifa miraba la pareja con ira mientras Cid sonreía al notar en su espalda los pechos de la luchadora) mientras yo tenia que montar con.

Un segundo que coja aire.

(Respirar)

(Soplar)

(Respirar)

(Soplar)

¡¡¡¡VIIIIIIICEEEENNNNNT!!!!!! XDDD.

Ahí estaba ofreciéndome su mano mecánica para ayudarme a subir, tan pronto como subí me apoyé sobre el apretando mis pechos sobre su espalda y rodeando y agarrando su torso con mis manos, sus largos cabellos acariciaban mi cara, creo que estoy en el cielo.

Pero como todo tiene un final, llegamos a Wutai en un suspiro X_O.

Tan pronto como entramos en el pueblo, encontramos a Yuffie y esta ¡se fue corriendo! (parece mentira que con lo delgada que esta corra como un coche), era como jugar al escondite, pero cada vez que la encontrábamos se nos escapaba como una anguila, ¡menos mal que al final la encontramos en un cántaro pero le bloqueamos las salidas!

Yuffie, impotente, nos llevó a su casa, nos contó su historia, de cómo Wutai perdió la guerra y acabó siendo un lugar de turismo, ella cazaba materia para que Wutai recuperara su orgullo y honor mientras lloraba, pero Cloud le exigió su materia, Yuffie, con voz llorosa le dijo la palanca derecha.

Un recuerdo tan fugaz me invadió la mente, instantáneamente me aparté del grupo antes de que una reja nos aprisionara a todos, momento en el que Yuffie se escapó, mientras Cloud intentaba liberar a sus compañeros, yo fui por la kunoichi, pero había algo que no recordaba ¿un peligro? ¿Un bonus?, no conseguía recordar, ni siquiera cuando Yuffie se metió en ese pasadizo secreto, en cuanto entré, noté un golpe muy fuerte en mi estomago, desmayándome.

Ahí estaba, Vicent, desnudo y con una cadena atada a su cuello mientras yo sostenía la cadena, con mi dedo le ordené que viniera, mi apuesto esclavo obedeció y vino a mí, sus manos tocaron mis pechos con dulzura mientras que yo las disfrutaba con los ojos cerrados.

Pero en cuanto abrí los ojos.

X_OOOOOOOOOO

¡era un hombre gordo con bigote y peinado ridículo vestido con la ropa mas hortera que os podáis imaginar, sus manos rollizas llenas de anillos acariciaban mis pechos, podía sentir los callos de las palmas de sus manos profanando mi piel ¡ahora recuerdo! (a buenas horas) ¡es don Corneo!.

-vaya, ya tenemos una tercera chica y es tan guapa como las demás, me costará mucho decidirme – decía don Corneo.

¡¿Yo?! ¡¿Con ese?! Ya me lo imaginaba, yo encadenada y abierta de piernas mientras el con su barrigota se me acerca para penetrarme X_O.

Yo no iba a dejarme poseer por esa parodia de mafioso, le mordí la nariz con violencia, ¡menudo mordisco di! Le arranqué un trozo de nariz, pero el me respondió con una cachetada, dolía, pero mis compañeros llegaron para salvarme a mi y las otras dos chicas (yuffie y una turca llamada Elena).

Pero don Corneo ordenó a sus hombres que nos llevaran al monte de Wutai, un sitio con varias estatuas, mientras que varios hombres se rezagaron para entretener a mis colegas, nos ataron en una de las paredes de roca de la montaña, en unos círculos que había mientras don Corneo se decía para si.

-mmmm difícil elección ¿quién será mi chica para esta noche? ¡Ya se! La ganadora es.

(Sonido de tambor)

-¡la chica del vestido tan sexy! – decía don Corneo señalándome a mi X_O.

Miraba la altura en la que estábamos, luego miré al que seria mi (brueeghs) amante ¿qué seria mejor? ¿Morir por la caída o morirme de asco en la cama con ese?

En ese momento aparecieron mis compañeros XD, ellos ordenaron a Don corneo que nos soltaran, pero el pulsó un botón y las ruedas giraron.

¡Nos pusieron cabeza abajo! La falda de mi vestido se me subía dejando ver mi tanga a los ojos del don X_O y de Vicent, ¡pero un pájaro monstruoso atacó al grupo!, me angustiaba la idea de que dañase a mis amigos, pero veía que se las apañaban perfectamente, al final, Cloud, con uno de sus limites, consiguió derribarlo.

El pájaro cayó sobre corneo y el mafioso perdió el equilibrio, pero se agarró al borde con sus manos, (que cómico resultaba ver que intentaba usar sus pedos para subir).

Entonces apareció Tseng y varios turcos más, los turcos son la versión de la GESTAPO de Shinra.

No les oía bien, pero me parecía que Tseng le daba a Corneo tres opciones, el gordo gritó la b antes de caer al vació.

Al liberarme, abracé con fuerza a todos, Dios, estaba tan asustada.

Mientras, en el fondo de la montaña, don corneo estaba de rodillas frente a Sephiroth.

-¡gracias! ¡Gracias! Cualquier cosa que pueda hacer dímelo, se te será concedido – decía don corneo.

-es por eso que no te dejé morir, ¿sabes esa extraña chica que está en el grupo? Quiero que la traigas, totalmente intacta, tengo planes para ella – decía el guerrero de cabellos plateados.

-si mi señor, tiene usted buen gusto, enseguida la traigo – decía Don Corneo antes de irse.

Sephiroth miró hacia arriba, ¿quién era esa chica que podía predecir algunos acontecimientos? ¿Una anciana? No, lo notaria, pero a la joven se le cayó la cartera cuando la rueda la volteo, miró su identificación.

-Méjico, nunca oí hablar de Méjico, la moneda, las fotos, todo, no me suenan, pero usaré mi poder para saber de donde es, esta noche, cuando ella duerma.