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Dificil seduccion

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DIFICIL SEDUCCION

Eva había terminado su jornada laboral y la semana. Había sido una semana intensa pero por fin había terminado. Encima empezaba las vacaciones por eso la semana había sido más dura. Abrió la puerta de su casa. Llevaba pues un traje chaqueta muy serio y el pelo recogido en una cola de caballo.

Escuchó ruido proveniente de la zona de la piscina. Su marido estaba de viaje así que estaría todo el fin de semana sola con su hija. Llamaría a alguna de sus amigas y a los sumisos y sumisas y montaría alguna “fiestecita”. En las tumbonas de la piscina estaban su hija Nerea y su amiga María tumbadas boca abajo tomando el sol. Las dos con la parte de arriba del bikini abiertas y caídas a los lados de la tumbona.

María siempre le había motivado pero era la amiga de su hija. Las dos tenían veinte años e iban a la Universidad. Nerea hacía poco que había probado el BDSM. Nerea no lo sabía todavía. Todos sus pasos los conocía su madre porque sus Amos eran una pareja conocida suya, no de sus amigos habituales sino de su círculo del BDSM.

Pero no sabía nada de María así que no intentaría nada salvo que recibiera alguna información en otro sentido. Bajó al sótano, al lado del garaje tenía un armario con loa bañadores, toallas, cremas y demás para la piscina. Un baño amplio y luego más discreta una gran habitación que había construido su marido y que habían dedicado a mazmorra y una celda para los sumisos y sumisas.

A Nerea nunca le habían permitido entrar en esa habitación, solo recibiría la llave cuando supiera que sus padres conocían su secreto y que ellos también participaban de los mismos gustos.

Estaba pensando cuando oyó un pequeño ruido pero como nadie entró no le dio importancia. Se había quitado la blusa y la falda y se estaba poniendo el bikini. Cogió la crema solar y la toalla y salió a la piscina pero antes de salir vió que en la piscina faltaba María y ella no se la había cruzado. Era muy raro.

Donde está María?------ le preguntó a su hija.

Hace cinco minutos me ha dicho que iba al baño---- respondió su hija.

Eva pensó que el ruido que había oído sería la chica y que era muy raro que no la hubiera visto porque ella se había cambiado en el baño de la piscina. A la mazmorra no podía haber entrado porque la puerta se cerraba con llave y el armario de al lado de la mazmorra también pero por si acaso fue a comprobarlo. Además desde donde ella estaba se veían las puertas.

Nere voy a coger un refresco, quieres tu algo?---- inquirió a su hija.

Mami tráeme una cerveza por favor.

Eva entró pero antes de ir a la nevera para coger los refrescos fue a la mazmorra y al armario y antes de llegar vió a María con el armario abierto viendo un par de trajes de vinilo y cuero que había, algún collar de sumis@s , un flogger y una fusta. Ahora estaba con la mano acariciando el traje de vinilo y oliendo la fusta.

Estaba tan concentrada que no la escuchó venir. Vestía solo la braguita del bikini. Se acercó sigilosamente. Con una mano sujetó la fusta y sopló suavemente en la nuca de la chica. María se giró con la cara desencajada por el susto. Eva tapó su boca con la mano y le susurró al oído:

No querrás que Nerea se entere lo zorrita que es su amiga….

Pero María no podía decir a Eva que su hija y ella aunque sin llegar a tener sexo se habían besado y acariciado alguna vez después de alguna juerga. Comentó a Eva que había leído hacía poco el famoso libro y que al ir al baño se había confundido y había abierto la puerta del armario y había visto todo eso y claro sintió curiosidad por el libro.

María y cuando yo me estaba cambiando también estabas mirando esto?. Mentira, te hubiera visto. ----- dijo de forma dura para ver por donde salía María.

María miró hacia el suelo avergonzada y Eva con la mano elevó su cara y la dio un beso en la frente y luego y besó sus labios. La chica puso los brazos en medio y la preguntó que que hacía.

Perdona, me dejé llevar, me perdonas? ------la dijo Eva simulando arrepentimiento

María en lugar de volver a la piscina se quedó quieta y Eva aprovechó y volvió a besarla y María claudicó se dejó llevar y soltó la parte de arriba del bikini de Eva para luego acariciarla por la espalda y bajar la braguita. Eva la empujó contra la pared y soltó la braguita del bikini. Dio un beso en la mitad de la vulva y aspiró cariñosamente el clítoris.

La chica se mordió el labio y exhaló un pequeño suspiro. Ahora Eva se levantó y la comentó:

Que experiencia tienes con mujeres? Veo que te gustaban mis vestidos pero para ponértelos y dominar o eres sumisa?

Pues con mujeres muy poca experiencia, solo algún beso y alguna caricia y una vez que me masturbaron y masturbé (con tu hija). Sobre lo segundo pues soy sumisa, sería incapaz de dominar a nadie.

Pues de acuerdo. Ahora ponte la braguita porque Nerea va a pensar que tardamos mucho pero antes de salir apúntame tu número de móvil para que te wassapee y te diga cuando tienes que acudir y las instrucciones. Si no me lo apuntas interpretaré que no te interesa.

La chica obediente se puso la braguita mirando con cara traviesa a la madre de su amiga y luego cogió el bolígrafo que le acercaba la mujer y escribió su numero. Fue otra vez a la piscina y cuando llegó sintiéndose algo culpable dio un beso en los labios de Nerea antes que llegase su madre la cual llegó con cervezas para las tres y una nevera con más.

El sábado siguiente que Nerea no iba a estar en casa todo el día wassapeó la noche anterior a María y la dio las siguientes instrucciones.

Mañana tienes que estar en mi casa a las 16 h en punto, cada minuto que te retrases recibirás un azote con la fusta que viste ayer. Tocarás al timbre que hay fuera de la tapia. Te abriré, verás en el suelo un collar de sumisa y una correa. Unirás la correa al collar. Luego te desnudarás dejándolo todo bien doblado a un lado del camino. Te pondrás el collar con la correa al cuello y caminarás hasta la puerta del sótano, la que va a donde tengo las cosas de la piscina y el armario que ya conoces. Allí sobre la manilla verás un antifaz que te pondrás y esperarás así a  4 patas.

María recibió el mensaje mientras estaba en casa viendo la televisión y su conejito se humedeció al leer el encabezamiento del mensaje que ponía que era Eva. Cuando leyó todo el texto se excitó como pocas veces. Respondió con un ok pero recibió otro diciéndole que así no responden las zorras y ella respondió disculpe Señora. Acertó. Había estado investigando por internet sobre como relacionarse con Amas etc.

Llegó el sábado. Para no llegar tarde decidió comer en un centro comercial que había cerca de la casa de su amiga. Para poder estar cómoda se puso un vestido veraniego y debajo un tanguita negro que le había regalado Nerea. Eva no sabía que la ropa intima se la había regalado su hija pero a María el detalle la excitaba. A las 16:01 tocó el timbre (un minuto de retraso es un azote). Un zumbido anunció la apertura de la puerta y allí en el suelo estaba el collar de cuero ancho negro y la correa a su lado. Se agachó y puso la correa en el collar. Luego se quitó el vestido y lo dobló con mimo. Seguidamente el tanga y lo colocó sobre el vestido y a un lado del camino. Se puso el collar y caminó a gatas hasta la puerta del sótano. Allí estaba el antifaz y se lo colocó tapando sus ojos. Ahora esperó.

Oyó abrirse la puerta, de repente un zumbido cruzó el aire y un agudo dolor recorrió su cuerpo. Era el azote por el retraso de un minuto. Eva la cogió del collar y la llevó sin antifaz para que viera el camino hasta la puerta de la mazmorra. Una puerta que la joven siempre había visto cerrada. Eva sacó una llave de su cuello y abrió la cerradura. Un espacio oscuro donde no se veía nada. La volvió a poner el antifaz y la condujo al centro y ella se sentó en un trono y la hizo arrodillarse ante ella.

Ahora la quitó la correa y el antifaz y encendió la luz. María pudo observar, estaba en una habitación pintada en tonos rojos, a un lado había una celda con sus barrotes y sus argollas en la pared.

Ahora me vas a lamer las botas zorra------ ordenó Eva.

María obediente besó la punta de la bota e hizo como si mamara la puntita y luego con lametones largos fue chupando toda la extensión de la bota. Eso la excitaba y hacía que se mojara cada vez más y más. Fue subiendo por la caña de la bota. Miró a los ojos a la Ama que la cruzó la cara de un sopapo.

Zorra, no te di permiso para mirarme.

Siguió con la mirada al suelo pero al llegar a las rodillas donde terminaban las botas. Desde allí podía ver el minúsculo tanga negro que tenía la Ama. Ésta la hizo ponerse a 4 patas delante de ella  y  la daba pequeños azotes con la fusta repartidos en cada nalga. La hizo parar y quedarse en la misma posición. Cogió una hellwheel y la pasó por sus doloridas nalgas provocándole pequeños dolores.

Cuando se aburrió la llevó al cuarto de baño. Quería bañarla y prepararla para los siguientes juegos. La introdujo en el gran plato de ducha que tenía y ató sus manos a dos argollas que estaban situadas en la parte superior de la ducha. Luego salió y fue a la mazmorra a por un irrigador. Volvió con él en la mano. María miraba con una mezcla de temor y curiosidad para ver que era lo que se traía entre manos.

Llenó el irrigador con agua templada y se acercó a la chica:

Zorra sabes para que es esto?. Pues para limpiarte bien por dentro.

La soltó de las argollas y la hizo ponerse a cuatro patas. Dio al grifo y la ducha las fue mojando a las dos. Eva se había desnudado previamente. Introdujo el irrigador en la vagina de la chica e introdujo todo el agua del irrigador. Luego la tapó con un plug y volvió a llenar el irrigador pero esta vez lo introdujo en el ano. Luego colocó otro plug de tapón y la dio instrucciones que contrajera todos sus músculos y fuera al wc y allí cuando estuviera sentada quitara los dos plugs, evacuara y volviera a la ducha.

La chica obedeció cuando estaba allí Eva la roció con una manguera que venía del jardín con agua fría. A la chica se le pusieron los pezones muy duros. La obligó a jabonarse y volvió a llenar sus agujeros que ya salieron con agua limpia. Ahora la dio un toallón y ya seca y dispuesta la condujo a la sala.

Ató sus manos y tobillos a una bonita cruz de San Andrés. Allí la hizo escoger con que quería ser azotada y la chica escogió el flogger. Primero con la mano desnuda fue dando pequeñas palmetadas para ir calentando el culo. Luego escogió la regla y lo mismo hizo, al repetir en la misma zona el color enrojeció. Ahora pasó la hellwheel haciendo que la chica se quejase. Para castigarla cogió un violet y la tocaba con el en distintas zonas.

Por último cogió el flogger y fue castigando las nalgas de forma más dura y la espalda de forma suave. Cuando la tuvo bastante castigada la dio la vuelta y la ató mirándola de frente pero la tapó de nuevo los ojos. Pinzó primero sus pezones tras pasar un hielo por cada uno de ellos. Luego colocó una cadena entre las dos pinzas.

Las sensaciones de María durante toda la sesión eran un tobogán de dolor por las sensaciones físicas y excitación por la parte mental. Colocó mas pinzas por todo el cuerpo. Encendió una vela y poco a poco fue vertiendo cera.

Ay, ayyyy, ayy, que dolooorr.  Se quejaba la chica.

Parte de la cera caía desde los pezones, otra cantidad fue a parar al pubis. Luego con la fusta fue quitando una a una las pinzas hasta quitar todas. Fue a una nevera pequeña y sacó un fino cuchillo frio como el hielo y con él fue retirando toda la cera excitando a la chica.

Ahora zorrita solo te queda disfrutar

La condujo a un extremo del recinto. Allí se encontraba una camilla con estribo. La hizo tumbarse y la ató. Con un paño húmedo retiró toda la cera de su joven cuerpo. Con sus labios jugó con sus tersos pezones a la vez que con los dedos jugaba con su mojada vulva.

Ahora vas a disfrutar. Cogió un bote de lubricante con anestesia. Vertió una generosa cantidad sobre el coño de la chica y la extendió. Luego cogió un par de guantes y se los puso. Cogió en las manos más lubricante e introdujo dos dedos en el coño y luego dos de la otra mano. Fue alternando las penetraciones con las dos manos. Primero con un dedo, luego dos. Girando las dos manos dentro, luego tres dedos alternativamente. Luego cuatro dedos. Estuvo un buen rato así a la vez con los pulgares masajeaba el clítoris.

María gemía como una loca y estalló en un orgasmo que mojó las manos de Eva. En el momento culminante después de contraer todos los músculos de la vagina que al relajarlos y Eva embestir con sus dos manos logró meterla el puño entero buscando así la cara anterior de su vagina y allí frotárselo de forma vigorosa y rápida haciendo que la muchacha vuelva a estar caliente.

Retiró su puño y fue en busca de un arnés. Colocó una polla de tamaño medio y dentro del arnés puso una pequeña que vibraba para dar placer a su clítoris mientras ella podía embestir. Se acerco a la chica y la condujo a una cama. La hizo tumbarse y allí la besó y acarició . Mordía su labio cuando en un movimiento de su pelvis la penetró de una sola vez. Comenzó a follarla. La chica entrecerraba los ojos, se besaban, dibujaban sus cuerpos con sus manos. Le sacó el arnés entre los muslos y la hizo ponerse a 4 patas agachando la cabeza. Cogió más vaselina y lubricó el ano de la chica y echó más en la polla del arnés y la fue sodomizando muy lentamente hasta que la tuvo completamente penetrada. La follaba de forma delicada a veces para luego demostrarla quien mandaba. Colocó un vibrador que tenía que terminaba en una esfera en la punta en su clítoris. Lo acercaba y retiraba a la vez que la daba por el culo y se la sacaba.

Guiándose de los gemidos de la chica fue regulando las embestidas hasta que estallaron en un orgasmo compartido y quedaron desmayadas las dos.

Ahora zorrita vente conmigo a la ducha .-------- ordenó conduciéndola de la mano.

Allí se volvieron a amar y jugar hasta que sus almas quedaron extasiadas y limpios sus cuerpos. Cuando se estaban secando María colocándose de rodillas le pidió permiso a Eva para ser su sumisa cosa que la mujer aceptó cogiéndola de la mano y llevándola a la mazmorra.

Ahora zorrita quédate aquí que voy a por tu ropa.

Trajo la ropa de la muchacha. El tanga la dijo se lo quedaría ella como ofrenda. Antes de ponerse el vestido sacó un pequeño estuche y cogió un anillo con una argolla y se lo puso en el dedo y luego una cajita que sacó e hizo que abriera las piernas para meterla un huevo de plástico y un mando a distancia.

Aquí tienes cada vez que me veas deberás activarlo y darme el mando. Tranquila no pongas esa cara, no te pondré en peligro en ningún momento.

María besó el anillo tras ponerse el vestido y se retiró para irse a su casa pero antes había quedado con Nerea a tomarse una copa y salir de juerga. Cuando Nerea la vió la dio un pico en los labios y al meterla mano sintió que no tenía braguitas y que llevaba un anillo de sumisa.

Que zorra, eres sumisa, es Ama o Amo? La conozco?----- preguntó Nerea.

A lo primero Ama, a lo segundo de momento no te responderé.

Las dos jóvenes se besaron apasionadamente

Este es un relato imaginario pero si queréis podéis escribirme a

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