Probablemente sea la única persona en todo el mundo a la que le atrae de una forma completamente sexual Jesucristo, el hijo de Dios. Pero la cuestión es que no me importa y escribo esto tras aburrir a mis amigas con comentarios que tan sólo hacían referencia a la enorme excitación provocada por Cristo en la cruz.
Como figura histórica, como padre de la iglesia católica o como primer hippie me interesa bien poco ya que la historia esta tan desgastada, ha sido tan manipulada y falseada por los diferentes intereses a lo largo de la historia que tan sólo me interesa ya como figura de mi propio placer. Es lógico desde mi punto de vista, ya que si te has criado con toda la imaginaria y los símbolos a cada paso, al final o acabas devota perdida o acabas enviciándolos.
La imagen de un Cristo moribundo sobre una enorme cruz de madera (un símbolo fálico donde los haya) desnudo, portando tan sólo un taparrabos de lo más sugerente sudado sangrando con su fuerte y fibrado cuerpo al sol, es la imagen más pasional, impresionante, expresiva y excitante que jamás haya podido imaginar. Un hombre, supuestamente atractivo o al menos así se nos ha mostrado a través del arte, sufriendo un terrible tormento por todos nosotros, si eso no es un ecologista, un hippie o un antiglobalización moderno que venga dios y lo diga, realmente te dan ganas de salvarle de aquel sufrimiento y aportarle un poco de paz, placer y sosiega a su existencia al igual que hizo Scorsese en la última tentación de Cristo
Su rostro no es el del torturado si no más bien del que goza sabiéndose libre y conocedor de su suerte en el "paradiso", como el esclavizado por su ama y que se siente en la gloria con cada nueva fustigación.
Yo no me veo de Magdalena, o tal vez un poco, cogiéndolo con mis brazos tras su bajada, mortificándome a mi misma sin saber muy bien que sentir pero embargada por el frenesí del momento, quizás me vea más como patricia romana, en primera fila, portando suntuosas joyas y perfumes de oriente esperando a la noche para dejarme llevar por mis fantasías más ocultas, o tal vez haciéndolo de día, sin esperar a que caiga el sol.
Rodeado siempre de mujeres
12 apóstoles con los que compartió grandes momentos
El diablo siempre tentándole
Dios como buen padre siempre atento y todo observándolo
Lo veo por todas partes y en cada momento, en su cruz, crucificado y con coronado con espinas que se le clavan y de las que brota sangre que sin duda es vida, sé que sufrió con la lanza en el costado y lo que siento no sé ni explicarlo. Una comprensión infinita, un amor tremendamente respetuoso pero muy poco virtuoso. Para los griegos el sexo siempre era sinónimo de amor, supongo que soy muy griega