miprimita.com

El cuidacoches de Atlatida

en Gays

EL CUIDACOCHES DE ATLATIDA

Mis lectores ya conocen a mi tío (el que quedó viudo hace poco) porque viajé con él a Curitiba y allí tuve la oportunidad de conocer entre otros a Walmir, de quién hablé en el relato titulado "Walmir, el guía curitibano".

Mi tío quería pasar las fiestas lejos del bullicio de Montevideo y de los lugares que le trajesen recuerdos de su esposa, por eso alquiló una casa en Atlántida y me invitó para que pasase las fiestas con él.

Acepté pero con la condición de que solamente me quedaría hasta el 15 de Enero porque quería ir como todos los años a visitar a mi hermana la que vive en Buenos Aires.

La dueña de la casa nos hizo esperar porque dijo que no estaba pronta, que la estaban limpiando, mientras terminaban el aseo nosotros descargamos el equipaje y lo dejamos en el pasillo.

Al entrar a la casa no vimos a nadie, a mi se me ocurrió ir a la terraza para ver el paisaje, aunque sabía que de allí el mar no lo iba a ver, pero por lo menos vería el lugar que estaría viendo a diario durante esos quince días de vacaciones allí.

Al salir a la terraza vi a un tipo en cuclillas lavándose la cara y las axilas en un balde.

El tipo se sorprendió al verme, me pidió disculpas, sin decirle nada entré a la casa y me puse a ordenar mi equipaje.

A la tarde con mi tío salímos a dar una vuelta por la playa y al ir hacia allá un cuidacoches nos dio conversación con tanta familiaridad como que nos conocía de algun lado.

No nos habíamos dado cuenta de que el cuidacoches era el tipo que había estado limpiando la casa!!!

Nos contó que estaba separado, que las mujeres no sirven para mucho y un montón de cosas como que iba a dormir a la casa de su mujer porque estaban sus hijas, pero que no dormía con ella que dormía en un sillón y cosas por el estilo.

A mi tío no le gustaron tantas confidencias, nos despedímo y nos fuímos a la playa donde recorrímos por unas cuantas horas horas la costa de este balneario canario.

Al regresar el cuidacoches estaba en su sitio, nuevamente nos abordó y nos dijo:

-No se preocupen por el coche, yo me quedó acá hasta las 4 o 5 de la madrugada cuido el coche de Carmen (la Sra. que nos había alquilado) que es muy amiga mia y de paso les cuido el de ustedes.

Después de cenar y de ver algo de TV Cable mi tío se fue a su habitación a dormir, ya había pasado la medianoche y yo me quedé mirando algo más de TV.

La noche estaba muy estrellada y calma, podía verla a través del ventanal del comedaor, por el cual salí a la terraza a fumar un cigarrilo.

Después de contemplar el cielo e identificar algunas de los millones de estrellas que titilaban en las alturas miré hacia la calle y vi al cuidacoches que andaba corriendo detrás de los autos que se iban para que ninguno se escapase sin darle su proopina.

Al verme se acercó y me dijo:

-Hola! No me convidás con una copa?

No me gustaba tanta confianza pero como no tenía sueño le dije que subiese.

Le abrí la puerta sin hacer ruido para que mi tío no se despertase y cuando entró le hice señas para que hablase bajito porque mi tío dormía.

Le mostré una botella de vodka y le dije:

-Esto es lo único que tengo, mi tí trajo esto porque quiere tomar caipirinha.

-Está bien pero trae hielo, pura es muy fuerte...

Traje dos vasos con hielo, nos pusimos a beber, él de un trago se tragó todo el contenido de su vaso, luego me hizo señas para que le sirviese más.

Si era conversador sobrio como sería con dos generosas cantidades de vodka en su interior?

Le dio por contarme que tenía un amigo, me dio el nombre de un doctor muy famsoso que según dijo era el padre de su amigo, me contó que iban a acampar para el lado de Río Branco y del Chuy, no me dio muchos detalles pero por lo que dijo deduje que era amante de ese amigo porque volvió a decir cosas contra su mujer, como que al quedarse ambos sin trabajo la pareja se había ido a la mierda después de 20 años de casados.

Ni me pidió más vodka él mismo tomó la botella y se sirvió otra generosa cantidad del transparente líquido, por lo que tuve que sacarle la botella porque mi tío se iba a dar cuenta de que alguien se habia tomado la bebida que él había traído para su consumo personal.

Al rato posó su mano sobre mi rodilla desnuda porque yo estaba de short, en cambio él tenía puesto un jean y una remera de color naranja, esa mano fue subiendo por mi pierna y como no la rechacé porque el vodka me había dado "calor", él al ver que no le decía nada de que la sacase me comentó:

-Que calor que hace acá!

Abandonó mi pierna, se puso de pie ,se desabrochó el jean, lo bajó un poco para poder sacar su verga, sosteniéndola con su mano y luego me dijo:

-Chupámela un poco, tengo "calor".

Lo que mostraba no era gran cosa, estaba medio parada pero ni por asomo sobrepasaba los 16 cms!

El cuidacoches tenía 42 años, más bajo y delgado que yo con bastante calvicie, resaltada por un brillo amarronado en la parte superior de la cabeza, causado por las constantes e interminables horas expuesto al sol corriendo tras los coches que estacionaban en la superficie que el custodiaba.

No era gran cosa lo que extrajo de entre sus ropas, pero como en estos lares hay un dicho muy popular que dice: "A falta de pan son buenas las tortas", queriendo decir que cuando hay hambre todo viene bien, por esa razón ataqué ante el pedazo de carne que se me ofrecía ante mi vista y ante mi tacto.

El cuidacoches se fue excitando con cada lamida que le daba a su verga y ésta terminó de ponerse dura y caliente dentro de mi boca.

Sus pantalones ya habían caído casi hasta el suelo quedando atascados en sus tobillos, a pesar de estar el ventanal abierto, por suerte de la calle no nos podía ver nadie porque el sillín estaba bastante retirado de la ventana y del edidficio de enfrente tampoco nos podía ver alguna persona porque como está en construcción está deshabitado.

Me separó de su cuerpo sacando de mi boca la verga chorreando saliva e hizo ademáan de que se iba a quitar los pantalones para estar más cómdoo, se lo inpedí porque podía levantarse mi tío y vaya con que espectáculo se iba a encontrar en el living!!

-Te arrepentiste!!? No me la vas chupar más?

-No me arrepentí, pero vamos a mi dormitorio, puede aparecer mi tío y nos puede encontrar haciendo esto....

Ya en el dormitorio nos desnudamos completamente y nos acostamos en la cama, pero antes de quitarme la ropa del todo él me vio la pija que ya estaba muy dura y exclamo:

-Qué pedazo de verga tenías escondida !!!! Cómo me despistaste!!! Al verte me dije:" A este le han de gustar las vergas, porque tendrá una cosita de nada... y ni la usará!!

Como pudímos nos acomodamos en la cama de una plaza y nos dispusimos a hacer un 69 con todas las de la ley, el sabía chuparla muy bien a pesar de que me dijo antes de hacerlo que él no se dedicaba a eso, que él solamente se dedicaba a hacércela chupar antes de metérselas a los tipos qeu querían pagar por sus servicios.

Me lamió el agujero uretral abriéndolo con sus dedos para que su lengua entrase en él, luego pasó su lengua por todo mi glande hasta que llegó al lugar dodne el prepucio se une a él metiendo todo dentro de su boca para empezar una chupada muy rápida sobre toda esa superficie, luego se fue tragando el tronco hasta que pude sentir su nariz sobre mis pendejos, en ese momento muy velozmente abandonó mi verga exclamando:

-Ufffffffffff....!AGgggHhhhhhhhh! Nunca me había tragado algo tan largo!! Me llegó a la garganta!!!

No creo que nunca haya tenido clientes con vergas muy grandes, la mía es grande pero normal, no creo que nunca le hayan tocado clientes con esa vergas de 25 cm!!! Pero como el dijo que no se dedicaba a chuparlas, a lo mejor era cierto y si tuvo clientes con esas dimensiones nunca se lo habría hecho.

En cambio yo no tuve niguna dificultad en mamar la suya, como era chica no hubo inconvenientes, con cada chupada le iba tocando el culo, el gemía y gemía hasta que se dispuso a hacerme una lamida de orto que me dejo visco de tanto placer que me dio sentir como esa lengua abría el camino ayudada por sus dedos que me los iba metiendo de una forma tal que podía sentir toda la humedad que ellos iban transportando cada vez más profundamente dentro de mi recto.

No tardó mucho en montarse sobre mi acercando su verga al agujero que había dilatado, pero antes de mandármela para adentro se acordó y me pidió un condón, aproveché que me levanté para ir a buscarlo ya que lo tenía dentro de mi bolso y cuando volví no me puse boca abajo como él esperaba, me acosté sobre una almohada levantando mis piernas bien en alto porque quería ver que cara ponía cada vez que hiciese el clásico mete y saca, por eso de esa forma le ofrecí mi agujero para que lo penetrase.

De una manera fuerte y violenta acometió contra mis entrañas, relamiéndose la lengua cada vez que su verga llegaba hasta el final, con su manos se ocupaba de pellizcarme las tetillas mientras las mías jugaban con su agujero, pero como no le gustó me dijo que me pajease de una vez así terminábamos la fiesta, porque había perdido mucho tiempo y tenía que ir a su trabajo.

Gimió un poco cundo expulsó su leche, le dije que no la sacase todavía porque yo no había terminado y quería gozar un poquito más.

No la sacó, me agarró la pija y con unos movimientos rápidos y apretados logró extraer de ella el jugo que no quería salir por mi propia mano.

Nos quedamos un rato tirados en la cama, luego fue a encender un cigarrilo y se encontró con la cajilla vacía por eso me dijo:

-No tengo más, tirame unos pesos para comprar una cajilla...

No se animó a cobrarme por sus servicios, por eso me pidió para cigarrilos, fue una excusa porque dinero tenía porque había trabajado desde temprano.

-Cuando quieras otra me llamás, por ser vos... te voy a hacer precio....

Se fue a trabajar, mientras yo me quedé solo y me dormí con el culo muy dilatado, no por el tamaño de su verga sino por los golpes que dio con ella allí dentro.

Al otro día que era el dia de Fin de Año lo vi corriendo como siempre tras los coches , pero se fue temprano, seguramente a pasar con su familia.

En los quince días siguientes nos veíamos a diario porque el tenía su lugar frente a la casa nuestra, solamente unos días antes de terminar mis vacaciones me anduvo tanteando para que lo invitase a hacerme una visita, pero como no me dejó ningun lindo recuerdo no lo quise repetir con él.

OMAR

Cualquier comentario o confidencia las espero siempre en: omarkiwi@yahoo.com

Mas de omarkiwi

El brujo de los puros

Jugando con la botella

En un hotel cercano a Shangrilá

Se concretó en Villa Mercedes

Olegario lo conocía

Glazo me llevó a la plata

Sorprendi a Glazo con un travesti

Víspera de nochebuena

En el festival de rock de Durazno

En el cumpleaños de Olegario

Hugo C. & Julián O.

Primero de mayo en concordia

El oficinista de concordia

El viejo de las tetas grandes

Me los presentó Marcelo

Polvo rápido con el policía bisexual

Juan de Colonia del sacramento (día 3)

Juan de Colonia del sacramento (día 2)

Juan de Colonia del sacramento (día 1)

Me lo contó Marcelo

El ex-imberbe me reconoció

Pierre, Cristina y yo

Pajeando a mi primo Alarico

El tío Marabú

Xeripé, sargento del pelourinho

Benicio, el mozo de Recife

Rodrigo me hizo perder el arraial d´ajuda

Mario Cezar, recepcionista de Río de Janeiro

Mala noche pasó Carlos Francisco

Un lujanero llamado TIMOTEO

El tipo que vive a la vuelta del cine porno

Trío con jerónimo en un cine porno

El debut de Eduardo

Valentin me invitó a su casa

Al borde del arroyo con el bodeguero

Lo conocí por internet

El policía de Luján

Un empresario en la calle malabia

Un empresario en el Hilaria Elisabeth

Valentín casi me lo entregó

Valentín limpia de todo

El policia bisexual me visita

Bajo el puente del parque rodó

Al fin localicé al policía de la tormenta!

El sobrino de mi cuñada

El malabarista del parque Roosevelt

Trio en la casa en construcción

El policía de la tormenta me reconoció

Una mariposa en un concierto

Con tres imberbes en Kibon

Follada con un nudista en chihuahua

El novio de la hija de la portera

La hija de la portera, su novio y yo

Los fracasos de Marcelo

Me lo contó Ricardo

Cumpleaños feliz con la ayuda de Salustio

Con mi vecino Salustio

El flaco del 333

Aventura solitaria en el rio Santalucia

Radamés después de la lluvia dorada

Radamés y la lluvia dorada

Hugo desapareció!

El peluquero del pene corto y cabezudo

Jalada con un espectador

Sara volvió de Canadá

El jardinero cambia de punta

Un guardia de seguridad me paga un favor

Moreno, delgado y con una verga normal

Otro hetero que cambió de bando!!!?

Fiesta para tres vergas

Trio con pierre y su chica

Oftalmólogo limpito

El jardinero de punta gorda

El policía del cementerio me llevó a la comisaría

Que pene! (el del chico del cyber)

Un anuncio en el baño de la terminal de omnibus

Me quedé otro rato en el cine porno

Un soldado con un cartel que decia melo

Otra aventura en un cine porno

Quien era el marido de Rosalia!

En la carpa de Yi y Canelones

El padre del vidriero

Día del patrimonio en el cementerio

Me fuí tras el culo de un policía

El mecánico del club

El albañil de Artigas

El policia bisexual y mi portero

Mensaje de agradecimiento

El medico de la mutualista

Oselmo, el taxista que la probó y la adoptó

Nahuel antes se llamaba Bibellco!

Un enfermero apodado coco

El debut de coco el enfermero

Jugador de basket, amigo y algo mas...???

Con nimedes entre los arbustos

Mi primo reynaldo, el camionero y yo

El guarda del 125 cabalga

Virgen a los 58!

Reencuentro con el policia bisexual

El muchacho del minimercado

Santiago su mujer y su cuñada

Guillermo un dentista conocido como -La Guillota-

Bibelico me hizo gozar sobre una mesa

Ya no quedan masajistas como los de antes

Un joven de 18 años

Acosado por mi primo

Al taxista Mario lo conoci en un cumpleaños...

Un profesor hetero!

Una chupada en el parque batlle

Recordando al negrito Luis

Audacia o descaro

Fantasia hecha realidad

A Serafin se lo rompieron en un cine porno

Bajita y tetona

Xavier me invitó...

Un lector que firmaba Geejay

Don Roque, el suegro de mi primo Reynaldo

Inesperado amante en un crucero

Marcos el muchacho del gimnasio

Juan Manuel, el hijo de un amigo de mi cuñado

Nestor me sedujo con su croissant

Rubio, velludo y transpirado

Casi fui testigo de una violación

El cuidacoches y el marinero

Pajas con Ulises

Osvaldo el lamepies

Eniwe, director teatral

Experiencias en los bares

Ireneo, quería muchisima mas -nafta-

El portero de Roberto

Los instaladores de telefonos

Vendiendo enciclopedias

El chico del bar

El truco del slip

Walmir, el guia curitibano

Tormenta rumbo a Santa Teresa

El amor de -los ratones-

En el baño con Dario

Casa con piscina

Mi primera y última vez en un sauna

Ireneo queria mucha -nafta-

Ireneo queria mi -nafta-

El -casi- suegro de Epifanio

Placenteras asaltantes escandinavas!

Federico, el hermano de Andrés

Panchos con mostaza

El fisicoculturista de la tanga turquesa satinada

Yazifar, el sastre

Anonimo

Homenaje a Daniel (muerto a los 35)

El paraguayito de Piriapolis

Accidente por felación

El panzón que no se le paró

El sargento de la plaza Fabini

Un día de suerte al fin y al cabo (2)

Un día de suerte al fin y al cabo (1)

El profesor Leyva

Tito, de Sarandi del Yi

Fernando, artista plastico

El guarda del 125

Las confesiones de Alex Trinidad

En el pulpito

El cuidacoches del buceo

Lionel, alumno de inglés

Provisorio

El marinero del referendum

El tatuador

El profesor-profesora

Gustavo, la profesora de ingles, yo... y los otros

Otro sereno y van...

Mi segundo viaje a salta

Chebo y su descubrimiento

Carlos Felipe

La casa de la gloria

Un albañil llamado Moncho

La lapicera de olga

Aventura con el hijo de un embajador

El lecherito de Gaby

El día que Miguel trajo al -querubin-

Doña Toribia, la curandera

El macho de la casa de citas

El gendarme chileno

Qué padre de familia?!

Mi hermano leo en Australia

En la vuelta ciclista del Uruguay

Pierre, la gorda y yo

Las cartas de Flydesdfale

Mi hermano Leo

El encuentro con Diaz

El enfermero y los dos hermanitos

Fin de semana con mi primer travesti

Mi primo Reynaldo

Mi -amigo- Pierre (01)

El farmaceutico desconcertante

Carta de Fito

El gerente y la miel

Los vidrieros de la Claraboya

El compañero de trabajo

El Gerente me retribuye

El director del liceo

El perro de Fito

El slip de Hugo

El mirón

Siempre hubieron bisexuales

Mi primer viaje a Bahía

Mi primer policia

Como conocí al gerente

La viuda Margarita

El pelado de la playa

El chico de la moto

Los soldaditos y yo

Una excursión a sexo total!

El indio Jose

El policia bisexual

En las grutas de punta ballena

El empleado de la telefónica

El cobrador de gastos comunes

Mi primer viaje a salta

El gerente y el Rafa

El Rafa

El tipo del omnibus

Bogyus

Mi primera vez

El matrimonio de Flores