TE AMO
Te amo porque me aniñas.
Me devuelves los tiempos
en que maquis, demonios y brujas
bajaban de los montes a los pueblos.
Te amo porque provocas, en mis años maduros,
el renacer lejano
de la vivacidad de los diez años
y de su nerviosidad descontrolada.
Te amo porque me asusta
el temor de perderte
y me aboca a terrores olvidados
de noches con las vigas en crujido.
Te amo porque tu ausencia
me devuelve la angustia
de un examen de Física
con el sol del otro lado de los muros.
Te amo porque intuyo
el sabor de tus besos:
Han de saber a feria, a algodón dulce
y a flores de azahar y de romero.