EL CALLEJÓN
Libe había salido a dar un paseo a ver si veía a sus amigas para ir a tomar algo, pasó por un escaparate de una tienda de informática, estaba allí un chaval mayor que ella y sus miradas se cruzaron durante un instante que fue mágico, ella siguió su camino y él tomó en dirección contraria, cuando ella se había alejado como cien metros del joven no pudo resistirse y comenzó a seguirle a distancia.
El chico se había dado cuenta y la dejaba que le siguiese hasta que vió que se acercaba una entrada a un callejón, él trazó un plan con rapidez, aceleró el paso y se metió en el callejón colocándose en la esquina a la espera de la chica. Ella vió que desaparecía tras la bocacalle y aceleró el paso, a la llegada donde él había girado algo la impulsó dentro de la oscura calle y la puso cara a la pared.
El se situó a su espalda y la dijo que porque le seguía, si es que quería follar con él, entonces con la mano la fue recorriendo toda la espalda, deteniéndose en su culo el cual apretó con fuerza y lujuria, la condujo hacia la parte más oscura de la calleja, detrás de un container con escombros había algún mueble que algún vecino había tirado allí, la puso de espaldas a la pared y la empezó a besar, ella le respondió con lujuria, le sorprendió por su ardor y sus ganas de corresponder a sus deseos.
El la iba desnudando con rapidez la quitó el jersey, la camisa y el sujetador dejándola solo con los jeans y el tanga, ella mientras tanto había hecho lo mismo, los dos desnudos de cintura para arriba, se besaban, Jorge que así se llamaba el chico fue bajando por su cuello besándola y acariciando esa piel que tanto que le estaba gustando, fue bajando por su escote hasta los pechos no demasiado grandes, la lengua la pasó por los pezones dibujando un circulo en torno a las aureolas succionándolos después y mientras los tenía de esta forma atrapados los pasaba la lengua por el botoncito, primero uno y luego en el otro pecho, la chica emitía pequeños gemidos.
Juan siguió con su recorrido por el cuerpo de Libe y rodeando el ombligo como si fuera un hoyito peligroso llegó a la cintura encima delos jeans de la chica entonces la dio la vuelta y la colocó apoyada sobre un sofá que había al lado, se puso de pies y hablándola al oído diciéndola como se la iba a follar la bajó de un golpe los pantalones quedando el tanga al descubierto un tanga blanco intenso, lo arrancó con la mano y la desnudó del todo alejándose un par de metros para observarla.
Libe era una autentica belleza, morena con el pelo largo y liso un poco por debajo de los hombros, labios carnosos, sonrisa perfecta, pechos medianos rematados por dos pezones rosados como dos pequeñas fresas, pubis rasurado y culo pequeño redondo y respingón. El se acercó y apretándola contra el sofá se acabó de desnudar y se arrodilló entre las piernas d ella que Libe abrió para facilitarle la labor, comenzó a pasar la lengua por la raja del culo, fue bajando por él hasta llegar al agujerito, le dio pequeñas puntadas mientras con las manos abría las nalgas, lo iba lamiendo cada vez con más deseo y a pasar el dedo.
Lo repasaba con el dedo haciendo círculos con él, cuando ya no encontraba resistencia lo iba metiendo hasta tenerlo todo el dedo metido dentro, entonces lo fue sacando y metiendo hasta que ya entraba con facilidad, luego iba haciendo lo mismo con dos dedos hasta que ya notó ya ninguna dificultad, se puso de pies y apoyando la polla en la entrada del ano fue empujando hasta que sintió como entraba sin dificultad y se la fue follando agarrandola de las caderas primero y luego con una mano la acariciaba a la muchacha los pechos y con otra mano masturbaba su clítoris con delicadeza al principio y luego con más fuerza.
Se la estaba follando el culo con muchas ganas y deseo, ella estaba jadeando de placer, completamente extasiada, tenía los ojos casi en blanco y emitía pequeños bufidos, la mano de él cada vez la masturbaba con más velocidad y fuerza a la vez que aumentaba su velocidad en la penetración. Ella estaba a punto de correrse, le apretó las nalgas de Jorge como queriendo indicárselo y explotó en un gran orgasmo apretando con su esfínter la verga del chico y haciendo que sacándola se corriese sobre su espalda.
Se quedaron sentados en el suelo en pleno asfalto enmadejados y besándose muy delicadamente para recuperar el resuello, Libe fue besándole en los labios mientras iba bajando por el pecho del chaval mordiendo sus pezones haciendo que el chico cerrase los ojos de placer, recorrió su vientre y llegó a su polla la cual estaba en un estado de semierección y con los restos todavía de la eyaculación anterior, se la metió en la boca para limpiarla y el pene fue reaccionando a las sensaciones que notaba y fue creciendo en la boca de la chica haciéndose cada vez más grande, más gorda y más dura.
Libe hizo que Jorge se pusiera tumbado sobre el asfalto boca arriba y poniéndose en cuclillas sobre él se fue clavando semejante trozo de carne en su coño y comenzó a cabalgarle sujetándose las piernas por los muslos para abrirlas más mientras lo galopaba, lo ponía luego las manos en el pecho mientras él la agarraba de las nalgas abriéndoselas jugando con dos dedos en su culo y haciendo que ella gimiese.
Llevaban un tiempo en esta postura cuando ella le descabalgó y se puso a cuatro patas poniendo el culo en pompa, Jorge se puso de rodillas y de una estocada se la clavó en el coño sujetándola como podía de las caderas y follandola como un loco, la velocidad cada vez era más alta, ella sentía que se venía en otro orgasmo y se dejó ir mientras él por la eyaculación anterior podía durar más, ella se corrió mientras él todavía la follaba, la volvió a descabalgar y entonces ella se puso tumbada boca arriba en una alfombra que habían extendido con las piernas completamente abiertas en una postura del todo obscena, él se metió entre medio de las piernas y la metió la polla jugando a meterla y sacarla mientras besaba y lamía los pezones, quiso torturarla un poco más y que se volviese loca de placer, entonces sacándosela bajó la lengua y dibujo los labios vaginales que estaban completamente ensanchados por la follada, el clítoris asomaba por uno de sus extremos completamente erecto como un pequeño pene que quería ser atendido, Jorge lo succionó con la boca aspirándolo ligeramente mientras con un dedo lo pasaba por el culo que estaba dilatado y húmedo por los fluidos vaginales de la chica que iban deslizándose hasta él.
Ella estaba jadeando completamente desatada y le decía que la follase que la quería toda para ella, entonces en el momento que Libe estaba más desatada se la clavó en la vagina y empezó un trote primero y luego un galope completamente desbocado que hizo que se corriesen los dos quedándose unidos y besándose con cariño.
El la sacó y ella se la volvió a limpiar con la boca, él limpió su corrida de los pechos de la muchacha compartiéndola con ella en un largo y prolongado beso en que las lenguas jugaron durante largo rato para posteriormente vestirse y despedirse quedando para repetirlo otras veces.
Este relato es imaginario pero va dedicado a cierta chica que he conocido y con la que me gustaría llevarlo a cabo aunque sea cambiando el lugar.
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