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Poemas de fuego: El sueño de la muchacha

en Poesía Erótica

Poemas de fuego: El sueño de la muchacha

Sueño con que tus manos me desnudan, aunque sigo desnuda de tus manos.

Sueño con que tus dedos andariegos recorren los paisajes de mi cuerpo

y susurran tequieros mentirosos que sueño que me creo.

Sueño con que descorres cremalleras, con que robas botones que me encierran

en la cárcel decente y aburrida de las buenas maneras.

Sueño con que me llevas de la mano al lugar donde el aire es puro fuego

y no hay mar, ni caminos, ni montañas, solo tu sexo erguido

y el mío tembloroso e impaciente por recibirlo en sueños.

Sueño que hay en tus ojos terremotos y que el viento me sopla entre tus dedos,

y que se rompe el mundo en mil pedazos cuando besas mis pechos.

Por soñar, hasta sueño que me quieres y que vivo en tus sesos,

y que nuestras dos bocas son pecera

del solo pez de amor tierno y caliente que forman y conforman nuestras lenguas.

Sueño con que no es sueño lo que sueño.

Sueño que no hay más sol que el de tu vientre, que hilvana de latidos mis entrañas

y clava, en mi entrepierna estremecida, banderillas de fuego.

Sueño con que un rumor de temporales me está asolando el cuerpo,

con que tu lengua marca territorio en la tierra redonda de mis pechos,

y tu mano es serpiente electrizante en la redes complejas de mis nervios.

Sueño con que me flotas y te floto, ingrávida, si siento en mí tu peso.

La noche es hoy más noche. Si soñaras lo mismo que yo sueño…

Tengo el mar preparado entre los muslos.

Y te espero.

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