FINAL DE “COMPRAS” - ALLANAMIENTO.

                                                  Cuando llegamos al hotel ya habían llegado las cajas de la confitería y el conserje me ofreció dejarlas en frío hasta cuando nos retiráramos, me pareció buena idea…  Detrás nuestro arribó una camioneta con todos los paquetes de la tienda y las chicas hicieron dos viajes a la habitación para llevarlas todas, con los brazos saturados de bolsas y con un botones del hotel cargando un carro de equipaje…  Adentro de la habitación…  no, no se puede contar lo que fue, el lío que se armó por querer ver toda la ropa que habían comprado, ya la habían visto en la tienda pero, a ellas no les importaba, mostraban, se probaban y querían ver lo que las otras tenían, ¡cosas de mujeres! pero, en definitiva, un despelote indetallable, la cuestión que yo ligué “algo” en el reparto, dos pantalones, cinturones, zapatos de sport y de vestir, dos camisas, dos remeras, ropa interior y una hermosa y elegante campera porque, según dijeron, “en la costa, por las noches refresca”…  Me tuve que poner serio…

• Chicas, así no se puede, nos come el tiempo, muéstrense todo eso en la Estancia…  Ahorren espacio, pongan todo junto en pocas bolsas, saquen ahora lo que van a vestir y lo que van a usar para viajar, tenemos que ir a cenar…

                                                  Como a las 20.00 llamó Gonzalo para avisarme que ya había llegado y quería saber si estábamos en viaje, recordando que Gonzalo entendía de mecánica, puse el altavoz y llamé a las chicas…

• Hola hijo, viajar ni por asomo, estoy en la Concesionaria, se me complicó todo, estábamos por salir y se prendió fuego la bobina de la camioneta, entró en corto circuito, se quemaron un par de cables y se descajetó la computadora, acá se armó un quilombo bárbaro porque no pudieron terminar de arreglarla ya que no tienen una bobina nueva de este modelo, la mandaron a pedir pero no creo tenerla terminada hasta las 10 u 11 de la mañana…
• “¡Qué cagada pa!, son las fallas de los 0 Km que aparecen cuando están en la calle, vas a tener que aguantártelas, yo sólo te llamaba porque Fernando y las chicas querían saber cómo les había ido”…
• Nos fue bien pero hay una barbaridad de paquetes para llevar, dame con Fernando”…  Hola Fernando me vas a querer matar, ya le expliqué a Gonzalo el problema, las chicas están en el hotel esperando con todos los paquetes y yo estoy con todo este lío en la Concesionaria…  Si tenés algún problema la mando en un coche de alquiler pero son muchos kilómetros para andar con un desconocido…  llamala a Ana María a su teléfono y decidí con ella que querés que haga, a esta altura, gastar unos miles más o menos no me preocupa…
• “Por favor Guillermo, quédese tranquilo y vuelvan mañana con tranquilidad, yo la llamo a Ana para que se quede tranquila y no se haga ningún problema…  Nos vemos mañana”…
• Listo, así yo también me quedo más tranquilo, hasta mañana…

                                                  A los cinco minutos la llamó Fernando y le pidió a Ana que se quedara tranquila y no me causara ningún inconveniente, ella le aseguró que así sería y solucionamos al toque el problema de la noche para gozar un rato de vida…  Me inmediato se fueron a bañar y yo hice lo mismo, cuando terminé de cambiarme aún tuve que esperar un rato largo a que salieran…  vestidas y arregladas como tres modelo de elite, daba gusto, ya no sólo mirarlas sino admirarlas y por ellas también pasaba la cosa porque se hicieron dueñas complacidas de todos los espejos que las reflejaran…  Yo había pedido reservaciones por medio del hotel en el mejor restaurant de la zona, también con vista al mar, cenamos muy bien agregando sorpresas por la vista nocturna de la ciudad y por las estelas blancas que las olas dejaban en la orilla de la playa como si desde una oscuridad infinita las impulsaran…

                                                  Ya el horario no daba para asistir a ningún espectáculo y decidimos ir un rato al Casino (yo lo sabía y esa era mi intención desde un principio)…  La entrada fue apoteótica y si bien es cierto que la “competencia” entre mujeres se hacía notar, a mi entender y a los de los ojos de muchos que las observaban, el “puntaje” de “mis” chicas estaba entre los más altos…  Caminamos un rato entre las distintas mesas y el murmullo junto al sonido tan particular de las fichas y el rodar de los rodillos de las ruletas las cohibió pero, a la vez, les produjo una excitación que notaba por el modo en que Ana María y Gimena se aferraban a mis brazos…  No se animaron a jugar y después de un par de apuestas en mesas de ruleta, “la Dorada” nos abrió el camino a la Sala Vip…

                                                  En ese lugar el ambiente era distinto…  Los físicos, las presencias y los vestidos de las mujeres emparejaban hacia arriba…  Mujeres mayores de cuarenta enjoyadas y acompañadas de jovencitos que no tenían trazas de ser hijos o sobrinos…  Hombres mayores, como yo, acompañados de jovencitas que ni aparentaban tener los 20, jóvenes y jovencitas observando el ambiente y a los jugadores, un par de personajes femeninos de la farándula que ellas identificaron, un actor de renombre que las desilusionó porque en la tele lo veían “distinto”…

                                                  Una mesa de Póker llamó mi atención y fui invitado a sumarme, me tenté aunque decliné, me encantaba pero me llevaría mucho tiempo…  Me senté un rato en Black Jack a probar suerte y poder tomar una copa tranquilo y, con fichas suficientes, mandé a las chicas a distintas mesas de ruleta, les dije que apostaran a color, o a docena, el uno por uno era más fácil…

                                                  Yo perdí y gané, Gimena salió “a mano”, Caro perdió parte de sus fichas y me contó asombrada que había tenido un inconveniente con un “pesado”, se la quería llevar a su hotel para “pasarla bien” y cuando quiso “manosearla” un tipo grandote como de dos metros lo levantó del cuello y se lo llevó en puntitas de pié sin alborotar y que cuando miró de nuevo ya no los vio más a ninguno de los dos…  Pensé en “cualquiera de tu entorno estará protegido” y me sonreí para mí mismo…

                                                  Nos faltaba Ana María y nos fuimos a buscarla, estaba riendo en una de las mesas con dos hombres y dos mujeres que no parecían pareja y seguían sus apuestas…  La pila de ficha a su lado indicaba claramente que una buena racha la acompañaba, la copa de champan casi vacía a su lado y lo divertido de sus ojos indicaban también que no estaba acostumbrado a tomar…  No bien llegué a su lado, me miró, les dijo a sus “seguidores” que había llegado su “ángel guardián”, me besó y dejó de jugar guardando sus fichas…  Levantarse y tratar de caminar a la par mía fue más difícil, lo logró haciendo esfuerzos ante las risas de Gimena y Carolina…

                                                  Cobraron sus dineros y nos fuimos contentos y alegres para el hotel, ya adentro de la habitación se desnudaron las tres y se arrojaron sobre mí para sacarme la ropa a tirones, la más enfervorizada era precisamente Ana María, había experimentado muchas cosas juntas que desconocía y pretendía agradecerme…

• “Guille me has regalado la mejor noche de mi vida, nunca pensé vivir todo esto, hasta me agarré un “pedalín” con champan que nunca en mi vida pero quiero pedirte otro favor…  Mi culo y yo necesitamos que nos “visites”, sin piedad, con fuerza, quiero que lo rompas y me hagas sentir la alegría de saberme tuya”…
• Encantado mi Cielo pero una tendrá que “activarte” a vos y otra a mi…

                                                  No terminé de decirlo que ya Carolina se había hecho “dueña” de mi miembro engulléndolo hasta el fondo de su garganta, Gimena pegaba su boca a la vagina de Ana y con dos dedos ensalivados dilataba su culo…  La boca de Caro, como ya me lo había demostrado, me enloquecía de placer y me encontré conteniéndome para no terminar dentro de su garganta.  Gimena arrodillada y con su cabeza metida entre las piernas de Ana dejaba su culo a merced de los dedos y de los “chirlos” de Caro que no perdió tiempo en utilizarlos haciéndola gemir y gritar, cuando ya todo se ponía más interesante, Ana se incorporó y se giró poniéndose en cuatro patas en el medio de la cama…

• “Ya está, no más, mi culo requiere la atención de nuestro “hombre”, dale Guille, metelo hasta el fondo y no pares, vos chiquita, ponete adelante que te quiero devorar la concha y vos Caro, hacé lo que quieras, te amamos”…

                                                  El maravilloso culo de Ana quedó a mi merced y mientras “punteaba” con el glande su agujerito, el gemido casi grito de Gimena me indicó que Ana devoraba con ganas su vagina, de golpe ya no pudo gritar más, Caro se sentó sobre su boca y comenzó a apretarle los pezones, alternando caricias y pellizcos que enloquecieron a la “Estanciera vecina”…  Así las cosas y ya muy caliente por lo que veía, me apoyé y empujé con fuerza hasta chocar mis huevos en la vagina de mi ardiente “Encargada”…  El grito fue visceral, salió desde muy adentro y nos estremeció pero Gime reaccionó rápido y empujó nuevamente la cabeza de Ana hacia su vagina empapada…

                                                  Yo no pude ni quise detenerme, mi miembro entraba y salía del culo de Ana que pronto se acompasó a mis movimientos, me pedía más y más aunque sólo faltaban ingresar mis testículos, no obstante, me arrojé hacia adelante y comencé a apretar sus tetas jugando con mis dedos índice y pulgar en sus pezones, los orgasmos de las chicas se sucedían hasta que llegó uno final que pareció extenderse como si fuera una mecha encendida…  Empujando lo más adentro que pude, terminé en el fondo del culo de Ana, ésta se manifestó con una convulsión y para no gritar tuvo su orgasmo mordiendo la vagina de Gimena que gritó el suyo con una mezcla de placer y dolor ahogándolo con la vagina y el clítoris de Carolina, la cual lo exteriorizó por completo sin poder contenerse… 

                                                  Nunca más pude repetir un “orgasmo encadenado” de estas características y con las chicas creo que pasó igual…  Quedamos tirados en la cama como manojos de trapos, al rato de recuperarnos besé a Gimena y a Ana María y las mandé a dormir a su habitación…  Carolina y yo nos abrazamos y nos dormimos casi sin darnos cuenta mientras nos besábamos y nos acariciábamos…

                                                  Desperté primero y pedí el desayuno para cuatro a la habitación, me bañé y cuando volvía a la habitación ya se estaba levantando Carolina, beso, “chirlo” amistoso en las nalgas y salió a los saltitos a bañarse, enseguida aparecieron Gimena y Ana María, ya bañadas, arregladas y muy sonrientes, cuando llegó el desayuno, al margen de sorprendernos por la variedad de alimentos y frutas que había para cada uno, no tardamos en devorarlo hablando sobre la noche de Casino y la variedad de especímenes que habíamos visto rondando por allí adentro…

                                                  Carolina comentó que le pareció haber visto a un conocido futbolista que tenía el cuello y los antebrazos todos tatuados, esa alusión a los tatuajes me hizo recordar la conversación mantenida con el Comisario…  Hice hincapié en esto de los tatuajes…

• A mí no me gustan para nada, me parece una vejación al propio cuerpo y, por más que digan las mujeres, me parece que se mal identifican con estos, de hecho ahora las gran mayoría de las chicas que hacen pornografías están tatuadas, parece sonar a “estoy tatuada, soy puta y me dedico al porno” aunque yo no “apunto” a nadie, ni siquiera a las putas, es un tema exclusivo de ellas, también es cierto que un pequeño tatuaje y sutil, no suele quedar mal pero no son de mi agrado, no terminan de convencerme…  Soy más conservador prefiero el color de la piel en la mujer…  ¿A ustedes les gustaría que sus parejas tengan tatuajes?...
• “Yo no podría ni pensarlo, Fernando no creo que la vaya con eso”.  -dijo Ana María-…
• “Yo ni siquiera lo he conversado nunca”… -dijo Carolina-…
• “Yo tengo una mala experiencia con eso, una vez mi marido se hizo tatuar un trébol a un costado del pecho y pretendía que yo me hiciera un tatuaje similar y uno en cada nalga, aparte de querer ponerme piercing en los pezones, me negué y me costó una paliza que me dejó dos días de cama”…

                                                  Con ese comentario acababa de dilucidar la duda del Comisario y una duda chiquita mía porque no le había visto el cuerpo.  Para cortar la conversación les pregunté si no habían comprado trajes de baño y me confirmaron que lo habían hecho, ante esto les pregunté si no querían bajar un rato a la playa, que estaríamos más o menos una hora y después emprendíamos el regreso… 

                                                  Todas contestaron enfáticamente que si y nos fuimos un rato a la playa privada del hotel…  Si para quien no conoce el mar la vista es maravillosa, pisar la playa, acercarse a las olas que llegan y escuchar su “rugido” no lo es menos, así como no mojarse los pies es casi un sacrilegio para quienes conocen las playas…  Más contenta que chico con juguete nuevo, Ana María se metía en el agua hasta una profundidad que apenas pasaba por sobre sus tobillos y reía feliz contagiándonos su felicidad…

• “Chicas, chicas, agárrenme, me quiere llevar para adentro, parece que me quiere tragar”…

                                                  Gritaba sin complejos provocando nuestras risas y la de los otros bañistas…  Yo me quedé sentado en la arena alejado de ellas y aproveché para llamar al Comisario…

• Buen día Comisario, ¿cómo está?...
• “Buen día, bien muy bien señor… -se notaba que estaba con otra gente alrededor y no quería decir el nombre de quien llamaba-, me viene bien su llamada, quería decirle que ya se están haciendo los estudios pertinentes”…
• Me parece fantástico y le agradezco, en realidad lo llamaba para confirmarle que su presunción era correcta, el dato es afirmativo, me lo acaba de decir la persona en cuestión, tal cual usted me lo narró…
• “Aguarde un segundo, no corte por favor”…

                                                  Se me hizo que entró en alguna habitación para hablar en privado…

• “Hola, si, ya estoy, le cuento que ya informé a su amigo e incluso me dijo que con usted puedo hablar con absoluta confianza porque tiene mucha experiencia…  Estamos tratando de prever varias alternativas pero yo me inclino más por un “ajuste de cuentas” por haber abierto la boca y a la vez un “mensaje explícito” para los que quieran hablar de más, por eso debe haber sido la tortura con fustazos, la lengua, los dedos y la cara debe haber sido para dificultar todo, al igual que el lugar, ya que fue encontrado por casualidad…   Lo raro es que no perdió sangre por los cortes, apenas por la cara golpeada”…
• Según tengo entendido, hay herramientas para eso pero, en realidad, no conozco, ni tampoco sé mucho, lo que sí me parece es que tiene que haber sido alguien cercano, ¿cómo se fue de la casa, cómo desapareció sin que nadie lo viera?…  Estoy medio oxidado pero todo parece apuntar a un solo tipo que está relacionado con todos…
• “Yo creo lo mismo y ya he pedido una Orden de Allanamiento para todas las instalaciones y “su amigo” nos va a mandar apoyo con perros para llevarla a cabo porque averigüé del otro “desaparecido” y eso se “encajonó” y se dejó “morir” sin resolver”…
• La fuente jamás se dice pero, averigüe si hay algún árbol grande en los límites norte de la Estancia, ésta señora no me pudo dar datos porque no conoce casi nada de las inmediaciones, el marido no la dejaba salir de la casa ni hablar con los empleados, sólo lo hacía con un par de amigas para ir a una ONG que las nucleaba en el pueblo…  Me parece Comisario que en esta usted se va a anotar un “poroto grande”  Lo único que le pido es aguantar hasta el lunes para la notificación “oficial” del tema”…  Bueno, lo dejo tranquilo, yo ahora estoy saliendo desde Mar del Plata hacia la Estancia y si quiere hablar tranquilo de esto véngase esta noche a eso de las 20.00 a cenar con su esposa así charla con las otras mujeres por la ropa que van a usar y para que ya tenga a alguien conocido y no se sienta tan perdida…
• “Me parece muy bien, le avisaré y quédese tranquilo, ya está todo pensado para eso”…

                                                  Después que terminé de hablar con este hombre, las llamé a las chicas para emprender el regreso…  Había sido una tarde-noche de un día agitadísimo pero me encontraba vigorizado y con muchas más energías…  Liquidé las deudas con el hotel y nos ayudaron a bajar todas las bolsas y cajas a la camioneta estacionada en la cochera…  Todo fue acomodado en el espacio trasero del vehículo y hasta hubo que utilizar parte de los asientos y el piso del interior trasero, lo que obligó a las chicas a viajar muy juntitas, aunque se portaron muy bien y aprovecharon para dormir…

                                                  Hice el viaje de un tirón y Carolina me dio conversación sólo en los primeros 100 kilómetros, luego se quedó profundamente dormida y yo las dejé dormir a todas…  Cuando faltaban unos mil metros para estar ya en la Estancia, las desperté y les avisé…

• Chicas, la camioneta se rompió, ustedes no saben qué fue…  Durmieron las tres juntas en una habitación y yo lo hice en otra un piso más abajo…  Aproveché para llevarlas a conocer el Casino porque yo quería ir, se divirtieron, vieron a algunos conocidos de la tele y nos fuimos a dormir temprano…  En la mañana fueron un rato a la playa del hotel mientras yo iba a retirar la camioneta de la Concesionaria, luego salimos para acá…  Si alguno pregunta, todas dicen lo mismo, ¿conformes?…
• “Muy conformes”… -dijeron todas-…
• “¡Qué pena!... -dijo Ana María-, no vamos a poder contar de todos los espectaculares orgasmos que tuvimos en la camioneta, en el baño, en la cama, ni como me quedó el culito, ni siquiera para darles envidia”…

                                                  La risa de todos recién aminoró cuando a eso de las 14.00 estacioné la camioneta frente a la casa…  Salieron todos a recibirnos y abracé a Gonzalo, Fernando abrazó y besó a su mujer diciéndole que la había extrañado, era la primera vez que estaban separados toda una noche…

• “Yo también Fer, ¿me podrías dejar un ratito más con todas las chicas porque vamos a ver la ropa que compramos?”...

                                                  El pedido delante de todos no le dejó alternativa pero no se lo notaba disgustado por nada…  Gonzalo me tomó del hombro y me llevó aparte para hablar…

• “Viejo, te voy a perdonar que no me compraras nada pero, no me quieras “vender el paquete” respecto que a esa camioneta japonesa se le funde, ¿qué bobina? y me tenés que contar que pasa el domingo, hay unos preparativos enormes y nadie me dice quien viene”…
• Te voy a contar sólo lo del domingo, con eso es suficiente información, lo otro es un secreto de un “cuarteto”…
• “Grande pa, ¿qué mierda te da esa Doctora?, se te ve muy bien, parece que las “atendés” a todas, Carolina ha hecho milagros y no quiero ni pensar nada más”… Entramos en la casa riendo y me fui al living con él mientras las chicas bajaban todos sus bártulos, alfajores incluidos, cuando vi las cajas me acordé y les dije…
• Chicas los alfajores y los conitos es una caja para cada una de ustedes, no se los coman todos juntos que son adictivos, Sol, le llevás también un par de cada una a tu madre y tus hermanas y que no se enoje tu viejo, las que sobran las ponen en la heladera…

                                                  Luego me dediqué a Gonzalo que esperaba impaciente por darme sus novedades y para enterarse de la reunión del domingo…

• Dale Gonza contame primero que pasó con lo tuyo…
• “Traje unas cosas que tenía, vendí uno de los coches, el otro se lo regalé a un amigo que siempre anda “a pata”, traje un sólo cuatriciclo, el otro lo vendí porque estaba jodido del motor, pagué el alquiler y dejé la casita sin problemas…  Con el que se puso medio jodido fue con el dueño del negocio, no quería saber nada de que me fuera pero le dejé el listado de clientes y quedó contento, igual se va a “cagar de hambre” porque no sabe atenderlos, ya es problema de él y después me vine, la camioneta se portó de diez y nada, ya está, vida nueva, ahora contame del domingo”…
• Está bien pero de esto ni “J” a nadie…  El miércoles estuvo almorzando un amigo que no veía hace años, es el Ministro de Seguridad de la Provincia y me dijo que tenían que hacer una reunión “secretísima” con las máximas autoridades del Partido para hablar sobre las próximas elecciones y me pidió prestado el lugar…  No le pude decir que no, además no quise y el domingo habrá aquí como 100 personas entre Dirigentes y esposas, más nosotros…
• “De acuerdo papá pero, la autoridad máxima del Partido de él es el Presidente, ¿acaso también va a venir?...
• El Presidente, el Vice, la Gobernadora los Ministros de los dos Gabinetes y algunos Senadores y Diputados todos con sus esposas o parejas sin chicos, no va a haber ninguna Prensa y yo no figuro, sólo Guillermo para todos, es almuerzo, merienda y cena de algunos y vos me vas a tener que ayudar porque hay que repartir las viandas a los efectivos del Grupo Especial de Policía que van a custodiar la puerta y los límites del campo…
• “No hay drama papá, ¡pavada de amistades!  Estos te los tenías guardados”…
• Si, “amistades” esta vez invitó yo porque quise pero no me agarran más…  No sabés el quilombo que fue organizar esto…

                                                  Desde el comedor nos llegaban los grititos y risas de las mujeres y yo me caía de sueño y me fui a dormir a la sombra en mi lugar preferido diciéndole a Gonzalo que avisara a las mujeres que me dejaran dormir…  Me despertó el conductor de la combi tocando bocina para avisar de su llegada a recoger a los pasajeros, luego de eso, me giré y me volví a dormir…  Un rato después me levanté y me acordé del Comisario y la cena, le avisé a Ana María para que hicieran algo rico y pusiera dos platos más a la mesa…  El baño me resultó reparador y a las 20.00 llegó la pareja esperada…

                                                  Él de elegante sport con saco y ella de jeans elastizado oscuro y blusa de color ocre con escote que dejaba entrever unos suculentos pechos y tacos altos, era morocha, muy simpática, de labios gruesos, dentadura muy blanca, ojos negros de grandes pestañas naturales y muy vivaces, la nariz perfecta parecía “de cirugía” y tenía pómulos altos, el cabello perfectamente recortado y con flequillo le llegaba hasta el final del cuello…  Mientras la miraba se me ocurrió que esa forma de mirar, sugestiva y con vivacidad manifiesta, la había notado en muchas mujeres cuando mi vida transcurría de noche alternando en cabarets y bares…  Rogelio y Rocío, así los presenté y como faltaba aún un rato para cenar, lo invité a Rogelio a charlar en el living y les pedí a las mujeres de la casa que se presentaran ellas…

                                                  Rogelio me decía que en la casa se respiraba un aire de tranquilidad y de confianza que era difícil encontrar en otros lados…

• Eso es fácil de lograr en mi posición Rogelio, siempre fui un tipo “del montón” y unos Pesos más o menos no me han cambiado, con ellos apelo a su adultez, a su sentido común y a su bolsillo…
• “Parece simple, ¿cómo hace eso?”…
• Adultez, porque les explicó lo que quiero y como lo quiero, un adulto lo entiende enseguida…  Sentido común porque les hago saber que no acepto a ninguna “manzana podrida”, el que no hace las cosas bien se va, ya que no doy segundas oportunidades y…   Bolsillo porque como les pago muy bien saben que deben rendir para mantener ingresos que no conseguirán en ningún otro lado…  Les otorgo confianza pero no tolero deslealtades, yo puedo tomar a otro empleado y ellos tienen más que perder, por eso digo que en mi posición es fácil de lograr…  Explotar a otro te rinde a mediano plazo, ser el “patrón malo” genera odios y malas energías, darles posibilidades al que tenés al lado te deja ganancias toda la vida…
• “Si todos hicieran lo mismo…”…
• ¿Qué dijo el Ministro?…
• “Me manda diez hombres del Grupo especial y dos perros, vienen con el Fiscal que interviene en el caso principal que trae la “Orden de Allanamiento” y mañana a las 08.30 hacemos el procedimiento, ellos están de acuerdo en fijar todo en el Capataz que era o es quien le hace los “trabajos sucios” al Intendente y a otros y su mujer”…
• ¿Está casado el hombre?…
• “Está “juntado” y ambos tienen nutridos antecedentes de robo a mano armada, violencia, desacato y otras “yerbas””…
• ¿Quiere que la pongamos al tanto a la señora Gimena, así usted le hace un par de preguntas sobre el individuo y dilucida de paso si ella oculta o sabe algo?…

                                                  El Comisario se quedó pensando, seguramente tratando de no meter “la pata” con lo que pudiera decir…

• “En realidad, ella tendría que estar allí o enterada porque la propiedad figura enteramente a su nombre pero no sé cómo encararlo para no joder lo que hablamos”…
• Se le podría decir que por una Causa Judicial vieja relacionada con el Capataz se va a proceder con un allanamiento a toda la Estancia y que ella debe estar enterada porque es la dueña de toda la propiedad pero como todavía no puede apersonarse en la casa ya que no ha salido la orden judicial por el caso de la paliza del marido, oficialmente no es necesario que se entere…  De paso le puede preguntar sobre si conocía las actividades que hacía ese tipo para el marido o si conocía algo más como, por ejemplo los límites del campo o con quienes se reunía, evitando en todo momento hablar del marido y lo que ya conocemos…
• “¡Qué buena idea me está dando!...  Había olvidado completamente que ella está impedida de ir a la casa por su propia seguridad…  Llámela si gusta y conversamos un rato”…

                                                  No pudo ser, ya nos llamaban a cenar y lo dejamos para después…  La cena fue de lo más amena, las mujeres parecían conocerse de toda la vida y habían hablado de todo lo vivido el jueves y parte del viernes, explayándose, por supuesto, en todos los “trapos” que habían comprado, como las atendieron en las tiendas, como era el hotel y como las habían tratado y Rocío me miraba interesada…

• “Guillermo usted parecía un jeque árabe con todo su harem y gastando fortuna, porque, por lo que las chicas me dicen ha gastado una montaña de dinero”…
• Y sí, algo se gastó y lástima que no pudieron venir todas aunque con la cara de felicidad que tenían acá sacando las bolsas revolviendo las compras me doy por bien pagado…  Lo que sucede es que el dinero está para gastarlo, porque no te permiten meterlo en el último cajón, además, ellas no lo saben pero el que se siente mejor soy yo, me encanta regalar a mis afectos…
• “Más de uno lo habrá mirado con envidia porque son muy bellas mujeres”…
• Es verdad, noté esas miradas en el Casino, en hombres que estaban acompañados de bellas señoritas que no parecían hijas o sobrinas, más bien “alquiladas” por eso les di unas fichas a las chicas para que jugaran solas y me abrí de ellas para que nos las confundieran porque les tengo mucho respeto, no sé si alguna habrá ganado algo pero como me sentía incómodo con tanto “gato” marca “Escort” suelto les dije de irnos a dormir temprano…  Ya no soy tan divertido saliendo de noche, prefiero dormir despatarrado como lo hice en una cama tan grande y solo porque ya no estoy para “trotes” raros…
• “Yo gané un montón y ya se lo di a mi marido”… -expresó Ana María-…
• “Yo perdí la mitad de las fichas y como no me gusta mucho jugar abandoné”… -dijo Carolina-…
• “Yo gané sólo una ficha que me guardé de recuerdo”… -aportó Gimena-…
• “Ya me he dado cuenta que el domingo la pasaré genial con ellas en la fiesta de sus amigos”…
• Esa era la idea Rocío, que no te encuentres perdida con tanto desconocido y si querés trae el traje de baño…

                                                  Después cambié el tema de conversación porque parecía querer seguir insistiendo en las ventajas de tener dinero y comodidades y no, no le “saqué la ficha”, la mostró ella sola, reverendo “cornudo” debería ser el tal Rogelio pero no me correspondía opinar al respecto, luego del café, ella fueron todas al comedor, Fernando se retiró y Rogelio, Gimena y yo nos fuimos al living para ponerla al tanto de algunas cosas…

• Gimena, el Comisario quería hablar con vos para ponerte al tanto de algunas cosas que van a pasar mañana pero, no te asustes que no es nada personal…  Ella nos miraba con cara de intriga e incertidumbre…
• “Verá señora, el tema es así, el día de mañana se va a realizar un allanamiento en su Estancia y quería que lo supiera extraoficialmente”…
• “En la de mi marido querrá decir, siempre fui un “trapo sucio” para él y ahora me va a dejar sin nada pero, igual voy a salir adelante y para eso Guillermo y las chicas me han ayudado mucho”…
• “Señora, me parece que usted está ignorante de muchas cosas, esa propiedad es enteramente suya, su marido no tiene poder sobre esos bienes, ¿no sabía usted esto?...  ¿Nunca firmó ningún papel por esto?...
• “Miré señor, vamos a hablar a “calzón quitado”, lo que recuerdo de los únicos papeles que yo he firmado son los dos puñetazos que mi marido me pegó en la cabeza ordenándome que firmara y eso lo sabe el Capataz y el Escribano “fulano de tal” que trajo para certificar que yo firmara…  ¿Cómo me dice usted que la propiedad es mía?...
• “Es que es así, quizás para evitar algún juicio por Evasión Fiscal o algo por el estilo, lo puso todo a su nombre como si hubiera sido suya desde antes de casarse y le salió el “tiro por la culata”…  Le digo esto sólo a título informativo, nunca le dije nada oficialmente y el problema de mañana no es en sí con su marido sino con su Capataz y la mujer, pues hay una denuncia que lo involucra con la presunta desaparición de” fulano de tal” y para saber si hay más gente involucrada”…

                                                  Aquí el Comisario se “trabó” un poco para no decir algo inconveniente pero Gimena no se dio cuenta y siguió contando…

• “Ese nombre lo conozco, es de un señor alto y pelado, muy agradable que trabajaba en la Municipalidad y que un día se me  acercó en el Restaurant del Club diciéndome que quería hablar conmigo para contarme algunas cosas que pasaban…  Yo lo conocía de haberlo visto un par de veces conversando con mi marido, el Intendente y otros amigos…  Mi marido lo vio que se me acercó y como es muy celoso me preguntó que quería, le conté que me había dicho de hablar conmigo y eso me costó una buena paliza en mi casa para averiguar lo que me había dicho, al tiempo me dijo que se había ido a vivir a la ciudad de Azul o por ahí cerca y no lo volví a ver”…
• “El caso señora es que parece haber surgido algo que lo “apunta” al Capataz de la Estancia, a usted se la iba a citar como dueña para que estuviera presente pero hay una Causa abierta por el Abuso que sufrió y, por seguridad, está inhibida de presentarse en su casa, es por eso que se lo aviso “extraoficialmente””…
• “Le entiendo Comisario y tal que usted dice que la propiedad es mía, yo le firmo lo que sea necesario autorizando a revisar lo que quieran”…
• “No es necesario señora, igual le agradezco…  Lo otro que le quería preguntar es si usted conoce donde están los límites de su Estancia”…
• “Mire Comisario, con lo que usted me dice me dan ganas de llorar, mi marido no me dejaba salir casi de la casa era casa-camioneta-pueblo-algunas compras-pocas amigas-camioneta-casa, un poco de la pileta y la parrilla que conocí cuando hacían asados para sus amigos, ni los corrales y ni los galpones conozco…  Le aseguro que, viendo la otra moneda, mi vida no ha sido nada fácil, acá veo que cualquiera de las chicas puede salir a pasear a caballo y nunca pude montar uno porque no me dejaban”…  Las lágrimas caían solas por las mejillas de Gimena…
• “Mejor lo dejamos aquí porque no le quiero causar daños haciéndole recordar cosas…  Gracias por su tiempo señora”…

                                                  Se saludaron y Gimena se fue a hablar con las chicas cargada de un montón de dudas…  El Comisario me miraba y se lo notaba bastante apesadumbrado por lo que Gimena le había contado…

• “Usted tenía razón Guillermo, veremos que dice el Fiscal pero esa mujer fue siempre utilizada como una “cosa” y estoy seguro que no sabe nada sobre el “mafioso” que tenía al lado, quizás de “poca monta” pero “mafioso” al fin y ahora sabiendo lo que sabemos, “uno menos es uno menos”, ¿no?”…
• Sin dudas Rogelio, sin dudas…  Quería que usted escuchara lo de ella de propia boca, esperemos que no la quieran dejar “pegada” con nada y si así fuera tengo un Estudio de Abogados de la Capital para “destrozar” a cualquier idiota con ganas de figurar…
• “No creo que sea necesario, el Fiscal es muy “vivo” para entender de estas cosas…  Bueno, los dejo descansar y veremos que resulta mañana, gracias por la cena Guillermo, ha sido todo muy agradable”…

                                                  Llamó a la mujer para retirarse y los despedimos en la puerta con las chicas…  Cuando entrábamos a la casa Carolina se colgó de mi brazo y me dijo:…

• “Guille amor, vos me tenés que sacar un par de dudas”…
• “Papá, tremendo “gato” ¿no?”…  -Gonzalo se despachó sin más vueltas-…
• Y tremendo “cornudo”, ¿no?...  Jajaja…  Nos reímos fuerte y Caro nos dijo sonriendo que parecíamos padre e hijo los dos…
• “¿Qué hacemos con esa mujer?”…
• Nada, trátenla bien y que “emboque” a quien quiera en la fiesta, el “cornudo” será el marido, ustedes saben cómo comportarse…

                                                  El “temita” fue adentro con Gimena estaba con unas dudas importantes y me pidió hablar un rato, que no había problemas en que estuvieran las chicas…

• Dale, vamos todos al living y preguntá lo que quieras”…  Mirá Gime, yo te cuento todo pero tenés que prometer que no vas a decir ni una palabra a nadie, ni amigas, ni conocidas y vas a estar muy calmada porque creo que de ésta vas a salir ganando mucho…
• “Prometido y los únicos amigos que tengo son ustedes así que contame todo”…
• Con el tema de las vacunas saltó un entramado tremendo de corrupción en la Municipalidad, se quedaban con los subsidios y tu marido estaba involucrado, “presuntamente” hicieron “desaparecer” al tipo que vos nombraste porque los quería denunciar…  El “trabajo” le habría sido encargado al Capataz que era el que se realizaba todos esas “encargos” y eso es lo que están tratando de dilucidar con el procedimiento de mañana…
• “Pero yo no sé nada de todo lo que hacía mi marido o este tipo”…
• De eso no hay dudas pero hay que investigar todo…  El Comisario te informó de todo por mí porque no te iban a avisar nada, normalmente no se hace…  Igual te podés considerar contenta, te enteraste que sos única dueña de toda la propiedad, aunque vas a tener que trabajar duro para hacer funcionar todo eso…
• “Me asusta bastante porque no sé nada de los temas de una Estancia”…
• De a poco, ya vamos a encontrar a alguien si se dan las circunstancias y te tenés que poner al frente…
• “¿Y mi marido dónde está?”…
• No se sabe Gimena pero voy a ser “crudo” con vos, en estos casos o está fugado o se metió donde no debía y está “desaparecido”, esperemos que sólo esté fugado…
• “¿Saben algo?, no me mueve ni un pelo, fugado o “desaparecido” me da igual, no lo quiero tener más cerca de mí”…

                                                  No dejaba de ser una manera de “prepararla” para lo que sucedería el lunes aunque no sabía que había entendido ella por “desaparecido”…  Como sea, le dije que se fuera a dormir porque mañana iba a ser un día bastante “movidito”…  Se retiraron con Carolina y me quedé un rato más conversando con Gonzalo…

• Gonza, mirá que Carolina suele dormir conmigo y no quiero que te llevés una sorpresa…
• “Sorpresa sería que durmiera sola, ya nos dimos cuenta con Lucas como venía la mano, es un “minón” y re-macanuda para tratar, mientras el cuerpo aguante, yo no te voy a decir ni ay…  ¿Qué onda con las demás?...
• Lo saben, lo aceptan y comparten, está todo bien pero vos no sabés ni una…
• “Tranqui viejo, que de esto algo entiendo…  Te aviso que posiblemente en la semana vengan algunas amigas “chetas” a pasar un par de días”…
• Decile a esas “bigotudas” que serán bien recibidas…
• “Sos Gardel viejo, me voy a dormir, estoy muerto”…

                                                  Lo saludé y me quedé solo, pensando en el despelote del fin de semana, luego me levanté y fui a decirle a Caro que se viniera a dormir conmigo…

Continuará…

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Gracias.  GUILLEOS 1