miprimita.com

Follándome a Angelina Jolie

en Fantasías Eróticas

FOLLÁNDOME A ANGELINA JOLIE

Para ver más de ella, http://spanish.imdb.com/name/nm0001401/.

Me encontraba de viaje en Los Ángeles, conociendo la meca del cine y disfrutando con el paisaje. En las pocas semanas que estuve allí, recorrí el Hollywood Boulevard, el Walk of Fame(el kilométrico "Paseo de la Fama" de las estrellas), el Kodak Theatre(donde han celebrado los Oscars más de una vez) y mucho más. Me lo estaba pasando en grande. De primero, lo que más me sorprendió es que los famosos hacen vida normal, no como en España, mi país, donde se les acosa hasta cuando tosen. Si bien al principio me sorprendía de que en la planta baja del hotel casi siempre había una estrella del cine con una entrevista, con el tiempo se me hizo de lo más normal, o al menos, eso creía.

A pocos días de terminar mis vacaciones, regresé de un buen paseo por la ciudad cuando, al entrar en el hotel, quedé petrificado: Angelina Jolie estaba haciendo una entrevista para una revista, según pude entender, por su nueva película, aunque no me quedé con el título. Con esos labios XXL y esos rasgos felinos, Angelina ya me había cautivado hacía tiempo, pero verla en persona fue fantástico. Ella ni se fijó, por supuesto, así que seguí de largo para entrar en el ascensor y subir a mi piso. Centrado como estaba en mis pensamientos ni me di cuenta de que una mano impidió cerrar la puerta del ascensor y una persona entró conmigo. Cuando me giré para ver quien era(la natural curiosidad), sí que quedé helado: era la propia Angelina.

-¡¡¡Guau-exclamé sin poder evitarlo-!!.

Ella se giró para mirarme, con gesto interrogante. Evidentemente estaba a la expectativa de ver que decía yo e intenté, lo que pude, contestar.

-Yo…esto…joder…¿cómo se decía?...ah sí…Angelina…I’m a great fan of you…I loving…no…I love you films…you is…¡¡mierda!!...you are a great actress…

Me estaba hacienda un lío monumental. El nerviosismo que tenía era muy grande y ni siquiera podía pensar con claridad. Ella arqueó una ceja y me miró divertida, cruzándose de brazos.

-I’m sorry…I’m excited…Bufff…¿cómo le digo que estoy nervioso?.

-¿Por qué no pruebas en español?.

Abrí los ojos como nunca. La voz que oí fue la de ella, quien se rió como una loca, llevándose una mano a la boca intentado disimular sus grandes carcajadas.

-Lo siento-me dijo-…es que estabas tan gracioso…

-No he sido muy brillante, ¿verdad-pregunté rascándome la nuca-?.

-No, no mucho, pero sí gracioso. Bueno, ¿tocas o qué?.

-¿El qué?.

-El botón para subir.

Se me había olvidado hasta eso. Ella iba al octavo piso, y yo al décimo. Me estaba riendo de mí mismo por aquel ridículo cuando, de repente, el ascensor se paró entre los pisos 4º y 5 º, y todo comenzó a temblar muy fuerte. Me quedé allí, muerto de miedo, ante aquel terremoto, y ella no quedó indiferente. Por instinto nos abrazamos el uno al otro, arrinconados en una esquina. Cuando todo cesó, probé varias veces a pulsar el botón, pero el terremoto dejó encallado el ascensor y no había manera de moverlo. Los dos habíamos quedado encerrados dentro.

-¿Qué se hace cuando ocurre un terremoto-pregunté-?.

-¿No lo sabes-me preguntó extrañada-?.

-No. Donde yo vivo apenas hay terremotos. En todos años que llevo donde vivo solo hubo uno, y fue de 2.1 ó algo parecido, en la escala Ritcher.

-Pues normalmente, después de un terremoto, avisan a los equipos de emergencia, comprueban los inmuebles y edificios y procuran comprobar que los ascensores están vacíos de gente. No creo que tarden mucho en venir por nosotros.

-Uuuuuuuffff-suspiré de alivio-. Menos mal…

-¿Tienes miedo?.

-Claro que lo tengo. Yo no estoy hecho a terremotos. Además, se supone que estoy aquí por vacaciones, no para morirme de miedo.

-Vale. Si te parece bien charlemos un poco para matar el tiempo, ¿qué haces aquí?.

Poco a poco fui contándole mis motivos para hacer tan largo viaje y lo bien que lo pasaba. Le conté que lo mejor era ver los nombres del Paseo de la Fama y recorrer esas calles larguísimas, que parecen no tener fin. Y también que de vez en cuando me tropezaba con la filmación de una película en plena calle y me quedaba como espectador. Angelina notó que era un cinéfilo de pies a cabeza y me escuchó con mucha atención. Ella también me contó algunas cosas suyas, aunque otras ya las sabía por la prensa. Al mirar mi reloj, noté que ya estábamos allí una hora, y ni oíamos voces al otro lado preguntando si había alguien ni escuchaba ruido de que vinieran a sacarnos de allí. Comencé a inquietarme y pulsé varias veces el botón de emergencia, pero no sabía si funcionaba. Lo que sí sabía era que, pese a culminar un sueño al estar con ella, no aguantaba estar allí atascado.

-¿De verdad eres un gran fan mío?.

-¿Perdón-pregunté totalmente ensimismado-?.

-Lo que dijiste antes. ¿De verdad eres un fan mío?.

-Eres una de mis actrices favoritas, y mi lista es muy selecta-dije orgulloso-.

-¿Ah sí?, ¿y quien más hay en esa lista-preguntó jocosa-?.

-Pues….Jennifer Connelly…Jodie Foster…Diane Lane…Drew Barrymore…

-¿Drew Barrymore-preguntó asombrada-?.

-Sí, me gusta mucho como actúa. ¿Ocurre algo?.

-No no…cada uno tiene sus gustos…en fin…Drew Barrymore-murmuró en voz baja, sin acabarse de creerlo-…¿Y cual es la película que más te gustó de mí?.

-Pueessss….bufff….deja que piense…creo que "Playing By Heart", ó si no, pues "Gia", que fue un trabajo muy bueno…¡ah sí!, y también "Pushing Tin"…

-Vaya, ya veo que has visto mis películas.

-…Y por supuesto "Lara Croft: Tomb Raider", las dos. Actúas muy bien.

Esbozó una amplia sonrisa de orgullo. Se notaba que le gustaba sentirse halagada, como cualquier otro actor. Mirando su ropa(unos apretados jeans y una camisa blanca abrochada a medias) no pude evitar recorrerla con los ojos y fantasear con ella, pero me quité esas ideas y al notar que estaba un poco duro me senté a su lado disimular. De nuevo ella me miró arqueando una ceja con mirada divertida.

-Vaya vaya…veo que mi forma de actuar no es lo único que te gusta…

A pesar de estar sentado en el suelo se notó un poco mi erección. Me lamenté de haber sido descubierto. Me sentí igual que cuando me pillaban robando caramelos en los kioscos cuando era niño.

-Lo siento…es que…siendo sincero, tienes un cuerpo de infarto…estás buenísima…

-¿Y que se supone?, ¿qué vamos a hacerlo aquí y ahora?.

-Pues….la verdad…no-respondí, con total indeferencia-…

-¿No-preguntó, sorprendida-?, ¿y por qué no?.

-Vamos, está claro…tú eres una estrella…y yo un tío de la calle…tú eres como las demás…te vas con otros actores ó con músicos o algo parecido…las actrices no se fijan en tíos de la calle…

-Perdona que te diga-me espetó herida en su amor propio-…yo no nací siendo famosa. Es cierto que soy hija de actor sí, pero mi fama me la gané. Empecé siendo una "tía de la calle", como tú dices, y luego me hice famosa ¿vale?.

-Sí, perdón. Lo que quería decir era que…

-No hace falta. Quedó muy claro que eres de los que creen que los actores vivimos en otro mundo.

-Sí, a veces sí.

-Pues cambia eso porqué estás muy equivocado.

-Quizá, pero no cambia el hecho de que tú solo te irías con actotes ó músicos, gente famosa como tú. Ni por asomo te fijarías en un tío como yo.

-¿Eso crees-me desafió-?.

-Sí, lo creo.

-A ti te hace falta una buena lección. Muy bien, niño, vamos a ver si puedes conmigo-dijo, poniéndose al otro lado del ascensor-.

-¿Contigo?.

-Sí, conmigo. Los dos solos, en un ascensor, sin salida…venga…ven por mí…nadie se enterará…y podrás presumir de haberte follado a Angelina Jolie…ven si tienes pelotas…venga…

-¿Lo dices en serio-pregunté dudando-?.

-Y tan en serio. ¿No estás excitado?. Pues venga, ven a follarme si te atreves.

En ese momento fui yo quien se sintió herido en mi amor propio. Desde luego no iba dejar que ella me pusiera a prueba, ni ella ni nadie, de modo que acepté su desafío. Me fui hasta ella y le agarré fuerte del culo mientras la besaba. Que labios, dios mío, que labios. No hay palabras. No me extraña que obsesionen tanto a los hombres. Como besaba, y como manejaba la lengua. Aquellos vaqueros ajustados le marcaban bien el culo como un guante y lo estaba disfrutando. La sostenía en el aire y hacía que ella cruzara las piernas alrededor mío mientras la sobaba tanto como podía. Nuestras bocas parecían centrifugadoras de tanto que nos movíamos, mientras nos dábamos unos besos de tornillo que casi nos dejaban sin aliento. Su boca sabía deliciosa, jugosa, y muy húmeda. Sus labios se unían a los míos, literalmente se fundían. Al dejar de besarla metí mi cabeza entre sus pechos y apreté fuerte. Deseaba ver en primer plano sus famosas y enormes tetas. Subí mis manos para acariciarlas, y me maravillé al ver que casi no podía abarcarlas con una mano. Sensacional. Con mis dedos sobre su ropa busqué ávido sus pezones y al encontrarlos jugué un rato con ellos, notando como Angelina comenzaba a gemir y cerraba los ojos para dejarse llevar. De inmediato me apartó y se quitó la camisa y una camiseta corta de tirantes. No llevaba sujetador. Casi me desmayé cuando por fin vi esas joyas, firmes y grandes, que me miraban directamente. Me lancé a comerle las tetas como un desesperado. Metía lengua por todas partes y probaba el sabor de aquellos pezones que tanto excitaban a medio mundo. Sentí un enorme arrebato de orgullo ante aquel panorama: yo, un perfecto don nadie, un tío normal y corriente, estaba comiéndole las tetas a una de las actrices más famosas y deseadas del mundo, y menudo manjar. Bajé una mano por su vientre y desabrochando sus vaqueros, le metí mano. La muy guarra ya estaba muy mojada. Aquello renovó mis fuerzas y continué mamando con delicadeza y mimo, hasta que ella me paró súbitamente, lanzándome contra la pared.

-¿¿Qué estás haciendo-preguntó, enfadada-??. Para hacer el amor me busco un marido…no necesito alguien como tú…¿queda claro?...

-¿¿¡¡Con que esas tenemos eh!!??, pues ya verás lo que te doy a dar hija de perra…

Volví a por ella y todas las delicadezas se fueron al diablo. La comía las tetas con rápidez y glotonería, la acariciaba por todas partes y de vez en cuando le apretaba esas nalgas tan firmes y aquellas tetas. Si quería echar un polvo, pues eso tendría.

-Mmmmmmmm….así, asíiiiiiiiiiii…venga…damé más…insúltame…vuelve a insultarme…dime guarradas…

-¿¿Con qué te gusta que te insulten eh??.

-Me excita…me pone muy mojada-dijo mientras la hurgaba entre pierna-…aaaaaaaaaahhh aaaaaahh aaaaahh…sí, asíiiiiiiiii…tócame, tócame el coño…

-Ya verás, ¡¡golfa!!, ¡¡guarra!!....¿¿harás lo que yo diga de acuerdo??...

-Sí…lo que tú quieras…haré todo lo que quieras…

-¡Así me gusta zorrita!…zorra, que eres zorra…ahora vas a mamarme la verga y quiero que la mames toda, ¿entendido?...y si no te daré unos buenos azotes en ese rico culo que tienes…

Se arrodilló delante de mí, me bajó los pantalones y comenzó a sobarme la verga y a mamármela tal y como le ordenaba. Nunca hubiera imaginado que Angelina, con lo aguerrida que sale en sus películas, fuera toda una sumisa en la vida real, una sumisa encantada con un macho que la sometiera para hacer con ella cuanto deseaba. Yo me encontraba en el cielo. ¡Menuda felación me estaba dando!, ¡¡joder con la famosa actriz, menuda chupapollas estaba hecha!!. Con esa boquita y aquellos labios, daba unas mamadas de impresión, capaces de dejarme sin aliento. Parecía que iba a quitarme la vida en cada larga chupada que me daba. Su lengua se enroscaba entorno a mi amoratado miembro y lo saboreaba como una loca. Ocasionalmente tocaba el glande con la lengua y eso me provocaba roncos gemidos y espasmos varios. Rechinaba entre dientes de puro goce. ¡¡Ya podían todas chuparla tan bien como ella!!.

-Ooooooohhhhh oooooooohhh ooooooooohhh…así, chupa chupa…no pares hija de perra…que cerda eres…mírate, pareces una puta barata…una fulana…vamos chupa más fuerte…….ooooooooooohhhhh OOOOOHHHHH OOOOOOOOOOHH OOOOOOOOOOHHHHHHH….ESO ES, SÍIIIIIIIIII…OOOOOHHHH OOOOOOOOHHH…

La cogí del pelo y la hice mamar más fuerte. Estaba alucinando. Nunca me había gustado el rollo ese de dominador y sumiso, y parecía todo un experto sometiéndola a ella. Con su mano se aferraba a mi tranca y chupó y chupó todo lo que quiso hasta que la hice detenerse, la hice levantarse y cogiéndola de los hombros la empujé contra la pared, fui hasta ella bajando con fuerza sus pantalones, lo que la hizo gemir de placer, me agaché y comencé a comerle el coño.

-Aaaaaahh aaaaaaaaaah aaaaaaaaahh aaaaaaaahhh aaaaaaaaaaaaaahh aaaaaaaaaaahhh…tú sí que sabes comer un coño…oh dios mío…¡¡OH DIOS MÍO!!...QUE COMIDA…AAAAAHH AAAAAAAHH AAAAAAHH…

-Menudo coño tienes aquí-dije irónico-…voy a gozar comiéndomelo todo…

Tal y como hacía antes, no se lo estaba haciendo con delicadeza si no con fuerza, sin importarme que ella gozase. Se lo comía a lo bestia, como siempre había querido hacerle a una mujer. Menudos chorros emanaban de ella, parecía un río en plena inundación. Le salían como si fuesen a explotar y yo me los bebía a toda prisa, me los engullía ansioso de ellos. Con mis dedos acariciaba su endurecido clítoris y totalmente frenético lo agitaba, escuchando como Angelina gemía y viendo su cuerpo retorcerse y agitarse en todas direcciones. Sus piernas temblaban. Eso me indicó que estaba a punto, y rápidamente me incorporé, la sostuve por las piernas y la penetré hasta el fondo. La cogí por sorpresa por lo rápido de mi acción.

-Aaaaaaaahhhhhhhhh-gimió-…aaaahh uuuuummmmm…

-Te voy a follar viva-dije entre dientes como enfurecido-…te la pienso meter por todos los agujeros de tu cuerpo pedazo de puta…

Se relamió por mis insultos y mis intenciones, que casi eran de violador. Tras unos momentos de deleite, sintiendo esa codiciada vulva de actriz, comencé a bombear dentro de ella como si quisiera echar abajo una pared de hormigón armado. Sacaba casi toda mi polla excepto la cabeza, luego se la metía entera y repetía operación una y otra vez, adentro y afuera adentro y afuera disfrutando de cada acometida. Jamás había entrado nunca en una vulva tan húmeda. Me sentía como en una bañera de agua caliente, incluso podía oír el chapoteo de nuestros fluidos mezclándose. Que ardor de mujer. Empecé a comerle el cuello y hacer chupetones, mientras sus manos iban locas a mis nalgas, se aferraban a ellas y al oído ella me susurraba, "más fuerte, métemela más fuerte". ¡¡Joder que golfa era!!. Sin inhibición alguna me la follé hasta sentir que más que follarla la estaba violando. Sus gemidos debían estar resonando por todo el hueco del ascensor, y los míos también, supongo. Mi excitación además era doble ya que el ascensor es uno de los sitios que más me excitan para hacer el amor.

-Uuuuffff que polvo….es el mejor polvo de mi vida…¿quieres que me corra dentro, perrita?, ¿quieres que te llene ese coñito de leche?...

-No, no te corras dentro…quiero que me la des en la boca…

-¿Así que te gusta tragar, eh?.

-Síiiiiiii…me encanta el sabor a leche de hombre…soy una esclava del semen…adoro tragarme semen…

-Pues…aaaaaaaahh aaaaaaahh…si semen quieres, semen tendrás, ¡puerca!…

Disfruté como un loco de las últimas embatidas dentro de ella, sintiendo ese calor que emanaba, y cuando estuve a punto de gozar me salí de ella, la agaché delante de mi tranca, me masturbó y comencé a eyacular. Aaaaaaaaahhhh que corrida…No quedó nada fuera. Angelina se había metido mi polla en su boca y se bebió todo mi semen. Nunca había visto nada igual. Fue increíble verla tragando, y cuando acabó me agaché y la pajeé hasta que se corrió con unos gritos de placer que me volvieron loco. Me comí sus últimos jugos y nos echamos en el suelo agotados. Me quité el sudor de la frente y la miré, sonriendo. Vaya mujer, que hembra más caliente. Ella me miró y me dio un beso en los labios.

-¿Qué?, ¿sé o no sé dar echar un polvo con un hombre normal y corriente?.

-Sí…sí que sabes…eres increíble…el que consiga tenerte para él será un hombre muy pero que muy afortunado…bufffff-resoplé-…dios mío, que polvo…

Angelina comenzó a reírse por mis exclamaciones y mis comentarios. Realmente me había dejado en una especie de shock. Nunca una mujer me había hecho gozar tanto.

-Bueno-me dijo-…creo que el que ahora debe sentirse afortunado eres tú, ¿verdad?...Por cierto…¿Cómo te llamas, corazón?.

-Iván-respondí-, me llamó Iván.

-Hola Iván, soy Angelina Jolie…¿qué tal?...

Su broma hizo que me riera con fuerzas. Le di un buen abrazo y probé de nuevo esos dulces y enormes labios. Mi excitación, añadida por el olor a sexo que había en aquel lugar, consiguió volver a ponerme erecto. Ella lo vio y me lo masajeó un buen rato. Me dio unos cuantos besos en el glande y gemí con fuerza. Me sentía como si viviera una película porno. Presa de mis deseos, me abalancé como un tigre sobre Angelina para besarla y acariciarla. La hice ponerse a cuatro patas y yo detrás de ella. Desde esa posición pude ir por sus pezones y su clítoris a la vez. Me fascinaba ver a Angelina pidiendo más con su boca jadeante abierta y su cuerpo de diosa temblando y gozando con mis caricias. Sin decirle nada, apunté mi polla directa a su culo, y para cuando ella se dio cuenta de lo que yo pretendía, fue demasiado tarde. La penetré hasta el fondo y ella lanzó un doloroso gemido. Aquello fue música para mis oídos.

-AAAAAAAAAHH…por el culo no…Que bestia eres…

-¡Ya, claro!, como si no te gustase, ¿verdad?. Ahora me vas a decir que no te guste que te den por el culo, ¿no?.

Ella no respondió. Su silencio habló por ella. Una vez me acomodé en la postura que habíamos pillado, comencé a encularla con frenesí. Si el coño era sensacional, su culo tampoco se quedaba atrás. Que culazo de estrella me estaba disfrutando. Y ella no tardó ni un minuto en apoyar las manos en la pared, mover las caderas y comenzar a disfrutar de la follada que le estaba dando. Nuestros jadeos comenzaron a ir a ritmo de nuestros movimientos. Me incliné sobre ella y le lamía el cuello y acariciaba su espalda, su vientre, sus pezones, su conejito húmedo y sus caderas, con las que me daba fuertes empujones.

-Uuuuummmm…¡¡aaaaaaaah aaaaaaaahhh aaaaaaaaaahh aaaaaaaaaahh!!...Joder que pedazo de culo…que culo de golfa tienes…buff bufff…esto es manteca de la buena…¡¡TOMA POR CULO!!, ¡¡TOMA POR CULO SO GUARRA!!...

-Aaaaaayyyy…aaaaaaaayyy que bien entraaaaaaaa…fóllame más, métela bien…madre mía que polla…que gozada de polla…vamos sigue insultándome…llámame de todo…

-Vamos pendeja…ramera, que eres una ramera…tú no eres una superestrella...eres una superputa…una guarra…

Comencé a insultarla de todos los modos posibles. A los pocos minutos ya ni siquiera podía hablar. Estaba centrado de gozar ese culo que era la octava maravilla del mundo. Metía y sacaba, metía y sacaba, adelante y atrás, adelante y atrás en un martilleo constante. La cogí bien de la cintura y de los hombros, me pegué lo máximo posible a su cuerpo y empezamos la recta final. Me encantaba el sonido que hacían sus nalgas al chocar contra mis caderas.

-¡¡¡OH DIOOOOOOOOOOOOOSSS!!...VOY A CORRERME…ME VOY A CORRER…OOOOOOOOHHH OOOOOOOOHHH…

-VAMOS, GUARRITA MÍA…YA ESTOY A PUNTO…DALE DALE…ERES UNA CERDA, UNA GRAN JODEDORA…VOY A LLENARTE LAS NALGAS…

-OOOOOOHH SÍIIIII…OOOOOOOHH ¡¡¡OOOOOHHH OOHHH OOOHH!!!...CÓRRETE CÓRRETEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE…

-ME CORRO ME CORROOOOOOO ¡¡AAAAAARRRRRGGGGHHH!!…

Apreté los dientes y luego lancé hondos y profundos gemidos cuando gocé y comencé a llenarle ese culo de semen. No eyaculé tanto como la primera vez pero sí que me corrí a base de bien dentro de ella. Después de gozar quedé dentro de ella un poco más, saboreando los últimos momentos. Al sacarla ella me la estuvo limpiando y la dejó como los chorros del oro. Teníamos la ropa por el suelo y a mi lado vi su tanga. Lo cogí, lo olí y llevaba impregnado el olor de su coñito húmedo.

-Esto me lo quedo-dije esbozando una sonrisa malévola-…

Le di un par de cachetes en el culo como último capricho. Entonces escuchamos un ruido en la puerta del ascensor que nos dio un susto de muerte. Escuchamos unas voces diciendo que los bomberos iban a llegar en enseguida, de modo que nos vestimos rápidamente, metí su tanga en uno de mis bolsillos y a los pocos minutos la puerta se abrió con una palanca. Según nos dijeron hubo daños considerables por toda la ciudad y debido a los atascos tardaron en llegar al hotel. Nos llevaron al vestíbulo y la cosa no pasó de un susto. Al día siguiente la TV y los periódicos se hicieron eco del terremoto. En uno de ellos pude leer el siguiente párrafo: "Entre las personas atrapadas por el terremoto, se cuenta la famosa actriz Angelina Jolie, que quedó encerrada en un ascensor con otro huésped sin identificar del hotel donde se hospedaba, que al parecer estaba de visita en la ciudad".

Cuando me fui de allí lo primero que hice, ya en el avión, fue sacar el tanga del bolsillo de mi pantalón y olerlo. Solo eso bastó para despertarme las vívidas sensaciones de haber pasado aquel rato con Angelina, encerrados en aquel ascensor, y de habérmela follado por todos sus agujeros. Sólo se lo conté a un par de amigos, que desde entonces me envidiaron profundamente por la suerte que tuve. A partir de ahí, cada vez que la veo en revistas ó en los carteles de sus películas, tengo que disimular para que nadie vea la erección que tengo al recordar como le daba por culo, encerrados en aquel ascensor…

PD: Me gustaría que la saga "Follándome a" fuera continuada por otros autores con su famosa favorita, ya sea cantante, actriz, modelo, presentadora, etc(y también que las autoras lo hagan con el suyo). De ese modo, pido por favor que tal y como hice, cojáis a vuestro famoso/a y fantaseéis con ellos para goce vuestro y de los lectores. Hasta la próxima…

Mas de Ivan Sanluís

Una noche, tres historias: Viki & Toñi

Una noche, tres historias: Trini & Pili

Una noche, tres historias: Moni & Puti

Mis primeros amantes

Viendo a mi novia follada por su hijo

Una noche de perros

La hija de mi amiga/La amiga de mi madre

Mente incendiaria

Aprendiendo a ser sumisa

Intercambio de venganzas (capítulos 5 y 6)

Intercambio de venganzas (capítulos 3 y 4)

Intercambio de venganzas (capítulos 1 y 2)

Realquilados: una historia morbosa

La vida secreta de Luna Lovegood

Celda de castigo

Vida de una supermodelo

Esclavizada

Forzada en la disco

Caballo: Mi primera experiencia zoo

Caso real de abuso de ultratumba

Testigos inesperados

Karlita

El círculo de las viciosas

Hogar, aterrador hogar

Severus Snape: biografía y secretos

El estudio de papá

Infidelidad en el cybercafé

Ñoña hasta decir basta

Angel Girl X, mi juego favorito

Una familia unida: el secreto de Ale

Aprendiz de chupapollas: tercera lección

Aprendiz de chupapollas: segunda lección

Aprendiz de chupapollas: primera lección

101 usos para un par de tetas

Ir por lana...y salir trasquilada

Novia pervertida, novio vengativo

Banquete de boda

Querido diario

Aurora & Iris

Fono Pasión

Jairo, mi hermano mayor

Leire, azafata de vuelo

La fuerza del destino

De la cam a la cama

El ente: la otra cara de la moneda

Feliz aniversario: la otra boda

Una mujer decente

Puta: mi primer cliente

Visitante de dormitorio

Mi amiga, mi iniciadora sexual... mi hermana

Lucía tiene un secreto

El culo perfecto

El diablo

El último amanecer

Saboreando del fruto prohibido

Mi tío, mi consejero, mi segundo padre...mi amante

Cena pasada por agua... o no

Documento inédito sobre brujería

Brujería: la conversión

La noche que cumplí 18 años...

Regreso a casa de mis padres

Cambio de look

Papá, hazme un favor

Svetlana

Enamorarse, declararse

El Inmortal

Mi primera consulta

La bruma, de Ivan Sanluís

El descubrimiento del sexo

El amigo de mi hermana

El examen suspenso

Orgías en las despedidas de soltero

Mi hijo disfruta de mí

Linda colegiala

Destino asumido

El mejor amigo que una chica pueda tener

Carla y la puta de su hermana

Mi hermana quiere polla

Violada colegiala

La violación de Andrea

La violación de Andrea II: juego de cartas

La chica de la calle

La entrevista de trabajo

Fono pasión

La Kiosquera

Los amigos de papá

El sueño se hace realidad

La censura, ese gran invento...

El trenecito

Ranma: el Corazón de los Deseos

Una familia unida

Una familia unida: amigos con derecho a roce

Severus Snape

Zaira: fogosa a todas horas

El amor de mi vida

Quiero saber lo que el amor es

Sheena, la reina de la jungla: masacre

Lluvia

Que zorra es mi jefa

Como escribir un relato en 10 pasos

Inés, mon amour

Karlita

Blossom: placeres secretos

Willy

Me mato a pajas pensando en...

Hija pródiga

Hijo pródigo

Rita: Fuego en estado puro

Una noche con Diane Lane

Seducí a Papá

Smallville: El señor de las ilusiones

Israel, mi mejor amigo

Castigada

CSI: En casa de Lady Heather

Cabalgando a lomos de un hombre maduro

Mi novia no se deja

Feliz aniversario: el regreso

¡Señor conserje, señor conserje!

Jairo, mi hermano mayor

Nadia

Follando con mi hermano

El hombre y su casa

Diario de mi viaje a África

Elizabeth

Un regalo especial

La mujer del barco

Nene, ven con la tata

Sometiendo a mi hermanita: tercer día (Domingo)

Sometiendo a mi hermanita: segundo día (Sábado)

Sometiendo a mi hermanita: primer día (Viernes)

Follando en el ascensor

Vejaciones a una buena vecina

Me follé a mi hija: Apoteosis final

Me follé a mi hija: Al día siguiente

Me follé a mi hija

Sara, la puta del instituto

Esther Arroyo, la diosa de oro

Susana, la niña del ciber: El reencuentro

Feliz aniversario

Ally McBeal: polvos de oficina

Hola vecino

¡Puta, más que puta!

Foto de Leticia Castá

El saben aquel...

Mis relatos favoritos

El bultito de mis hijas

Sueños que se hicieron realidad

Edipo Rey

A Katy le gusta ser violada

Una noche inolvidable

¿Qué fue de Inma Brunton?

Mi primo del alma

La vecina de al lado

Expediente X: Los señores Devlin

Doncella, criada... y esclava

AVH: Avril Vs. Hilary

Fiesta de pijama

Yo quiero a mi hijo

Las chicas Gilmore: el invitado

Begoña: puro vicio

Todo en un día

El bultito de mi hija pequeña

Te veo en mis sueños

Viaje en tren

Lujuria en Disneylandia

Susana, la niña del ciber

En la profunda oscuridad del bosque

Bajos instintos

Aurora & Iris

Begoña: pasión inconfesable

Buffy, cazavampiros: Willow

Pizza con extra de almeja

Mi hijo, mi nuera...y yo

Ojos que no ven...

Buffy, cazavampiros: Dawn

Más allá de las estrellas

El amor de mi hermano

Mireia, la madre de mi mejor amigo

Cojí con mi madre

Sonia, la gogo brasileña

Buffy, cazavampiros: Joyce

Orgía en la casa de Britney Spears

Pamela: corrupción total

Sabrina, cosas de brujas: el perfume

SI, de Rudyard Kipling

El pony que me folló

Paulina Rubio, el volcán mexicano

Xena, la princesa guerrera: Perversiones

Verónica

Ese oscuro objeto de deseo

El bultito de mi hija

Embrujadas: El poder de cuatro

La vida secreta de Harry Potter

Amada por Tiziano Ferro

Amantes

La vida secreta de Ron Weasley

Sara, la guarra de mi profe

Alyson y sus amores

La vida secreta de Draco Malfoy

Follándome a jennifer connelly (Ed. Especial)

Desvirgada

Follandome a Jennifer Connelly

La historia de Mary Kay Letourneau

La vida secreta de Hermione Granger

Saúl, el semental que me desvirgó a mi también

Saúl, el semental que me desvirgó

La isabel

Juntos para siempre

Gabi, mi dulce amante peruana

Secretitos: Alicia en el jardin de las delicias

Raquel: entre la realidad y la fantasía

El pony que se folló a mamá

Mi adorado Sr. Sebastian

Mi dulce quiosquera: Un placer sin igual

Mi dulce quiosquera: Otra sorpresa

Mi dulce quiosquera: Inesperada petición

Mi dulce quiosquera: El deseo hecho realidad

Mi dulce quiosquera: Agradable sorpresa

Gemma, mi profesora particular

La dependienta: mi 1º vez con (toda) una mujer

Joyce

Cynthia: lección de una anatomía precoz

En el metro de japón

De cena con mi prima... y alguien más

De cena con mi prima