Lo que yo tome como una noche en blanco, ha sido casi un mes. La peor me rodea ahora a cada paso que doy, es como si el mundo se hubiera vuelto patas arriba. En los diarios gratuitos solo hablan de la "Gran Crisis", y a mi alrededor parecen haberse cuadriplicado el numero de pobres. Lo que antes eran barrios de clase media, ahora son chabolas... ¿Qué coños ha pasado?
Decido buscar las respuestas, y se donde encontrarlas.
Solo me basta un pensamiento, mi magia parece potenciarse con mis emociones (algo que antes no me había ocurrido)
-Hola.
Saludo al traspasar la puerta.
-Hola ¿Cómo estas?
Responde ella, como si no hubiera pasado nada hace una hora
(será falsa), desde la cama.
-Bien ¿Y vos?
La increpo con sarcasmo.
-Mejor.
-¿Qué tal estas de salud?
Me aproximo a ella, mientras mi mente se funde con la suya.
-Mejor ¿Tu?
-He conocido épocas mejores.
Ella suelta una risilla divertida. El control comienza a ser
mio.
-Me encanta verte reír, y, me gusta que te cuides bien.
Me siento a su lado, en la cama.
-Me estoy cuidando mucho, así me encuentras muy bien.
-Veámoslo.
Ella se sube la falda, y me muestra una de sus piernas.
-Mírala... tócala... y dime como está.
-Mmmmmm... Se ven bien torneados tus muslos.
-Mira mi vientre y se sube la camiseta, revelando su tersa piel desnuda - ¿Qué
te parece?
-Que liso y suave está.
-Soy perfecta ¿No lo crees?
-Me abres el apetito ¿Lo sabías?
-No se hace la inocente -, no sabia nada... Que problema ¿No? Ahora sentirás
mucho apetito.
-Te comería todita.
-Pues espero que no me duela.
-Será suave.
-Mejor así.
De pronto, ella, para mi sorpresa, sacude su cabeza, y, se aparta de mi. De
nuevo es dueña de su mente.
-Me encanta como te pones a la defensiva.
Digo, sonriendo, al ver la ira en los ojos de ella.
-No es a la defensiva ella me apunta con el dedo acusadora -... Tú me confundes, y no quiero eso ahora.
Nunca la había visto perder tanto la compostura, no se lo que es... pero me gusta.
-Si te confundo, será que algo te carcome relacionado conmigo.
Ella se mantiene en silencio unos momentos, luego dice algo apretando los dientes.
-A lo mejor... Pero mejor dejarlo allí.
-Querida, muchos me han llamado diablo... Sembrar el Caos y
la confusió0n es mi especialidad.
-¿Que seria lo siguiente? la ira contenida de ella, tiñe, cada palabra suya,
de rencor - ¿Querías que te hiciera un francés?
-Sí.
Es la respuesta contundente que la doy.
-Vete.
-No.
Y, entonces, lo veo en su cabeza, veo todo lo que me ha hecho desde que nos conocimos... Veo que nada ha sido casual, y que ella me encontró a mí (y no yo a ella), y, que hasta ahora ha estado manipulándome... Es un vistazo efímero, pero que quita la venda de mis ojos.
No lo dudo, agarro sus rizos y, mientras grita, la meto de golpe mi polla entre sus carnosos labios. Doy fuertes embestidas para evitarla la tentación de apretar los dientes. Ella me ha violado durante casi dos meses, es momento de devolverla el favor. Siento como la entran arcadas, y tras un rato consigo inmovilizar sus brazos y sus piernas. Disfruto de la violenta acción, hasta que decido que, al igual que ella me ha dado por culo, debería hacerle una visita a su lindo anito.
La volteo, y la levanto por la cadera, mientras con la mano libre la sostengo sus brazos. Comienzo lamiendo y chupando su ano... realmente aterciopelado. Cuando lo veo un poco dilatado (no mucho, quiero que la duela) pongo mi pene en la entrada y empujo con toda mi rabia.
Creo que la han oído todos los vecinos de esta manzana, tampoco me importa. Paso bombeándola alrededor de 10 minutos. Finalmente salgo de su ano, y me evaporo. Eso la enseñara a no manipularme más.