Nunca me imaginé que podría estar tan salida, la verdad ya de chica había tenido algunos tocamientos con los vecinos del barrio, lo típico, algunos morreos con lengua, maternos mano e incluso uno me la intento meter en el ascensor del piso en que vivíamos.
La verdad no me enteré de nada (tendría unos 10 años) y el chavalillo yo creo que tampoco, pero yo estaba súper calentorra, se me mojaba el coño entero siendo todavía tan pequeña. Normalmente estaba siempre caliente y me gustaba meterme mano con una amiga de la escuela, experimentábamos tocándonos mutuamente la raja y de vez en cuando cuando nos quedábamos solas en casa nos lo comíamos mutuamente.
A mí me daba todo mucho gustillo, pero nunca había llegado a correrme , no sabía pajearme, pero el día que por fin llegue al clímax, ese día ya no pude parar de pajearme como las locas. Me metía lo que pillaba, aun no podía follarme a ningún tío porque era muy pequeña, pero no tarde mucho, sobre los 13 años tuve mi primera follada.
Y esta es la que os voy a contar en esta ocasión. El mito de que la primera vez duele, todo falso, yo disfrute como las zorras y jamás lo olvidaré.
Era verano, y me fue con mis padres de vacaciones al sur de España (soy hija única), a casa de unos tíos. Tenían 3 hijos, mayores que yo, sus edades 24, 22 y 18, muy guapitos y salidos, pero de eso me di cuenta mas tarde.
Después de estar allí unos días mis primos se iban un fin de semana a la playa con unos colegas en plan de acampada en una cala y convencieron a mis padres para que me dejaran in con ellos. El sitio era estupendo y también muy solitario, montamos unas tiendas de campaña y empezaron a sacar cervezas y me ofrecieron, yo la verdad nunca había bebido pero me gustó y no tardé en ponerme a tono.
Me había llevado un bikini muy pequeño (yo estaba bastante escuchimizada) de esos de triángulos, pero con las olas y los revolcones lo tenia todo el rato metido por mi culito y las tetitas se me salían a cada rato. Mis primos y los colegas me miraban mucho y se reían y yo con la cerveza me empecé a calentar.
Al poco rato, mi primo el mayor se me acerco mientras yo descansaba al sol tirada en la arena. Se tumbó a mi lado y me dijo que estaba muy buena para lo chica que era, yo me reía como las atontas y no sabía que decir. De repente empezó a untarme bronceador por la espalda, yo estaba boca abajo, lo hacia suavemente y fue bajando hasta llegar a mi culito, yo tenia todo el bikini metido por la raja, me tocaba cada vez mas cerca del coño y yo notaba que me estaba poniendo chorreando de flujo. ¿Te gusta? Me preguntó, yo no sabía que decir y contesté: sí, mucho. En ese momento llamo a mis otros dos primeros y a sus dos colegas y se sentaron todos a mí alrededor. Yo no sabía si moverme, notaba un montón de manos tocándome por todos lados, yo cada vez mas cachonda solo podía sollozar y uno de ellos, mi primo el mayor, me desabrocho la parte de arriba y uno de los colegas me quito el bikini. Yo en pelotas, chorreando sobre la arena del calentamiento que tenia, y todos tocando mis partes.
Entonces me volvieron y estaban todos en pelotas, con las pollas tiesas, yo aluciné. Mi primo el grande se acercó y me dice: ¿quieres chupar un poco, es como una piruleta, ya veras? Yo sin articular palabra empecé a lamer como si de verdad se tratara de un caramelo y sorprendentemente me encantó el sabor, y cada vez la chupaba más. Los demás se reían y hacían comentarios: "joder con la niñita, es mas putona de lo que pensaba", " eres una perra calentona y te vamos a enseñar lo que es una buena follada ", "te vamos a desvirgar todos los agujeros so puta".
Yo chupaba como una posesa, y dos de ellos colocaron sus pollas en mis manos para que las pajeara, eran muy grandes y no atinaba y con otra en la boca no me podía agarrar a ningún sitio y me la metía hasta la campanilla. Otro de ellos me empezó a comerme el coño, joder que gusto, me temblaban las rodillas y comencé a jadear como un verdadero zorron. Cuando mi primo estaba a punto de terminar la saco y se corrió entero en mi coño para lubricarme bien, y el que me lo estaba comiendo empezó a meterla muy poquito a poco. Cuando la tuvo toda dentro se comenzó a mover y yo pajeaba a los otros como loca.
Me volvieron a meter otra polla en la boca. Yo ya no sabía quien era quien. Tenían 4 pollas para mí, un sueño echo realidad. Pero faltaba una. Y no tardo en llegar. Note como uno de ellos empezó a lamerme el agujero del culo, yo me quede parada del gusto que me dio, aunque los demás me movían con él mete y saca del coño y la boca. Después de meterme la lengua hasta el fondo del culo me metió un dedo bien chupado y lo movió dentro, yo me retorcía y gritaba: " llename el culo con tu polla gorda" y el no tardo en hacerlo. Metió la punta y yo relaje el culo para que entrara toda..
Y vaya que si entro y hasta el fondo. Yo me quería morir, me notaba toda llena y casi no me podía mover pero ellos se encargaban de menearme bien como locos. Después al que le estaba comiendo la tranca se dio la vuelta para que le comiera el culo, me dio un poco de reparo, pero allí estaba lamiendo y metiendole la lengua por todo el agujero mientras me taladraban los míos.
Teníamos que ser un panorama espectacular. Yo con cinco tíos, uno en el culo, otro en el coño, dos pajeando y a otro comiéndole el culo. Según se iban corriendo, cambiaban de posición, y yo tuve tantos orgamos que ni me acuerdo del numero. Pero lo que sí recuerdo es todas las folladas como si las vivera ahora mismo, flujo, semen por todo mi cuerpo, me sentía como una guarra y me gustaba. Que me trataran como una puta y me hicieran todas las depravaciones posibles e inimaginables, superando incluso las de mí pervertida mente.
La primera vez y me marco para toda la vida. Fue tan fuerte para una virgen de 13 años y tan porno, pero a la misma vez disfrute y goce tanto, que el resto de mis días hasta ahora los dedico al sexo personal y profesionalmente.
Espero que os haya gustado mi historia y que os halláis pajeado como locos, porque yo lo voy a hacer ahora mismo. Un besito.