PORNOGRAFFITY (Capitulo 8)
Berlin esta en estas fechas lleno de estudiantes, borregos que celebran la victoria de su selección contra Portugal en las semifinales, y algún que otro turista. Yo, no soy ninguno de esos tres prototipos, yo vengo por un motivo y no es para nada turístico, aunque pudiera acabar siendo instructivo. Me siento en un banco, y observo Miro a las turistas, y algunas locales, tumbándose, en bikini, a tomar el sol en las playas artificiales que hay junto al río. Disfruto de las vistas de los cuerpos de algunas estudiantes italianas y latinoamericanas que están aquí estudiando por becas de intercambio.
Pronto parezco ser descubierto por dos enormes ojos miel encuadrados en espesas y largas pestañas, sonríe hacía a mi, y luego le da un morreo a su compañera. ¡Joder! ¡La hostía! Esa zorra si que sabe como poner caliente a un tío.
-Jodida zorrilla.
La tipa parece leerme lo labios, sonríe, y, dándole un codazo a su compañera, señala hacía mi. Como dice el chotis, una morena y otra rubia. La morena, que es la que me vio primero, comienza a acariciar los pechos de su helvética amiguita, y, esta hace lo propio con los de ella Sacan sus lenguas y las entrelazan la una con la de la otra. Con este puto sol, y esta escenita calentorra, me voy a derretir entero.
-Haber hasta donde os atrevéis a llegar.
Esta vez me escuchan perfectamente, ya que las hablo al interior de sus cabezas. Esto las confunde, pero mi sonrisa retadora las hace reaccionar. La morena tumba de espaldas a la otra, y se coloca encima, comienzan a simular un coito (Cabalgando una, y dejándose cabalgar la otra). La rubia alarga sus manos hasta apresar los pechos de la otra, comienza a magrearlos mientras la otra no para de cabalgarla.
-Vais bien, pero aún no habéis hecho nada realmente novedoso Para ver esto, me alquilo una porno.
De nuevo las hablo mentalmente, y las doy un pequeño empujoncito.
La morena la arranca la parte de arriba del bikini a su amiga, e, inmediatamente, comienza a mamarla los pechos con un ímpetu indecoroso. La rubia comienza a jadear ostensiblemente Pronto hay un enorme grupo de gente a su alrededor.
Poco a poco la escena se vuelve mas tórrida, ahora, aún una encima de la otra, se masajean el cabello, se besan y lamen la una a la otra, sin dejar de frotarse (Ahora también la morena carece de parte superior del bikini (He de reconocer que sus tetas son muy apetecibles, enormes y bien bronceadas).
El sol se refleja en sus sudorosas pieles, donde recalienta los jugos del placer que entre esas dos se remueven.
Suelto un silbido de gusto, realmente están superando mis expectativas.
Oigo las sirenas de la policía, algún alma pía habrá dado notificación de aquel escándalo público.
Me levanto, camino hacía la playa artificial. Me dan ganas de vomitar cuando veo a algunos borrachos meneándosela sobre las dos chicas. Por un momento dudo si esperar a que lo hagan, pero las sirenas cada vez más cercanas me convencen de entrar en acción. Así que pillo del brazo a la morena, no me gusta cortar el rollo a nadie, pero no creo que la guste que la detengan en su situación (Claramente, en cuanto empieza a insultarme en castellano a la vez que se revuelve, esta chica es una estudiante Erasmus).
Salimos de allí antes de que la policía disuelva el grupillo, y arreste a la rubia (una pena, también estaba muy buena Pero, que se joda El mundo tiene demasiadas rubias tontas, así que de vez en cuando las viene bien un sustito).