miprimita.com

Hija de........

en Dominación

HIJA DE………

 

No es lo que pensáis. Simplemente una chica universitaria que sale de casa para ir a visitar a su madre al trabajo y acaba a la noche como la sumisa de un hombre que la llena de atenciones pero a la vez la va educando en su sumisión. Era la hija de la jefa de prensa de un importante y joven empresario de su ciudad. Ella salió esa mañana para ir a la oficina de su madre a pedirla algo de dinero para comprar un libro.

Llegó a la empresa. El portero que era un guardia de seguridad la preguntó donde iba, quien era y el motivo. El guardia era muy guapo, la comió con los ojos. La dejó pasar y Maider subió en el ascensor. Salió en el segundo piso y fue hasta el final al despacho de su madre. Su secretaria la saludó con dos besos. La conocía desde hacia mucho.

Llamó a la madre de la chica que respondió que había salido y que tardaría una hora que tenía dinero en el cajón y que si quería verla la esperara una hora o así. Dejó pasar a Maider al despacho. La chica se inclinó sobre la mesa de su madre para encontrar la llave del cajón. Llevaba un vestidito corto amarillo que mostraba bastante de su muslo. El jefe de su madre se había asomado a la puerta de su despacho que estaba pegado.

Vió a la chica y pensó que tenía que hacerla su sumisa como ya lo era su madre. Era una idea retorcida pero que consiguió una erección casi instantánea.

Buenos días, tu debes de ser Maider.

La chica se dio un buen susto. Se giró de golpe y se puso colorada. La puerta de la secretaria estaba cerrada. El se tomó la libertad de coger de la barbilla a la chica. Iba a probar una cosa que llevaba tiempo cavilando. El riesgo era mínimo porque sabía que la chica era sumisa y le gustaba de la misma forma que a su madre el BDSM. Ni su madre sabía que la chica le gustaba eso ni la hija de la madre. El podía acceder al ordenador de la madre ya que para eso era su sumisa y ella deseaba que él accediera, lo que no sabía era que su hija Maider de vez en cuando lo usaba para leer el correo o navegar algo por Internet.

Se que eres una pequeña zorra sumiiiisaaaaa y que no tienes Amo. Si deseas tener collar esta tarde a las 20 estate lista que pasare a buscarte.

Maider vivía sola con su madre. A veces visitaba a su padre en su casa pero se alojaba con su madre, una mujer separada más cerca de los 50 que de los 40 pero muy atractiva. Su madre no fue a casa ese día. A las 19 se preparó, llevaba el mismo vestido que a la mañana. A las 20 en punto pitaron y ella salió. El jefe se notaba que tenía clase. La recogió en un descapotable. En cuanto se sentó la hizo bajarse las bragas y comprobó que no estaba rasurada sino que tenía algo de vello en la zona púbica.

La dio un huevo que se tenía que meter en la vagina a la vez que él controlaba el mando. Allí en plena calle tuvo que abrir sus piernas y meterse aquel trozo de plástico en el coño. Estaba mojada como pocas veces lo había estado. Llegaron al chalet de su jefe. Antes de entrar la tapó los ojos.

Allí sentada en el sótano, un sótano listo para jugar a ese bello y cruel juego estaba su madre María.

Atada y con los ojos tapados. A Maider la hizo desnudarse y colocarse en la cruz. Fernando la ató y la quitó la venda de los ojos. Frente a ella vió a alguien que estaba frente a ella sentada en una silla en mitad de una habitación en cuyas paredes había todo tipo de artilugios. El hombre se acercó a la mujer atada y levantó la tela que la cubría.

Maider se pus completamente roja. Era su madre. María insultó a Fernando diciéndole lo depravado que era. El se acercó a ella y la metió la mano entre los muslos comprobando que estaba completamente mojada.

Ves eres una zorra y te gusta.

Fernando soltó a María. Atrajo hacia mitad de la sala una especie de potro donde situó a María completamente inmovilizada. No se podía mover. Cogió una fusta que Maider eligió de todos los objetos que había en la pared. Azotó con ella las nalgas de la madre de su nueva sumisa. Los puso a un tono rosa fuerte. Luego tocó una campana y entró un hombre en la habitación. Parecía una escultura andante. Piel de ébano, cercano a los dos metros. Marcado cada músculo con precisión pero sin llegar a ser culturista.

Un miembro viril como un vaso de cubata. A Maider los pezones se le pusieron en punta. Estaba completamente caliente. El adonis de ébano se dirigió a María y la penetró sin miramientos. La follaba con fuerza y vigor sujetándose de su pelo y haciendo que la mujer mirase hacia donde su hija estaba atada.

Fernando cogió unas pinzas de las cejas y las acercó a su pubis, cogió el primer pelo y estiró de él, la chica se quejó pero recibió un sopapo a cambio y una vibración en el huevo que llevaba dentro. Luego con el cigarro que encendió acercó el calor al pubis de la chica. Ella intentaba encogerse como intentando desaparecer pensado que la quemaba. Con la pinza siguió quitando pelos hasta que se cansó. Con cada pelo daba un toque al huevo vibrador.

Cuando la dejó completamente rasurada fue llenando de pinzas su joven cuerpo hasta poner una suficiente cantidad. El hombre que se follaba a la madre había reducido el ritmo para no eyacular. La mujer estaba enlazando orgasmo tras orgasmo. El hombre sacó su oscuro miembro y lo aproximó a su ano. La mujer miró con cara de miedo. Pero el jefe se acercó y la acarició y la susurró al oído lo zorra que era y que sabía que luego lo iba a disfrutar. El negro comenzó a empujar. La mujer chillaba y se quejaba pero el vergón no paró de entrar hasta quedarse quieto con sus nalgas partidas.

Luego se acercó a la joven que miraba todo con una mezcla entre escándalo y excitación. Sus muslos estaban brillantes por sus fluidos. La soltó y la tumbó bocarriba en una camilla justo al lado de su madre. María acercó su mano a la de su hija y murmuró unas palabras de cariño y ánimo. Fernando con la fusta fue quitando las cincuenta pinzas con pequeños golpes. Ahora la mano que controlaba el huevo era la de María que daba lo dejó casi en vibración continua para que su hija disfrutase mas que sufriera. Maider gritó y lloró dejándose ir en un gran orgasmo al mismo tiempo que su madre.

María fue desatada y cogiendo una palangana con agua y jabón lavó a su hija y la adecentó pero sin soltar de la camilla. El hombre de color trajo un hierro al rojo con un símbolo que acercó a su jefe. Fernando lo cogió a la vez que María y el hombre de color trajeron un recipiente con cenizas al rojo. Fernando con el hierro candente lo acercó a la chica joven. Maider puso los ojos como platos y chilló y protestó pero no había visto que el otro hombre había acercado al otro lado un trozo de madera.

Fernando después de enseñar a la chica el hierro lo acercó tanto que ella sintió el calor en su piel pero la madera recibió el impacto del metal. Fernando se carcajeó y Maider sintió una sensación muy extraña, la misma que se queda después de un orgasmo. Soltaron a Maider y las dos mujeres se abrazaron. Ahora el jefe las dejó que fueran a ducharse para relajarse después de tatuar en hena a la joven su símbolo de pertenencia.

Este es un relato imaginario pero si queréis podéis escribirme a:

Picante100@hotmail.com

Picante100@gmail.com

Mas de picante100

Inicios duros en la senda del placer

Inocente propuesta, picante aceptación

LA ALDEA (iii)

De reunión a trio

La aldea(II)

La aldea

Prácticas provechosas

Directamente orgia

Empiezan dos y acaban cinco

Invitado a boda disfruta de ardiente noche

Dos mas dos a veces hacen cinco

Fantasía por accidente

Montañas

Amistades y vecindades

Sorpresa en el campo

Sociedad secreta

La fiesta no termina siempre en el portal

Causa y sus consecuencias

Iniciacion profesional

Dificil seduccion

Con la madre de ane

Ane entregada a su novio

En la tienda

Amigas para esto, la ceremonia

Amigas para esto

Castillo de adiestramiento(I)

Castillo de adiestramiento

Mi primera vez

No sin la mantequilla

Amistad excitante(v)

Amistad excitante(IV)

Amistad excitante III

Amistad excitante II

Amistad excitante

Piso vacio

Amaia, jugando a paddle

Entre hermanas

Yo,ane

Dos parejas y una estacion

En los vestuarios

Antiguas alumnas

Sara y los 19

Por trabajar en sabado

Sorpresa en el club

Por bocazas

Llaves

En la calle

Por las fiestas tuvo otra fiesta

Alicia y las salchichas

Cumpleaños feliz

Derivadas de confesiones

Confesiones de autobus

La doctora

Relatos

El tren de las 6

Los lunares

Diana vence su timidez

Amaia (8)

Amaia (7)

Amaia (6: su primera orgía)

Amaia (5)

Amaia 4

Amaia, siguen las perversiones (3)

Amaia 2

Amaia

Dos machos

Intercambio extraño

Exámen o trabajo

Vuelta a casa

Nochevieja diferente 2

Nochevieja diferente

Diario de un inicio

Vecinitas

Fiestas de San Juan

Seduccion arriesgada

Cuando pecar es un placer

Harina

Elena y Vanesa

Primer dia de playa

Clases de verano

Playa con kiwi

Los baños

Mente y cuerpo (3)

No con mi padre

Mente y cuerpo (2)

La soledad no es buena consejera

Orgía en obras

Mente y cuerpo (1)

Mente y cuerpo

Metedura de.....

La subasta

Fiesta en la universidad

Maider

Creacion de una sumisa (3)

Creacion de una sumisa (2)

Creacion de una sumisa (1)

Buena chica

Vendimiando

Vidas cruzadas

Topico placentero

La cajera del super

Los billares

Tres amigos en la playa

Pícara luna de miel

Aventura sobre ruedas

Universitario

Entre camiones

La pareja y la pelirroja

La criada

Footing x

Sola en casa

Duchas playeras

La madura y l@s jovenes

Horas extras bien pagadas

Vivero del 69

Verano en la terraza

Obras en casa

El tren del sexo

SMS traidor

Comercial

Baños termales

La ardiente Elena

Entre vecinos anda el juego

Calor en la playa

Tarde en la oficina

Despedida de solteros

La enigmatica morena

La victoria

La visita de Alicia

Amaia, secretaria en practicas

Viaje a la obediencia

Alazne, inocente vecina

En 10 minutos de ama a sumisa

Ayyyyyy maider

Sábado de botellón

Elena y Fernando

Casa rural X

Casa rural X (2)

Era profesora o sumisa

Elisa y su antiguo alumno

Renata

Dos amigas seducen a libe

Internado

Tania

Elena y los cazadores

Menudo melocotón

Expiación de errores

Janire y Naiara

Orgía hotelera

Sorpresa en la consulta

Monica y la rubia

Nerea es entregada

Corinne vence su timidez

Laura la dominanta

Reencuentro en la farmacia

Sopresa matutina

Dopi se ambienta

Dopi sigue marchosa

Cuatro esquinas

Diana se siente zorra (1)

Patricia entre pajas

Patricia

La blanca nieves y los siete hombres

El descampado

Sonia en su cuarto

Fin de semana en un hotelito

De empleada a sumisa

La noche en el camping

Dominación en la disco

La llave y el candado (5)

Maria comprando lenceria

De noche y en la playa

Conociendo a la perrita Sara

De noche y en la playa

Sara, una sumisa entregada (2)

A sus pies Maria

Relato 100 de picante100 (2)

Sara, una sumisa entregada

Miriam haciendo de masajista

La Yolanda estaba al rojo

Relato 100 de picante100

La vecinita universitaria

Usando a diana (3)

Domingo de pelotas

Usando a diana (2)

Usando a Diana

Cena de navidad

La llave y el candado (3)

La llave y el candado (4)

Sherezade en la estacion de ski

Una mas una hacen tres

La llave y el candado (2)

La llave y el candado (1)

La llave y el candado

La vecina por la webcam

Diana de marcha nocturna

Stripoker estudiantil

Sexo en el despacho

Dos amigas descubren su atracción

Mañana en la playa

Triángulo amoroso (1)

Cubata picante

Triangulo amoroso (y 2)

Baile de mascaras

Dobles parejas

Libe en el supermercado

De pareja a trio (¿poker?)

Cita a ciegas

Libe busca el aprobado

Elena, de señora a perra sumisa

Libe busca el aprobado (2)

Libe en el cine

El tren en día de playa

Sexo entre rejas

Un polo de fresa

Ana, sexo en la madurez

La coincidencia (3)

La coincidencia (2)

Juan y la insolita familia

La coincidencia

Las vacaciones

Ducha de conversión

Sesión inicial

Lidia

Bailarina

El dentista

Encuentro mágico

Perra en el metro

El pastor

El callejón

Ana la autoestopista

Novata en el reino de sade (2)

Novata en el reino de sade

La sesión

Fiesta en el piso

La canguro (2)

El descubrimiento

Del big-bang al gang-bang

Que susto se llevo la secretaria

Polvo y playa

La canguro

Zapatos especiales

La esclava

La chispa

El encuentro

Exámen médico

La traición

Vaya apartamento

Tequila

Va por ti Maria

Festin de nochevieja

Qué regalito!

Un loco día

Chequeo médico

Sorpresa en el parking

La vecinita

La profesora

La morena que quería ser sumisa

Una clase muy particular

La iniciación (1)

Las vacaciones (2)

La iniciación

La ducha caliente

Fantasía hecha realidad

Las vacaciones

Sumisión en la granja (3)

Juerga fructifera

Eva y Mario caen en el volcan

El señor y la criada

A través de la sumisión llegó al cenit sexual (5)

A través de la sumisión llegó al cenit sexual (4)

A través de la sumisión llegó al cenit sexual (3)

A través de la sumisión llegó al cenit sexual (2)

Corona de sangre

Sumisión en la granja (2)

A traves de la sumision llego al cenit sexual (1)

Sumisión en la granja (1)

Relato conjunto

Sumisión en la granja