TRIANGULO AMOROSO (y II)
Fernando tenía completamente ensartada a Carla por el culo mientras la masturbaba el coño con dos de sus dedos, Elisa se había colocado de rodillas entre las piernas del Amo y lamía los labios vaginales de Carla y de vez en cuando se centraba en la polla del chico que entraba y salía del culo de la otra chica, luego se puso tras el culo del hombre y le pasó la lengua desde los huevos hasta el ano, con las manos abría las nalgas para luego lamerle el agujerito con vicio y haciendo que el hombre se estremeciese y follara todavía con más vigor si cabe. Se levantó y con una mano le acariciaba el culo mientras él follaba a su amiga con bastante rapidez para mezclarlo con momentos más lentos y profundos que hacían que Carla jadease como una perra y él cada vez le costase aguantar más el orgasmo.
Carla ya había tenido un orgasmo en esta postura e iba a por el segundo mientras Elisa acariciaba a través del recto del chico su próstata cosa que hizo que el amo no pudiera contenerse más y se corriera dentro del culo de Carla mientras ella tenía otro orgasmo entre grandes y audibles gemidos.
Carla entró a la bañera y se puso a ducharse mientras Elisa se daba un muerdo con el Amo, las lenguas se juntaban y ella le decía que ahora quería probar esa polla como una buena puta, que la tenían a mil y que les iba a demostrar lo que era una mujer multiorgásmica. Fernando entró en la bañera y se sentó en el borde y la indicó a Carla que quería una buena mamada mientras Elisa aprovechaba para enjabonar a su amiga todo el cuerpo dándola un relajante y placentero masaje por cada poro de su piel.
Cuando Carla había conseguido de nuevo otra erección levantó a Elisa de las axilas y la hizo sentarse sobre la polla y clavársela entera dando la espalda a él y abriendo las piernas frente a ella para que la morenaza se arrodillase entre sus piernas y comenzase a comerle el coño con una autentica zorra. Primero con la lengua fue dándola pequeños lametones en las ingles pero apenas rozando la piel lo que hizo que la chica se excitase todavía más unido todo a ellos a los masajes que le daba su amante en los pezones con las yemas de los dedos que la hacían casi entrar en trance por la excitación del momento.
Elisa botaba como una condenada, tenía los pezones superduros mientras Carla la lamía como una perra todo el clítoris, los labios vaginales estaban empapados y la polla entraba con bastante facilidad, en uno de los botes el Amo la levantó y la colocó sobre la polla y mientras ella se la iba clavando poco a poco, él la hizo bajar de golpe.
AAAAAAAyyyyyyyyyyy.---chilló la muchacha pero pronto los gritos de dolor se convirtieron en placer mientras ella era follada por detrás y su amiga la comía todo el coño.
Era una maestra con la lengua, buscaba todos los posibles puntos de placer y los recorría con diversas velocidades y con dos dedos la penetraba el coño buscando el punto G que parecía encontrar, estaban Elisa encadenando orgasmos y tenía una excitación tal que sus muslos brillaban por los flujos que iban cayendo incesantemente de su coño palpitante.
Fernando con una mano agachó el tronco de Elisa para que la boca de ella quedara cerca del coño de Carla que la quería devolver el regalito de la cama.
Carla empezó a orinar y Elisa a recoger todos los chorros hasta que terminaron, el hombre estaba follandola con más fuerza y vigor cada vez y avisándola se corrió en su culo. Ella se levantó y vió como por sus muslos caían los restos de semen mientras Carla la besaba y la acariciaba el pelo y la preguntaba si había disfrutado.
Mucho, esto tenemos que repetirlo muchas veces--- dijo Elisa.
Fernando como premio las colocó de espaldas y las fue jabonando toda la espalda y el resto del cuerpo hasta que no quedó un cm de piel sin jabón, luego las aclaró bien y las envolvió con sendos toallones y las llevó a una habitación de la casa que Elisa por orden del Amo había puesto dos camillas y en una mesa había una serie de aceites aromáticos para masajes.
Las dos sumisas se tumbaron en las camillas y él vertió sobre la espalda primero de Elisa una ración de aceite y empezó a masajearla, siguió por los brazos y por todo el cuerpo hasta que terminó tanto por delante como por detrás, luego con una gran toalla mojada con agua caliente mezclada con colonia la cubrió para repetir la misma operación con la otra chica.
Las dejó así una hora y él se fue a la cama, ellas llegaron y se echaron encima de él, volvían a estar juguetones y la polla de él también, ellas se estaban besando una encima de la otra, entonces él las ordenó que siguieran así pero que abrieran las piernas y no se movieran mucho, colocó una almohada bajo las caderas de Elisa que era la chica que estaba debajo para poder acceder a los cuatro agujeros cuando quisiera.
Primero penetró el ano de Carla y la comenzó a follar, ellas dos mientras se comían la boca con una mano se acariciaban los pechos una a la otra y con la otra se masturbaban mutuamente, cuando estaba cansado de follar el culo de Carla pasaba al coño de la misma chica, luego al coño de Elisa y por fin al culo de Elisa era como un juego pero cada vez que las penetraba de nuevo el vigor de la penetración era mayor, ellas mientras tanto no escatimaban caricias mutuas y estaban sumamente excitadas con lo que no le costaba conseguir orgasmos de ellas.
Fernando salió de este juego y se tumbó boca arriba y empezó a acariciar a Carla mientras ésta follaba con dos dedos el coño de su amiga, él se acariciaba su verga para mantenerla en tensión. Carla se levantó y se puso como una amazona sobre la polla de él y comenzó a cabalgarlo, apretaba de vez en cuando los muslos y los músculos de la vagina sobre todo cuando con su bote casi se salía de ese cilindro de placer para con los músculos tensos penetrarse de nuevo consiguiendo con ello todavía una penetración más sensitiva.
Elisa la tapó los ojos por orden del Amo mientras él pellizcaba sus pezones, Elisa fue hasta un armario donde cogió un arnés con una gran polla de unos 20 cms y de un grosor destacado. Se situó tras Carla y comenzó a darla besos en la parte trasera del cuello para luego agarrarla de las caderas y con bastante rapidez penetrarla analmente y acompasar sus acometidas a los botes de la otra muchacha que se sorprendió, el arnés llevaba un pequeño vibrador que rozaba el clítoris de Elisa y que hacía que cada vez que ella metía más la polla de látex en el culo de su amiga ella también recibía mucho placer. Estuvieron follando así durante bastante rato con varios orgasmos de las chicas, en uno de ellos en el momento que caía Carla sobre la polla de Fernando, él se tensó entero apretándola más los pechos y ella entendió perfectamente lo que significaba, se levantó de la polla, se quito el pañuelo de los ojos y cogiendo a Elisa de la mano se acercaron a la polla y la acariciaron hasta que él eyaculó comiéndose las dos el semen que salió despedido.
Terminaron exhaustos los tres, se ducharon para luego dormir hasta la mañana siguiente.
Este relato es imaginario pero va dedicado a Cinthia una guapa morena que me distingue con su cálida amistad y a la que deseo provocar sensaciones como las que ella me describe cada vez que me cuenta que ha leído uno de mis relatos.
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