No comí, me quedé en la cama gran parte de la mañana, estaba algo dolorida. Sonó el telefono y era mi hermano:
Que tal estás Maria?-me pregunto con voz risueña
Algo cansada
Escucha llama a Carlos, el teléfono está en mi cuarto en el segundo cajón del escritorio y dile que está tarde estarás sola y que vaya a verte hacia las 18.30 de la tarde, que entré por el jardín que se nos estropeo el timbre y dejarás esa puerta abierta... dile que le esperas en tu cuarto... le encantara!
Juan, no me apetecé ya más, estoy cansada... que vamos a hacer?
Hermanita está ya casi todo listo, solo falta un detalle por ultimar... después de esta tarde todo llegará a su fin...
Y que hago cuando venga?
Nada, eso dejalo de mi mano... tu solo dile eso...
Subí al cuarto de Juan, y enseguida encontré el numero de Carlos, cuando descolgó el teléfono pareció sorprendido pero al relatarle mi idea pareció ilusionado.
Me di una ducha, mi ano seguía algo resentido, no mucho debido a que casi no había permanecido tiempo el pene de mi hermano dentro de mi y la recuperación parecía rápida. Me vestí con mis mayas y una camiseta de algodón entallda. Todo ello resaltaba mi estilizada cintura.
Ya eran las 17.00 y no tenía noticias de Juan, qué se supone que debía hacer cuando llegara Carlos, estaba inquieta y preocupada, no me gustaba el cáliz que estaba tomando esta venganza que no sabía muy bien cual era su motivo.
Sentada en el sillón de la salita escuche como la llave entraba en la cerradura de la puerta y detrás de la columna de a entrada aparecía mi hermano con una chiquita muy menuda de su mano.
Hola Maria, mira esta es Sara- me dijo cogiendola por la cintura
Sara?
Si la hermana de Carlos
Ah... si...claro...- me quedé perpleja
No podía imaginarme a mi hermano embistiendo a esa pequeña chica, era muy menuda, de cabellos rubios y cortos, con los ojos más azules que nunca vi y una mirada tan dulce... no podía imaginármela con el pene de mi hermano dentro de su estrecho culo. No parecía tener casi tetas, era finita y bajita y miraba tímidamente con una medio sonrisa...
Hola Sara- le dije
Hola, me contestó
Podías enseñarle tu cuarto María- dijo mi hermano
Subí obediente a la habitación, ella me seguía callada, era un silencio muy incomodo
Que eres la novia de mi hermano?- le pregunté descaradamente
Mmmm... mas o menos- me dijo muy bajito
Mi hermano ya tiene una novia... conoces a Sofía?
Si fue novia de mi hermano
Pues ahora lo es del mio- ahh, no sabía nada...
Pues si
Ella bajo muy rápido las escaleras, llamó cerdo a mi hermano y pretendió salir de mi casa, pero este no le dejo, la agarró de su frágil muñeca preguntándole que qué ocurría..
Ella lloraba...
Que has hecho Marieta? Que le has dicho?
Yo sonreia desde las escaleras
Sara cariño ,que te pasa?- besaba su cuello
Tu ya tienes novia, es Sofia, me lo dijo tu hermana- decía entre sollozos
La deje hace unos dias mi niña, no llores... mi hermana es que tiene celos...
Vi como mi hermano alzaba la vista para ver la hora del reloj de cuco de mi salón eran las 18.15, el tiempo se había echado encima.
Ven mi cielo, vamos a mi cuarto y te lo explico
Ella cedió a la primera... "será niñata la cria esta " pensé yo.... Mi hermano con un gesto me hizo una seña de que les siguiera... subimos los tres para arriba. Sara refugiada entre los brazos de mi hermano...
Entró en su cuarto y vi como empezaba a consolarla....la besaba en sus chicos y carnosos labios y limpiaba sus lagrimas con la punta de la lengua...
Venga Maria pidela perdón- y bajaba una de sus manos a querer tocar unod de los casi inexistentes pechos de Sara
Yo?- dije incrédula
Si tu...y me guiñó el ojo- dale un besito y podreis ser muy amigas
Todo eso era ridículo, me acerque a su cara y mi hermano iba bajando la mano hacia las caderas de la cria... bese su mejilla...
Os quiero mucho a las dos- dijo él- plantando un beso muy húmedo a su protegida para acabarlo en mis labios
La cara de Sara era de asombro, se dejaba hacer perfectamente... no sé que trabajo habría hecho mi hermano con ella, que su voluntad no aparecía en ningun minuto de esa situación...
Vi la mano de Juan dentro de la falda que llevaba Sara, sus piernita debiles y flaquitas se abrian ligeramente y su cara se tornaba algo brillante..mi hermano sacó su ropa interior...
Juan que está aquí tu hermana- dijo ella muy colorada
Shssss... no pasa nada ella te va a pedir perdón haciendote lo que a ti más te gusta... ven Maria... mira...
Subió la falda de la chica hasta la cintura, pude ver su sexo, era mucho más infantil que el mio, los cachetes de su coño eran muy carnosos, unos cortitos pelos algo arreglados (supongo que por las maestras manos de mi hermano como en mi lo hizo), coronaban el pubis... dale un besito para pedirle perdón...
No quiero- dijo con cara de gran desagrado
Mi hermano abrió sus labios y acarició como haciendo cosquillas su clítoris, ella quedó en silencio, con los ojos cerrados...
Vamos Maria, besalo- miró mi cara con tono autoritario
No quiero Juan
Querrás que se lo diga a todo el mundo, querrás que presuma de que te encanta que tu hermanito te folle?
No pensé que él tenía más que perder que yo, solo imaginé la vergüenza que eso me producía... me agaché y mi hermano aprovechó a empujar mi cabeza contra el coñito de esa cria que estaba húmeda sin fin...
Venga niña, saca la lenguita y hazla gozar... hasta que te perdone...
Mi hermano dejo de tocarla a ella y empezó a desnudarse, yo me sentía extraña notaba el olor de esa chica y mi boca llena de pequeñas carnes muy húmedas y blanditas que desprndían calor...
Cuando mi hermano se halló desnudo, le vi su miembro, duro, corvado hacia arriba...se sentó al lado de Sará y le quito el jersey y el mínimo sujetador que envolvían unos muy pocos prominentes pechos. Ahora ella estaba desnuda con su flada de pana enrollada en la cintura.
Las caderas de Sara se contorneaban en busca de s propio placer, tumbada yacía con los ojos cerrados, no queriendo ver que era otra joven chica quien le hacía jadear.
Cuando vi el pene de mi hermano me excite mucho, él se acercó a la niña y me dijo que parara y me desnudara rápido, así lo hice, los dos me miraban atentamente. Creo que Sara con cierta admiración a ver que mis curvas se acercaban bastante más a las de una mujer...
Era increíble tal situación, la peque jadeaba medio avergonzada, mi hermano tenía los ojos llenos de rencor y fuego y yo andaba muy perdida, medio excitada medio asustada...
Ven aquí María
Agacho su cuello, empujo mis muslos. Yo permanecía de pie frente a Sara que tenía sus piernitas abiertas y el dedo de mi hermano moviéndose dentro de ella, mi hermano sentado a su lado introduciendo su cabeza entre mi muslos y sacando la lengua para lamer completamente mi sexo...
Estaba muy empalmado... lo veía desde arriba... cerré los ojos y me dejé llevar... jadeábamos las dos ...saco la cabeza de entre mis piernas y paso a introducir dos de sus dedos...mmm que placer...
Algo le hizo repentinamente cambiar de posición, pareció entrarle gran precipitación...
Vamos Sarita follame como sabes pequeña- dijo
La niña con unos colores muy rojos en la cara se levantó, mi hermano se tumbó en el suelo y ella se sentó sobre su tiesa polla... Maria ven que te coma tu coñito... me hizo sentarme frente a Sara sobre la cara de él, dejando mi sexo muy abierto para que pasara su lengua sin dificultad... su dedo se aproximaba al comienzo de mi culo....
Era extraño, la polla de mi hermano parecia más ancha que el sexo de Sara, cuando se abría camino entre sus labios parecía partirla en dos, ella sudaba y desde mi posición veía paerfectamente como lo hacían los dos, como se movía ágilmente debido a su poco peso... mi hermano estaba como loco, intentaba agarrar los diminutos pechitos de ella que casi ni se movían con los saltos, de repente con su pelvis daba empujones para que la chica lo hiciera más fuerte... su dedo se introducia hasta el fondo de mi ano y me chupaba el coñito como nunca lo había hecho...
El placer era incrible...
Tócale el clítoris a la hermanita de Carlos, Maria.- su tono era vengador... hasta ese momento que escuche lo de la "hermanita de Carlos no me percaté...
Ya había llevado el dedo al coño de ésta, pareció encantarle cuando... en el quicio de la puerta vi su cara... allí estaba Carlos, enfurecido mirando la cara de mi hermano... mi hermano agitado moviendo la pelvis, clavándole su sexo a ese pequeño coñito mientras yo lo meneaba... mi hermano sonreía, miraba fijamente a Carlos a sus ojos y Carlos a él.
Me quede fria, Sara gritó muy fuerte y en mi mano note esa tierna carne palpitar con energía.. ella no se había dado cuenta de nada... ahora abría los ojos y veía a su hermano mirando su cara después del orgasmo. Se levantó rápidamente a taparse tras la puerta... mi hermano pareció disfrutar con la crueldad.
Se incorporó levemente y giró su cuerpo para metermela a mi... nada más introducirla se corrió....y su leche salió entre mis labios...paso sus dedos por mi clítoris y me masturbó, no tarde nada en sentir como llegaba al climax...
Carlos se quedó en la puerta todo el rato, inmóvil, quieto, callado... su hermana daba pequeñas carreritas, buscando su ropa por el cuarto, bajó su falda para taparse lo que todos ya habiamos visto y la mayoría disfrutado... puso su jersey...
Yo intenté incorporarme para vestirme pero Juan me abrazó...
Me sujeto entre sus brazos, los dos desnudos, mientras los hermanos cada uno nos miraba de distinta manera...
Vamonos Sara- dijo Carlos muy serio
Ella con la cabeza gacha salió del cuarto tras su hermano
Te has pasado Juan- le dije mirándole seria a los ojos
Jajaja- rio besando mis labios...