CAPÍTULO 04.
“PLATA EN MANO, CULO EN TIERRA”…
La noche fue más “movida” que las anteriores, no tanto por los dolores, a los que me estaba acostumbrando, sino por la ansiedad que me consumía. Yo daba todo por hecho pero… si algo fallaba, si no me aceptaban la tarjeta de crédito, si sacaba algún premio y no me pagaban hasta el mes que viene, si surgía algún otro problema… Humano al fin, anteponía lo negativo ante las posibles oportunidades nuevas, aunque, a la vez pensaba que todo iba a salir bien porque las otras pruebas a mi favor estaban resultando acorde a lo solicitado… Era todo un lío mental, además me asaltaban temores pensando que si dudaba de la palabra que me había dado, se enojaría y me podría dejar sin nada y ¿cómo?, ¿de qué modo podría reclamar si algo fallaba?…
El “despelote” en mi mente era tremendo y para cuando logré tranquilizarme anteponiendo lo positivo a todo lo negativo que se me iba ocurriendo, estaba amaneciendo y sentía unos calambres tremendos (o lo que parecían como tales) en las piernas y el ardor en los pulmones no me permitía acomodarme en la cama… En definitiva, dormí poco y muy salteado… A las 07.15 hs no aguanté más y salté de la cama, mi mujer se levantó detrás para hacerme el desayuno, le dije que siguiera durmiendo, que yo me arreglaba… Hambre como para desayunar no tenía, sólo puse a calentar el agua para tomar unos mates… Fui al baño y hasta pasé por alto el examen físico y de pene acostumbrado…
Prendí la computadora, saqué mi tarjeta, puse al lado del teclado los números anotados y abrí la página de la Lotería de Nueva York… Todo estaba en Inglés y como entiendo poco y nada de ese idioma habilité el “San Google-Traductor”… Traduciendo toda la página, un recuadro destacaba que el cierre para las apuestas era a las 09.00 hs. y que el sorteo se efectuaría a las 12.00 hs… Tampoco había mirado la diferencia horaria y me desesperé…
Entré en la zona de apuestas, me pidieron los seis números y los anoté en casilleros al efecto para eso, los controlé y coincidían todos… Luego me pedían el número de tarjeta, mi nombre completo, la empresa de la tarjeta, el número de código, todo lo que se pide normalmente para una transacción vía Internet, más un Correo Electrónico válido para enviarme el ticket y los resultados del sorteo…
El costo era de 5 dólares, casi lo mismo que uno podía gastar en una jugada de Loto en La Argentina y con las mismas posibilidades pero mayores premios… El premio “extranjero” oscilaba en 600 millones de dólares que se repartirían, no entendí cómo, tampoco le di mucha “bola”, yo sólo quería que la compra saliera bien y en horario… Acepté las condiciones y mandé el “Enter”, los segundos que transcurrieron hasta que aceptaron todo y me avisaron que me enviaban un mensaje al Correo Electrónico, fueron “eternos”, no sé cuantos fueron pero se hicieron de “goma elástica”… Finalmente, apareció un mensaje avisando de la entrega del mensaje de Correo y a esa página personal me dirigí…
Abrí la página, luego el mensaje y allí estaba el ticket con los seis números correctamente anotados y una nota en Inglés que traducida decía algo así como: “Usted ha adquirido el ticket nro. xxxxx-xxxxxx, que se adjunta impreso, para participar del sorteo del día miércoles xx/xx/2018 a las 12.00 hs, la misma es auspiciada por la Lotería del Estado de Nueva York y tiene un premio acumulado de 612 millones de dólares… Mucha suerte… P.D. Por este mismo medio se le informará de los resultados de la misma, en no más de 15 minutos de acontecido el mismo… Los premios podrán efectivizarse a la presentación del ticket, personalmente o por Apoderado Legal o bancario… Gracias por participar”…
Guardé con sumo cuidado el mensaje en una carpeta creada en ese momento… El paso y el gasto habían sido completados con éxito, ahora sólo restaba esperar… Las piernas me temblaban y no podía estar quieto, comencé a toser y no era fingido, tampoco era con ahogos y pensé que era todo un estado nervioso… Mi mujer se levantó al escucharme y me alcanzó el inhalador, lo usé un rato y me calmé… me preparó un par de emparedados con galletitas de salvado, jamón y queso y los acompañé con el mate pensando en las tres o cuatro horas “de goma” que me esperaban…
Al rato me puse a cambiar el agua y el alimento de los pájaros, limpié sus jaulas tomándome más tiempo del necesario en cada una de las cuatro que había y mi mujer me preguntó que me pasaba…
- “Nada, ¿qué me va a pasar?, tengo que limpiar las jaulas y darle de comer a los jilgueros”… Le dije ya casi terminando…
- “Sí, eso veo pero los cambiaste hace un día y medio y normalmente lo hacés cada tres días”…
- “Tenés razón, seguramente lo que me dijeron ayer en la Fundación me tiene acelerado, no veo la hora de estar mejor”… ¿Sabés qué voy a hacer?, voy a probar de salir a caminar un rato para despejarme”…
- ¿Te acompañó?... Esperá que me visto”…
- “No, no hace falta, voy despacio y hago un par de vueltas a la manzana, llevo el teléfono y cualquier cosa te llamo pero, me siento bien”.
Así lo hice y me fui a caminar, quería ir sólo porque recordé que tenía que ir a la Inmobiliaria por el tema de la casa que me había gustado y caminaría un poco más para pasar por la Concesionaria de venta de autos que vendían las camionetas 4x4 de marca japonesa… Si se daba lo de la Lotería, había unos datos que quería recabar…
La casa en venta quedaba a unos 100 metros de mi casa, doblando la esquina y la Inmobiliaria que la tenía en venta estaba situada a unos 50 metros más por la misma vereda… Allí me atendieron muy bien y me explicaron que la casa estaba desocupada y podía ser ocupada a la brevedad si se abonaba todo el precio solicitado y las comisiones pertinentes por medio de transacciones bancarias pues no aceptaban efectivo, que la Escrituración del inmueble no tenía impedimentos y saldría a nombre del comprador en aproximadamente veinte días…
También podría abonarse un 50% al momento de la compra y el otro 50% al momento en que se entregaba la Escrituración y recién allí se tomaba posesión del inmueble… Le planteé el inconveniente respecto a que el comprador a nombre de quien iba a ser escriturado el inmueble no podría estar presente para firmar y si se podía nombrar a un Testaferro o Apoderado para que hiciera los trámites a su nombre…
No había inconvenientes, se hacía un Poder legalizado ante Escribano Público y firmaba el Apoderado por el dueño legítimo… Todo ese trámite lo hacían por medio de la Inmobiliaria… El precio era accesible (aunque sólo para quien tuviera el dinero), me dieron una tarjeta y quedé en pasar al día siguiente… Salí contento de allí y me dirigí a la Concesionaria de autos…
Ahí vi la camioneta que me gustaba y hasta con el color rojo fuego que me gustaba… Consulté los precios y cuando me comenzaron a decir de las facilidades de pago, le dije al vendedor que en caso de comprarla, sería con el pago total por medio de una transacción bancaria pero era necesario que el vehículo fuera entregado en un máximo de 24 horas con todos los papeles y el patentamiento a nombre del comprador… Si podían hacerlo, se vería de comprarla ese mismo día por la tarde o el jueves a primera hora de la mañana…
Inmediatamente, el trato se hizo más amable, pidió que tomara asiento y que por favor esperara un instante y me ofreció algo de tomar, dije que no pensando en el refrán que dice: “Por la plata baila el mono” y me sonreí, el vendedor rápidamente lo consultó con la Gerencia y con la Oficina de documentación y, regresando, me dijo que no habría ningún inconveniente, que si el trato se hacía en la tarde podría retirarla al mediodía siguiente, sino, habría que esperar hasta el viernes… Pedí una tarjeta y salí satisfecho…
La posibilidad de disponer de dinero y poder comprar sin dar “vueltas” o escatimar gastos generaba, además de la atención claramente diferenciada, una satisfacción interior que nunca había experimentado… Regresé a casa a tranco lento y me dispuse a esperar tranquilo la notificación del premio ya que, por cómo se daban las cosas, no dudaba que éste existiría… Entré y me llovieron las preguntas respecto a cómo me había sentido, si había tenido ahogos, contesté que estuvo todo muy bien y que me sentía reconfortado con la “caminata”… Luego comí algo y me senté frente a la pantalla a joder con el Facebook, todavía faltaba casi una hora…
A las 12,45 hs. la máquina avisó de un mensaje con un pitido y yo pegué un salto en el asiento con el corazón que se me salía por la boca… Temblando abrí el Correo y AHÍ ESTABA, el mensaje decía el letras grandes y doradas, “CONGRATULATION” y en el escrito en Inglés sólo pude descifrar una cifra: 351 MILLION DOLARS, no llegué a traducir todo el texto, cerré el Correo y le dije a mi mujer que tenía que ir urgente al Banco porque me avisaron que se había producido un gasto enorme en la tarjeta y tenía que hablar con el Gerente para autorizar o desautorizar el importe del gasto antes de que lo pagaran…
Se aprestó para acompañarme y le dije que mejor no lo hiciera porque prefería empezar a moverme solo y hablar tranquilo sin enojarme, que me llamara en 15 o 20 minutos para ver cómo estaba… Extrañamente no puso ninguna objeción…
Entré al banco a las 13.00 hs. y pedí hablar con el Gerente, la secretaria displicentemente me preguntó el motivo por el que quería verlo… Le contesté que era por una transferencia del orden de los 25 millones de dólares y que me avisara si no me podía atender, para poder ir con tiempo al Banco de al lado (en la cuadra había tres Bancos distintos)… Fue como si le aplicaran electricidad en el culo, la rubia alta y de buenas formas, pegó un salto de la silla y se metió en la oficina de la Gerencia, a los dos minutos salió pidiéndome que, por favor, pasara…
El Gerente me atendió muy deferentemente, Un hombre joven, rondaba los cuarenta años y se encontraba sentado haciendo notar el “Poder” del tipo al que siempre le van a pedir y tiene el definitivo “si” o “no”. Preguntó si quería tomar algo en un tono condescendiente y por cumplido, ante mi negativa, me dijo…
- “A ver señor, cuénteme el “asunto” o problema de la transferencia”.
- “El “asunto”, que creo que no es problema, radica en lo siguiente pero… para empezar a explicárselo, necesito que vea un mensaje que me ha llegado a mi Correo Electrónico personal y, de acuerdo a lo que usted estime que puede hacer, hablamos de mis condiciones para la o las transferencias”…
- “Bueno, como guste”, -me dijo sonriendo y un tanto descreído-… “Acá está la computadora, dígame a nombre de quien está el Correo y la contraseña, yo se lo busco… Quizás prefiera poner la contraseña usted mismo”…
Parecía que me estaba tomando a broma y pensándolo bien, yo no tenía presencia de alguien que pueda estar “moviendo” 25 millones de dólares, tampoco podía no darme “bola” porque de resultar verdad lo que yo decía, el Banco perdería la posibilidad de ganar un montón de billetes por su desatención y, en ese ambiente, eso no se perdona…
- “No, no es necesario, yo se la dicto, confió en usted… ¿Usted habla Inglés, verdad?”…
- “Si señor, a la perfección, dígame la contraseña”…
Se la dije y abrió el mensaje… Leyó y se puso pálido…
- “Pe, pero señor, felicitaciones, aquí dice que… es decir… de acuerdo a este mensaje ha ganado
usted 351 millones de dólares… para hacer algo al respecto necesitaría el ticket que lo habilita para cobrar y decirme en que lo podemos ayudar como Institución que, desde ya se pone a su disposición”…
- “El ticket que ellos me hicieron llegar al momento de jugar está en tal carpeta”… La abrió, se dio cuenta que era verdad, ya le cerraba perfectamente “el paquete” y los ojos le brillaban distinto…
- “Bien, ahora que vio que no estoy “jugando” le voy a decir que necesito de ustedes”…
Me daba cuenta que habían cambiado las “tornas” y el “mango de la sartén” cambiaba de dueño…
- “Por favor, señor, comprenda que…”…
- “Dejémoslo ahí… Necesito que el Banco, por su intermedio, porque no pienso usar otra sucursal y tampoco quiero cambiar de Institución, se haga cargo del cobro urgente de este dinero, lógicamente con los descuentos pertinentes de los Impuestos del Estado de Nueva York que tengo idea que no son baratos y las comisiones necesarias por las tramitaciones bancarias… Con el total de lo cobrado por el premio luego de todas las deudas saldadas, se transferirán 25 millones a esta sucursal bancaria, lo restante será depositado en un Banco de Nueva York que USTED considere pertinente, éste Banco me pagará intereses mensuales transferidos a este banco religiosamente mes a mes… Usted dirá que es lo que tengo que autorizar o firmar para que esta tramitación se haga efectiva “para ayer”… ¿Me entiende lo que le voy diciendo?… Tengo absoluta confianza en que usted acelerará los pasos”… Lo “local” lo hablamos después”… De pronto recordéclaramente que me habían dicho que “nadie me perjudicaría”…
Los ojos y, seguramente, la cabeza de este hombre funcionaba como una calculadora, asintió con la cabeza y mandó a llamar urgente a la Secretaria, la envió a sacar varias fotocopias de los mensajes con el ticket y mis documentos de identidad y que llamara urgente a la señora “fulana” para confeccionar un Poder que lo habilitaría al Banco y a él en particular para realizar todas las tramitaciones en mi nombre… Pidió una comunicación urgente con el Gerente General del Banco y que arbitraran los medios para comunicarse con el número de teléfono que figuraba en la página de la Lotería de Nueva York…
- “Si nos apuramos, podremos hacer las transferencias hoy mismo”, -me dijo moviéndose con celeridad-…
Lo comunicaron con el Gerente General del Banco, lo puso al tanto rápido y luego me pasó la comunicación, nos presentamos, me felicitó y me dijo que quedaba todo en buenas manos…
- “Eso espero, por eso vine con ustedes, soy cliente de Caja de Ahorro y ahora la incrementaré un “poquito””… Reímos y se despidió diciendo que ya se habían comunicado con la filial del Banco en EE.UU. y que las puertas de la Gerencia General estaban abiertas para mí… (Seguramente nunca me vería un pelo o yo no dejaría que me viera un pelo pero, “lo cortés no quita lo valiente”)…
De seguido, el Gerente de la sucursal habló con alguien de la Lotería, lo hizo en Inglés y le mandó un mail con mis datos, los datos de él, fotocopias de los documentos, el Poder recién firmado y los mensajes… Lo mismo hizo con la filial propia del banco en ese Estado americano…
- “Me parece que vamos a tener suerte, me acaban de decir que nuestro Banco en Nueva York ya se puso en contacto con gente de la Lotería y están arbitrando los medios para transferir los fondos a una cuenta especial a su nombre… Desde allí harán la transferencia de 25 millones a esta sucursal… Me va a tener que dejar su firma en otros papeles para gestionarle para mañana una tarjeta de crédito dorada especial y exclusiva porque el monto de su cuenta la amerita, es absolutamente intransferible, tiene un código que sólo usted conocerá y puede utilizarla para gastar sin límites a cualquier hora y día de la semana”… Le firmé todos los papeles que la Secretaria, más solícita y sonriente que nunca, me alcanzaba, preguntando a la vez si necesitaba algo más…
Ya había pasado una hora y sonó mi celular, era mi mujer preguntando cómo estaba… Le dije que bien, que el problema se había solucionado y estaba tomando un café con el Gerente… Se quedó más tranquila cuando le dije que después le contaba bien…
- “Tendremos que esperar, más o menos, una hora y media más, hasta que todo se confirme y pueda disponer de sus fondos, mientras tanto, como ya firmó todo, que le parece si lo invito a tomar algo en la confitería de la esquina y de paso me cuenta que es lo que quiere hacer en el ámbito local… No se haga problemas por el horario, el Banco cierra a las 3 de la tarde pero la gente se va a quedar hasta solucionar todo lo suyo y yo necesito tomar algo urgente, me ha hecho “acelerar” y trabajar a todo tren”… Le acepté la invitación y salimos de la oficina… Los murmullos entre los empleados sonaban como gritos y todos miraban asombrados… El Gerente le hizo una seña a un “ropero” (seguramente un Seguridad de Civil) que nos siguió a pocos metros…
Allí la cosa fue más distendida, hablamos de algunas cosas personales, miramos mujeres, comentamos sobre ellas, como expresé antes, él era un muchacho con una edad cercana a los cuarenta y como no vi anillo en sus dedos deduje que era soltero o divorciado y se me antojó que era un “atorrante” al que le gustaba “vivir la vida”… En un momento hizo un comentario sobre “negocios” y no lo dejé seguir hablando…
- “Permitime el tuteo pero, hoy por hoy, no me hables de ningún negocio porque, para serte sincero, no te voy a dar ni cinco de bola… El viernes a la tarde me voy de viaje y posiblemente no regrese hasta dentro de seis meses o más… Entre nosotros y esto es porque me generás confianza y te voy a contar algo, mi mujer sabrá que cobraré un premio pero serán algo así como 25 millones que tengo que ir a cobrar personalmente a EE. UU. y, sin ella saberlo, alegando que ando jodido de salud, voy a aprovechar ese viaje para internarme en un centro de recuperación respiratorio y rejuvenecimiento con “células madres” por el tiempo que te dije… la realidad es que para ella, para vos y para todos, voy a estar internado en el exterior, yo me voy a dar unos cuantos gustos solo, ¿se comprende?”… Asintió, se sonrío y lo único que me preguntó era si podía ubicarme, para lo cual le pasé el número del celular y me dio el suyo particular…
Salvado este tema, me preguntó sobre lo que quería hacer en el ámbito local y le dije que tomara nota, pidió papel al mozo y se aprestó a escribir lo que le iba dictando…
- “Del dinero que quedará en mi cuenta, vas a transferir 2 y 1/2 millones de dólares limpios a cada una de estas personas y los gastos de éstas transferencias los debitás en mi cuenta”… Le di los nombres y los números de documentos de mis dos hijos y de mi mujer…
- “Van a tener que venir a firmar al Banco y firmar además las solicitudes de las tarjetas de crédito”…
- “Yo te los mandó a que te vean personalmente el jueves o el viernes para firmar y para que se enteren de la “sorpresa”, respecto a las tarjetas, dales las internacionales doradas, con límite de gastos, gestiónalas ya y también vas a debitar en mi cuenta los gastos mensuales de cada una, de última, creo que con los intereses que cobre me va a alcanzar para pagarlas… Ni palabra de nada”…
- “Por mi quedate tranquilo”…
- “Quiero comprar una casa, si es posible hoy y habrá que citar a los de la inmobiliaria para pagarles el importe que solicitan por la casa, honorarios, escrituración y/u otros gastos”…
- “Bueno, les avisamos desde el Banco pero estas transferencias implican un gasto bancario”…
- “Ya sabés como proceder, todo debitado a mi cuenta… Lo mismo sucederá con una Concesionaria de autos para que, apenas cobren, inicien los trámites por la compra de una camioneta, así me apuran las tramitaciones”…
- “Cuando volvamos al Banco los llamamos y hacemos la transferencia o les pagamos con cheques de mostrador certificados y avalados por el Banco”…
- “Del mismo modo, el jueves a primera hora llamá a la doctora “fulana” Directora de la Fundación tal y le decís que el banco tiene disponible un importe de 500 mil dólares para la Entidad… Se lo transferís a donde te diga y le avisás que proviene de mi, que luego yo, oportunamente, hablaré con ella, decile de mi parte que lo aproveche bien… Al margen de todo esto, no me vas a decir que no fue un buen negocio para el Banco esto de sacarme la Lotería, ¿no?”…
- “No sólo para el Banco, ni te imaginás el espaldarazo que significa para mi tener esta cuenta”… Pagó y nos volvimos al Banco riendo como “compinches”…
No bien entramos al Banco, le informaron al Gerente que la transferencia bancaria ya estaba acreditada, como ya no había clientes todos los empleados estallaron en un aplauso y me felicitaron… Yo le agradecí a todos y principalmente al Gerente que había actuado con muchísima celeridad… Desde allí llamamos al vendedor de la Inmobiliaria y al de la Concesionaria y aceleramos todo aún más…
Se les pidió venir con las sumas que pretendían cobrar, más gastos, honorarios, impuestos y patentamiento y seguro total del automotor. Serían atendidos aunque el Banco ya estaba cerrado… A los 15 minutos ya estaban allí, en el caso de la casa me dieron el boleto de compra venta a mi nombre, los recibos de pago de honorarios de escrituración e impuestos y las llaves, se llevaron los datos de mi mujer para nombrarla Apoderada…
En el caso de la Concesionaria sucedió algo similar, en ambos casos recibieron sendos cheques certificados (eran como dinero en efectivo) que firmé yo y el Gerente del Banco… Luego hizo otro cheque certificado para la Fundación y la transferencia e inicio de las cuentas para mis dos hijos y mi mujer… Ya todo estaba encaminado para bien… Por último, me hizo saber que quedaban 151 millones depositados en la filial de EE.UU. del mismo Banco y que para el día de mañana tendría todas las certificaciones y recibos que lo acreditaran, más el correspondiente número de cuenta.
Eso me reportaría algo más de 900 mil dólares mensuales que incrementarían mi cuenta mes a mes, le di el conforme… me despedí de todos más que contento y regresé a casa cansado como si me hubieran dado una paliza… Ahora venía la parte más engorrosa, hablar con mi mujer y explicarle mitad verdad y mitad mentira…
Entré a casa y, al verme la cara de cansado, me preguntó cómo estaba y que había pasado que tardé tanto…
- “Vení mi vida, tenemos que sentarnos a charlar un rato largo, ¿vos sabés que te quiero, no?”... Me miró y me dijo que si… “Bueno, creo que esta charla va a definir nuestro futuro juntos, es muy importante que escuchés y trates de entenderme”…
- “¿Qué pasó cielo?, no me asustes, ¿qué sucedió?, ¿te sentís mal por algo?, ¿hay otra persona?”... Parecía a punto de llorar…
- “No empecés con las “pavadas”, me “cago” en las “otras personas” que se te puedan ocurrir, por eso te estoy pidiendo que me escuches y me entiendas… El caso es que, sin decirte nada, jugué unos Pesos a la lotería y gané, para ello fui al Banco, para tratar de cobrar el premio y por eso el tiempo que me pasé ahí con el Gerente, además aproveché y pasé por la Inmobiliaria de acá a la vuelta”…
- “¿Tanto lío por algo que ganaste?, si me decías te acompañaba”…
- “Necesitaba tiempo para digerirlo… El Banco sólo pudo transferir una parte de lo ganado y para el resto tengo que viajar a EE.UU. el viernes a más tardar”… Mañana tengo que sacar el pasaporte y ellos me mandan el pasaje y la visa para viajar el sábado de madrugada”…
- “Después de todo no era tan malo… ¿Por qué decís que define nuestro futuro?... ¿Cuánto ganaste?...
- “Porque a partir de ahora va a cambiar todo… Gane 25 y al Banco sólo le giraron 10”…
- “Tanto lío por esa plata, ¿son 25 mil Pesos o Dólares?”… ¿Por eso tenés que viajar a EE.UU.”…
- “No, mi vida, no, sentate bien, son 25 millones de Dólares”…
Se agarró la cabeza, se puso blanca, no podía creerlo y creí que se desmayaba…
- “Eso son como 100 millones de Pesos, es una cantidad enorme”… ¿Qué vas a hacer con esa plata?”…
- “No entendés nada de plata, son 1.000 millones de Pesos y el tema no es “que voy a hacer yo con esa plata”, el tema es “que vamos a hacer con esa plata”, aunque yo ya decidí varias cosas por las mías sin consultarte y decidiré algunas más…
Le iba a contar despacio y tranquilamente, que es lo que había hecho y lo que quería pedirle que hiciera, porque, como pensaba, todavía no tomaba conciencia de la cantidad de plata que era y cómo nos cambiaría la vida… Estuvo siempre acostumbrada a pensar en si le alcanzaba para el día siguiente y, de buenas a primeras, eso no se podía cambiar así porque sí…
Además, no sé por qué me alteraba que no entendiera las cosas importantes más rápidamente, siempre tenía que tomarse un tiempo extra y las diferencias de personalidad y proceder quedaban muy evidenciadas…
- “Vamos por partes, ¿te acordás de la casa de acá a la vuelta, esa que tiene jardín, garaje, terraza y un terreno grande al fondo?”
- “Sí, sé de la casa que hablás, me encanta”…
- “Bueno, la acabo de comprar para los dos”…
- “Y con esta casa, ¿qué hacemos?... Me desesperaba explicar cosas ilógicas y contestar preguntas pelotudas…
Para ella no era lo mismo dos más dos igual cuatro, tenía que ser uno más uno, más uno, más uno igual cuatro… ¿Por qué carajos las mujeres suelen dar tantas vueltas?...
- “La prendemos fuego para que nadie la disfrute… ¿Qué querés que te diga?, todo te tengo que explicar como a los chicos del colegio… Esta casa va a ser refaccionada, arreglada, pintada, se le harán las modificaciones que siempre quisimos… Se llamará a una empresa de construcción y quedará hecha un “chiche”, después decidiremos qué hacemos”…
- “Se la podemos dejar a mis sobrinos”…
- “Noooo, ellos o su entorno están esperando que no estés para reclamar una parte que nunca se ganaron… (el inmueble estaba a nombre de ella y de la hermana (la cual ya tenía casa de antes) y era un regalo del padre, de lo que se arrepintió a posteriori por las trapisondas y boludeces del yerno pero, ya estaba hecho)…
- Mirá, te lo voy a dejar claro, si le avisás a alguno de tu familia la cantidad de dinero que ganamos, si le llegás a prestar algo de dinero a alguno de ellos o te ponés a ayudarlos sin mi autorización, te lo voy a decir una sola vez, agarro el dinero que está todo a nombre mio y NO ME VOLVÉS A VER EL PELO… Vas a tener que elegir entre tus pariente y tu marido porque YO, aunque me tenga que masticar las tripas y me duela, ME VOY PARA SIEMPRE DE TU LADO… Vos sabés que no digo las cosas por decir… ¿Te queda claro?... Si te preguntan algo, que seguro te van a preguntar, deciles que gané 50 millones de pesos en la Lotería pero que el dinero lo manejo exclusivamente YO”…
Mi bronca casi furia y el desagrado que experimentaba, se manifestaba con un “in crescendo” interior que a mí mismo me molestaba…
- “¿Con los muebles que vamos a hacer?”…
- “Los quemamos, los ponemos en la puerta para que se los lleven, los regalamos, no sé… Hay que comprar todos muebles nuevos y todo lo que necesites para la casa tiene que ser nuevo, no quiero más cosas usadas y viejas ”…
- “Es una pena regalar todo lo que tenemos a desconocidos”… Seguía insistiendo con su “chiquitaje mental”…
- “Bueno, regalalo a “conocidos”… Eso no es nada, quiero que te hagas una cirugía plástica completa como siempre dijiste que harías si tuvieras dinero… podrás irte de vacaciones adónde quieras, contratar la mejor prepaga para no renegar con los médicos para jubilados, tener personal doméstico para que te ayude en la casa, podés hacer miles de cosas que antes no podías”…
- “Dejame pensar todo esto, tengo que asimilarlo”…
Se fue a recluir en la habitación, yo estaba tan enojado que me quería ir “a la mierda”.
- “Andá a pensar pero no tenés mucho que pensar, tenés que disfrutar ahora que podés y NO LLAMES POR TELÉFONO A NADIE PARA AVISARLE NADA (no te podías tirar un pedo sin que lo contará a “su” hermana y eso me enervaba)… Yo no voy a cambiar mi modo de pensar… En un rato vamos a ver la casa nueva, ya tengo las llaves”…
Me metí en otra dependencia de la casa, tomé el teléfono para llamar a mis hijos y me obligué a calmarme, luego de tranquilizarme un poco, los llamé a los dos… Uno estaba en la Costa, a 400 kilómetros y el otro sólo a 30 kilómetros, los dos vivían solos… A ambos les dije lo mismo:
- “Tengo un regalo para ustedes, saqué un premio más o menos “grosso” en dólares y quiero compartir algo con ustedes… Para ello les abrí una cuenta en el Banco “tal” de la sucursal de mi ciudad, esto es en la calle “tal”, altura “tal”, a cinco cuadras de mi casa… Tienen que estar, SI o SI en el Banco, mañana antes de las dos de la tarde para ver al Gerente (fulano de tal) en mi nombre, a fin de firmar, habilitar la cuenta y disponer del dinero (a uno le dije que ni por asomo fuera a trabajar, que pidiera el día y al otro que no viniera manejando, que se tomara el primer micro que saliera con destino a la capital)… No les voy a decir la cantidad depositada, ya se enterarán en el Banco pero, es importante y les solucionará “algunos” problemas y NO HAY MÁS… Otra cosa, a “cerrar el culo” con todos porque me van a llover los “mangazos” y hasta que no me estabilice no estoy para ayudar a nadie… Tampoco les voy a decir lo que gané y lo que reste lo disfrutaremos mi mujer y yo… Otra cosa más, no vengan por casa, yo no voy a estar y mi mujer no sabe de esta ayuda, comuníquense sólo a este teléfono… Besos”…
Los dos estuvieron de acuerdo en hacer lo que les pedía y aunque en el aire flotaban toda una serie de interrogantes, me conocían bien como para no insistir con preguntas que sabían que no les contestaría y yo estaba seguro que esos dineros le cambiaría la vida a ambos…
Después me puse a navegar por Internet, mirando el Facebook, noticias de distintos medios y publicaciones y fotos de mujeres que resultan, normalmente, inalcanzables… Ahora, sabiendo que podía “alcanzar” a la que quisiera tan sólo con acercarme y hablarle, sin importar condicionamientos, edades o parejas existentes, me “atacaba” un morbo que se trasladaba a mi entrepierna y me provocaba una erección que, por lo repentina y “abultada”, no esperaba…
Me miré y sin dudas estaba más grande y con ganas de hacer algunos “ejercicios”… De todos modos, de la noche a la mañana me había convertido en todo un potentado y por mi cabeza pasaban muchas cosas y muchos problemas urgentes por solucionar y no tenían que ver con tetas y culos…
Tenía que irme a Corrientes a comprar los campos, de esto tampoco sabía mucho y no era cuestión de gastar por gastar en algo improductivo y estéril… Pensando en esto, se me ocurrió llamar a un “gaucho” (o “paisano” como le gusta que le digan) amigo, de cuatro o cinco años menor, con una salud de hierro, criado en el campo, de hecho vivía solo en un pequeño campo de su propiedad y conocía mucho de animales, útiles y tierras propiamente dichas…
Lo había conocido en una época en que yo vivía solo cuidando caballo en un Pensionado Equino… Me enseñó mucho sobre caballos y conocí mucho de él y sus habilidades para todo lo rural, conocimientos que me trasladaba en largas horas de “mateadas”… Hacía rato que no lo veía y se me ocurrió invitarlo el fin de semana para ir juntos a “explorar” las posibilidades que se presentaran…
Por suerte lo encontré disponible, preguntó por mi salud, le dije que había mejorado un montón, que había ganado una plata “grande” en una Lotería y que tenía que viajar el fin de semana a Corrientes para adquirir un campo y para eso, necesitaba de sus conocimientos y asesoramiento…
Estuvo encantado y como siempre (propio de paisanos de mi tierra), no preguntó demasiado, de casualidad, hacía unos meses que vivía con un sobrino y él podría quedar encargado de su casa y animales… Quedamos en que lo pasaba a buscar el viernes a eso de las seis de la tarde… Colgué con mi amigo y le pedí a mi mujer que me acompañara a ver la casa nueva…
Salió de la habitación con claros signos en su rostro de haber llorado…
- “¿Qué te pasó, por qué lloraste? y no me digas que no porque se te nota”…
- “Lloro porque no puedo decir nada a nadie, porque te enojás con mi familia y porque ahora te podés ir vaya a saber con quién”… Empezaba otro drama…
- “No seas ridícula, no me jodas con berrinches de “pendeja” que estamos “viejos” para eso… ¿Qué crees que voy a salir a “revolear” la “pistola” por todo el barrio para morir ahogado en cualquier esquina?, yo necesito curarme y te necesito a vos… Te quiero a vos a mi lado pero más linda y sin “mochilas” externas… ¿Cuántas veces te trasladé a vos los dramas de mi propia familia?… Además, jamás te dije algo que en el momento o poco tiempo después no corroboraras y lo de tu familia no es la excepción, es más, lo has podido comprobar más de una vez…
- Tu cuñado es un tipo que “quiere cagar más alto que el culo”, vive pidiendo préstamos que después no devuelve y le debe “a cada santo una vela”… Compra el celular más caro y luego anda quejándose de que le falta para comer… A tu sobrina y el marido les tuviste que decir que no vinieran más a casa porque se querían imponer a los gritos y yo eso no lo iba a permitir…
- Viven de arriba en la casa de tu hermana, el tipo trabaja sólo los fines de semana, gana un sueldazo y ella tuvo que salir a trabajar y junto a los hijos más de una vez andan a los saltos y con necesidades porque él tiene que pagar créditos y deja dinero en su casa paterna y a los hijos adultos y casados de su anterior matrimonio, de ahí a exigir en su momento su parte de la casa o la casa total hay un paso… Ella trata mal y a los gritos a la madre, tu hermana, sin importarle que está convaleciente de una enfermedad jodida, con el padre no se habla y por otro lado recibe malos tratos del marido ¡Es una familia genial!…
Me miraba y no contestaba nada, tenía los ojos llenos de lágrimas pero, interiormente, sabía que yo no le mentía ni inventaba nada…
- Con todo ese panorama vos crees que no te van a venir a pedir, suplicar y llorar para que les prestes dinero y hasta van a usar a los hijos para ello… Date cuenta y entendé porque no quiero que les prestes o le digas nada, ni a tu hermana, que es tan “boluda” que después cuenta todo, lo peor es que sabés que no “invento” nada… Sólo vas a ayudar a tu hermana si necesita para comer o hacer análisis caros y/o remedios pero “bajo cuerda” y a nadie más y ya no me llevés la contra con pelotudeces porque termino cansándome de tu familia y “pagás el pato vos”… Estamos muy bien solos para que lo arruinen desde afuera…
- “Tenés razón pero, ¿qué les digo cuando sepan de la casa nueva, de los arreglos de la vieja y todos los gastos de los muebles o la cirugía plástica?(evidentemente había estado pensando en todas las “mejoras” y eso era importante pero el “¿qué les digo” me sacaba de quicio)...
- “Ya te lo dije, avisale que yo saqué una buena plata en la Lotería, compré la casa y mandé a arreglar ésta pero que no sabés nada porque TODO lo manejo yo y vos ignorás el total de lo que gané”, ya bastante “mierda” y envidias van a desparramar por el mero hecho de haber sacado “algo” en la Lotería…
- A todo esto, mañana a las 10 de la mañana tenés que ir al Banco con los documentos para activar una cuenta con dinero que yo te deposité, de ahí podrás gastar lo que se te dé la gana sin pedirme nada a mi… La cantidad te va a alcanzar para todo lo que se te ocurra”…
- “Bueno”… Me lo dijo resignada, sabía de mis razones y mis reacciones y también que no podría cambiar nada…
Parecía el pensamiento y el accionar de un déspota pero, era todo producto de la experiencia, la cual me enseñó algo importante que se resume en dos refranes: “Las cosas por su nombre” o “Al pan se lo llama pan y al vino, vino”, desde ahí en más, aún desde cuando era un “pelagatos jubilado” lo que pensaran los demás, no era problema mío…
La casa era hermosa, tres dormitorios, uno en suite, habitación para el personal de servicio con baño, comedor, otro baño grande, todo en planta baja, terraza con galpón que era otra habitación, jardín en todo el frente y un terreno detrás de más de 30 metros de largo, era hermosa y cómoda, además, no extrañaría el barrio, motivo que siempre expuso antes para no vender la actual casa y comprar en otro lado… Quedó muy reconfortada y contenta, cuando volvimos a casa ya iba haciendo planes para mudarse rápido y siempre preguntando mi opinión cuando decidía algo…
Al ingresar en el pasillo comunitario (de unos 50 metros, nuestra casa estaba al final) nos encontramos con una vecina de 82 años y a la nieta que tendría unos 30 años, morocha, alta y con un físico llamativo y voluptuoso, de esos de “girar para mirarla”, estaba separada hacía unos cuatro meses y el “ex” la estaba tratando de convencer para volver…
Mi mujer solía atender y ayudar a la “viejita” cuando necesitaba algo durante el día porque vivía con la nieta y ésta trabajaba afuera hasta las seis de la tarde… Nos saludamos, yo seguí hacia mi casa y ellas se quedaron charlando… Mientras me iba alcancé a escuchar que la chica le preguntaba a mi mujer si podía ir un rato a mi casa porque necesitaba hablar algo con ella… No me hice mayor problema, otras veces había pasado, no era la única a la que mi mujer le hacía de “paño de lágrimas”…
Como a los 20 minutos, mi mujer terminaba de prepararme la comida y golpearon la puerta, fui a abrir y era Flor, así se llamaba, el cabello negro largo resplandecía y brillaba, la blusa cerrada hasta el cuello pero ajustada al cuerpo, dejaba adivinar un par de tetas erguidas que era obligatorio mirar, sus 95 de copa o más, no pasaban desapercibidos y ella lo sabía, me obligué a seguir con la vista fija en sus ojos verdosos…
La hice pasar y la miré de atrás, con tacos medianos, me llevaba una cabeza en altura y la pollera tableada con un largo apenas por encima de las rodillas dejaba entrever un hermoso culo compacto y de nalgas altivas sustentado por pantorrillas moldeadas de tobillos finos…
Sabía que su prestancia de mujer “grandota”, era mantenida a base de dietas, gimnasio y aerobic para combatir su tendencia a engordar… Llamé a mi mujer cuando ella se sentó y me metí al cuarto de la compu para dejarlas hablar tranquilas… Abrí una ventana con música, bajé todo el volumen, me coloqué los auriculares colgando del cuello y me puse a tratar de escuchar lo que hablaban, si alguien entraba en la habitación, me daba tiempo a colocar bien los auriculares y, para cualquiera que me viera, sólo era esto lo que podía escuchar…
La conversación no tenía nada de interesante, las mismas dudas de siempre y los reproches que yo conocía respecto al “ex” marido de Flor… No daba para más, abrí otra ventana sin cerrar la anterior y me puse a ver porno… El video de una Angelina Jolie más joven y totalmente desinhibida que hacía un trío sexual con dos hombres, falso, trucado o verdadero, me puso a mil… Era una de mis “mujeres deseadas” (tenía varias, no era tan distinto a los demás hombres), no era tanto por el físico, adoré desde siempre a esas mujeres que pueden “encenderte” con la mirada.
El miembro medio “encabritado” y haciendo fuerza desde atrás del bóxer, me hacía saber que lo que pasaba en la pantalla me gustaba sobremanera (esto tampoco me pasaba antes) y “volé” imaginando que ahora si podía darme el gusto con una de mis “mujeres-fantasía”, viajar podría y acercarme no me costaría, bastaba con tenerla a mi lado y “santo remedio”… No era la misma que años atrás pero los ojos y la mirada permanecían…
Soñar no cuesta nada, tratar de hacer realidad esos sueños suele tener un costo y yo estaba en condiciones de hacer las dos cosas porque podía “bancar” el gasto que se presentara… De pronto pensé que Angelina no estaba cerca pero… Flor si y… ¿Por qué no?... Volví a prestar atención y escuché que ella decía, “es que yo también tengo mis necesidades” y me decidí…
En cuanto mi mujer dejó la mesa para ir al baño salí del cuarto, aún con los auriculares colgando del cuello, me acerqué, me senté en una silla a su lado y le pregunté:
- “¿Y, cómo andan tus cosas?”…
- “Bien, todo bien o, no sé, más o menos”…
- “¿Problemas con la salud de la abuela o con Jorge?”, (su “ex”) porque, en hipótesis, yo no debería saber que hacía un tiempo que estaba separada…
- “La abuela está bien, hay algunos desacuerdos con Jorge”…
- “Hay que matarlo a palos a ese tonto, debería evitar de tener cualquier problema con una mujer tan hermosa como vos… Yo no podría estar a tu lado sin acariciarte, de hecho tengo unas ganas locas de acostarme con vos pero, no se lo digas a mi mujer…
Por unos pocos segundos se puso tensa y, repentinamente, se le suavizó la mirada y se le llenó de deseos…
- “Yo también, ¡Por Dios!, quiero que me cojas y me revientes ya… ¿Cómo hacemos?, vámonos a la calle, a la plaza, a algún hotel, te necesito con urgencia”… Lo decía en voz baja mirando hacia el baño y tocando y apretando mi rodilla, le agarraron todos los “apurones” de golpe y movía el culo y las piernas sin despegarse del asiento de la silla…
Los pezones parecían a punto de explotar y a mí me encantaba verlas así…
- “Ahora no podemos, tratá de disimular, quedate un ratito más y en veinte minutos yo salgo a la calle y nos vamos a algún lado”… Me levanté de la silla cuando salía mi mujer del baño y tanteé las llaves de la casa nueva que permanecían en mi bolsillo… La saludé, mandé besos para la abuela y me metí en el cuarto de la compu…
Más o menos a los cinco minutos escuché que se iba y viendo que mi mujer se cambiaba para acostarse, no sin decirme que Flor con el tema del ex marido estaba nerviosa y un poco alterada… “Problema de ella” le contesté y le avisé que debido a que había sido un día muy agitado e inusual, iba a tratar de “oxigenarme” dando una vuelta a la plaza… Me dijo que lo tomara con tranquilidad y que no me apurara, que no me acompañaba porque estaba “molida” (antes me hubiera acompañado, si o si, decididamente, “alguien” influía)…
Eran las 22.15, en unos pocos minutos saldría a encontrarme con Flor y tardaría bastante para sólo dar la vuelta a la plaza… 22.20 salí de casa y desde allí vi que Flor estaba en la puerta conversando con alguien, a medida que me acercaba me di cuenta que no era alguien conocido… Era una compañera de trabajo de Flor que venía a visitarla y ver cómo estaba, un poco más baja que Flor, rubia, cabello corto, 30 y pico de años (no pasaba los 35), vestida con jeans ajustados y elásticos que moldeaban sus piernas, zapatos de tacos altos y una remera ajustada que denunciaba un par de tetas menudas y bien armadas…
No bien me puse al lado y saludé Flor la presentó como Soledad, me echó unos de sus brazos por detrás de la cabeza y me dijo que nos fuéramos ya, que no aguantaba más y a la vez, me besaba el cuello y acariciaba con la otra mano mi pecho… A la amiga, esto le disgustó sobremanera y no lo disimuló… Ergo: Mis “ratones” me dijeron que aspiraba a más que una simple amistad…
No se aguantó y le habló a Flor de malos modos.
- “¿Qué hacés nena?, calmate un poco, parecés una loca buscando macho”…
- “Sabés que pasa, está así porque le dije que quería acostarme con ella y…”… Me miró furiosa y me habló mal…
- “Aparte de viejo choto, creído, caradura y desubicado”…
- “¿Por qué me tratás así?... Con vos también tengo ganas de acostarme, a pesar de lo mal educada que te demostrás”…
- “Pero, ¿qué te crees idio..?”, me empezó a contestar y se calló, se llevó una mano a la entrepierna, se arqueó y casi gritó… “Perdón, perdón… Vamos a mi casa, aprovechemos que hoy no están los chicos, cogeme a mi también, hoy vas a ser mi macho, nuestro macho, haceme lo que quieras, te necesito… Flor, por favor, me tiene que coger a mi también, dejame participar”…
Ésta asintió y Soledad salió corriendo hacía su auto que estaba estacionado a unos 50 metros, subimos a fuimos a su casa, distante a unas 10 cuadras… Manejando no podía hacer nada, Flor y yo nos sentamos atrás y ella se sacó las ganas de besarme a gusto, dejándome manosear “a piacere” el tremendo par de tetas durísimas que portaba…
La casa tenía garaje con portón automático, lo abrió desde el auto y cuando entró, cerró, paró el motor y se lanzó sobre los dos, besándonos con pasión y desenfreno, primero a mí y luego a Flor que algo se le resistía y me miraba como buscando aprobación, aprobé con la mirada y con un movimiento de la cabeza… A Soledad no le daban las manos para tratar de desnudarnos y desnudarse, estaba desencajada…
Como pudimos bajamos del auto e ingresamos a la casa por una puerta interna, en el comedor, al lado del sofá, sobre una mesa ratona, había una botella de champán en un balde con, todavía, algo de hielo y dos copas… Evidentemente, la “niña” había preparado el escenario para llevarla hasta allí y “ayudar” a Flor con sus penas…
Estábamos semi desnudos y la dueña de casa, nos sacó rápido la ropa a Flor y a mí, besándonos y tocándonos en el interín… No sé ni como hizo para desnudarse ella pero, en segundos no quedó en los tres, ni rastros de prenda alguna… Soledad nos sentó a los dos en el sofá, se arrodilló y se sacó las ganas de mezclar lo hetero con su lesbianismo, metía mi miembro casi hasta su garganta, quedaba haciendo arcadas y se recuperaba rápido para zambullirse en la depilada vagina de Flor que empezaba a gemir ruidosamente…
Sólo veían el cabello de Soledad, las piernas abiertas y las montañas con formas de tetas de Flor… La caliente joven disfrutaba chupando con fruición la deseada vagina de su amiga y con la mano me señalaba hacia sus nalgas y entendí que sus sonidos guturales me decían algo así como “metela”…
Pasé mi glande por su ano y su vagina lubricándolos, le hice una seña a Flor para que le agarrara la cabeza y apunté al agujero más chiquito, Flor apresó la cabeza de Soledad con las piernas sobre su nuca y espalda y, en dos movimientos le enterré el miembro hasta que choqué mis huevos con su vagina…
El grito fue desgarrador y no podía mover la boca para articular palabra, sólo se quejaba pero seguía chupando desesperada, la amiga orgasmaba también con un grito profundo y le pedía más sin dejarla mover de su entrepierna… Al rato quería y pedía más pija, con sus movimientos, ella sola trataba de empujar su culo hacia mí, agradable y mullido por cierto y no me contuve.
Las entradas y salidas se hicieron profundas y reiteradas hasta que no aguantó y estalló también en un orgasmo que no se guardó de contener… Saqué el miembro sucio y con unas pequeñas hebras de sangre, (algo se había roto allí adentro o rajado, siempre se raja cuando la penetración es un poco más violenta).
Soledad lo limpió con su remera y luego lo volvió a ensalivar tratando de penetrarse la garganta pero Flor la apartó, ella también quería su parte… Se arrodilló en el sofá, tomó el pene con su boca y con una de sus manos acariciaba y apretaba suavemente mis testículos sin causarme dolor…
La boca de Flor era otra cosa, luego de un par de arcadas, si se quiere lógicas, lo alojó en su garganta, acariciando el tronco con la lengua y, respirando por la nariz, apoyaba el frente de su cara en mi ingle, así un rato en que me hizo retorcerme, luego comenzó una especie de masturbación bucal metiendo, sacando y apretando con sus labios gruesos distintas partes del tronco, nunca había experimentado este placer…
Soledad no se quedaba quieta quiso ser cogida por un hombre, por “su macho” pero sus ganas primordiales eran con el cuerpo y la persona de Flor y eso no se le olvidaba… Me miró, me mostró como se ensalivaba tres dedos y los “perdió” dentro del apetitoso culo de su amiga, el apretón y el quejido fuerte de Flor me dio a entender que había alcanzado su cometido…
Yo apretaba sus pechos, pellizcaba sus pezones y ella sólo “viboreaba” quejándose y moviendo sus nalgas pero no abandonaba su oral, sólo lo hizo cuando no aguanté y le llené la garganta de leche… No, no me defraudó, se tragó hasta la última gota sin que nada escapara…
- “Yo también quiero, yo también”… gritó la otra cuando se dio cuenta que yo terminaba en la boca de su amiga, quedó sólo en un pedido, Flor acaparó todo el líquido y no lo compartió…
Fueron las únicas palabras que hasta el instante habíamos pronunciado y quedamos los tres tirados… Al recuperarnos, abrí la botella, serví una copa de champan helado para cada uno y brindamos por esta cogida y por las que vendrían…
- “Eso sí, no hago más nada arriba de un sofá”… Soledad se rió y haciéndonos levantar de allí nos guió a su habitación…
Las dejé caminar delante de mí y pensé “¡qué bien les cae la gimnasia a las mujeres!”, piernas, culos, cinturas y espaldas, aunque de distintos tamaños, dejaban admirar firmeza y plasticidad… Soledad caminaba un tanto dolorida, no sé si practicaría pero que lo sintió profundo adentro de su culo, lo sintió y cuando llegamos al cuarto, yo estaba listo para seguir…
Se dejaron caer las dos boca arriba en la cama King apoyando los pies en el piso, muslos duros, vaginas depiladas, vientres planos, pechos erguidos, quizás los de Flor un tanto más desparramados hacía los costado de su cuerpo y eso debido a su volumen y caras de satisfacción de ambas dispuestas a seguir recibiendo, ¿para qué más?…
- “¿Tu nombre es Guillermo, no?”, me preguntó Soledad…
- “Todavía si pero me están “pegando” tal paliza que en cualquier momento me lo olvido”…
- “¿Ves que sos un “caradura”?, en mi vida me había hecho el orto como me lo hiciste hace un rato… Hacía un tiempo que nada entraba por ahí, lo rajaste pero, me encantóóóó, cuando quieras me doy vuelta y me lo seguís rompiendo… Creo que nada volverá a ser igual, desde que me separé ahí sólo entraron dedos y lenguas, ¿ves?, ¿ves?, todavía estoy temblando, dale apurate”…
- “¡Noooo!, primero me lo tiene que romper a mí, ahora yo voy primera… Guille, acercate y metelo por donde vos quieras, tengo las mismas ganas que hace un rato o más, estoy chorreando”…
Mientras me hablaban cruzaban sus brazos, uno por encima del otro y se acariciaban las tetas… “Cogeme, cogeme, no me hagas esperar más”… Que pidieran lo que quisieran, mi idea era otra y, eligiendo primero a Flor, metí, boca, labios y lengua en esa hermosa concha de labios regordetes y cerrados, luego hice lo mismo con la amiga, la tenía de labios más finos y más abiertos pero igual de apetitosa…
Se movían a gusto, se tocaban, se besaban y gemían casi gritando, ninguna de las dos tenía el clítoris muy grande aunque ambos eran muy receptivos a besos y lengua… Cuando noté que con la lengua no alcanzaba metí el clítoris de Flor en mi boca y absorbí succionando, con eso alcanzó, se tensionó todo su cuerpo y el grito fue tan fuerte como el chorro de flujo que salió despedido de su vagina y me mojó hasta el pecho, aún se seguía moviendo como por inercia y me corrí hacía Soledad que la miraba sorprendida…
Aquí pasó algo similar, la succión en su clítoris provocó un grito fuerte, temblores e insultos que, en esos momentos, más que molestar, te inflaman el morbo y el ego…
- “Ahhhhhhh, hijo de puta, que mierda que sos, que polvazo me estás provocando, seguí chupando, me quiero morir mientras me cogés” y quedó aún moviéndose cuando me volví hacia Flor y la penetré de una y sin pedir permiso.
Volvió a gritar pero ahora su reacción fue distinta, cruzó sus piernas sobre mis riñones y sólo me permitía el movimiento de entrar y salir, que comencé a realizar cada vez más violento…
- “¡Dios!... ¡Dios!, no sé como agradecerte este placer” -decía Flor en la vorágine de sus movimientos que ya había acompasado con los míos-…
- “Dejalo tranquilo, no llamés a nadie más que los tres estamos fantásticos” (no voy a comprender jamás por qué las mujeres llaman o nombran siempre a sus referentes religiosos cuando experimentan o están por experimentar un orgasmo, después de todo era claro que no lo sabían pero, no era precisamente por Él que estábamos en esta situación “pecaminosa” los tres)… En definitiva, no le di tanta “bola”, seguramente, como siempre, estos “referentes” “desconectaban el chip” para no escuchar la catarata y cantidad de “pelotudeces” que les piden… Su orgasmo fue tan violento y ruidoso como el anterior…
Salí de ella y pasé a Soledad que esperaba expectante y noté en su mirada un cierto resquemor, por eso, ingresé despacio ayudado por la lubricación de ella y por la que traía de Flor… Se la notaba con ganas pero tensa y pareció ser cierto que hacía rato que no entraba algo allí, dilatar, dilató aunque su estrechez se hacía notar causándome un placer extra al rozar sus paredes rugosas…
Mordía sus labios y esperaba un dolor que no fue tal, ante esto, una vez totalmente dentro de ella, se relajó pronto y comenzó a colaborar con movimientos y gemidos, cuyo tono iba elevando acorde a mi vaivén… Flor se recuperó rápido y sin que nadie se lo pidiera comenzó a besarle los pezones y amasar sus tetas medianas, llegó al orgasmo tensando su cuerpo y sólo pudo decir “más Guille…” porque Flor le “comió” la boca y no la dejó proseguir… Quedamos “fundidos” y aunque yo no había terminado, estaba tan cansado como ellas pero sabía que me recuperaría enseguida…
Flor se levantó y fue a buscar la botella porque teníamos la boca reseca y me quedé mirando hacia un hermoso culo que caminaba, no vi nada más que dos nalgas portentosas y no me iba a ir sin darme una vuelta por allí… Soledad comenzó a contar que tenía miedo de ser penetrada, convivió seis años con un marido al que le dio dos hijos pero nunca “delicadezas” al momento del acto, el “tipo” usaba sus orificios por donde se le ocurría y ni siquiera esperaba la satisfacción de ella (existen, ya lo creo, estos “macho-man” existen y son demasiados)…
Después descubrió el sexo lésbico con una amiga, ello aceleró o decidió su ruptura y no volvió a tener relaciones con hombres… Esto se lo contaba a Flor, yo sólo escuchaba y cuando le tocó el turno a ella de contar sus cosas con su “ex”, me desentendí y comencé a “jugar” con mi dedo mayor en el orificio cerrado y tentador de su ano…
A ella no le desagradó, al contrario, comenzó a colaborar, moviendo y acomodando el culo para que yo pudiera ingresar el dedo sin problemas y su relato se tornaba un tanto incoherente… Dejó de hablar, me miró y me dijo…
- “Guille, lo estoy deseando como nunca, rompelo pero, por favor, rompelo con piedad… Mi culo es grande pero no creo que mi agujerito pueda aguantar un pijazo tuyo”… Yo me reí e instintivamente me miré el miembro, recién ahí me percaté que estaba más largo y más grueso… El morbo ante ese culo que ya perforara con el dedo y el ego por ver y notar mi miembro más grande apuraron mis ganas de meterlo rápido allí adentro…
Apunté el glande y cuando lo apoyé Flor tensó todo el cuerpo y lo retiré…
- “Metelo igual, carajo, metelo igual aunque tenga que comerme la almohada, ¡cogemeeee!, ¡rompé ese culo!, no me hagas desear”… -gritaba medio desencajada-… Volví a colocar el glande en su lugar y sabía que no resultaría fácil, cuando volvió a tensarse le pegué un “chirlo” fuerte en una nalga y se aflojó por completo. El glande penetró, el anillo del mismo pasó y todo el tronco se fue deslizando despacio pero sin pausas ante las exclamaciones de placer de Flor…
- “Dale más, apurá que no me duele… ¡Madre mía que placer!, matame a pijazos, dale fuerte, reventame”…
Soledad se fue “colando” invertida por debajo del cuerpo de Flor y se “prendió” a su vagina alternando besos y lamidas a mis bolas hinchadas y receptivas… Sus lamidas eran inconstantes por mi movimiento que se aceleraba y tampoco podía recibir una lamidas acordes porque Flor abandonaba su vagina para exclamar su placer a los gritos… Yo no aguantaba más y en una estocada profunda inundé su interior sedoso… Mi vecina no se quedó atrás y su orgasmo llenó de flujos la cara de Soledad que se desesperaba por chupar y tragar y a mí me dio un apretón inesperado y bastante doloroso con los músculos de su esfínter…
Ahora sí, ya no había tiempo ni ganas para más y luego de un rato, me fui a bañar solo, cuando regresé estaban cambiadas de forma informal y luego de números telefónicos y pedidos para otros encuentros más, me llevaron hasta casa y se volvieron las dos porque, según dijeron, “tenían muchas cosas que charlar”… Las despedí con un beso a cada una e ingresé a mi casa… Mi mujer dormía relajada y yo me puse a pensar que en la mañana debía finiquitar algunas otras cosas, después me “desmayé”…
Continuará.
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GUILLEOS 1