Durante la noche despertó asustada por sentir que tocaban su cuerpo, no estaba acostumbrada a dormir con nadie, volteo la cara y vió a Félix con su brazo sobre su cintura, recargó nuevamente la cabeza en la almohada, tomó con su mano la mano de él y se durmió otra vez, la claridad de la mañana la despertó, estaba boca arriba en la cama y Félix dormía de lado con su mano entre los muslos de ella, con cuidado quitó la mano de él y se levantó de la cama, tomó la bata que había quedado en el piso, se la puso y salió a preparar café, sentía su vientre inflamado, al pasar por el comedor abrió su bolso y sacó la caja del "Levonorgetrel".

Entró a la cocina leyendo el instructivo, puso todo sobre la mesa y preparó el café, encendió la cafetera y al tomar nuevamente la caja de la pastilla, observó su calendario colgado de la pared, donde había marcado el día martes con "resalta textos" amarillo y al derredor del número pintadas con bolígrafo unas flores, así marcaba en todos los meses la fecha probable de inicio de su menstruación, "Con razón tengo esta panza" pensó, se sirvió el café cuando la cafetera había llenado tan solo media jarra, le dió un sorbo que la hizo hacer un gesto de asco, "además de caliente está muy cargado", vació un poco del café de su taza en el fregadero y rellenó la taza con agua del garrafón que siempre tenía en la cocina, nunca bebía agua de las llaves de la casa.

Se sentó a la mesa y mientras bebía de su café se decía "¿Qué haré?, esta panza significa que mi ciclo no se interrumpió, además es un día bastante seguro, ¿y si me la tomo y me afecta en algo?, que no lo creo pero la verdad no estoy segura" leyó nuevamente el instructivo, no decía nada al respecto, "¿Qué ginecóloga conozco que sea de confianza?", no, no conocía a ninguna, solo a Enrique, pero ¿que le digo? "Enrique anoche tuve un sexo increíble, dejaron el semen dentro de mi dos veces, pasado mañana debería de comenzar a menstruar, que dices ¿me tomo el Levo o no?, ¡no por Dios!, que vergüenza", bebió nuevamente de su café, "¿Y si me embarazo? A mi no me importa, pero al chico le destruiría la vida, ¡Carajo!, si todo tiene que ser un maldito problema.

Tomó su agenda, buscó el número de la casa de Enrique y marcó, escuchó que llamaban y contestó una voz de mujer,

-"Diga",

Ella se dió cuenta de que eran las 8 de la mañana de domingo, pero ya estaba hecho y dijo

-"Mari, soy Susana, ¿le podría consultar algo a tu marido?

-"Susy, sabes que te estimo mucho pero si lo haces salir al hospital hoy que cumple años la niña, te juro que te mato",

Ella rió y le dijo

-"No Mari es algo personal"

No respondió y enseguida escucho la voz de Enrique,

- "¿Qué pasó doctora? ¿Qué cardiópata va a dar a luz?"

- "No seas sangrón, es sobre mi"

Dudó un momento pero se lo soltó

-"Mira Enrique según mis cuentas, que nunca me fallan, este martes debo iniciar mi menstruación, anoche tuve relaciones sin cuidarme, ¿que tomo?, ¿el Levo?, o que me recetas?",

Sintió el rubor en su cara, ¿Qué pensaría de ella?, ¿pasaría a ser la puta del hospital?, ¿todos los hombres del hospital le pedirían hacerlo con ellos?, ¿Qué pensarían sus alumnos?, ¿sería la noticia del momento en el hospital?, Enrique le respondió.

-"Por favor Susana, ¿no recuerdas como son los periodos menstruales?, no tomes nada, lo que debes de hacer es iniciar con algún anticonceptivo y dejar de pasar por estos "tragos amargos". Demonios pensó, que indiscreto, ya se enteró Mari, trató de "arreglarlo" y le dijo.

-"Es que fué algo que no pude evitar"

Enrique con voz que denotaba molestia o enojo le dijo

-"Mira Susana, eres mujer, una bella mujer, y lo lógico es que tengas sexo, a mi tú vida sexual me tiene sin cuidado, como me tiene sin cuidado la de todas mis pacientes, no tomes nada y mañana platicamos a ver que tratamiento anticonceptivo te conviene".

Hubo un silencio y escuchó la voz de Mari en el auricular que dijo

-"Ya me pasó la bocina, ¡qué hombres por Dios!, no pueden entender las dudas de las mujeres, ¿vas a venir a la fiesta de la niña verdad?"

- "Si, al rato nos vemos por allá y dile a Enrique que me disculpe".

-"Qué le voy a decir Susy, si ya se durmió otra vez, nos vemos por aquí"

Colgaron el teléfono y ella se quedó pensando "pues no, en realidad no le importó, claro para él es algo normal, a cada rato le han de hablar para preguntarle sobre esto", metió la pastilla y el instructivo dentro de su caja y la guardó donde tenía todos los medicamentos, "¿Qué puede pensar de mi?", "¿qué puede decir de mi?", "¡Atención todos en el hospital!, Susana se acostó anoche con un hombre que terminó dentro de ella y me pidió consejo sobre que tomar al día siguiente" ¿Y qué? Si casi todos en el hospital han de haberlo hecho anoche, incluso los residentes de guardia, ¿yo por qué debo ser la excepción?, yo soy la que no ve el sexo como algo normal, sin duda necesito pasarme por psiquiatría un día de estos.

Estaba sentada con su taza de café sobre la mesa cuando llegó Félix y le dijo dándole un beso en la boca

-"Buenos días preciosa"

-"Buenos días caballero, ¿quiere café?"

Félix se sirvió una taza de café y le comenzó a platicar sobre donde habían ido sus papás, que regresaban en la tarde y otras cosas sin tocar el tema de lo sucedido la noche anterior, ella estaba sorprendida, ¿Cómo se puede dormir con una mujer y al día siguiente no tocar el tema sobre lo que hicieron?, ¿Qué pasa? Se preguntaba.

Félix la miró y notó su cara "encajada" y le preguntó

-"Qué pasa Susana, ¿estás enojada?"

Ella lo miró fijamente a la cara, pensaba pedirle una explicación, ¿Cómo es que no tocas el tema de lo que hicimos anoche?, ¿Ya olvidaste lo que pasó anoche?, ¿No te gustó lo de anoche?, algo por el estilo pero pensó que pasaría por una loquita que quiere recordar lo que vivió, por lo que solo le dijo

-"Pensaba que cuando se enteren en el edificio, me tendré que mudar"

-"¿Lo piensas platicar?"

-"Lo digo por ti Félix"

Félix la miró, movió la cabeza y le dijo

-"Mira Susana, para mi las mujeres no son un trofeo, habrá quien ponga la foto de todas con las que lo ha hecho como calcomanías enemigas en un avión de caza, yo no soy así Susana, para mi fué algo maravilloso que solo debe quedar entre tú y yo, para mi en el edificio siempre serás la doctora, pero aquí dentro de mi corazón serás Susana, la mujer mas bella que he conocido, además si yo platicara algo tendría un grave problema familiar y perdería la oportunidad de hacerlo nuevamente, puedes estar tranquila y si te sirve de algo saberlo, te quiero Susana, te quiero mucho"

Susana lo miró con cara de incredulidad y él después de tomar un trago a su café agregó

-"No te espantes, te quiero, yo sé que no me enamoraría de ti, ni llegaría a amarte con locura, ni nada de esas cosas que se dicen, pero te quiero, eres una persona especial para mi y no hay manera de cambiarlo"

Ella quedó pasmada ante la declaración de Félix, le tomó la mano y le dió un beso mientras permanecían tomando el café, después de un rato ella preguntó.

-¿Ya te tienes que ir?

-No, podemos desayunar juntos

Susana lo miró a los ojos y le dijo

-Yo pensaba en otra cosa que de seguro te va a encantar.

Tomo a Félix de la mano lo llevó al baño, abrió la regadera, se besaron las bocas, sintió como el pene se endurecía y se apoyaba sobre su vientre, se quitó la bata y él se quitó el calzón, entraron desnudos a la regadera, se mojaron bajo el chorro de agua caliente, ella se arrodilló, tomó el pene con sus manos y comenzó a acariciarlo masturbándolo lentamente, mientras hacia esto con su lengua le lamía los testículos, Félix estaba de pie deteniéndose de la barra de acero inoxidable que había pegada a la pared, solo cerraba sus ojos y gemía de placer, ella lamió el glande al derredor de su corona, y lo metió a su boca, trató de meterlo todo, pero no soportaba que le tocara la garganta.

Dentro de su boca lo acariciaba con su lengua y con sus manos apretaba y acariciaba el tronco del pene, Félix se comenzó a poner duro y le dijo.

-Me vengo Susana

Ella continuó con el pene dentro de su boca, subió la mirada hacia los ojos de Félix y solo afirmó ligeramente con la cabeza y él dejó venir su orgasmo, Susana sintió los chorros de semen golpear sobre su paladar llenando su boca de ese líquido viscoso y caliente que ya había saboreado algunas veces, el de Félix le supo algo mas dulce de lo que ella recordaba sin embargo su sabor no se podía comparar a nada conocido, "simplemente sabe a semen" se decía cuando escuchó a Félix decir.

-Dios Susana, que excelente mamas, eres única, maravillosa, me matas de placer mujer

Ella aún con el pene dentro de la boca se tragó el semen recorrió todo el glande con su lengua y lo sacó de su boca, Félix la levantó, la abrazó con fuerza y la besó en la boca para ponerse a enjabonarla mientras ella se dejaba acariciar todo el cuerpo por el jabón y las manos de él, cuando él termino de bañarla ella hizo lo mismo con el cuerpo de Félix, estuvieron un rato bajo el chorro de agua caliente, cerraron las llaves de la regadera y se secaron saliendo después los dos desnudos a la recámara, se recostaron así desnudos un rato sobre la cama y ella le dijo.

-¿Te gustaría pasar un fin de semana conmigo en Cuernavaca?

-¿Cómo?, ¿Tú y yo solos?, ¿O como estaría el asunto?

Ella le explicó el plan de sus amigos, y terminó diciendo

-Tendríamos sexo todas las noches y también en el día, disfrutaríamos mucho de todo lo que hicimos anoche y lo que te acabo de hacer, mmmm, ¿qué dices?

El le dijo

-No Susana, no creo poder.

-¿Por qué?, ¿No te gustaría tenerme por un largo fin de semana?

-No es eso, claro que me gustaría tenerte y no solo un fin de semana, pero no lo creo prudente, siento que estaría mal que tus amigos nos vieran juntos.

Ella no insistió, solo dijo "Está bien", se levantó de la cama, se vistieron y fueron a la cocina a desayunar, preparó el desayuno y mientras lo comían no se habló del asunto de Cuernavaca, pero ella no dejaba de sentirse mal, no podía entender la negativa de dos hombres a pasar con ella un fin de semana.

Félix salió del departamento de Susana y abrió la puerta del suyo rápidamente cuidando de que nadie lo viera, ella se arregló y salió a la fiesta de la hija de Enrique, ella había llegado nerviosa por la plática de la mañana sin embargo no hubo comentario alguno al respecto, ahí se encontró al suegro de Enrique, un psiquiatra que pasaba de los 60 años con una gran experiencia y varios artículos sobre la sexualidad humana, la gente lo suponía un gran "sexólogo" titulo que el negaba siempre molesto, "Yo estudio la sexualidad desde la mente humana y no desde los genitales, mi interés es sobre como la mente humana inicia, desarrolla, impulsa y controla la sexualidad vista como el comportamiento humano que rige todo y no como el simple acto de copular, yo no me dedico a sobar un clítoris y preguntar si se siente placer, la sexualidad es algo mas complejo que tocar, acariciar o disfrutar"

"La sexualidad hace la diferencia entre los géneros, así los hombres y las mujeres piensan actúan y viven como hombres o como mujeres de ahí que la sexualidad sea la vida misma y no un simple acto de unión carnal"…Con esas palabras había iniciado un artículo en una revista de psiquiatría donde explicaba la complejidad de sus estudios y la diferencia entre ser psiquiatra y ser sexólogo