PORNOGRAFFITY (Capitulo 18)
Bajo al salón, ella me ha echado de malos modos de su habitación. Estoy un poco confundido, no entiendo su reacción. Un extraña ansiedad por perderla comienza a nacer en mi.
-Hola.
El corazón me da un salto. Entonces me fijo en la muchacha recostada en el sofa.
-Perdón, pensé que solo estábamos
-¿Mi hermana y tu? me interrumpe ella tranquilo, no quería molestaros.
Por alguna extraña razón no puedo apartar los ojos de sus delgados, suaves y blancos pies. Siento ansias de besarlos, lamerlos, y chupara cada uno de esos dedos redonditos y rosados.
Me siento a su lado, obnubilado por sus pies. Ella no parece alarmarse, y sigue leyendo, ignorando mi presencia. Paso suavemente mi dedo por encima de la piel de su empeine, es suave y lisa. Nunca antes había sentido atracción por los pies de nadie, joer, pero estos me tienen hipnotizado.
-¿Hace mucho que conoces a mi hermana?
Su voz me alarma, me sonrojo.
-Nos conocimos en el tren que venía del Francia a aquí.
-Ah.
Y vuelve a su lectura.
Yo vuelvo a sus pies, podría obligarla a dejarse hacer todo lo que yo deseara Pero dentro de mí, chupar o besar un pie obsesionarse con un pie No
Pero ahí esta ese deseo, esa adoración, por esos dos pies Que me parecen exquisitos
-¿Eres su novio o solo follais?
De nuevo me sobresalta, intento ocultar mi sonrojo por poder haber sido descubierto.
-No No lo se ni yo.
La contesto.
-Ah.
Y vuelve a su lectura.
¿Qué cojones me esta pasando? Trato de combatir ese deseo que no reconozco en mi, me levanto. Al girarme me encuentro frente a ella, y con sus ojos de gato, y, ella esta sonriendo satisfecha de mi tortura
Salgo corriendo de esa casa, lejos de ella lejos de lo que me esta haciendo ella.