Sexo, viagra y unos pantalones anchos de cintura ( Epilogo)

( Este relato .- aunque autoconclusivo- es continuación de “4,3,2,1...)

Lo que ha pasado hasta el momento:

JJ y Mariano, son dos sevillanos, que han decidido irse de vacaciones a Galicia. Llevan dos días de “Sexo y desenfreno”. Tanto que hasta comparte un improvisado trío con un gallego; trío, en el que Mariano experimentó dos cosas nuevas para él : la doble penetración y las excelencias de la viagra.

14 DE AGOSTO DEL 2010

La voz de una máquina diciendo que es tu hora de levantarte, no es la forma más agradable de recibir el día, máxime cuando te duele la polla de tenerla tiesa...¡ Si no me tenía que haber tomado aquella puta pastilla! Si no empalmaba, no es porque no pudiera es porque estaba supercortado … y es que después de tanto tiempo sin tener sexo con JJ, lo de ayer se me hizo un mundo... Pero en fin, lo de la doble penetración a mi amigo; bien lo había merecido … ( No sabía yo, de estas habilidades de mi JJ... ya le pediré que me cuente más detalles...)

Diez minutos en la ducha me transforman en un hombre nuevo; ¡Y tan nuevo! El agua fría normalmente bajan mis calores matutinas en la entrepierna, pero hoy eso no ha funcionado, después de secarme concienzudamente; mi hermanito pequeño sigue en posición de presentando armas... Bueno, este pantalón de algodón es amplio y disimulará un poquito el problema; jo, si supiera que haciéndome una paja se me quitaba, me hacía no una, ¡sino veintisiete...! Pero no, Juan José me dijo, que no era la solución; pues a pesar de los varios polvos que echó con Paco; él la tuvo tiesa hasta bien pasada la tarde... O sea, que está claro que un “parribapabajo” mañanero, no resuelve nada. Paradojas de la vida, ayer preocupado por que no se me subía, y hoy mi preocupación es que la jodida picha no se baja. Y es que con las churras, pasa lo mismo que con la Economía. Si todo lo que hace es bajar y bajar, malo ¡Muy malo!. Pero si todo lo que hace es subir y subir, al final... ¡Catapum! En fin, esperemos que cuando se pase los efectos, no haya complicaciones … Sino me veo visitando las urgencias de Vigo... ¡Puff, que mal rollo!

Tras terminar de arreglarme, abandono la habitación; dejando en ella a Juan José durmiendo plácidamente; a pesar de mi cautela, un poco de ruido si que he hecho,pero a mi amigo ni ha parecido importarle, ¡ni se ha coscado el muy cabrito!

Al pasar por la recepción del hotel, una sensación de vergüenza me invade ¿Se notará que voy empalmado? ¿ Por qué todo me tiene que pasar a mi ?

Mientras me sirvo el desayuno en el autoservicio del hotel, tengo la sensación de que todo el mundo mira mi indecente paquete; siento mis mejillas sonrosarse... ¡ Vaya bochorno que estoy pasando! Todo mi afán es sentarme y poder tapar aquel prominente bulto en mis pantalones... En cualquier momento creo que va a aparecer Mae West, preguntado aquello de :” ¿ Tienes una pistola en el bolsillo o es que te alegras de verme? “ Si no tuviera que recoger los malditos pantalones, ¡iba a salir a la calle hoy, quien yo me sé... !

Cojo un taxi para que me lleve a la zona donde está las tiendas de moda... Me siento en la parte de atrás y me tapo con las manos la entrepierna... Veras tu ahora, cuando llegue a la tienda, y el dependiente que me atendió, se de cuenta de que voy empalmado, después de lo de ayer, que me empalmé mientras me probaba los pantalones ¿ Qué va a pensar de mí? ¡se va a creer que soy un pervertido! ¡Y es que lo que no me pase a mi!... Porque los pantalones son taco de guapo, que o si no...¡Los iba a recoger un guardia!

Pues no veo al dependiente que me atendió. ¡Mejor! Yo le voy a dar el papel de la recogida a éste. A ver que pasa....

- Ahora mismo se lo traigo, señor.- Me dice el dependiente, con una elegancia que roza lo femenino.

Espero que no tarde mucho, porque como me vuelva a poner bien otra vez el paquete, el personal se va a creer que tengo ladillas... Ahí viene ,¡ menos mal!

- ¿Está seguro usted, que le dijeron que se lo iban a tener para hoy?

- Si , el chico que me atendió me dijo que me lo ponía urgente y que pasará hoy sin problema... Es que mañana abandono la ciudad.

- Es verdad, aquí está puesto...- dice señalando la esquina del recibo donde está estampada la palabra urgente- Debería estar... No sé que habrá pasado ...Espere que pregunto.

No, si me van a tener todo el día esperando, ¡ Veras tú! ¿ Donde habrán metido los pantalones dichosos? Ahora se ponen a discutir entre ellos... ¿ A quién estarán llamando por teléfono? ¡Si es que no me los tenía que haber comprado ! En fin, ya viene para acá el chico que me ha recogido el recibo de la compostura...¡ A ver que me dice.!

- ¿A usted le atendió Oscar Cifuente?

- No sé, un señor de unos cuarenta años, moreno, corpulento...

- Si, es él..Bueno, él dice que quedó con usted en que se los llevaría al hotel donde se aloja. Por lo visto le cogía de paso.

- ¡Ah, si!, Ya no me acordaba, la verdad es que anoche bebí más de la cuenta y no me he levantado muy fino- digo en un tono que aunque intenta ser convincente, me parece que no logra su objetivo. ¡Si fuera Pinocho, la nariz me llegaba por lo menos a Sevilla.! El joven que me atiende se queda un poco pensativo... ¿ Será porque no se ha creído la trola que le he metido o es que ha visto la empalmadera que llevo?

De vuelta al hotel, en taxi de nuevo, no dejo de pensar en porque ha dicho el tal Oscar que había quedado en llevarme los pantalones... bueno, un porque se me ocurre, pero se me apetece tan ilógico, que no me lo puedo creer... Me suena el móvil...

♫ ♫ Tengo una sonrisa para regalarte

tengo mil cartas de amor

y tengo todo el tiempo que perdí, sin ver el sol ...♫♫

Es JJ... ¿ Qué querrá?

- Sí, dime

- ¿Tú dónde estás?

- Yo en un taxi camino del hotel. ¿Por qué?

- Por que me quiero ir de “shoping.”... Así que te espero y nos vamos.

No le digo nada, ya tendré tiempo de explicarle la historia del tal Oscar y los puñeteros pantalones... No me compro más nada en esta ciudad, ¡ni de coña....!

Llego a donde está JJ. Éste para ir de tiendas; en un alarde de vanidad, se ha vestido con su ropa más juvenil. (¡Antes muerto, que sencillo!)Al verme bajar del taxi, me hace señas como para que me monte de nuevo, yo le hago un gesto de negación con la cabeza, él me mira con extrañeza.

- ¿ Qué carajo te pasa? ¿Se te ha fundido la neurona o qué ? - la voz de mi amigo, denota que se ha enfadado un poco- Ahora vamos a tener que esperar a otro. ¡Y no veas lo que tardan en pasar...!

- No se me ha fundido “la neurona” gracioso. - mi tono está cargado de bastante retintín- Es que no voy a ir contigo... Tengo que esperar al dependiente de la tienda

- ¿ Y eso? ¿No te lo tenían arreglado...?-comenta con extrañeza JJ, para terminar diciendo con absoluta firmeza- ¡Te dije que era muy pronto!

- No, es que por lo visto. Vive por aquí cerca y me los va a traer.- aunque intento sonar natural, no consigo enmascarar mi nerviosismo.

- ¡Uy..Uy..¡ Te está sentando a las mil maravillas esta tierra a ti... !¡ Vaya dos días que llevas.!- dice mi amigo con total picardía.

- Pues lo poco gusta, lo mucho cansa y el exceso empacha...-la acritud de mis palabras es latente.

- Hablas como mi padre.. ¡Parece mentira que tengas 35 años!...- a la vez que dice esto JJ, mueve la cabeza y se muerde suavemente el labio- Bueno ¿ Me vas a contar lo que te pasa? ¿Por qué coño, estás tan nervioso?

- ¡Que me va a pasar …!¡ Que todavía me dura el efecto de la puta Viagra... !- al hablar, levanto el tono de voz y me señalo solapadamente la entrepierna- ¡Tío !, que la gente me mira por la calle de la empalmadera que llevo.

- Mira chaval... Hay que fijarse mucho para darse cuenta de que vas empalmado.. Hijo, tú tendrás otras cualidades, pero hijo mio, ¡ te aseguro que no eres Nacho Vidal...!- dice mi compañero de viaje, en un tono absolutamente burlesco.

- Entonces , ¿no se nota?- no sé que es peor, el tono ingenuo con el que pregunto estas cosas o la cara de imbécil que se me pone. ( Mejor no hago ninguna encuesta, por lo que que pueda pasar )

- ¡Para nada so pavo....! Eso de que te mira la gente es otra “amparonia” de las tuyas. ¡ Relajate hijo mio , que estás de vacaciones! - dice JJ, riéndose y en ese tono tan cordial y agradable que lo caracteriza- Bueno, como tú te tienes que quedar. Ya te llamo yo, cuando termine y comemos juntos

- ¡ No me vayas a llamar muy tarde! Que ya nos conocemos, que te entra el síndrome “Paris Hilton” y no paras.

- Pero a ti qué más te da , si vas a estar entretenido con el dependiente.- las palabras de JJ están cargadas de ironía.

-Dejate de rollos, que no estoy yo “pa” milongas...- digo con absoluto convencimiento, a la vez que niego con la cabeza- A este le recojo yo los pantalones y hasta luego...

-¿Cuanto va a que sí? Mariano, que ya estoy yo acostumbrado,a que primero digas que vas a hacer una cosa y después, hagas lo contrario y te quedes tan pancho... - el tono de JJ es sarcástico a más no poder-¡ Qué ya nos conocemos! Que después te confunde la noche....

- ¡Lo que tú digas...! ¡ Que “jartible” eres ! Venga, hasta luego...- termino la frase moviendo la mano en señal inequívoca de que me deje en paz.

- Por cierto tapate, ¡que vaya el bulto que llevas!

- Pero..no me has dicho que...-cuando miro a JJ y éste me saca la lengua y me guiña un ojo; así que no tengo más remedio que reírme- Venga, ¡Vete ya, cabrón!

Odio, cuando se burla de mi ... Y mira que lo conozco... Pero siempre lo hace... En fin, ahora a esperar al tal Oscar, que supuestamente, me va a traer los pantalones ahora en la mañana.. Debería haberme llamado y decirme algo … Más pronto lo digo, más pronto suena el teléfono... Número desconocido, espero que no sea ninguna compañía telefónica.. Porque no estoy yo para escuchar a la “Jeniffer Vanesa” de turno...

- Hola ¿Sr. Mariano M.?- la voz de mi interlocutor tiene un leve acento gallego.

- Si, soy yo ¿dígame?

- Soy Oscar Cifuentes... En cinco minutos, estoy en su hotel para hacerle entrega de los pantalones, como quedamos ayer.

La gente le echa tela de cara para echar un polvo, encima intentaba convencerme, de que había convenido conmigo lo de la entrega en el hotel; ¡pues lo lleva claro!, si hay algo que me me moleste más que un baboso es un mentiroso, y el tal Oscar estaba demostrando ser uno a tener en cuenta.

Quedamos en la cafetería del hotel... Aún no he pegado ni un sorbo del caliente café, cuando el susodicho Oscar aparece por la puerta... Su aspecto es bastante diferente al que recordaba del día anterior, a diferencia de un encorsetado traje, su atuendo era una informal camiseta y unos holgados vaqueros gastados.. Me fijo en él y me parece más guapo de lo que lo recordaba, a ello ayudaba mucho sus inmensos ojos verdes y el que estuviera sin afeitar, lo que le daba un aspecto más varonil... mmmm... ¡A que le voy a tener que dar la razón a Juan José...! Cuando se acerca y me saluda, en su rostro se pinta cierta desilusión, sospecho que la ropa que visto, tan distinta a la del día anterior, ha destrozado la idea que se había hecho de mi... ¡ Mejor, así no tengo porque darle ninguna excusa para no subir con el al cuarto! ( Que en el fondo,es lo que él está buscando) Le invito a un café por cortesía, él lo acepta... Poco después charlamos de manera relajada, mientras bebemos el caliente liquido...

-Sé que es deformación profesional, pero ¿ Me permite una observación?- dice con un aire solemne, digno de los dependientes de los grandes almacenes.

- Sí, si dejas de llamarme de Vd. .. es la quinta vez que te lo digo- a la vez que pronuncio esto último, mis labios exhiben una amplia sonrisa

- Bueno... - la sonrisa de Oscar es preciosa- ¿ Me permites una observación?

- Sí, hombre. ¡Venga, desembucha ya …!- digo en tono cordial.

- Procura vestirte así siempre... Te favorece más... La ropa con la que fuiste a la tienda, es demasiado llamativa.

- Llamativa rozando lo hortera... ja ja ja. Era un regalo y me lo tenía que poner por narices.- sentencio yo intentando justificarme

A la vez que avanza la conversación, el mentiroso de Oscar me parece un tío de lo más interesante... No sé si soy más blando que facilón, o ambas cosas a la vez; el caso es que me estoy dejando seducir. Lo que más me tiene prendado de él, es su forma de expresarse y que no te aparta la mirada cuando habla contigo, constantemente, sus preciosos ojos verdes buscan los míos; como si me hablaran, con un código de complicidad no escrito..

- Lo que no tengo muy claro... Es que el arreglo esté hecho en condiciones... Yo que tú me lo probaba y si no es de tu satisfacción... siempre te pueden devolver el dinero- su voz, transmite una encantadora mezcla de timidez y picardía; la cual me seduce por completo....

Cinco minutos de que el atrevido dependiente haga esta solapada proposición, yo he decidido que no se va a ir de vacío... Pero antes, me voy a divertir un poco con él ... Si, se lo pongo muy fácil ¡ Qué va a pensar este hombre de los Sevillanos!....Las cosas, hay que hacerlas bien y dejar el pabellón bien alto.

- Pues subo, me lo pruebo y ahora te digo como me queda- digo como quien no quiere la cosa.

- Sería mejor que alguien te lo viera y le diera su opinión. Para la altura de los bajos, siempre es mejor que te de el visto bueno otra persona...

- ¿ No te importa subir?

- Para nada, hombre.. Lo prefiero, incluso...No quiero que te lleves una mala impresión de Vigo.

Las palabras de Oscar están cargadas de dobles sentidos, yo juego a hacerle creer que no me entero de nada y actúo con total naturalidad... El tío está bueno, pero lo voy a hacerte sufrir un poquito...Un poquito nada más, que la vida es muy corta.

Subimos a la habitación, paso al baño para probarme los pantalones y cierro la puerta tras de mí; en un claro gesto, de hacerle ver, que no va a haber nada sexual. Todo puro teatro; estoy deseándolo tanto como él.

Cuando salgo vestido con mi nueva adquisición, me encuentro con el atractivo dependiente sentado en el sillón, el mismo en el que estuvimos follando JJ, Paco y yo la noche anterior. Tiene las piernas abiertas, dejando entrever un abultado paquete bajo la portañuela de los vaqueros; mi mente comienza a lucubrar, con la excitante imagen y el corazón se me pone como una moto... Me controlo, aunque no puedo parar de mirar el pronunciado bulto del vigues(¡seguro que te has empalmado cabronazo, pero te vas a esperar un poquito!...)

Al llegar a su altura, Oscar se incorpora y se transforma radicalmente . Ya no es el chico jovial, con el que degustado agradablemente un café... Ahora es el impersonal dependiente que me atendió el día anterior... Observa en silencio, como me queda la prenda de vestir, me mete los dedos por la parte delantera y se agacha ante mi, pasa su mano por el tiro del pantalón, acariciando de manera muy tenue mis testículos... Me hace dar la vuelta y esta vez introduce los dedos en la parte de atrás...

- Están perfectos... Le quedan como anillo al dedo... ¿Es usted tan amable de volverse para que vea como le queda por delante.

Me doy la vuelta, mi entrepierna queda a la altura de su cara, acerca su boca hacia mi abultado paquete y durante unos breves segundos respira profundamente a pocos milímetros de mi polla...El calor de su aliento sobre esas zonas erógenas de mi cuerpo, hace que mi empalmado cipote comience a tomar vida propia bajo el tejido. Mi acompañante es consciente de ello y acerca sus boca empapando la tela con su caliente saliva... Sus labios circulan a través de la prominencia que marca mi pene bajo el pantalón,dejando un hilillo de baba sobre la tela, como si, de una manera libidinosa, la pespunteara.... Oscar se entrega a la tarea de manera minuciosa, sin prisas, haciendo vibrar al ataviado miembro al paso de su boca.. Mis ahogados suspiros, sirven de estimulo para prolongue más aún, mi placentera agonía... Mientras morrea mi paquete por encima del pantalón, una de sus manos acaricia su entrepierna (¡ no está mal servido el muchachito!- pienso al ver la dimensión del agarre de su dedos.)

Se ha tenido que cansar de jugar, pues de manera casi violenta desabotona los pantalones y tira de ellos para abajo... ¡Vaya ojos que se le han puesto cuando ha visto el bulto bajo el boxer..!. Pasa su lengua sobre el algodón, esta vez de modo más salvaje, desde el tronco hasta el prepucio...Quejidos entrecortados escapan de mi garganta... Tira de la prenda intima hacia abajo, mi polla queda a la altura de su boca por unos segundos; sin pausa alguna, trata en engullirla de golpe...La boca de Oscar es puro fuego, su mamada es frenética desde el primer momento, ocasionandome por momentos un leve y placentero dolor...Se ve que el atractivo vigues tiene ganas de polla, ha pasado de un suave y morboso morreo sobre la ropa, a una vertiginosa y trepidante succión... Cuando sus manos agarran mi culo para facilitar la mamada, me mira buscando mi aprobación... Le sonrío, y aprieto sus manos entre mis dedos...

Rota la barrera de mi posible negativa, a que me toquen el culo, Oscar pasea sus dedos a lo largo de la raja de mis glúteos, arrancándome unos espaciados suspiros. Sus ojos vuelven a buscar los míos, y en un lenguaje no escrito, le respondo que siga... que lo estoy deseando... Su ruda boca se traga mi nabo, mientras sus dedos caminan hacia mi hoyo...Empujan contra sus paredes intentando traspasarlo... primero de manera suave, después de manera un poco tosca.. Al oír una queja de dolor por mi parte , se detiene....

- ¿ Tienes lubricante?- la última palabra, la pronuncia como si ésta fuera tabú. Así, que tras responderle afirmativamente con la cabeza, buscó el maravilloso bote, al cual tanto partido se le está sacando estás vacaciones.

La pegajosa crema resbala por sus dedos, antes de hurtarla en mi agujero... Una vez completa el pequeño ceremonial, vuelve a meterse mi nabo en la boca y se la traga todo, sin darme tiempo a reaccionar. Sus labios hacen un refinado trabajo sobre el empinado falo, mientras sus dedos siguen intentando horadar mi culo...Cuando su indice logra penetrar en mi interior, me da, a modo de recompensa, lametazos desde la cabeza hasta el tronco. Todo mi ser se estremece ante el placer que lo invade, mi nabo vibra dentro de su boca, cada vez que su dedo entra y sale de mi esfinter. Le pido que pare, si no quiere que me corra... Hago que se incorpore, sus ojos buscan los míos, nuestras bocas se acercan, culminando en un intenso y prolongado beso... Nos acariciamos mutuamente, mis manos recorren apasionadamente su tórax y su espalda; le hago desprenderse de la camiseta.. ¡ Jo que bueno está el cabrón! Una manta de pelo rizada y negra cubre unas abultadas tetas, las cuales están coronadas por dos anchos y oscuros pezones... Sin pensarlo acaricio al unisono aquel semigrasiento busto, para terminar chupándolos despacio , primero uno; después el otro...

-¡Joder macho, que bien lo haces !- dice Oscar con total complacencia.

Sigo dando lametazos a aquel peludo pecho, succionando los anchos pezones al recorrerlo; me agacho y paso la boca por la prominente panza, en un desenfrenado viaje hacia su pelvis... Desabrocho impacientemente el cinturón, el me ayuda con el botón y la cremallera, dejando a la altura de mis ojos el abultado paquete que se marca bajo sus calzoncillos; como queriendo devolverle el placer que me ha regalado, momentos antes; morreo su miembro por encima de la tela, pero la excitación me gana la batalla y sin preámbulos dejo salir a la bestia...

-¡Ostia, tío!- grito inconscientemente.

Ante mí tengo una de los cipotes, con una de las erecciones más hermosas que he visto; aquella verga despierta mi lívido, nada más verla , no es por su tamaño ( el cual , dicho sea de paso, es bastante superior a la media ) ,no por que sea gorda ( que lo es) ; no se explicar que me gusta más de esta polla, si como se le marcan las venas a lo largo de su tronco, si su pronunciada cabeza, que sin ser desproporcionada se me antoja enorme, o en cambio, lo que más me agrada, es esa dureza que se reconoce en su palpitar. El caso, es que no puedo evitar, querer metermela, sin dilación, entre los labios.

Agarro sus hermosos y peludos huevos con una mano, mientras con la otra acaricio aquel exquisito falo, desde la cabeza hasta el tronco, desde el tronco hasta la cabeza...una vez y otra. Me meto el carajo en la boca, degustando su cabeza con la lengua, un lametón en el orificio central, otro en el lateral.. glup.. glup... Ahora me meto este pedazo de carne al completo, hasta que mi campanilla hace de tope, mi saliva viste calientemente este buen cipote... glup.. glup... sigo chupando... como si me fuera la vida en ello... glup... glup... Un hilo de caliente saliva resbala desde mi boca, hasta el tronco de aquel descomunal carajo...

Mientras mi boca degusta aquel hermoso vergajo, mis manos pasean por sus robustas piernas; un manto de vello oscuro rizado la cubre por completo. El tacto de mis dedos descubren, que a pesar de estar ejercitadas; demasiadas horas de pie, han pasado factura en forma de pequeñas varices, en la zona de la pantorrilla. Aún, así el tío tiene unas piernacas, las cuales da gusto acariciar.

Las manos de Oscar empujan mi cabeza contra su pelvis, en un intento de ensartar mi garganta un poco más, unas pequeñas arcadas le demuestran que he llegado a mi tope, aún así empieza a mover sus caderas en un acto salvaje de querer follarse mi boca.. Pongo mis manos alrededor de sus peludos glúteos, los aprieto fuertemente. Un leve quejido de placer escapa de sus labios. ¡ Que buen culo tiene!

- Date la vuelta, “porfa”- cuando pronuncio esta leve suplica, un hilillo mezcla de saliva y liquido preseminal resbala por la comisura de mis labios.

Observo aquel hermoso trasero, redondo y apretado como él sólo; un vello oscuro y rizado lo viste por completo... Paseo mis dedos sobre él, como jugando a recorrerlo. Muevo la cabeza en un gesto mezcla por igual de rendición y negación, me relamo solo de contemplarlo.. ¡Mmmm, qué rico!... Hurgo en la raja intermedia y cuando le pido que abra las piernas, el me complace plenamente.. Meto mi lengua en el orificio, provocando en él un prolongado suspiro... Le regalo un beso negro, como pocas veces he realizado. Mientras succiono, chupo, muerdo... aquel poblado orificio, mis manos intentan masturbar su hermosa polla...Cuando lo creo conveniente mis dedos acarician sin premura el semidilatado agujero... descubriendo para mi satisfacción, que en aquella pasarela, ya ha habido desfiles de moda.. Le pido que me alcance la crema lubricante... Oscar me la acerca con una sonrisa, al mismo tiempo que me lanza una pregunta.

- ¿ Tienes preservativo?

Una vez me enfundo el profiláctico, le pido que se ponga a cuatro sobre la cama; con el fin de terminar de dilatar su esfinter... sin prisas, que sino después, todo se jode... Introduzco mi polla a través de sus glúteos, dejando que sea su hoyito el que marque el ritmo; poquito a poco, que no hay prisa, así, así...Traspasado el primer anillo, mis caderas marcan el compás... toma, toma... ¡ ni la mitad que te mereces cabrón! … ¡ toma , toma! Me dejo llevar por el ritmo que marcan mis testículos al chocar contra su perineo. Después lo agarro fuertemente por la cintura, como no queriendo que se escape del incontrolable “meteysaca”; mi falo entra y sale del cada vez menos estrecho orificio, al compás de unos desenfrenados gemidos...En el momento que mi polla empieza a gritar que quiere correrse, paro en seco...¡ no todavía no... .!

- ¿Por qué paras?- pregunta Oscar, con un gesto de desilusión en su rostro.

- ¡Quiero que me folles!- Mi tono es mitad orden, mitad suplica.

Me oigo y no me reconozco; ¡Cómo puede cambiar uno tanto en unos días! Desde que mi relación con Enrique llegó a su fin, no he vuelto a tener pareja; como mucho he repetido un par de veces, a lo sumo tres, con algún tío... De ahí, que hayan sido pocas las veces que me haya dejado penetrar. Y todo es, porque hasta ahora, había considerado ese acto, como algo super intimo que, sólo podía tener lugar, cuando se implicará sentimientos. Pero, desde el polvo con el ejecutivo burgues; todo ha cambiado. No sé que es que lo que me ha ocurrido. Pero está claro que una puerta que habia permanecido cerrada, se ha convertido en la entrada de unos grandes almacenes, en los primeros días de rebajas.

Los ojos del dependiente se clavan en mi, dejando que el deseo fluya entre los dos. Sin decir esta boca es mía, Oscar me ayuda a deshacerme de la poca ropa que aún llevo puesta. Una vez estoy completamente desnudo, me empuja sobre la cama, levanta mis piernas dejando mis píes a la altura de su boca, los mira jubiloso, a la vez que se relame los labios y comienza a besarlos... los primeros besos son cortos y espaciados, al no ver ninguna cortapisa por mi parte, los siguientes se vuelven mas prolongados; culminando éstos, en unas pequeñas chupadas, tratando a las falanges de los dedos de mis píes, como si de órganos sexuales se trataran...Mientras chupa uno de mis pulgares su mirada busca la mía en un gesto de morbosa complicidad... Al principio su lengua, sobre la parte baja de mis extremidades, me produce un poco de cosquillas, pero estas son sustituidas por un continuo gozo que trepa por mis píes haciéndome estremecer por completo...Cuando se cansa de jugar con mis dedos, agarra mis femorales y tira de ellos, en pos de acercar mi culo a su boca, mi cuerpo queda casi en volandas, mis únicos puntos de apoyo son mis codos y mi cabeza... me sujeto con mis píes a su cuello

- ¡ Peladito, qué rico !- al descubrir mi rasurado agujero, los ojos de Oscar parecen arder de lujuria.

Escupe sobre mi ano, mezclando su saliva con el gel lubricante, juega con sus dedos a hacer círculos sobre mi hoyito, mientras sus labios profieren un sinfín de obscenidades ininteligibles.(Algunas, creo que son en gallego) Agarra mis glúteos con sus manos, oprimiéndolos y soltándolos para deleitarse en como se dilata mi agujero en el transcurso, vuelve a escupir una vez, otra... Mi ano resuma el liquido caliente, parte imagino que cae sobre las sabanas; otra resbala por mi perineo, empapando mis huevos... Su lengua chupa la extraña mezcla de saliva y gel que se ha formado en aquel pequeño crater... chop... chop... Por la pasión que vuelca en ello, el sabor no debe ser desagradable... Su boca deja paso a sus dedos que siguen jugando a pasear en círculos por mi depilado ano... acto que se consuma cuando uno de sus dedos atraviesa con facilidad mi esfinter... primero uno, después otro... el índice y corazón izquierdos de Oscar, se retuercen logrando dilatar poco a poco la entrada de mi orto... Es tanto el placer que me esta proporcionando, que el dolor no alcanza ningún protagonismo.

-¿ De verdad quieres que te la meta? Estás muy estrecho...

- Sí,... estoy deseando y además sé que tú me vas a tratar bien- superado por el placer, las palabras salen de forma entrecortada de mi boca

- No te preocupes pues, te voy a tratar bien.... ¡ Tan bien, como se merece ese cuerpo que tienes!- al decir esto, el rostro del dependiente se llena de una satisfactoria sonrisa.

En el momento que me hace ponerme a cuatro patas sobre la cama, mientras el se coloca el preservativo, contemplo en toda su dimensión el vergajo del gallego. Y lleva razón el hombre, la enorme polla que se gasta el amigo Oscar, no es de la talla de mi culo; pero ya puestos, tampoco pierdo nada por probarmela. ( Lo mismo hasta me sienta bien, y todo.)

Una vez cumplido el obligado ritual del lubricante ; el caliente dependiente, empieza a empujar su polla contra la raja de mis glúteos. Me pide que me agache un poco, respiro profundamente para hacer menos doloroso el paso en mi interior de ese mastil de carne, se toma su tiempo, despegando mis cachas para hacer más factible la penetración...ufff....

poco a poco...ufff.... despacio... ufff; una amalgama de placer y dolor atenazan mi ser... mis manos se agarran bestialmente a la manta de la cama, destrozando su apacible forma. Guturales quejidos escapan de mi boca cuando el hermoso falo logra explorar mis interiores... Ahora sale, ahora entra...Uff, ¿cuanto placer puede albergar un cuerpo antes de explotar? Unas sonoras palmadas de Oscar en mi trasero, me recuerdan que no estoy saciado... que quiero más...Hecho una de mis manos hacia atrás para alcanzar sus genitales, en un alarde de corroborar que parte de esa hermosa herramienta a horadado mis entrañas, sólo puedo acariciar sus testículos, que a modo de tope chocan contra la parte cercana de mi perineo. Esta claro, que mi culo es capaz de albergar más de lo que parece en un principio. Así que me relajo y me dejo hacer por el vigoroso macho que ha demostrado ser el tal Oscar, pues, por lo que parece, no se cansa de entrar y salir de mi.

No sé que tiempo estamos así, sumidos en un baile desenfrenado de placer; estoy disfrutando tanto que se me hace cortisimo. Sin querer,me vuelvo a correr sin tocarme; es la segunda vez, que me pasa en poco tiempo... Cuando Oscar es consciente de mis placenteros quejidos; acompaña a éstos con una compulsión, señal inequívoca, de que él, tambiénha alcanzado el orgasmo.

El tiempo pasa deprisa cuando estas a gusto.. Por eso cuando nos tendemos en la cama y nos entregamos a la satisfactoria tarea de besarnos y acariciarnos, tiene que ser el puñetero móvil el que nos devuelva a la realidad.

♫ ♫ Tengo una sonrisa para regalarte

tengo mil cartas de amor

y tengo todo el tiempo que perdí, sin ver el sol ...♫♫

Por el tono que suena , sé que es JJ, rechazo la llamada ( no tengo ganas de que se ponga a preguntar y a preguntar , como el acostumbra y me ponga en evidencia delante del dependiente) miro el reloj y exclamo, llevándome instintivamente una mano a la cabeza:

- ¡ Coño, son las tres!

- Se nos ha pasado el tiempo..

- ..follando.- concluyo despertando en Oscar una amplia sonrisa

Nos volvemos a besar, invito al gallego a asearse... Y después de una rápida ducha

-¿Todavía la tienes tiesa?- los ojos del atractivo dependiente se abren presos del estupor.

- Es que tarda bastante en bajarse- miento como un bellaco, pues me da vergüenza contar lo de la puta pastillita.

- Porque tengo prisa.. Que si no, ya te diría yo a ti - dice Oscar abrazándome, para acto seguido besarme apasionadamente.

Después de un prolongado muerdo, nos vestimos. En esto yo decido, que esta tarde es tan buena como otra, para estrenar los dichosos pantalones

- ¡Le quedan estupendo los pantalones!- me dice el gallego sonriendo picaramente.

- Creo que, a estas alturas, ya me puedes hablar de tú ¿ O qué necesitas que pases entre nosotros para hacerlo? - le digo riéndome-Por cierto, ¿ te pasa mucho esto?...

♫ ♫ Tengo una sonrisa para regalarte

tengo mil cartas de amor

y tengo todo el tiempo que perdí, sin ver el sol ...♫♫

Esta vez acepto la llamada y en un tono que roza el enfado:

- ¡Ahora te llamo, pesado...! Que en este momento no puedo hablar contigo...

Me vuelvo hacia Oscar y prosigo la interrumpida conversación.

- Te decía que si te pasa mucho esto

- ¿ El qué?

- Acostarte con un cliente

- Es la primera vez, y no voy a negar que hubo veces que se presentó la ocasión... pero no lo hice. Pero, es que tú merecías la pena. Aparte de estar buenorro; tienes cara de buena persona....

- Gracias por la parte que me toca...- al decir esto, siento como el calor sube a mis mejillas.

Lo vuelvo a besar, esta vez mis labios no están cargados de pasión, sino que reflejan agradecimiento, por el momento vivido.. Cuando se va me quedo apoyado sobre la puerta con una sensación felizmente triste, pero estas despedidas son un peaje de pago obligatorio en esta vida que he decidido vivir... Voy a ver que tripa se le ha salido al tocapelotas de JJ

Continuara en “Culos hambrientos para pollas duras” ( ¿Qué pasa?... También uno tiene derecho a tener momentos “románticos”)

Si has llegado hasta aquí. Muchísimas gracias por leerme, pero si te pasas por la pestaña de valoraciones, mejor que mejor. También se admiten comentarios ( es la única manera que tengo de saber que te gusta y que no de lo que escribo)

Si te gustó, y quieres saber más de las vacaciones de estos dos Sevillanos, puedes buscarte en mi perfil.“Sexo en Galicia con dos heteros”

A todos los que dejaron un comentario en el relato anterior, muchas gracias y a modo particular:

A gippal( Aunque sé que este no mucho de tu estilo, espero que te haya gustado) ; a mmj ( Me encantas como te fijas en los detalles más sutiles, ¡eres la leche tío!); a jj1970 ( Muchas gracias hombre, seguiremos aquí; mientras me aguantéis);a bicrod ( “Bienvolvido” hacia tiempo que no recibía un comentario tuyo; creí que habías dejado de leerme y todo) ; a elbotiija10 ( Por lo que me dices, el personaje de JJ, te gusta; ¿ Cómo es que no me has comentado nada del relato “2 pollas para mi culo”? ¿ no te gustó? Es el trío con el gallego narrado por JJ) ;a Karl ( Muchas gracias. Lo que dices viniendo de ti, es un lujo. Y si te ha gustado Guillermo, no te pierdas el próximo: “Celebrando laderrota” ; a kantidubi ( Espero, que este te haya gustado un poco más, que el anterior. De todas maneras, gracias hombre; como siempre, te curraste el comentario) y a Gabonice (Me alegro-no sabes cuanto- de que te gusten; espero que te llevaras buenos recuerdos de esta tierra nuestra)

Bueno sin más hasta la próxima....