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Mi -amigo- Pierre (01)

en Gays

MI "AMIGO" PIERRE

Hoy quiero contarte como conocí a Pierre.

Hace más de diez años, en el centro cultural al que yo concurría pidieron colaboraciòn de los socios, para tareas de toda clase.

Yo me anoté para colaborar en cuestiones de biblioteca, ficheros y otras cosas.

Un día me llamaron de la directiva de ese centro para una entrevista, o sea para saber cuales eran mis conocimientos y en lo que podía ayudar.

Llegué a una oficina muy grande y oscura, porque estaba en a planta baja del edificio. Hablé con una mujer y me dijo que me sentara y esperara porque el director estaba entrevistando a otro socio.

De allí vi al director conn muchacho rubio, no muy alto, delgado y de unos 25 años.

Al terminar la entrevista el muchacho pasó al lado mío, nos miramos, pero nada más. El no sabía quien era yo ni a que iba.

Tuve la entrevista y me anotaron para colaborar en esas tareas.

A pesar de ir casi a diario a ese centro cultural, nunca nos había visto o nunca nos dimos cuenta de que estábamos en el mismo sitio hasta ese día.

Al poco tiempo nos encontramos, nos reconocímos y empezamos a charlar.

Vimos que teníamos gustos comunes, intercambiamos números telefónicos y conversábamos de cine, literatura y de muchos otros temas que nos gustaban.

Por ejemplo el tenía gran conocimiento de cine y literatura francesa y yo en cambio le pasaba información de otros países.

Por esa época se me ocurrió estudiar francés, ya que el conocimiento que tenía de esa lengua provenía del liceo y era muy pobre.

Fuí a una academia cerca del club y me inscribí.

Al poco tiempo supe que el director de esa academia era su padre!!! Sí. él era su hijo.

La vida seguía igual, él se había divorciado de su primera esposa y tenían una hija que en ese tiempo tendría unos cuatro años.

Un día comentando de que yo coleccionaba estampillas me dijo que el padre tenía una gran colección de estampillas francesas y me invitó a su casa a verlas.ÿ Fui por primera vez a su casa, conocí a su mamá, vi las estampillas, después me llevó a su dormitorio y me mostró muchos libros de cine y de otros temas.

Al poco tiempo lo invité para que conociera mi casa.

Hice lo mismo, le mostré mis estampillas, mis libros, fotos de cine y al final saqué mi colección de revistas eróticas, que por ese tiempo acá no se conseguían.

Yo iba mucho al Brasil por esa época y todo lo que veía compraba, ya que acá no tenía oportunidad de obtener ese tipo de cosas. Miró las revistas, pero no hizo ningun comentario.

Todas eran hetero, salvo un par que eran gay.

Siguió nuestra vida rutinaria, hablar por teléefono, encontrarnos en algun espectáculo o en el club.

Yo empecé a salir con una señora de unos cincuenta años, que tambien la conocí cuando colaboraba en esa instituciòn.

El puso un comercio y me invitó a ir allí. Era más fácil conversar allí que en su casa y ademáas me quedaba máa cerca.

Siempre tenía la idea de hacer un trío con una chica. Nunca me confesó que tuviese deseos de tener algo conmigo, siempre me proponía hacerlo con una chica. Ignoro si querría verme desnudo o querría ver si lo hacía con mujeres también.

Aunque nunca le dije, ni me lo preguntó si lo hacía con hombres.

Cuando iba a su negocio, a veces ponía videos porno, y cuando venían clientes, le sacaba el volumen o apagaba el televisor.

Me llamaba la atención que siempre se iba para la trastienda, yo me quedaba en el frente porque como el no me llamaba para el fondo a mi no se me había ocurrido ir.

Siempre que volvía al negocio, tenía la bragueta muy abultada y a veces lo miraba y veía como se acariciaba el bulto.

Llegó el día que me dijo que había conseguido a una chica, que venía de noche al negocio y cogían allí, bueno imagínate lo que harían, no solo coger, sino de todo un poco.

Fuí como a las nueve de la noche, el cerró el comercio como a la media hora, puso un video y se empezó a acariciar la bragueta y se le notaba en la cara que se estaba excitando.

Mas o menos a las diez llegó la chica, nos presentó y le dijo que estábamos mirando un video porno, mientras ella lo miraba la empezó a besar y a meterle las manos bajo el buzo donde le acariciaba las tetas.

Ella no quizo saber nada de hacerlo de a tres. Miramos la película y nos fuimos.

Si el me hubiese dicho que me quedara la historia hubiese sido diferente.

Seguí yendo, intercambiando estampillas, información y a veces me ayudaba con las tareas del curso de francés.

El sabía que yo salía con esa señora, y quiso probar el trío con ella, pero no lo aceptó.

El era aficionado a la fotograf¡a y yo querí sacarme una foto desnudo , ya tenía algunas que un amigo me había tomado hacía unos años, pero no me satisfacían. Le conté que tenía ganas de que me tomaran esas fotos. Se ofreció y un día arreglamos para que fuera a su negocio y me tomaría las fotos.

Llevé la cámara, y en la trastienda hicimos pruebas, pero como era un lugar muy pequeño, era problemático y no salía de cuerpo entero, así que desistí y no las hicimos. El tendría ganas de verme desnudo, pero no dijo nada y no me saqué la ropa. En fin todo quedó como antes, o sea sin plantearnos nuestros deseos reprimidos.

Un día puso un video muy erótico y como siempre se fue para la parte de atrás del negocio a tocarse con comodidad. De vez en cuando asomaba la cabeza, no sé si para ver si venían clientes o para que yo me diese cuenta y fuese para allí.

Ya no aguanté más y fui para el fondo a ver que pasaba. El estaba parado y con cara de placer se acariciaba el bulto.

No me dijo nada, de por qué había ido para ese lugar, ni me propuso nada, ni falta hacía.

Me senté en una silla que había allí y alargué mi mano hacia lo que él tan afanosamente tocaba, como no me rechazó me animé a más y me fui directamente al cierre de su pantalón y lo comencé a bajar, cuando lo bajé totalmente metí la mano y saqué su pija hacia afuera.

Me impacté!!! Lo primero que vi fue una cabeza redonda y gorda!! El no reaccionaba en contra ni a favor, parecía que gozaba con lo que le estaba haciendo, como si lo estuviese esperando desde hacía mucho tiempo.

Tomé esa pija por el tronco y comencé a correrle el prepucio hacia atrás para poder verle todo el glande en su plenitud y quizáas metérmelo en la boca, al correr el forro vi que estaba muy colorado y brilloso.

Tenía mucho líquido preseminal cubriendo totalemnte el glande.

Cosa que no me agradó para nada, si hubiese estado seco, tal vez otra hubiese sido la historia...

Pero ya que estaba en el baile, seguí con su pija en la mano, se quejó de que no corriera mucho el forro hacia atrás que le dolía. A pesar de haber sido padre y de tener una vida sexual intensa de unos diez años, su prepucio no es tan eláastico como el mío y le molesta que se lo corran en su totalidad hacia atrás.

Me dijo que le tocara el culo y procedió a aflojarse el cinturón para que pudiera pasar mi mano.

Desabrochó el botón de arriba de su pantalón y aflojó el cinturón pero no se bajó los pantalones porque el negocio estaba abierto y si alguien entraba tenía que ir a atender.

Vi sus pendejos rubios que me encantaron, aunque no pude ver su pecho ni su vientre me imaginé que tendría más de esos vellos rubios maravillosos, tambiín vi su pija en su totalidad era larga como la mía, quizás un poco más gruesa y con esa cabeza redonda, roja y húumeda.

Sin soltar su pija pasé mi otra mano por la cintura, le toqué las nalgas buscando el canal que las separaba, cuando llegué al orificio que me había pedido que tocara, apoyé un dedo y presioné, lo mantuve apretado allí, supongo que habrá entrado la parte de la uña porque fue todo muy ráapido, incómodo y yo estaba un poco nervioso porque era nuestra primera vez y lo estábamos haciendo sin haber hablado de que lo queríamos hacer.

Comencé a apretarle la pija según sus indicaciones y a pajearlo sin disminuir la presión de mis dedos en su culo.

Después de un rato, empezó a gemir y a hacer muecas de placer con su boca y a pasarse la lengua por los labios, hasta que en mi mano sentí que su pija palpitaba de una forma incontrolable y empezó a escupir unos largos chorros de leche que cayeron al suelo.

Te imaginaás que con todo eso yo estaba muy caliente, pero mi pija seguía prisionera dentro de mi ropa. Sin soltar su pija que después de esa gran eyaculación quería descansar, apresuré mi otra mano hacia mi bragueta y saqué la mía hacia afuera, él no quizo agarrarla y yo tuve que pajearme con una mano mientras con la otra seguía apretando la suya, de la cual ya no salía más nada.

El solamente me miraba, no intercambiamos palabras, una vez que mi semen también cayó sobre el piso, retiró mi mano y se fue al baño a limpiarse.

Volvió con un trapo para limpiar el piso y me dijo que pasara al baño a lavarme.

No hablamos más de lo sucedido. Pasó porque era inevitable, pero ninguno de los dos lo propuso. Solamente sucedió.

Ese fue nuestro primer encuentro, espero haberlo relatado en su totalidad no sé si me olvidé de algun detalle, pero fue tan inesperado y si haberlo programado, las cosas sucedieron tan rápido que no se me ocurrió hacer algo más o mejor.

No me propuso más tener otro encuentro, ni hablamos del tema.

Por un tiempo cuando me llamaba por teléfono me contaba sus hazañas sexuales, me contaba de que había levantado a algun travesti en su auto, y que habían ido a algun lugar oscuro y el travesti se la había chupado y después el se lo había cogido, en alguna ocassión los había llevado a un hotel.

Pero nunca me dijo que él le agaRrara la pija a los travestis o algo parecio, lo que le gustaba era chuparles las tetas. Mientrass me contaba eso se pajeaba por teléfono y me preguntbaa cosas como si la tenía parada, o si la tenía en la mano, si estaba acabando y cosas parecidas.

Pasaron unos cuantos meses, sin que ninguno de los dos le propusiera al otro hacer algo más.

Hasta que un día me llamó y me contó que había conocido a una chica, se enamoró de tal manera que antes de los cinco meses me dió la initación para la boda!! Fuí a la iglesia y luego a la recepción. No era una chica muy linda, y no tengo opinión de ella porque la vi solamente unas dos o tres veces. El día de la boda y una o dos veces la encontré en el negocio.

Nuestras conversaciones teléfonicas seguían y él me contaba muchas cosas que hacía con ella, como que algunas veces él le ponía a ella pepinos u zanahorias en el culo mientras la cogía por delante, no recuerdo bien pero creo que ella también le introdcía a él esos vegetales.

Para no extenderme en detalles de su matrimonio que no conozco te diré que antes de los diez meses de haberla conocido terminó todo en separación.

Nunca supe bien la causa, no me animé a preguntárselo directamente y no tengo una idea muy clara de lo que sucedió así que no quiero inventar nada y no te lo puedo decir.

A los pocos días de esa noticia, me llamó contándome que había empezado a ponerse zanahorias en el culo y solo se pajeaba de esa forma.

Me dijo que si quería ir por su casa para probar, que estaba solo porque sus padres se habían ido a la casa de la playa.

Cerca de las tres de la tarde de un día veraniego llegué a su casa. Me hizo pasar, fuímos a su dormitorio nos desnudamos y al terminar de sacarse la ropa vi que ya la tenía parada.

Se acercó a mi para que la agarrara y lo empezara a pajear.

Así lo hice un buen rato, de vez en cuando agarraba la mía y la pajeaba un poco, pero él tenía como temor a agarrármela y no lo hacía.

Gemía mucho y quería más pero como siempre no quería que le corriese el forro hacia atrás para que quedase la cabeza descubierta.

Finalmente me dijo que parara, se levantó y se dirigió a la cocina seguido por mi. Allí tenía preparada una zanahoria, no muy grande, la agarró y m ela mostró. Pasamos por el baño donde agarró un pote de crema y volvimos al dormitorio.

Me dijo que le pusiera crema en el culo. Metí un dedo en el frasco y se lo acerqué al lugar indicado.

El se puso en cuatro patas con el culo hacia arriba, le pasé crema por las inmediacioness del agujero y después le metí el dedo. Mientras le metía el dedo con la crema la otra mano la pasé por abajo suyo y le agarré la pija y empecé a pajearlo hasta que noté que se había dilatado un poco, arrimé mi pija y la empecé a pasar por el canal entre las nalgas pero sin apoyar la cabeza en su agujero solamnte el costado d emi verga estaba en contacto con su cuerpo hasta que me dio un condón, puse la zanahoria adentro y se le emepcé a meter sin soltarle la pija.

Con cada mete y saca de la zanahoria él gemía y decía palabras como que estaba gozando y si me preguntaba si yo también gozaba.

Querido amigo hasta el día de hoy no sé si fue una excusa lo de la zanahoria porque realmente quería que yo lo cogiese y no se animó a perdírmelo o simplente esa era su intención del uso de la zanahoria y no quería otra cosa.

Te cuento que me dijo que sentía cosquilleo dentro del culo, su pija se puso más gorda y con mucho líquido preseminal hasta que aumenté los movimientos de mi mano, hasta que empezó a largar mucha cantidad de leche.

Yo no podía atender a mi verga porque tenía las manos ocupadas una con su pija y la otra con la zanahoria.


Cuando todo pasó y dejó de salir el líquido blanquecino, me dijo que sacara la zanahoria. Te cuento que le saqué el forro y ésta estaba muy caliente y como cocida!!! Aunque no me lo creas la zanahoria se había ablandando ahí dentro!! Me acuerdo muy bien a pesar de que pasaron como como nueve o diez años de ese encuentro.

El notó que mi pija seguía dura y me dijo que me pajeara, así lo hice y toda mi leche cayó sobre la toalla que había puesto sobre la cama y que ya estaba mojada por sus jugos.

Tiró la zanahoria en la lata de la basura, nos despedimos y me fui con ganas de haber hecho más cosas.

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