Mi aventura con la Marisa
Bueno esto ocurre algunos meses atrás cuando me encontraba trabajando en una agencia de turismo internacional, y tuve la oportunidad de conocer a muchos extranjeros la mayoría de los visitante provenían de España, hasta que un día conocí a una estupenda españolita, es delgadita de no mucho pecho pero no tenia mal cuerpo.
Luego nos presentamos y nos saludamos y ella se llama Marisa es muy jovial y simpática, luego le entregué mis datos para contactarnos.
Días después sonó el teléfono y Marisa me avisa si podemos juntarnos en su hotel para salir a conocer la cuidad.
Después me encontré con Marisa, estuvimos recorriendo un tour por toda la cuidad, y luego fuimos al zoológico.
Yo hable con Marisa, como siempre y nos hacíamos preguntas a nosotros para conocernos aun más.
Marisa tiene 23 años, es una joven españolita muy divertida, hace algún tiempo tuvo un novio que se llamaba Joaquín, felizmente para mi se corrompió ese noviazgo, y ella estaba sola sin acompañante.
Al otro día nuevamente sonó el teléfono, estuvimos una larga y apasionada conversación con Marisa, la invite para ir el viernes por la tarde a un bar.
Salimos en la tarde, y nos juntamos a un bar del centro de la cuidad, ella estaba allí con un ajustadísimo jeans, y un culito muy ardiente y goloso. Luego la salude y le di un fuerte abraso. Luego mas tarde salimos a la terraza del bar; tuve el deseo de besarla, lentamente me acerque a su cuello y le comencé dar varios besitos en su cuello y ella reacciona sin rechazo; La besé en la boca y apenas opuso resistencia. Se derritió en mis brazos.
Le susurré que la quería, convencido incluso yo mismo de mi sinceridad, y con mi lengua introduciéndose dentro de su boca empecé a acariciar más profusamente su anatomía; primero mi mano derecha retrocedió, dentro de su blusa, hacia su pecho y pude sentir la suave brevedad de su teta, Marisa comienza a excitarse su piel se le comienza a erizar.
Luego Marisa me introduce su delicada mano en mi entrepierna me baja el cierre de mi pantalón y comienza suavemente a sobar mi pene, comienzo a excitarme siento un escalofrió de placer que me recorría todo mi cuerpo, Marisa me besa apasionadamente; le mordí un labio le doy una nalgada a su culito, mientras que el jeans de su pantalón cedía paso a de mi mano que se deslizaba circunvalando el perímetro de su braga ceñida a su pubis. Marisa aun me estaba agarrándome el pene que ya asomaba fuera del calzoncillo; disimuladamente le introduzco mi mano en su caliente entre pierna y siento un bulto en su vagina pero me extrañé.
Luego de esta increíble experiencia con Marisa desee mas decidí llevarla a un motel, pero ella estaba con algunas dudas.
Al minuto después solicitamos una habitación a la brevedad, y luego comienzo a besarla desesperadamente y luego comencé besar sus tetas, introduje mi manos en su entre pierna lentamente baje el broche de su jeans pero no se sentía la tela tan delgada como en la parte superior, decidí ser todavía más audaz, y de un golpe metí mi mano entre su pantaleta y su vulva y cual sería mi sorpresa que estaba totalmente mojada, no era una humedad caliente sino como que medio fría, pero Marisa reacciona me da una hermosa sonrisa, luego comienzo flotarle su clítoris, y ella comienza gemir desesperadamente de excitación, y luego retiro mi mano totalmente mojada, y cual sería mi sorpresa que cuando me llevé la mano a la nariz para oler el aroma de sus jugos, me di Cuenta que Marisa estaba menstruando.
Marisa me comenta que esta indispuesta, pero me pone un gran dilema por que deseaba de follarme a la españolita; ella sin esperarlo, echó mano a mi pene me lo estaba acariciando, yo solo le pude responder: ...Marisa., Me dijo calla, que te lo vas a pasar muy bien.
Me sentó en la cama, me quitó mi camisa, me empezó a Sobar mi pecho comiéndoselo a lenguetazos, penetrándome con su cálida lengua en mi ombligo, luego Marisa me retira mi pantalón y mi calzoncillo y comienza a juguetear como mis genitales, reacciono bruscamente le quito rápidamente su blusa retiro su sostén y visualizo por completo su pequeñas tetas que estaba con sus pezones muy inflamado por su excitación, y recorrí su pecho con mi lengua, luego puse mi boca bajo de su cuello surcando su pecho, trazando un rumbo con mi lengua hasta acariciar el botón de la mama; noté cómo con un escalofrío Marisa exhalaba un jadeo al avanzar con mi dedo índice por su raja, y se retraía el pezón que empezaba a mordisquear, para luego sorbarlo, hasta engullir casi entera aquella teta de sabor dulcemente ácido, sin cesar mi dedo de escindir su caliente raja; Yo estaba completamente excitado.
Luego retiro su jeans y sus pantis, oliendo a su perfume de transpiración femenina, y comienzo besar sus muslo lateral, sus rodillas, sus canillas y tobillos, luego la estiro a la cama le abro las pierna y comienzo oler su vagina inhalé, el aroma de su menstruación, suavemente retiré su pantaleta y su tampón femenino, me lance por primera vez una vagina menstruando, por placer. Cosquilleado por el pelo de su pubis, y me demoré, relamiéndola, ahora engullendo uno, otro, sus labios, ahora mi lengua alcanzando la entrada de su vagina, atrás desentrañando su tímido clítoris, acechando mi boca en el vestíbulo de su íntima su feminidad; y sorbí el liquido menstrual, teniendo como un sabor agridulce y a marisco, y nuevamente comencé a beber gota por gota su sangre menstrual, Marisa gemía por placer estaba gozando como nunca.
Después dije que Marisa se pusiera de boca a bajo, para contemplar con su culito, teniendo un horizonte de sus hermosas nalgas, su culo olía un fuerte olor agrio, comencé a lamer sus par de nalga sintiendo su sabor a vinagre, excitante total; Luego separo su nalga introduzco mi lengua en su orificio anal, tragué desagradable sabor de su mucosa anal, mientras Marisa no dejaba de jadear, comienzo besar su culo; luego me monto por su espalda mi pene hinchada apretada contra su culo, comencé a besar su nuca y su hombro, mi pene chorreaba con mi semen fuera de su esfínter anal bañando la brillante tersura de la región inferior de sus nalgas.
Marisa reacciona y comienza a hacerme sexo oral, luego me besa mi pene y testículo; y yo entro un estado shock de placer y satisfacción, Marisa me comienza a masturbarme mi semen chorreaba en mi entrepierna, y luego comienza limpiarme con su lengua, y me dice penétrame, yo le respondo estas menstruando, y me insiste con su voz sensual penétrame...
Con mi pené erecto me coloco un preservativo, después la acuesto a Marisa le abro las pierna, me incliné sobre ella y mi glande rozó los labios mayores de su vagina, la agarré por los muslos. Empujé ligeramente y mi pene entró con suavidad No se puede describir cuán delicioso era sentir resbalar mi pene en aquel vagina con su flujo menstrual. Continué follando con un poco mas de violencia metiendo mi pene hasta el fondo de su vagina, Marisa gemía agitadamente, ahora mi pene entraba y salía de su vagina, embadurnada de sangre menstrual, tirando fuertemente de sus caderas y notando que cada tras empuje me llenaba de su ser tanto como yo la llenaba en lo más profundo de su vientre desflorado.
Minutos después retiro lentamente mi pene de aquella maravillosa vagina, obtenido en el preservativo coágulos de su sangre menstrual, y excitando a un más.
Susurré a Marisa que deseaba en follar su hermoso y delicioso culo, pero ella no le gusta mucha la idea y después me dice bueno intentémoslos. Luego Marisa se acuesta de boca abajo, colocando su culo en pompa y comienzo masajear la suavidad y transpirada nalgas, le doy varias nalgadas, luego comienzo besar su colita las nalgas su ano y su perineo, introduzco mi dedo índice en su raja y comienzo cosquillar su orificio le quito unos vellos de su raja y ella dice hau..... lentamente penetro mi dedo en su ano; me llevé el dedo a la nariz para olerlo.
Luego me coloco un nuevo preservativo, estuve separándole las nalgas con las palmas de las manos, impulsé mi miembro viril dentro del angosto orificio, apenas cedió y mi pene, aplastado contra su culo, la empujaba contra la cama sin lograr el ansiado penetración, sentí un fuerte dolor, hundido en sus nalgas note como su esfínter se apretaba; nuevamente empuje con mi cuerpo a su culo, hasta Marisa se dilata y su ano empezó a engullir mi rígido pene que lo forzaba una y otra vez, luego mi miembro viril se hunde en su recto.
Marisa gemía de dolor, luego retiro suavemente mi pene veo mi preservativo tenia la marca con mierda, y me excita nuevamente y la comienzo a follarla con mayor facilidad en su culo, luego comienzo meter y sacar con mayor velocidad, Marisa gritaba de gusto ..........ah........ah.....que placer, al momento de retirar mi miembro viril de su deliciosa raja, le salió un pedo y me penetro su olor a metano en mis fosas nasales; Marisa se enroja de pudor y me pide las disculpa, le respondo con una nalgada no te preocupe mi amor.
Me acerco con mi boca su culo transpirado le doy un chupón en una nalga , y quedando la marca de mi.
Al día siguiente ante despedirnos le di el ultimo beso en sus dulce labios; Marisa, me miró, y me hizo una confesión. Mira George
yo soy " bix ".
yo reacciono súper mal, " quedo entre una espada y la pared" y reaccioné cruzando su rostro con un fuerte bofetón que arrancó las primeras lágrimas de sus ojos, le dije que se fuera y no la queria verla nunca más.
Días después Marisa regresa a España, en la actualidad no trabaje mas en esa agencia, y reconozco que nunca existio sentimiento amoroso involucrado, solamente fue por placer.