En el edificio siempre había dos grupos, uno compuesto por Isabel, Marta, Azucena, Carlos, Juanma, Diego y otro compuesto por Silvia, Jose y yo.
Como bien se puede observar éramos una minoría clara. La verdad que la división venía hecha por la edad principalmente, porque del otro grupo rondaban de los 17 a los 19, y nosotros pues teníamos 13-15.
Desde muy pequeños la división era la misma y de hecho nos enfadábamos a menudo intentando hacernos la vida imposible. En el grupo de Isabel estaba Diego, que era el hermano pequeño de Marta y tenía 14 años uno mas que yo. A mi siempre me había apetecido más integrarme en su grupo, ellos eran como más divertidos, me resultaban mas interesantes.
Un día me enfadé con Silvia, por una tontería, pero en esa edad los enfados son verdaderas batallas campales. Yo sabía que mi peor venganza era irme con los enemigos, asi que sin pensarlo dos veces comencé con los acercamientos estratégicos.
Esa tarde baje al parque sola, estaban en "su banco" Azucena, Juanma y Carlos. Intenté iniciar una conversación con ellos pero me miraron como si fuera de parvularios:
Anda vete de aquí- nosotros no queremos niñas cursis
Eh, que yo no soy cursi!
Por favor, eres una niñata!!, vete a jugar con la Barbie
Quiero ser vuestra amiga, Diego tiene casi la misma edad que yo y va con vosotros- dije muy enfadada
Diego hace cosas de mayores que tu nunca harias...
A si, a ver como que?, seguro que yo también puedo
Juanma me miró, era el mayor del grupo, se fumaba un cigarrillo:
Sabes fumar? dijo orgulloso de su idea
Pues claro- afirme con la cabeza alta
Demuéstralo- y me paso su medio cigarro
Lo miré con desconfianza, en mi vida había dado una calada a ninguno, lo agarre temerosa, lo puse en mis labios y absorbí: Menudo ataque de tos me dio:
Ves como no sabes, vete con las muñecas
En ese momento Azucena se fue a buscar a las chicas y me quede a solas con ellos tres:
Venga déjanos en paz y vete con tus amigos bebitos ya
He dicho que quiero ser vuestra amiga, enseñarme a fumar y ya está
No seas pesada, vete.
Había fracasado, me volví y encontré en el camino a Silvia y Jose, ni les miré, me subí a mi casa. Hacia las 9 de la noche sonó el telefonillo, pensé que sería Silvia arrepentida para pedirme perdón, pero cual fue mi sorpresa cuando resulto ser Carlos:
Si?
Soy Carlos baja un momento al portal- me dijo
En segundo y medio estaba allí. Al lado de Carlos estaba Juanma y Dieguito.
Hemos hablado con las chicas, si nos demuestras a los 3 que eres mayor podrás venirte con nosotros
Vale- estaba contentísima
Pero hay que pasar unas pruebas secretas, lo primero es demostrar que sabes guardar un secreto
No se lo diré a nadie, lo juro por... por lo que queráis
Vale dijeron- pues vamos a mi trastero que está vacío dijo Juanma y allí hacemos las pruebas
Los trasteros estaban cerca de la puerta del garaje de la finca, fuimos los 4 para allá, estaba bastante oscuro y olía a humedad, Juanma abrió la puerta de un cuartito chico, dentro había unas banquetas, algún cuadro y poco más. Encendió la luz.
Empecemos:
Debes enseñarnos que ya eres toda una chica mayor, nosotros no vamos con niñas
Lo soy -dije toda orgullosa
No se te notan tetas de mayor- dijo Carlos medio riendo
Pues si que tengo
Pues no se ven- repitió Carlos, para que te creamos tendrás que enseñarlas- seguro que no llevas ni sujetador...
Juanma se reia mientras tanto.
No quiero enseñároslas...
Bueno entonces acabo la prueba, vete con tus amigos y ya está, cuando seas mayor y tengas tetitas hablaremos.
Me pique mucho, yo quería ir con ellos:
Las chicas pasaron por las pruebas?- pregunte inocentemente
A ellas se les notan las tetas- pero por alguna si que pasaron- y se reian
Diego permanecía muy callado
Nos las enseñas o no?
Vale
Subi me jersey, la camiseta que llevaba debajo y alce el sujetador por encima de mis pequeños pechos....
Vaya... que pequeños son... no se ven de muy mayor eh... no se yo creo que habría que completar la prueba no Juanma- dijo Carlos
Yo creo que si- respondió el amigo sonriente... a ver tienes pelitos en la rajita?
Si- respondi bajito- os dije que ya era suficientemente mayor para ir con vosotros...
Pero tienes muchos o pocos? Porque tetitas tienes pero pocas eh...
Diego tiene casi mi edad y le dejáis ir- mientras bajaba el jersey para taparme el torso
No, no , no te tapes, déjalo al descubierto hasta que decidamos que hacer... ah y Diego tiene muchos pelitos, enséñaselos Diego!
El se quedo quieto, no sabía que hacer, en ese momento Carlos bajo la cremallera del vaquero y me enseño todo su pubis sin llegar a dejar ver el pene:
Ves yo se lo enseño y no pasa nada, ahora tú Dieguito
Diego al ver a Carlos sin pensárselo dos veces bajo la cremallera, los slips y pude ver sus genitales, cubiertos de pelo, no muy espeso pero a mi en aquellos días me pareció una mata en comparación a lo mío...
A ver ahora tu niña?
Fue Juanma quien se acercó , bajo el mis pantalones y mis braguitas....
Pues muchos pelitos no tienes, yo creo que eres pequeña!
Yo también dijo Carlos, seguro que como pequeña que eres, también eres chivata.
Que noooo, por favor.
Mira a las mayores les gusta que las toquen el pechito y la rajita... a ti te gusta?
No se- dije timidamente
Pues a Diego si le gusta que le toquen la polla sabes?
A que si Diego?- dijo Carlos- a él le gusta porque es mayor- probamos a ver si te gusta?
Carlos me sentó encima suyo, bajo algo más mis pantalones y subió algo más mi jersey, uno tocaba mis pechos pequeños y el otro metía los dedos entre mis labios vaginales, lo hacían suave....
Te has masturbado alguna vez?- me preguntó Carlos
Si- respondí mientras lo hacía Juanma
Mira me parece que igual si que puedes venir con nosotros, igual si que actúas como una mayor. Carlos se metía mis pequeños pechos enteros en su boca y los acariciaba con la lengua, Juanma introdujo su dedo meñique en mi vagina.
Diego acercate hombre- dijo Juanma- a que es guapa?
Si- dijo bajito
Yo creo que podíais ser novios y así vendríais los dos con nosotros
Bueno
Yo me retorcía sobre las rodillas de Juanma, el había sacado el dedito y frotaba mi coñito empapado por mi flujo y su saliva.
Diego estaba empalmado, sus amigos se dieron cuenta:
Ven, enseñale la polla otra vez a ella,
Se puso de pie a mi lado, Carlos le agarró el miembro a Diego y lo introdujo en mi boca, en cuestión de segundo el chaval se estaba corriendo de la propia excitación y el primer contacto de su pene con una lengua
Carlos paso a tocarme ahora a mi mi sexo, lo hacía algo peor y Juanma a agarrar mis pequeños senos, esta vez introdujo en mi, parte del dedo índice... me hizo daño, así que frotó de nuevo en círculos mi coñito. Sentí el calambre interior, tuve un orgasmo y los dos mayores se echaron a reir.
Vístete y límpiate yo creo que ya podéis venir con nosotros, siempre y cuando paséis la prueba de mantener el secreto, con las chicas también
No diré nada de verdad
Si nos enteramos nos enfadaremos muchísimo contigo, y la proxima vez en vez de gustarte igual te hace mas pupita.
Me asustaron. Nunca dije nada, ni hablamos de ello, ni siquiera pasó de esa ocasión el tema, creo que quedo como un juego entre chavales que entraban y otros que salían de la adolescencia.