La despertó el sonido de la puerta, abrió los ojos y vió entrar a Carmen una doctora de pediatría con la que había hecho cierta amistad, le dijo "Me quedé dormida" y Carmen se sentó a un lado de la cama en la que ella estaba y le preguntó "¿Vas a comer en el hospital?", ella le dijo "Si, el único día que me salvo del suplicio de la comida hospitalaria son los miércoles", Carmen le dijo "¿Y si comemos en el restaurante de la otra cuadra?, dicen que se come bien", y ella aceptó, ya en el restaurante le preguntó a Carmen "¿Como te apasionas con el sexo?", Carmen puso cara de desconcierto y dijo "¿Qué?, ¿te refieres a volverte adicto, ninfómana, o a algo así?, yo soy pediatra Susy, pregunta en psiquiatría".

Ella tragó el bocado que tenía en la boca y le explicó "No, no, no me refiero a eso, sino a como nace en ti el deseo, ¿te descontrolas?, ¿te quieres comer a tu hombre?, ¿O como?", "Te refieres a lo que hago durante el sexo, desde el principio?", "Si a eso, te lo pregunto a ti, a Carmen".Carmen la miró tratando de encontrar la razón a su pregunta y le respondió "¿Por qué la pregunta?, ¿es un experimento o qué?", "No lo tomes a mal, era solo para saber si yo estoy mal, pero olvídalo, mi pregunta estuvo muy fuera de lugar", Carmen le sonrió y dijo "Leí un día que la excitación sexual es solo un instinto reproductivo hace que se secreten muchas endorfinas al grado de bloquear partes importantes del cerebro, entre ellas la razón, o sea que te hace actuar llevada solo por el instinto.

Lo comparaban al instinto de supervivencia que te hace luchar, incluso sacar fuerzas increíbles por sobrevivir, fíjate que al instinto reproductivo es a lo que se le llamaba "el demonio de la lujuria", o sea algo que se apoderaba de ti, pensaban que te había poseído el demonio y te confieso que yo si me dejo poseer por el demonio y por mi hombre, me dejo llevar por mis instintos, se me mete el diablo hasta el fondo, además de otras cosas", Susana le sonrió y preguntó "¿Cómo Carmen?, me refiero a lo que haces físicamente" la amiga le dijo "¿quieres que te lo diga con detalles?, uyy", "No tanto, pero dime algo al respecto", Carmen terminó de comer bebió de su vaso, "Mira, respondo a las caricias de una manera absolutamente fuera de control, me lo quiero comer, me gusta sentir el aliento de nuestras bocas abiertas, me pongo a besar y a lamer todo su cuerpo y me refiero a todo, mezclamos nuestras salivas y saboreamos todos nuestros cuerpos, las respiraciones son agitadas y cuando….." hizo un silencio mientras la mesera recogía los platos y les ofrecía el postre.

Les sirvieron el postre y Carmen continuó "Y cuando estamos ardiendo ya sin control que solo deseamos "eso", lo hacemos de todas las maneras posibles, no pensamos en otra cosa que en terminarlo y cuando se llega al clímax terminamos sudados, lamidos, llenos de los fluidos corporales del otro y absolutamente relajados y poco a poco vamos recuperando la conciencia al grado que yo he tenido que recurrir a la píldora del día siguiente ya que me importaba poco no habernos cuidado, ¡imagínate!, ¿quien es ese momento piensa en salir a comprar un condón?", "¿Entonces, según lo que me dices tu mente está perdida en un solo objetivo que es el placer?, no hay razón, no hay prejuicios, nada que no sea placer", "Pues si, ¿No te pasa a ti lo mismo?", Susana respondió "Si claro, exactamente lo mismo, me pierdo en la pasión"

Regresó al hospital, revisó al paciente de la cirugía, fué a su consultorio y ya por la noche pasó a casa de su hermano, cuando le abrió Eugenio la primera pregunta fué "¿que dijo el doctor de Alina?" "Ya la revisó, le mandó un té y que descansara, que en dos días está bien", "¿Ha tenido fiebre?", "No hermanita, solo catarro", subió a la recamara vió a Alina, la revisó, le dijo que no se preocupara por el bebé, y bajó con Eugenio, se metió al despacho y le dijo "Préstame unas películas de las que tienes escondidas", él puso cara de admiración y le dijo "A caray, mi hermanita tiene pelea hoy en la noche", sacó varias películas y ella tomó dos, mas llevada por las fotos del estuche del DVD que por el título, "Te las regresó mañana".

Llegó a su casa cerca de la 8 de la noche, entró en su departamento y se metió a bañar, estuvo un rato bajo el agua caliente, salió, se puso una panty limpia y sobre de ella el pantalón de su pijama y la camisa de la misma, abrió el refrigerador se quedó observando lo que había en su interior, no tomó mas que una cerveza y se dirigió a su cuarto a ver una de las películas, escuchó a la mujer gritando "ah, ay, more, ha, ha" y él "oh, oh, am, mm", "Diablos, esto no enseña ningún tipo de pasión." Se dijo, sin embargo lo visto la había excitado, mucho al grado de humedecer su vagina, se levantó y sacó su juguete en forma de pene y un pequeño vibrador accionado por baterías, puso el vibrador en su entrepierna, pensaba masturbarse nuevamente.

Quitó la película que había terminado y puso la otra, se quitó el pantalón del pijama, y metió bajo su panty el pequeño vibrador que tenía el tamaño de un pequeño cilindro, cuando lo pidió por internet le decían "bala vibradora". En la TV apareció un matrimonio desayunando en traje de baño junto a la alberca de un mansión, llega una amiga, pide que le regalen una uva y la esposa le dice "si se la quitas a mi esposo de la punta del pene", él baja el traje de baño y aparece un pene realmente monumental, él se pone la uva sobre el pene y ella se come la uva y el pene, "¡que manera de chupar tiene esta mujer!, lo mete todo en su boca" pensó ella mientras la bala vibraba sobre sus labios vaginales.

La siguiente escena es dentro de una habitación donde las dos chicas besan al hombre y se juntan las lenguas de los tres, él se acuesta sobre la cama y mientras una le chupa el enorme pene la otra se "monta" sobre su cara para qué el saboree su vagina, Susana estaba muy excitada y pasaba sus manos sobre sus muslos pero en ese momento fué distraída por el timbre de la puerta, puso el DVD en pausa, apagó el vibrador se iba a poner el pantalón de pijama pero pensó que podría ser el hijo del vecino un chico de 21 años que estudiaba el primer año de medicina y que a veces la visitaba para que le explicara algo de sus estudios, hoy no lo haría, hoy le enseñaría algo mas que medicina.

Se desabotonó dos botones de la camisa para dejar ver la parte de en medio de sus pechos y fué a la puerta de entrada del departamento, estaba excitada y dispuesta a abrir la puerta a cualquier conocido y ser poseída hasta caer desmayada de placer, se asomó por la mirilla y vió a Mónica, abotonó su camisa y abrió la puerta diciendo "¿Qué paso chaparra?", Mónica entró en el departamento diciendo "Nada, que los chicos se fueron al ridículo retiro espiritual que cada año organizan en su escuela y mi encantador maridito tuvo que "salir de viaje con urgencia" y todos regresan el sábado y como yo no me pienso quedar sola en casa, pensé que mi amiguita de la infancia me dejaría dormir dos días en el cuarto que tiene desocupado", ella rspondió "Si claro, está a tu disposición".

Mónica metió un bolso donde llevaba su pijama al cuarto desocupado y mientras se cambiaba de ropa le preguntó, "¿Y tú que hacías en calzones amiguita?", Susana respondió "Viendo películas porno", Mónica respondió fingiendo estar escandalizada, "¡Susana!, no me digas eso que se me "brinca el escapulario", mi amiguita viendo cosas inmorales, eso no puede ser, viendo cochinadas, tipos cogiendo con unas pobres e inocentes jovencitas, ¡que inmoralidad!, ¿están buenas?", "Pues solo los actores", "Y para que las ves, solo te vas a calentar a lo pendejo", Susana se metió con ella al cuarto y mientras sacaba la ropa de cama le platicó lo que había pasado en la mañana en el hospital, Mónica le preguntó "¿Y tú piensas que viendo esas películas podrás dejar de ser un hielo?"

Susana quedó pensativa y respondió "No, es una actuación exagerada, gritos, gemidos y pujidos, pero la verdad si te pone caliente", Mónica se puso su camisón corto y le dijo "Vamos a verlas, a mi me gusta ver ese tipo de películas, la verdad me ponen cachonda", entraron a la recámara de Susana y Mónica al ver los juguetes le dijo "vaya, por lo visto no solo las veías, te querías sentir la artista", Susana rió sonrojada y oprimió el botón de play al control del DVD, las escenas del hombre con las dos mujeres continuaron, hacían un trío, las dos mujeres gritaban, Mónica expresó "Uf, que cosa tiene este hombre y mira que nalgas tan bien formaditas, con ellas empuja dentro de ti, ya se me antojó".

Susana solo respondió "si, se ve atractivo", Mónica la miró y le dijo "¿Atractivo?, está delicioso amiguita, ya quisieras algo así para una nochecita de sexo y locura, mira, mira como la chica grita cuando le empuja la verga hasta el fondo, si que eres fría amiga, o te cuesta aceptarlo, yo ya estoy húmeda, ¿y tú?",Susana se mantuvo en silencio, pero no podía negar que estaba bastante excitada, la escena cambió, en ésta el hombre ponía a las dos mujeres a besarse y acariciarse, Mónica preguntó "¿Lo has hecho con una mujer?", Susana replicó "No, como crees ¿y tú?", "tampoco, pero me decía la ex esposa de Carlos que es rico, ya que la mujer sabe como excitar al 100% a otra mujer".

Susana preguntó "¿La ex de Carlos?", "Amiguita vives en otro mundo, a Carlos lo dejó su mujer por otra mujer, él sospechaba que ella tenía un amante y ella se lo confirmó diciéndole que era lesbiana, ¿te imaginas?, que tu marido te dejara por otro hombre, eso si que ha de ser duro, pero después te platico, déjame ver esto". Continuaron viendo la película, Susana puso su mano sobre el muslo de la amiga quien puso su mano sobre la de ella, "que suave está la piel de sus muslos, por eso tiene al hombre que quiera y yo sigo sola, pero no, no es eso, mi piel también es suave y no tengo a nadie" pensó Susana, Mónica volteó la cara para mirarla, notó lágrimas en los ojos de Susana y le preguntó "qué pasa amiguita?".

Susana respondió "No sé, estoy desesperada, sola, triste, deprimida, nunca podré encontrar a un hombre y todo por ser un maldito témpano", "Cálmate amiguita, todo a su tiempo", "¡Por Dios Mónica!, a que tiempo, tú eres dos años mayor que yo y ya tienes hijos prácticamente adolescentes y vives tu vida como mujer, yo no puedo expresar y mucho menos decir lo que siento", "amiguita, tu problema es que pretendes encontrar la razón lógica a todo lo que haces, y lo mas irracional e ilógico que yo conozco son el amor y el sexo, no soy buena para explicar y menos hacerlo con mis pocos conocimientos, pero eso debe nacer de dentro, espontáneo, sin pensarlo, se hace y punto, si permites que esto domine tu ser las cosas fluyen sin sentirlo, bueno sintiendo mucho placer, además que tú estás llena de prejuicios".

"¿Prejuicios yo?, por favor Mónica, yo me siento una mujer liberal y sin prejuicios de ninguna especie, ¡No me juzgues así!, no digas que no puedo disfrutar ni hacer disfrutar por mis prejuicios, en eso estás muy equivocada", Mónica no respondió se acercó a Susana y le dió un beso húmedo en la boca, Susana se quedó pasmada sin responder al beso y Mónica le dijo en plan de burla "¿No tienes prejuicios?", ella respondió "No, no tengo, pero tampoco soy lesbiana", "Ni yo amiguita y es la primera vez que beso a una mujer, pero mira, estoy muy cachonda, eres una amiga a la que quiero mucho, se me antojó probar esto que estamos viendo en la TV, necesito tener un orgasmo y te pido que me complazcas en ello, ¿te sientes capaz de hacerlo y disfrutarlo?, o piensas que se lo diré a todo mundo destruyendo tu reputación y de paso la mía?" y agregó "¿Eres capaz de dejar salir tus deseos y tu pasión sin que exista otra cosa mas en tu mente?".

Mónica le dijo "Mira lo que hago", se desnudó, tomó el pene de juguete y lo metió entre sus labios vaginales humedeciendo todo el glande de hule con los líquidos de su vagina, lo acercó a los labios de Susana quien se hizo hacia atrás diciendo "No Mónica, que haces", "quiero que pruebes, que sientas mi humedad, mi deseo de tener otro cuerpo disfrutando del mío, que tus instintos afloren y que disfrutes de esta verga después de haber estado en otra mujer, que saborees la pasión que encontró en mi cuerpo, que te entregues al placer del sexo", Susana al escucharla hablar sentía algo especial, algo que decidió dejar salir sin freno alguno y fué ella la que tomó el juguete con la mano y lo metió en su boca, sabía a sexo, al sexo de su amiga y sintió eso, eso especial que siempre reprimía.

Mónica sacó el pene de la boca de Susana y juntó sus labios a los de ella, que simplemente los separó para dar paso a la lengua de su amiga, saboreó su lengua y sus manos se posaron sobre la cintura de Mónica subiendo por sus costados hasta detenerse sobre sus pechos y acariciarlos apretándole los pezones, Mónica separó su boca de la de Susana, desabotonó su camisa y se la quitó, tocó sus pechos endurecidos, los acarició y metió su cara entre ellos, los lamió, chupó y sorbió de ellos, Susana había hecho su cabeza hacia atrás, hacía tiempo que nadie le chupaba sus pechos y lo disfrutaba sin importar que fuera la boca de su amiga, enderezó su cabeza y dijo "Ya Mónica, esto no puede ser, no somos lesbianas".

Mónica metió su dedo índice en su propia vagina, lo sacó y lo metió en la boca de Susana que se puso a lamerlo y dijo "No amiguita, no somos lesbianas, pero te urge tener otro cuerpo sin importar que sea el mío", Susana seguía lamiendo, Mónica se arrodilló en el piso, le quitó a Susana la panty, le separó las piernas, con sus dedos separó los labios vaginales y se puso a lamer su clítoris y la entrada de su vagina, bajaba suavemente hasta su ano y subía a meter la lengua lo mas profundo que podía en la vagina de Susana, ella, Susana quería detenerla pero ese algo, ese demonio de la lujuria ya la había poseído, el placer dominaba la cordura y la razón, ya nada importaba necesitaba el calor de otro cuerpo, sus caricias, que la hicieran gozar, ansiaba que su orgasmo se lo diera el calor de otro ser humano y no la frialdad de un juguete de hule en la soledad de su cuarto.

Se subió a la cama, puso las plantas de sus pies sobre de ella, separó las piernas y le dijo a Mónica, "Ven méteme el juguete, pásame la bala esa que vibra", Mónica lo hizo y ella escuchó salir de su boca un gruñido al sentir el pene abrir y llenar toda su vagina, puso el vibrador sobre su clítoris y le dijo a Mónica "Acuéstate sobre de mi, necesito sentir otro cuerpo sobre el mío", Mónica lo hizo, se besaron en la boca, se saborearon las lenguas, Mónica se separó, pegó su nariz a la de ella y con la boca abierta frente a la de ella sacaba su lengua y lamía los labios de Susana que le respondía de la misma forma, el cuerpo de Susana se comenzó a poner tenso, sus piernas se movían sin control cerrándose sobre el cuerpo de Mónica y sintió ese rió de placer que va de la entrepierna hasta la nuca, vibrando en contracciones deliciosas que la hicieron soltar un grito que Mónica ahogó poniendo su boca sobre la de ella quien sin control saboreaba, mordía y lamía, labios, lengua y barbilla de su amiga.

Su cuerpo quedó relajado, Mónica se levantó y se puso con las piernas abiertas sobre la cara de Susana quien lamió, besó y mordisqueó su sexo haciendo gemir a Mónica que le decía "Que delicia, mamas muy rico", Mónica sacó el pene de la vagina de su amiga, lo puso el pubis de ella diciendo "detenlo ahí con tus manos", y se fué sentando lentamente sobre el pene, Susana veía con asombro como la vagina de su amiga devoraba el juguete en medio de gemidos, Mónica se puso a "cabalgar" sobre el juguete, Susana veía la manera en que disfrutaba su amiga quien con sus propias manos apretaba sus pechos y oprimía su pezones, aún siendo baja de estatura 1.62m, su cuerpo era bello, firme y muy bien proporcionado, Mónica hizo su cabeza hacia atrás, soltó un grito y se dejó caer hacia delante, apoyando sus manos sobre la cama a los lados del cuerpo se Susana quien había dejado el juguete dentro de ella, sus pechos "colgaban" hacia los de ella, su mirada fija sobre la de Susana con una expresión de inmenso placer.

Terminando su orgasmo, se recostó sobre Susana quien sintió el calor del cuerpo de su amiga, la abrazó acariciando su espalda y sintia en su pecho el sudor de otro cuerpo producto del enorme placer vivido, Mónica se sacó el juguete de la vagina y se dejó caer al lado de Susana, le preguntó "¿Lo disfrutaste amiguita?" Susana se quedó pensativa y le dijo "Como loca, tanto que siento una verdadera preocupación, ¿No seré lesbiana?", Mónica rió y le dijo, "No seas pendeja amiguita, esto fué una pinche locura nada mas, yo sigo prefiriendo a tu hermanito que a ti", se levantó de la cama, se puso su camisón y se fué a su cuarto diciendo "hoy si vas a dormir a pierna suelta", Susana se quedó un rato mas desnuda sobre la cama pensando en lo que había pasado.