DOCTOR DELIRIO: POKEROS
ESTIMADO AMIGO, HAY UNA ENFERMEDAD QUE TIENE ALGO QUE VER CON CONFUNDIR REALIDAD Y FICCION (SEGÚN TU ÚLTIMO ARTICULO, ME ALEGRO QUE DESMIENTAS EL TENERLA) Y HAY OTRA QUE SE LLAMA PARANOIA (CREERSE QUE TENEMOS LA RAZÓN Y QUE SOMOS DIOSES, QUE TODO LO QUE VEMOS EN EL MUNDO ES PRODUCTO DE NUESTRA PRESENCIA, ETC. TAMBIEN EL PARANOICO PIENSA QUE DEBE DICTAR LO QUE SE DEBE O NO HACER... LO CUAL LE CONVIERTE DE SIMPLE PARANOICO A PARANOICO FANATICO, PUES SE SUSTENTA EN DOCTRINAS IDEOLOGICAS ULTRACONSERVADORAS O ULTRARELIGIOSAS. YO SOLO ESPERO QUE ESE TAMPOCO SEA TU CASO)
EN FIN: UN ABRAZO.
PD: POR CIERTO, SOLO AVISO UNA VEZ.
-Tu última evaluación del comité medico es excelente, Doc ¿No te alegras?
Él levantó la mirada de la pantalla del ordenador y clavo sus ojos grises en la otra doctora que estaba apoyada en el dintel de su puerta. Él se encogió de hombros como única respuesta.
-Eres impasible, tío.
Le soltó ella entre risillas.
Él volvió a clavar sus ojos en la pantalla del ordenador.
Realmente su fijación en el trabajo se debía principalmente a su preocupación por Elisabeth, nadie la había visto desde la Fiesta de Navidad, estaba desaparecida... Él había ido a la casa de ella, para encontrarla tal y como estaba cuando fue a recogerla aquel día. Trataba de no obsesionarse con ello, quizá se hubiera ido al yate de aquel joven medico con él que había estado bailando (y que fue la última persona con quien la vio). Pero él conocía la verdad, aunque intentara negársela o buscar otras explicaciones: Akarin.
Todo empezó como siempre ocurría cuando un caso se le presentaba, una breve sensación, en ocasiones, una imagen fugaz. Se levanto de la mesa, y agradeció que hubiera terminado su jornada.
Menos mal que los demás médicos parecían bastante ocupados, así no tuvo que irles explicando a donde iba. La verdad que en este mundo tan racionalista y cartesiano, hablar de muertos vivientes ya era para que te metieran en el manicomio.
Todo apuntaba a una de esas tribus urbanas tan comunes en las calles en los últimos tiempos: Los Pokeros.
¿Qué o quien eran los Pokeros? Mejor dicho, aún son. Los Pokeros son esos chicos que llevan un peinado y una estética heredera de los gitanos y los inmigrantes del Este de Europa. Como ambos individuos tipo (Gitano y Balcanico ex sovietico) son amantes del oro (En collares, sellos, piercings, pendientes, etc.) y de todo lo que brille (O sea, son una especie de horteras que van de modernos con una estética copiada a delincuentes y buscapleitos). La estética del chico Pokero se copia en muchos casos en los artistas de la nueva rumba (Melendy, Andy y Lucas, etc.), genero musical que les encanta, igual que a sus contrapartidas femeninas. Si el Pokero masculino es un hortera y un macarra, la pokera es el símbolo de la chica amante del rosa (incluso tapizando sus coches con el tono mas chicloso del rosa), los complementos en el pelo (a ser posible estrellas o mariposas), el oro que no falta, y un maquillaje estridente de tonos rosas o rojos. Los Pokeros nacen sobre todo en los extrarradios de las ciudades, donde la juventud tiene más contacto (Institutos, calles, etc.) con los colectivos a los cueles copian. Son normalmente (como suele ocurrir en todas las tribus urbanas) jóvenes sin una personalidad formada, los cuales van con sus seats con la música horrible, que escuchan, a todo trapo y las ventanillas bajadas. Son, en su mayoría, pendencieros, chulos, egocéntricos, machistas, en fin, una copia de aquellos prototipos a los que imitan (y que suelen ser sociedades donde la mujer no tiene derechos, donde se cobran las deudas con sangre, se suele abusar de la diversión (y con esto ya sabrán a que me refiero), y se guían por códigos legales propios)
Bueno, cuando llego al lugar, él pudo comprobar los resultados de combinar a semejantes horteras con la necromancia. El doctor se giro, y salió del lugar (Un pub de rumba y gitaneo) meneando la cabeza mientras murmuraba:
-Pobres imbeciles.