miprimita.com

El chico de mis sueños. Final Alternativo Uno.

en Gays

Hola, es la primera vez que escribo un final diferente al elegido, a ver que tal les parece.

 

Sueño Final Alternativo Uno.

 

Al paso de tres largos meses; Edna estaba muy impaciente en sus clases; cada media hora miraba el reloj; para ella el día se estaba pasando lento, pero para otros estaba yéndose muy rápido; al finalizar la última clase Edna presurosa salía del salón y se dirigía a las canchas de básquetbol dónde Abel, Alfredo y Gina encestaban junto con otros compañeros, practicando sus tiros.

Ella se paraba en el lugar donde acostumbraba estar con Julián y gritaba entusiasmaba. – ¡Abel!, ¡Abel!, ¡vámonos, el momento ha llegado!, ¡rápido, hay que irnos!

– Abel un poco sudado volteaba y al ver a Edna se sorprendía diciendo. – ¡Ya, tan rápido se acabaron las clases!

– Gina se le acercaba con papel higiénico y sonriendo le decía. – Toma, sécate el sudor y ya vete, debes lucir muy bien.

– Él sonreía, se limpiaba diciendo contento. – Gracias, no puedo creer que ya sea el día, se fueron rápido estos meses.

– Alfredo le daba la mochila a Abel diciéndole. – Ten hermano, será mejor que te vayas a casa a duchar, aún hay tiempo.

– Abel agarraba sus cosas, sonriendo les decía. – Gracias y sí, aún queda tiempo.

– Abel trotaba para alcanzar a Edna y Gina les gritaba. – ¡Los alcanzamos más tarde!

– Abel respondía gritando. – ¡Espero sea verdad!

– Edna haciéndoles señas, se despedía de ellos muy presurosa, para así irse de inmediato al estacionamiento.

Abel manejaba a prisa, cortando camino para llegar a casa.

Edna le decía nerviosa. – ¡Maneja con cuidado, no quiero morir sin ver la exposición!

– Abel moderaba su conducción y le decía serio. – Disculpa, es que tengo nervios de llegar tarde y aún quiero pasar a bañarme.

– Edna le ponía su mano izquierda en el hombro derecho de él diciéndole tras un suspiro. – Te entiendo, la prisa es comprensible, con calma, tenemos tiempo.

– Viendo que aún faltaban unas pocas horas para el evento; Abel pasaba a su casa a bañarse y cambiarse rápido; Edna esperaba en la sala, siendo acompañada por la madre de él, quién le hacía platica sobre el evento y que estarían ahí puntuales para ver la exposición.

Al cabo de un rato, ya listo Abel bajaba muy bien perfumado y vestido; sonriente aunque un poco nervioso él junto con Edna se despedían, acordando de verse en el centro cultural de la universidad, la mamá de Abel le decía que no se preocupara, que estarían ahí a tiempo; ellos abordaban el carro para irse de inmediato a la casa de Aldo y Alba.

Ellos vestidos y bien arreglados estaban igual de ansiosos y esperando con ganas de ya irse a la “Casa del lago”; un centro cultural perteneciente a la universidad de la ciudad; en ese instante, el claxon del carro de Abel se hacía sonar; de inmediato Aldo y Alba salían y se subían, saludándoles.

Alba emocionada decía. – ¡Al fin luego de tres meses veremos sus creaciones de mi primo en una exposición!

– Aldo entusiasmado decía. – ¡Fue un gran gesto amable de la universidad al prestar su centro cultural!

– Abel sonreía mientras conducía y Edna lo miraba de reojo.

Ella ponía su mano sobre la mano derecha de él para decirle. – ¡Estará muy contento Julián de este evento en su honor!

– Abel suspiraba con los ojos cristalinos a punto de llorar.

Edna sin percatarse de eso, decía entusiasmada. – ¡Siguiente parada la “casa del lago”!

– Los cuatro ansiosos llegaban tras un camino recorrido de media hora.

En el lugar, llegaban los padres y hermanos de Julián; así como un amplio personal docente de la universidad en la que estudiaban, igual que compañeros de otras áreas y Gina con Alfredo que llegaban casi al par de ellos.

Abel suspiraba y decía. – Julián estará contento por esto.

– Edna le abrazaba diciendo. – Mi amigo brincaría de gusto por esta estupenda idea que tuviste.

– Abel derramaba una lágrima diciendo. – Sí, estaría brincando de alegría.

– Edna le abrazaba más fuerte hablándole con ánimo. – No lloremos, este evento es para estar contentos, no estar tristes, creo ya le lloramos lo suficiente; ahora arriba ese entusiasmo qué somos los maestros de ceremonias y debemos lucir muy guapos.

– Abel sonreía, sacaba un trozo de papel, limpiándose las lágrimas y nariz decía. – Tienes razón, ya le lloramos mucho, es momento de continuar con la vida.

– Edna le sonreía hablando. – ¡De ese ánimo es el qué me agrada!

– Edna con algarabía, le acomodaba el saco, diciendo. – Anda prepárate, cero nervios Abel, yo me iré a vestir en los baños, Gina y Alba me ayudarán, en un ratito más te acompaño.

– Abel le daba un tierno beso en la mejilla diciendo. – Anda, que nuestro amigo debe vernos radiantes.

– Edna se sonreía diciendo. – ¡Claro, es lo menos que podemos hacer en su evento!

– Ella caminaba a prisa para el baño, donde Gina y Alba la alcanzaban para auxiliarle con su ropa y maquillaje.

Toda la gente invitada al evento estaba presente; justo dando las cinco de la tarde, llegaba el momento esperado y el motivo por el cual los familiares de Julián estaban allí; pues no tenían idea alguno del acontecimiento.

Abel y Edna saludaban a los presentes; Abel nostálgico hablaba. – Nunca imagine que un gran amigo al que quise mucho, tuviese un talento tan impresionante para dibujar; las obras que verán a continuación, fueron creaciones de él, que mantuvo escondidas en su recamara mientras vivió con sus primos aquí presentes; Aldo y Alba; y unas más que mantuvo ocultas en la casa de sus padres.

– Edna suspiraba diciendo. – Julián tenía talento y pasión por dibujar, era un buenazo en lo que hacía, seguramente él estará contento, un poco ruborizado, pero alegre de que su talento sea mostrado a sus familiares, amigos, maestros y gente que le conoció mientras estuvo en la universidad.

– Abel, sintiendo un nudo en la garganta, tragaba saliva para hablar. – Quiero que esta exposición sea un honor al talento y don que Julián tuvo, con el que fue privilegiado, para crear estos grandes bocetos a lápiz, en colores pastel, crayones, gises y pintura acrílica.

– Abel hacía una pausa, Edna le miraba y le ayudaba diciendo al borde del llanto. – Julián estaría extremadamente feliz por esto, muchas gracias a la universidad por prestar y permitirnos rendirle este homenaje en su memoria, muchas gracias de verdad y aunque físicamente él no esté, todo lo que verán a continuación es la presencia plasmada por el talento.

– Abel derramaba una lágrima diciendo. – Papás, hermanos de Julián, admiren el talento que él en vida poseía y que ahora nos ha dejado como recuerdo; bienvenidos aquí al sueño de la vida real.

– Sus familiares aplaudían el momento tan emotivo, al igual que la demás audiencia, Alba lloraba nostálgica y su hermano la abrazaba fuerte.

Los cuadros les quitaban la cubierta y eran mostrados a los presentes; admirando uno a uno de las creaciones que Julián había realizado antes y durante el tiempo que estuvo estudiando en la universidad.

Abel algo deprimido, se ocultaba para llorar mientras recordaba la escena de como Julián se arrojaba al vació, para impactarse contra el pavimento; cuando él bajaba hasta donde estaba tendido, le sostenía la cabeza y en sus últimas palabras le decía. – Al fin me siento libre, no me juzguen, es lo que quería, sentirme libre, perdóneme por parecer un cobarde, pero creo en mi lugar, harían lo mismo, perdón.

– Abel le daba un beso en la boca, confesándole su amor, justo cuando él expulsaba su último aliento, para así cerrar los ojos, con una delicada sonrisa y morir.

Esa misma noche Julián era velado, Abel y Edna siempre se mantuvieron al lado del féretro, en ningún momento se despegaban de él; Gina muy triste, pedía perdón; pues se sentía culpable de su suicidio; mientras acariciaba el vitral que dividía su cuerpo inerte del contacto físico.

En un momento discreto, Abel le decía a Gina que no debía sentirse culpable, que Julián tomó la decisión por cuenta propia y por no tener salida alguna para su situación; Gina lo abrazaba fuertemente y él se desmoronaba en llanto.

Alfredo y Edna los miraban con profunda tristeza; pues una se sentía culpable por haber sugerido el suicidio y el otro por no haber llegado a tiempo y evitar su final; el velorio de Julián fue muy conmovedor, sus padres lamentaban la perdida y deseaban regresar el tiempo atrás para remediar las problemas habidos; a su ataúd suplicaban el perdón por no haberlo comprendido.

Su cuerpo fue cremado y llevado a su ciudad de origen; Abel y Edna acompañaron a Aldo y Alba, junto con demás familia, a dejar las cenizas en su última morada; en el nicho familiar.

Fue ahí donde Abel; con permiso; entraba a la casa de los padres de Julián y al pasar a lo que era su habitación, descubría los diversos dibujos, paisajes y bocetos que él dibujaba en sus ratos libres cuando era más joven; él tuvo una brillante idea; que demoró un poco; pues debía mandar y registrar cada creación elaborada por Julián; naciendo así esta exhibición en su honor.

Abel lloraba desconsoladamente, Edna lo descubría en ese estado, sentado en el piso; ella se acomodaba junto a él y contagiada por el sentimiento le abrazaba hablando. – Sé que aún te duele su pérdida, sé bien que es muy resiente, pero debemos seguir adelante, continuar, Julián hizo lo que hizo para tener su libertad, para sentirse bien, para descansar, porqué él quería dejar de sufrir, debemos respetar eso y no juzgar.

– Abel abrazaba a Edna y lloraba con más fuerza; para luego decir sollozando. – Respeto su decisión, no lo juzgó; aunque me hubiese gustado poder evitar ese momento, poder ayudarle, tenerlo aquí con vida, mirando esté momento, disfrutando la exhibición, viendo su sonrisa, su mirada protegida por sus lentes, ¡lo extraño demasiado!

– Edna le limpiaba las lágrimas, diciendo tranquila. – Con lo tímido que era Julián, no hubiese querido eso, tal vez hubiera mostrado sus creaciones pero más adelante, tal vez te las hubiese enseñado a ti nada más.

– Ella un poco sorprendida, hablaba. – ¡Me impacto ver todo eso que tenía pintado y dibujado!, ¡yo que era su amiga sabía de ese talento, pero no que fuera tanto!

– Abel calmándose un poco le decía serio. – Nadie se percataba de lo que era, se sentía invisible, pero ahora no seguirá siéndolo.

– Abel suspiraba diciendo. – Tal vez ya no estará físicamente, pero todo lo que está aquí, es él; me alegra que esta exposición sea un homenaje para él, donde quiera que esté, espero esté feliz.

– Edna le daba un beso en la mejilla, le secaba las lágrimas afirmando. – Julián esta alegre, contento, feliz por lo que organizaste tú para él, te lo puedo asegurar.

– Ambos se levantaban del suelo y como si nada hubiera pasado continuaban con el evento.

Aunque en un momento de distracción, Abel salía del lugar, se subía a su carro y manejaba presuroso al puente Xallitic; estando ahí se sentaba en el mismo lugar donde Julián se había lanzado.

Miraba al cielo, diciendo nostálgico. – Me di cuenta de mi amor por ti demasiado tarde, sospechaba de este sentimiento, pero no quería aceptarlo; cuando lo hice fue muy tarde, pues tú ya estabas con ese desgraciado, luego de lo que te hizo, quise ser sincero, confesarte mi amor, pero me invadió el miedo al rechazo y no decirte esto que nació; me decidía a decírtelo justo momentos después de que rendiste tu declaración; pero cuando al fin pude decirte, tú ya estabas muriendo.

– Una ráfaga de viento acariciaba el rostro y cabello de él.

Mostrando una ligera sonrisa para decir. – Te querré siempre Julián, algún día nos volveremos a ver; trataré de seguir mi vida y tal vez, digo tal vez, me vuelva a enamorar de alguien más, por lo pronto, mi único amor serás tú, tú mi querido Julián, el chico soñador.

– Abel se bajaba, caminaba lento a su carro y regresaba al sitio.

Aldo y Alba al verlo entrar de regreso, le preguntaban donde había estado, a lo que respondía que había ido a ver a Julián; los hermanos le sonrieron y amables le entregaban una foto de Julián; tamaño pasaporte; con una hoja de papel doblada en cuatro, dónde estaba plasmado un dibujo hecho por Julián.

Abel al ver que era él de perfil mirando el cielo, sonreía y los guardaba en su saco; suspirando pensaba. – Julián gracias por haber existido, por conocerte y ayudarme a descubrirme; siempre te llevaré conmigo.

– Derramaba una lágrima que Edna limpiaba al acercárseles y le decía animándole. – Nada de llorar.

– Alba sonreía diciendo. – Gracias por esta idea es un gesto hermoso en memoria de mi primo.

– Aldo amable decía. – Así es, gracias por este detalle, querías mucho a mi primo, gracias a los dos.

– Abel sonreía ruborizado sugiriendo. – No agradezcan, mejor le damos un recorrido, observando con atención sus creaciones.

– Los cuatro se miraban; Abel y Edna cruzaban sus brazos, al igual que Aldo y Alba; para así caminar y admirar la exposición en honor a Julián

Para así continuar con sus respectivos sueños de la vida real.

Mas de Jesus tsukishiro

Franco - Tira - Amor. Capítulo 2

Franco - Tira - Amor. Capítulo 1

Gay, casos de la vida real.

Gay, casos de la vida real.

Gay, casos de la vida real.

¿Por qué a mí? Capítulo 10

¿Por qué a mí? Capítulo 9

¿Por qué a mí? Capítulo 8

¿Por qué a mí? Capítulo 7

¿Por qué a mí? Capítulo 6

¿Por qué a mí? Capítulo 5

¿Por qué a mí? Capítulo 4

¿Por qué a mí? Capítulo 3

¿Por qué a mí? Capítulo 2

¿Por qué a mí? Capítulo 1

Gay, casos de la vida real.

Gay, casos de la vida real.

Gay, casos de la vida real.

Gay, casos de la vida real.

Gay, casos de la vida real.

El Otro. Parte 3

El Otro. Parte 2

El Otro. Parte 1

Gay, casos de la vida real.

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 18

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 17

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 16

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 15

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 14

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 13

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 12

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 11

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 10

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 9

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 8

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 7

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 6

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 5

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 4

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 3

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 2

Amor, Pasión o Deseo. Capítulo 1

Gay, casos de la vida real.

Antes de Rockear al Destino. Capítulo 3

Antes de Rockear al Destino. Capítulo 2

Antes de Rockear al Destino. Capítulo 1

Gay, casos de la vida real.

El chico de mis sueños. Final Alternativo Dos.

El chico de mis sueños. Capítulo 8

El chico de mis sueños. Capítulo 7

El chico de mis sueños. Capítulo 6

Breve Mensaje a mis Lectores.

El chico de mis sueños. Capítulo 5

El chico de mis sueños. Capítulo 4

Heridas de Amor.

El chico de mis sueños. Capítulo 3

Gay, casos de la vida real.

El chico de mis sueños. Capítulo 2

Sacrilegio Capítulo 7

El chico de mis sueños. Capítulo 1

Show en Cam Four... (Parte 3, final)

Show en Cam Four... (Parte 2)

Show en Cam Four... (Parte 1)

Sueños de una Noche

Nuestro Secreto

Es Cuestión del Destino. Capítulo 19

Es Cuestión del Destino. Capítulo 18

Es Cuestión del Destino. Capítulo 17

Es Cuestión del Destino. Capítulo 16

Es Cuestión del Destino. Capítulo 15

Es Cuestión del Destino. Capítulo 14

Es Cuestión del Destino. Capítulo Especial Pt. 2

Es Cuestión del Destino. Capítulo 13

Sacrilegio Capítulo 6

Es Cuestión del Destino. Capítulo 12

Es Cuestión del Destino. Capítulo 11

Es Cuestión del Destino. Capítulo 10

Es Cuestión del Destino. Capítulo 9

Es Cuestión del Destino. Capítulo 8

Es Cuestión del Destino. Capítulo 7

Es Cuestión del Destino. Capítulo 6

Es Cuestión del Destino. Capítulo 5

Es Cuestión del Destino. Capítulo 4

Es Cuestión del Destino. Capítulo 3

Es Cuestión del Destino. Capítulo 2

Es Cuestión del Destino. Capítulo 1

Sacrilegio Capítulo 5

Sacrilegio Capítulo 4

Licua-Mix de Relatos 2013

Licua-Mix de Relatos 2013

Sacrilegio Capítulo 3

Sacrilegio Capítulo 2

Sacrilegio Capítulo 1

Luna de Miel Capítulo 15 Gran Final

Luna de Miel Capítulo 14

Luna de Miel Capítulo 13

Luna de Miel Capítulo 12

Luna de Miel Capítulo 11

Luna de Miel Capítulo 10

Luna de Miel Capítulo 9

Luna de Miel Capítulo 8

Luna de Miel Capítulo 7

Luna de Miel Capítulo 6

Luna de Miel Capítulo 5

Luna de Miel Capítulo 4

Luna de Miel Capítulo 3

Luna de Miel Capítulo 2

Luna de Miel

En los ojos del amor Capítulo 37 Gran Final

En los ojos del amor Capítulo 36

En los ojos del amor Capítulo 35

En los ojos del amor Capítulo 34

En los ojos del amor Capítulo 33

En los ojos del amor Capítulo 32

En los ojos del amor Capítulo 31

En los ojos del amor Capítulo 30

En los ojos del amor Capítulo 29

En los ojos del amor Capítulo 28

En los ojos del amor Capítulo 27

En los ojos del amor Capítulo 26

En los ojos del amor Capítulo 25

En los ojos del amor Capítulo 24

En los ojos del amor Capítulo 23

En los ojos del amor Capítulo 22

En los ojos del amor Capítulo 21

En los ojos del amor Capítulo 20

En los ojos del amor Capítulo 18

En los ojos del amor Capítulo 19

En los ojos del amor Capítulo 17

En los ojos del amor Capítulo 15

En los ojos del amor Capítulo 16

En los ojos del amor Capítulo 14

En los ojos del amor Capítulo 13

En los ojos del amor Capítulo 12

En los ojos del amor Capítulo 10

En los ojos del amor Capítulo 11

En los ojos del amor Capítulo 8

En los ojos del amor Capítulo 9

En los ojos del amor Capítulo 7

En los ojos del amor Capítulo 6

En los ojos del amor Capítulo 5

En los ojos del amor Capítulo 4

En los ojos del amor Capítulo 3

En los ojos del amor Capítulo 2

En los ojos del amor Capítulo 1

Rockeando al Destino Capítulo 23 Gran Final

Rockeando al Destino Capítulo 22

Rockeando al Destino Capítulo 21

Rockeando al Destino Capítulo 20

Rockeando al Destino Capítulo 19

Rockeando al Destino Capítulo 18

Rockeando al Destino Capítulo 17

Rockeando al Destino Capítulo 16

Rockeando al Destino Capítulo 15

Rockeando al Destino Capítulo 14

Rockeando al Destino Capítulo 13

Rockeando al Destino Capítulo 12

Rockeando al Destino Capítulo 11

Rockeando al Destino Capítulo 10

Rockeando al Destino Capítulo 9

Rockeando al Destino Capítulo 8

Rockeando al Destino Capítulo 7

Rockeando al Destino Capítulo 6

Rockeando al Destino Capítulo 5

Rockeando al Destino Capítulo 4

Rockeando al destino Capitulo 1

Rockeando el Destino Capítulo 3

Rockeando al Destino Capitulo 2