Vanesita El angelito del SEXO
Hola, lo primero que haré es presentarme, mi nombre por seguridad lo dejare como Alex, vivo en Chile, soy moreno, mido 1.93 ni flaco ni gordo, simplemente normal,
A veces salgo a correr, juego fútbol, y me fascinan los licores caros, bueno la historia comienza así.
Hace poco mas de 3 años, cuando yo me encontraba en los plenos 16, salí de viaje a Viña del Mar con mi padre, en asuntos de negocios, para esa época no tenia novia y mi contacto con las mujeres era muy escaso debido a la timidez que me rondaba, bueno hasta aquel día.
Me encontraba en el Comedor del hotel donde nos estábamos quedando, mi padre aún no se levantaba. Cuando mi vista se desvió a una de las mesas cercanas a la donde yo me encontraba, se encontraba una muchacha hermosa de primera viste uno le echaba unos 15 años, llevaba un peto verde con tirantes en los hombros y una faldita de mezclilla, media como 1.60 cm ojos como la miel, de pelo rojizo teñido, unos labios que llamaban a ser devorados, tenia unos pechos sorprendentes para su edad diría que llegaban a bordear los 88 cm aproximadamente, una cinturita de abeja y un culo tan redondo que creo que hasta la silla donde estaba sentada se estaba excitando como yo, se encontraba con al parecer su madre, la cual a pesar de los años era toda un ángel, comencé a mirarla de reojo e intentar escuchar datos sobre ella, logre escuchar su nombre Vanesa, demasiado sensual para ser verdad, para ese entonces ya la había estudiado completo con la vista, y mi miembro se encontraba en plena erección (no diré que lo tengo grande ni nada de eso, creo que normalmente en excitación alcanza unos 16 cm pero en este caso de seguro superaba aquello) si darme cuenta comencé a tocarme el pene y a frotarlo por debajo de la mesa y por encima del pantalón, de repente me di cuenta de que mi querida Vanesita me estaba mirando, yo solo atinaba a mirar de reojo.
Ella se levanto de su asiento dejando entrever aquel hermoso culito y de alguna forma me las ingenie para agacharme a recoger aquel cuchillo que "misteriosamente" se me había caído, alcanzando a ver sus calzoncitos blanquitos, dejando marcados dos labios que para mi sorpresa se notaban un poco húmedos, ella siguió de largo subiendo las escaleras, yo sin pensar más me levante de mi mesa y me fui discretamente a seguirla, subiendo las escaleras a una corta distancia de Vanesa, viendo como meneaba aquel precioso trasero, ella se detuvo en el baño de mujeres que tenia un cartel que anunciaba que estaba en reparación, aun así se metió dentro de él, lo que me llamo la atención.
Así que seguí de largo al baño de hombres y entre, con la sola intención de masturbarme con sus grandes pechos y su boquita mamandome el miembro, al entrar me di cuenta de la razón por el cual el baño de mujeres estaba en reparación, existía un hoyo del porte de un balón de fútbol, sin más me acerque cuidadosamente a él sin hacer ruido para ver a aquel angelito, cuando me acerqué quede totalmente plasmado, aquel angelito se estaba tocando enterita, un tanto lejos de donde yo me encontraba, tenia su mano derecha hurgando por debajo de su faldita y su mano izquierda masajeándose uno de sus maravillosos senos, emitiendo leves gemidos de satisfacción. Nuevamente mi pene se encontraba pidiéndome con salvajes ansias sacarlo a pasear, pero me contuve.
De alguna manera quería que ella supiera que la estaba viendo o simplemente que me encontraba al lado, así que me aleje de aquel lugar y di un portazo en el baño de los hombres y comencé a hablar en voz alta.
Dios mío que niña más rica, si parece un ángel, como desearía tocarle aquellas piernas, y poder besar aquellos maravillosos labios-
Sin darme cuenta mire de reojo por mi costado y me di cuenta de que alguien se movió rápidamente del hoyo, estaba listo. Nuevamente me acerque a mi lugar de antes y para sorpresa mía, Vanesa se encontraba solo en ropa interior, mirándome directamente, me ruborice y quise salir de allí, pero simplemente mis piernas no reaccionaban, Vanesa sonrió maquiavélicamente y se acerco agachándose a aquel hueco en la pared, extendió su mano por el, y sin más comenzó a tocarme el bulto que traía conmigo.
¡Pero valle que estas excitado! Espero que haya sido todo por mi, me dijo riendo
no pude responder, solo deje que siguiera tocándome el pene,
¿no eres muy comunicativo que digamos? Me dijo nuevamente, bueno no importa no hables solo déjame actuar a mi.
Yo estaba fuera de mi, esta niña era toda una maniática, de alguna manera me tocaba el pene por encima se los pantalones, haciendo sentir en mi mas placer de lo que nunca tuve. Prosiguió bajándome el cierre del pantalón y dejando a mi ya salvaje pene fuera en el aire, lentamente acerco su pequeña cabecita por aquel hueco y acerco sus labios a mi glande, y lentamente comenzó a untarse toda mi salchicha en su boca, hacia arriba hacia abajo, luego se lo saco y con su lengüita rápidamente lamió mi glande, el frenillo, todo, me encontraba en el cielo, acelero sus movimientos y nuevamente se lo puso dentro absorbiendo con ganas todo mi ser, no alcancé a decir nada cuando, ya me había venido en su boca, para mi sorpresa esta nenita se trago todo y me dejo bien limpio.
Cuando termino me dijo
¡ahora es tu turno de hacerme gozar se levanto y se bajo su bombachita y dejo entrever su maravillosa zorrita, que se encontraba bastante húmeda, y con pequeños pelitos rubiecitos, con un dedo comencé a masajear su clítoris que lo tenia bastante hinchado, alo que ella respondió con gemidos que me llamaban a seguir con todo, saque mi dedo todo húmedo y lo lamí con gusto, luego acerque mi lengua y comencé a atacar aquel hermoso campo de batalla, despacio en círculos, rápido y en línea recta, hasta que Vanesita mi querida Vanesita dejo salir todos sus jugos de mujer, pero yo no me detuve seguí y seguí como 15 minutos, debió haber tenido 3 orgasmos fácilmente, y para mi sorpresa, mi querido amigo se había levantado nuevamente, cuando termine, Vanesa se sentó en el suelo, jadeando y transpirando, dándome las gracias, quedo como inconsciente botada en el piso.
Así que me levante rápidamente salí del baño de hombres y entre con cautela al de damas, y la vi allí tirada en el piso, cerré con llave bajándome los pantalones en un santiamén ...
Pero eso es ya otra historia espero les haya gustado mi primer relato espero tener más luego, después les contare de cómo Vanesa no tan solo era así de buena en sexo oral, era mi primera experiencia y Vanesa me dio con todo...